Esto ya no se debería de considerar spoiler ya que la película salió por fin. Sin embargo hasta que haya pasado por lo menos una semana, quitaré las advertencias de spoiler en este hecho, en este como en el otro libro. Sin más que decir, disfruten. 👉🏻👈🏻

Era una tarde lluviosa, el cielo está teñido de gris mientras las gotas de agua no dejan de caer. Te encontrabas sentada al lado de la tumba de tu prometido, le habías dejado las flores que solías llevarle cada semana y te quedaste para hablar un ratito.

—¿Estás feliz con tu madre? —preguntaste. —Espero que sí, Senjuro aún sigue llorando... Yo también, jaja.

Era claro que quedarse callada y esperar una respuesta no serviría de nada.

—Tu padre ha estado un poco más decaído, ¿sabes? Esto es un secreto pero lloró en cuanto se enteró y estaba solo, lo vi por error —agregaste. —ayudo a Senjuro a cuidar de él, se ha vuelto más suave sabiendo que solo le queda un hijo a quien cuidar.

Volteaste a ver a la tumba, a las flores y después suspiraste. Era tonto estar ahí sin embargo no dejarías de ir, Kyojuro fue alguien a quien amaste y sigues amando; está en tu corazón y por ende es imposible de sacarlo de ahí. La lluvia te mojaba pero era lo menos importante, querías estar ahí como cada semana, sin falta. Un nudo se formó en tu garganta, las ganas de llorar se estaban apoderando de ti; era difícil luchar contra ellas, después de todo el ambiente de soledad y muerte se sentía presente.

—En cuanto a mí... —pensaste. —Sigo siendo cazadora de demonios pero tengo una vida más normal. Por más tonto que suene esto nunca podría enamorarme de alguien más que no seas tú, que loco...

Te tocaste la cara.

—Ya no sé si esto son lágrimas o lluvia —suspiraste. —Te extraño... Quería que nos casáramos.

En cuanto volteaste para enfrente viste algo inesperado, es Rengoku. Cerraste y abriste los ojos múltiples veces sin creer lo que estabas viendo. El rubio te dio la mano y la tomaste...

Fue entonces que despertaste.

Exaltada.

Lo miraste dormido a tu lado, tu corazón latía demasiado rápido y seguías asustada y triste. Mientras que Kyojuro seguía dormido; plácidamente, su rostro y expresiones relajadas, su respiración lenta y suave. En definitiva no se parece para nada a lo que soñaste, suspiraste. Intentaste relajarte mientras veías a Rengoku, tenía el cabello suelto y algunos mechones tapaban su cara. Se ve muy lindo y atractivo que te hizo sonreír. Moviste tu mano para poder apartar el cabello de su cara y después acariciaste su mejilla. Te tranquilizó estar junto a él que comienzas a creer que el sueño que tuviste sólo se sintió muy real, te tranquilizó mucho poder tocar a Kyojuro.

Él abrió los ojos, despertando; en cuanto te vio sonrió.

—Buenos días, cariño —dijo mientras tomaba tu mano y la llevaba hacia sus labios para darte un beso. —¿Despertaste primero? Que curioso...

—Buenos días, Kyo —saludaste devuelta. —Únicamente quería apreciar lo bello que te ves dormido.

—No tanto como tú —estiró sus manos hacia tus mejillas y te besó la frente.

—¿Hoy no tienes trabajo? —preguntaste mientras los dos se sentaban en la cama, sin levantarse aún.

—No, hoy es mi día libre después de mucho —dijo mientras se levantaba, cuando se paró se estiró.

—¿Podemos hacer algo juntos? —hiciste otra pregunta.

—Ese es el plan —se dio la vuelta para verte. —Te ves diferente hoy...

Te moviste a su lado de la cama, él se acercó a ti; le miraste a los ojos mientras él se seguía acercando. Entonces Kyojuro te besó. Correspondiste con ganas, después del mal sueño que tuviste no dejarías pasar una oportunidad así. Cuando tu novio se separó no te quedó más que aceptarlo, revolvió tu cabello con cariño mientras se volvía a alejar.

—¿Tuviste una pesadilla? —preguntó.

Tu rostro se puso rojo en su totalidad, ¿cómo se dio cuenta?, ¿tan obvio se ve?

—Algo así —respondiste desviando la mirada.

—_______ —se sentó a un lado tuyo y tomó tus manos. —Cualquier cosa que haya sido está bien, ¿sí? Fue sólo un mal sueño, cariño. Todo está bien ahora.

Te abrazó, correspondiste y casi te sueltas a llorar en cuanto te abrazó, te aguantaste pero las ganas no faltaron. Tragaste saliva y en cuanto ibas a hablar, Kyojuro lo hizo primero por ti.

—Te amo.

—También yo —respondiste.

—Cámbiate, vamos a desayunar. ¿Está bien? Luego iremos a pasear, a caminar por ahí. ¡Vas a olvidar esa mala pesadilla que tuviste!

Su sonrisa también te hizo sonreír.

—¡Cómo usted ordene, señor pilar! —reíste, también te paraste.

Al levantarte fuiste a buscar ropa para cambiarte, mientras Kyojuro salió de la habitación para ver que podían desayunar. Ahora te sentías más feliz, no solo porque Rengoku sigue vivo y a tu lado, sino que también son una hermosa pareja. Ya nada podía preocuparte, su muerte, su tumba, sus recuerdos... Ahora todo era un simple y malo sueño. Estás con él, él contigo y se aman. Ese sueño solo demostró el mucho cariño que se tienen, así que será difícil que algo malo suceda de ahora en adelante, como en una novela de amor. Suena estúpido pero su amor es muy grande.

En cuanto terminaste de cambiarte saliste hacia la cocina, ahí se encontraba Kyojuro junto a su hermano; quienes estaban sirviendo el desayuno.

Te acercaste al pequeño y mientras revolvías su cabello lo saludaste.

—Buenos días, Senjuro-kun —él sonrió.

—B-buenos días, _______.

—¿No despertaste muy temprano? —cuestionaste dándole su espacio.

—Le hice la misma pregunta —el mayor rió.

—Suelo despertarme muy temprano... Hoy lo hice aún más, no sé porque.

—Y obtuve la misma en respuesta —volvió a hablar Kyojuro.

El Rengoku pequeño no dijo nada más, dejó los platos de comida en el kotatsu y luego se sentó junto a ustedes. Comenzaron a desayunar mientras platicaban sobre distintas cosas que sucedían en la casa o derivados. Todo era risas y diversión, habías olvidado por completo lo que sucedió en tu sueño; ahora solo era un mal y vago recuerdo. La felicidad que sientes ahora no puede ser nada más que verdadera, estar con Kyojuro, Senjuro hasta parece hijo de los dos. En definitiva en este ahora no tienes mucho de que preocuparte, eso te alivia un montón, demasiado.

Cuando terminaron de comer, Kyojuro se ofreció a lavar los platos mientras que tú le ayudas a Senjuro.

Una vez terminaron era de día, ustedes salieron a dar un paseo matutino mientras Senjuro se quedó en casa.

—¿Qué tan mala fue tu pesadilla? No quise preguntar en el momento pero te veías muy exaltada.

Apretó tu mano con cariño, suavemente

—Uh —desviaste la mirada, pensando. —Realmente no lo recuerdo. Pasó tanto que lo olvidé.

Mentiste.

—Si vuelve a suceder, ¡no te preocupes y despiértame! Me encargaré de que te tranquilices.

Sonreíste.

—Claro.

Siguieron caminando hasta un claro, donde los dos se sentaron, te acostaste en el pasto y Kyojuro imitó tu acción.

—Hay algo que había querido pedirte desde hace tiempo... Me pareció que este es el momento adecuado —habló.

—¿A qué te refieres?

—Cásate conmigo, _______.

Abriste los ojos de sorpresa, lo abrazaste mientras llorabas repitiendo muchas veces "sí". Rengoku te tomó del rostro, limpió tus lágrimas y luego te dio un beso en los labios; uno lleno de cariño.

Sin embargo algo no cuadra aquí... Matrimonio, prometidos, hay algo raro. ¿No?

• • •

E

l fuerte sonido de tu alarma te hizo despertar, exaltada, sudando y con el corazón latiendo rápido. Tomaste tu celular el cual se encontraba en el buró al lado de tu cama; lo prendiste y viste la hora. Te sentaste en la cama mientras tallabas tus ojos, es temprano; despertaste temprano porque debes visitar a tu madre en el hospital, sin embargo la mayoría de cosas debido al sueño que tuviste. Un bostezo salió de tu boca mientras te levantabas de la cama, tu celular se quedó ahí y caminaste directo al baño, abriste la llave del agua y te mojaste la cara, para después mirarte al espejo y seguido suspirar.

—Ese sueño termina destruyéndome emocionalmente cada noche —murmuraste. —Ese hombre también es muy atractivo... ¡Agggh!

Saliste del baño para buscar la ropa que usarías en el día, una vez la encontraste volviste al baño para poder tomar una ducha.

Cuando terminaste de arreglarte, saliste de tu casa y fuiste directo a la estación de tren, corriendo porque ibas tarde. Cuando entraste te quedaste parada porque no ibas a viajar mucho. Sin embargo en la siguiente parada entró alguien que al principio no llamó tu atención, pero en cuanto volteaste no pudiste despegar la mirada de él. Inconscientemente comenzaste a llorar; no podías creerlo y ni siquiera lo habías sentido. En cuanto sentiste las lágrimas caer por tus mejillas, las limpiaste pero era demasiado tarde. Sin importar lo extraño que era tu "sueño"; después de haberlo vivido por tanto tiempo y tantas veces, en esta ocasión realmente sientes un vacío en el corazón. Aún no podías dejar de verlo, en cuento negaste y desviaste la mirada; el tan misterioso hombre volteó. Kyojuro te miró, aunque al principio tenía una sonrisa, cuando te vio su rostro cambió a una expresión de confusión y extrañeza.

—¿Se encuentra bien? —preguntó acercándose a ti.

No le respondiste.

—¿Por qué llora?

Escuchó que murmuraste unas palabras.

—¿Es por alguien? —fue lo primero que pasó por su mente. —¡Si es así... Hum, cualquier cosa que haya sido está bien!, ponerse triste por alguien o algo no es malo, liberar nuestros sentimientos.

Esas palabras ya las habías escuchado en otro lado, tragaste saliva y sin previo aviso, lo abrazaste. El rubio correspondió pues no sabía que más hacer, pero verte débil en ese momento le hizo reaccionar. Un abrazo no es nada malo.

—Nos íbamos a casar... —murmuraste.

—¡Qué mal! Vendrán cosas mejores.

—Kyojuro...

En cuanto susurraste su nombre, él te miró con curiosidad.

—¿Me conoces?

El tren paró, habían llegado a otra estación. En cuanto retomaste tu compostura y te diste cuenta de las tonterías que habías dicho, saliste corriendo sin fijarte siquiera en que estación era; en el acto, se cayó tu celular de tu bolsa.

Regresé a las 7 a mi casa, el regalo es precioso en serio.

Sabía lo que pasaría, lo tenía en cuenta y aún así lloré, me puse a llorar en medio de los sueños y lloré aún más con la muerte de Rengoku. Así que tremendo bajón me dio, me deprimí tanto y hace mucho tiempo no me pasaba.

También me di cuenta de tremendo protagonista que es Tanjiro, es re maduro y un solecito 🥺. Aceptó dejar el sueño, a su familia y ser capaz de suicidarse cada vez que se quedaba dormido. AGGsgshdhshzha AmOOOoOOoO

El próximo one shot será de Giyu con una rayita ciega  :0