Ya se encontraban dentro del hospital esperando a ser atendidos por algún médico de guardia. Milagrosamente Jimin logró llevarlos a ambos sanos y a salvos hasta el hospital.

Cuando Jungkook se había bajado del auto casi besa el suelo mientras daba las gracias a cualquier ser divino ganándose un quejido del omega diciéndole que era un exagerado por hacer eso.

Aunque realmente lo que traía la hermana de Jimin en su auto le había ayudado a su miedo y nervios para no desmayarse del dolor que sentía en su mano y lo mal que manejaba el omega.

Antes de llegar al hospital casi volvía a chocar con otro auto ganándose el sonido fuerte del claxon del otro auto.

Jimin y Jungkook estaban recostados en una de las camillas riéndose sin parar gracias a lo que estaban fumando, el humo inundaba a su alrededor siendo el olor de la marihuana lo único que se apreciaba.

—Relájate, está todo bajo control —dijo arrastrando las palabras llevando el rollito de marihuana a los labios del alfa para que fumara un poco—. No tendrás que mover ni un dedo —hizo un chiste verdaderamente malo pero ambos estallaran en carcajadas.

De repente llegó una enfermera omega quien abrió la cortina con más fuerza de lo debido y se les quedó observando con una expresión seria de pocos amigos al ver la escena que ambos estaban llevando a cabo.

Cuando los dos notaron la presencia de la enfermera su expresión pasó de una divertida a una seria en cuestión de segundos.

La enfermera solo negó con la cabeza.

—¡Oops! —dijo Jimin antes de ponerse de pie en un salto y escondiendo el rollito tras su espalda mientras la enfermera se acercaba a la mano de Jungkook.

—Hoy no quiero reportarlos —dijo con voz molesta la omega revisando el registro del alfa.

—Oh, gracias —respondió el alfa con una sonrisa mostrando sus dientes.

—Lo siento —se disculpó Jimin con una mueca preocupada apagando el rollito en una especie de aparato que estaba a un lado de él para después soplar sobre este para que los residuos se quitaran de encima.

—Honestamente, creo que te conozco de algún lugar —dijo mirando con su ceño fruncido y cabeza inclinada hacia un lado a la omega quien negó al comentario del alfa—. Pero no puedo poner mi dedo encima —dijo mientras comenzaba a reír de nuevo.

Jimin también se comenzó a reír del comentario de Jungkook como si hubiese sido lo más gracioso que había escuchado antes.

La omega los miró raro a ambos.

—El médico llegará pronto, está re acomodando un tobillo —avisó mientras seguía leyendo el expediente médico.

—¿Del tobillo? Espera, un dedo debe tener prioridad sobre un tobillo —volteó a ver a Jimin para luego regresar su mirada a la enfermera.

—Oh, lo lamento, hubieras sido un idiota un poco más temprano —dijo la omega sarcástica con tono de voz molesta antes de salir del lugar.

—Por Dios —dijo el omega ojiazul viendo sorprendido la reacción de la enfermera y como ésta se marchaba—. En verdad pusiste el dedo en la herida —comenzó a reír nuevamente mientras caminaba hacia la camilla y apoyaba sus brazos sobre la incómoda superficie.

Al alfa también le hizo mucha gracia el chiste sobre su situación y estalló en carcajadas, todo lo que decía Jimin le daba gracia.

—Muy bien... —dijo el médico alfa que acababa de entrar a la habitación.

—¿Chanyeol? —dijo dudoso Jimin dejando de reír al ver al alfa conocido.

—¿Jimin? —lo miró dudoso y caminó rápidamente hacia el cuerpo del omega—. ¿Estás herido?¿Te pasó algo? —preguntó preocupado tomando en sus manos el brazo del menor para revisarlo.

—Hola —saludó con una bonita sonrisa haciendo relucir las arruguitas que se formaban a los lados de sus preciosos ojos azules—. No, estoy bien, solo no sabía que trabajabas en este lugar —dijo con su ceño fruncido.

—No lo hago, de hecho me llamaron para coser un dedo meñique —explicó.

—Es sorprendente —dijo con una sonrisa y ojos con un bonito brillo en ellos.

—Es muy crucial esa falange —dijo el alfa y el omega comenzó a reír de nuevo, la marihuana haciendo efecto desde hacía ya rato.

—Detente —dijo empujando levemente el hombro del de cabello azabache comenzando a reír un poco más fuerte y llevando su mano a la mandíbula del alfa quien solo lo veía raro pero con una sonrisa—. Haces un trabajo excelente —halagó aún sin quitar su mano del rostro del médico.

Jungkook solo presenciaba la escena con su entrecejo fruncido y con su alfa rasgando en su interior por los celos que sentía, la sangre del alfa hervía por la molestia que le causaba ver así a su omega tan cerca de ese alfa.

—Solo hago mi parte —restó importancia con una bonita sonrisa tomando entre sus dedos la suave mano de Jimin.

—Si —dijo en un suspiro el castaño.

El alfa médico comenzó a dejar suaves caricias sobre la parte superior de la mano de Jimin quien no hacía ningún intento por apartar al alfa.

Jungkook desvió su mirada ante la innecesaria escena —según él— porque no soportaba ver cómo aquel alfa se tomaba muchos atrevimientos.

—Bueno, me decepcionó no volverte a ver —dijo mirando a los azules ojos.

—Y a mí me decepciona no ver mi traje favorito —interrumpió Jungkook con un tono de voz amigable totalmente falso ya que lo único que tenía ganas de hacer era golpear a Chanyeol.

—Ah, sí, Jungkook —dijo el alfa por fin viendo al rizado.

El alfa ojimiel soltó lentamente la bonita mano del omega quien después de eso se sintió incómodo y llevó su brazo hacia atrás fingiendo rascar la parte trasera de su cabeza.

—Te caíste me supongo e intentaste meter las manos, ¿me equivoco? —preguntó el alfa señalando la mano vendada.

—Si —respondió seco Jungkook.

—Oh, eso va a doler —dijo cuando tocó el dedo del ojiverde y este hizo una mueca de dolor—. El falange distal se salió de su lugar, solo debemos re acomodarlo y estarás bien —dijo Chanyeol analizando como se veía la mano.

—Si... —canturreó victorioso el ojiverde.

—Muy bien, espera un poco y te reparamos, ¿de acuerdo? —dijo el médico dando una palmada al hombro del otro alfa.

—Lo repararás —viroteó emocionado el omega viendo a Chanyeol para después repetir lo mismo mirando ahora a Jungkook.

—Si, eso esperemos —respondió—. Crucen los dedos —hizo un chiste sonriendo en grande.

Jimin y Jungkook solo lo miraron extraño sin reírse en lo absoluto.

—Solo era un chiste —juntó sus labios en una línea fina, tomó sus cosas y salió del lugar dejando otra vez a alfa y omega juntos.