Conectado a dos One-shot de Sabito y Giyuu (Au).
"Posible spoiler" si no has leído el manga.
Créditos a la imagen: Smolkoos (Twitter).

—¡Por favor Urokodaki-San!... Sabito querrá detenerme, pero quiero ir a la batalla.—Pedia la ex-cazadora, a pesar de que había decidido retirarse, solo quería esta última vez para combatir, después de todo es la batalla decisiva contra Muzan. —No se si seré de mucha ayuda, pero aún así quiero ir.—El anciano se quedó guardando silencio, mientras Giyuu ya estaba dormido al tomar la medicina.

—Esta es tu decisión la respeto.—Al fin dio respuesta, la chica sonrió, y pronto mostró su espada, gracias a Kotetsu la unió como un tipo garfio a su mano, así la podrá sostener con ambas manos, poder luchar. —Pero por favor, regresa junto a Sabito.—Al escucharlo mostró un poco de tristeza pero después sonrió.

—¡Lo haré!... Prometí estar al lado de ambos no los dejaré.—Acaricio la cabeza de Giyuu, y después le dio un beso en la frente. —Descansa, te quiero.—Y así se fue, apurada por llegar y entrar a la fortaleza.

Solo fue capaz de matar demonios menores, experimentos que creo Muzan mientras estaba con más cazadores que buscaban al padre de los demonios.

Fue en ese momento que todo se puso turbio, ese monstruo se movía a una velocidad increíble, ni siquiera era capaz de seguirlo con su mirada, sus reflejos la salvaron de la muerte, trato de ayudar a sus compañeros, pero cuando los trataba de alcanzar para alejar de las garras de Muzan ellos ya estaban destrozados, trato de salvar a los que aún respiraban pero nadie sobrevivió.

Iría contra él, pero todo empezó a colapsar, juro haberte visto a un herido Sabito, entonces cayó al suelo, no recuperó la conciencia hasta más tarde, cuando escuchó a Muzan decir que la persona que quería murió. —No...—Queria protegerlo, y no pudo.

La rabia la invadió en ese mismo instante, no sabe porque, pero los ataques de Muzan se le hacían repetitivos fue capaz de entrar a su defensa pequeños cortes tenía pero no le importaba, solo quería cortar su cabeza, las lágrimas de dolor se acumulan en sus ojos, no entiende que le dirá a Giyuu, no puede simplemente regresar sin él y decir que se fue, no quiere verlo triste, ya sufrió demasiado, Sabito y Giyuu merecían su final feliz.

Lo cortó, pero esa horrible regeneración no le permitía hacer nada. —¡Te odio te odio!.—Grita con rabia.

Estaba segura que las heridas que tiene no son mortales, y aún así está perdiendo el equilibrio, está tan cerca de Muzan, está vez no podrá evitar su ataque.

Más alguien la salvó. —¡Presta más atención maldita sea!.—El pilar del viento ya la sostenía, mientras le decía aquello, entonces un ataque nuevo vino a los dos, Sanemi solo podía evadir al tenerla que cargarla.

—¡Déjame ir soy un estorbo!.—Le pide. —¡Usame como un escudo!.—

—¡No digas estupideces!.—Contesto Sanemi furioso. —El no querría que murieras.—

Ella se sintió mal al querer rendirse, más esto es lo que podía hacer, la vida de un pilar no se podía desperdiciar y menos por una persona que se dejo llevar por sus sentimientos, se zafo de Sanemi. —¡Mierda!.—Grito el albino tratando de alcanzarla, ya que cayó al suelo, uso su espada unida para protegerse, pero está fue cortada como si nada, el último golpe del tentáculo sería mortal, lo evadió lo mejor que pudo.

—¡__________!.—Reconocio esa voz por completo, volteo a verlo, Sabito estaba con vida, y solo pudo sonreír a pesar de que su muerte ya estaba cerca.

—Que alegría, estás vivo.—Entonces la sangre corrió, ella cerró sus ojos el tentáculo de Muzan rozó su hombro.

Ahora descansaba en el suelo, escupió sangre, las venas se resaltan en su rostro y brazos. —¡Resiste!.—Queria decirle algo.

Sabito solo pudo observar como ella no abrió los ojos de nuevo, sudo frío, no lo aceptaba, no piensa regresar sin ella. —Aun hay pulso...—Se escuchó esperanzado.

—Ella no sobrevivirá, la cantidad de veneno que entro a su cuerpo la matará lentamente, debió dejarse decapitar.—Escupio el monstruo, Sabito se levantó, Sanemi tomo a la cazadora y entrego a un kakushi. —Lo único que admito es que fue buena resistiendo.—No soportaba oírlo hablar.

El sostenía su espada con todas sus fuerzas, si ella muere... No podría soportarlo, no entiende porque vino a este lugar, ella debía estar a salvo con Giyuu, duele, duele demasiado no poder proteger a quienes ama.

Ella soñaba con Giyuu, él lloraba, rogaba que no se fueran, era tan borroso su sueño, además no se podía mover. —¡No me dejes por favor!.—El gritaba, mientras sostenía su mano.

No quería verlo llorar, después de todo el Tomioka es tan amable y dulce, ya ha sufrido demasiado con el hecho de perder a toda su familia, de ser un demonio que quieran asesinar, de soportar el hambre para demostrar que es bueno. —Giyuu...—

El Tomioka corría con todas sus fuerzas, uno de sus ojos ya no era felino, estaba perdiendo los colmillos, poco a poco se volvía humano pero parecía que resistía, necesita está velocidad para llegar.

Los recuerdos lo empiezan a invadir, Sabito es él primero en ver, su amigo desde que perdió a su hermana, siempre tan alegre, el día que lo cacheteó lo recuerda, también cuando fue atacado por un demonio y él lo rescató, llorando y rogando que permanezcan con él.

Aún recuerda cuando lo atacó, pero Sabito le pidió que se detuviera, que tenía fe en él.

Cómo viajaron juntos.

También aparece su hermana en sus recuerdos, ella era hermosa, y decidió dar su vida para protegerlo, mientras le susurraba que todo estaría bien, que está era su decisión.

También _________, al principio pensaba que era su hermana, pero poco a poco se dio cuenta que era un alegre pero algo tímida chica, como estaba enamorada de Sabito pero se lo guardaba, aún cuando hubo una confesión de amor está fue olvidada lentamente, pero ella no perdió su sonrisa, permanecieron juntos los tres, su sonrisa y el como le sujetaba de la mano era lo que más tenía presente.

Sabito a su lado está, diciendo que vayan juntos, mientras lo sostiene de la mano, se sonríen.

—Soy Giyuu Tomioka... Ella, mi hermana fue asesinada por un demonio.—Los recuerdos del día horrible se proyectaron en sus ojos, también cuando __________ fue mal herida con Sabito, debe avanzar más rápido, algo le dice que lo necesitaran.

Aunque no sabe cuánto podrá ayudar siendo un humano.

...

—¡Ella reacciona!.—Grito uno de las kakushis alegre. —¡Hay que alejarla de la batalla!.—No entendía sus palabras, está segura que el sol ha salido o tal vez su vista se vio comprometida por el veneno. —Sabito...—Que no recibiera respuesta le hacía pensar lo peor, escapó de los kakushis, menos mal el antídoto la ayudo para levantarse, escuchó un rugido, cubrió sus oídos.

Cuando levantó su mirada vio algo que creía imposible. —Demonio...—Murmuro.

Las palabras no salían, perdía el color en su piel, Sabito ahora es un demonio, mordió a Giyuu, aunque al parecer poco a poco lo libero, más el Tomioka se aferra a él para que no haga nada malo, porque si llega a asesinar no habrá vuelta atrás.

—¡Sabito!.—Le grito con todas sus fuerzas, llamando la atención de él, este liberaría una fuerte bola de energía.

—¡Basta por favor!.—Grita desesperado Giyuu, quien le cubre la boca para que no le haga daño a __________.

Es capaz de detenerlo, pero su mano sangraba y sus uñas fueron arrancadas.

Ella respiro profundo, algo había en sus ropas. —Por favor, te lo ruego haz que esto funcione.—Lo acerco a sus labios para susurrar. —¡No le hagas daño a Giyuu!... Recuerda que luchaste tanto para protegerlo y volverlo humano.—Lo señaló, pero Sabito tan solo le gruñía, amenazando con atacar de nuevo. —Se que sigues allí, el que Giyuu este vivo es una prueba.—Le sonrió, para así avanzar poco a poco.

—¡No _________ aléjate!.—Le pide el Tomioka, quien abraza a Sabito desde el cuello para intentar detenerlo.

—Giyuu...—Le sonríe entonces un delgado tentáculo atraviesa de nuevo su hombro, pero ella no se detiene, sigue caminando.

—¡________!.—Llora el Tomioka sin parar, otro va y atraviesa su brazo izquierdo, la sangre cae al suelo, pero está bien, debe llegar, hacerle pensar a Sabito que él la tiene.

Sabito la mira, este parecía que se detendría, pero al verla sonreír de nuevo atacó, rozando su mejilla. —Esta bien, traeré de vuelta a Sabito, entonces tú no estarás solo.—

—No...—Ruega en su llanto, el demonio Sabito se llevó una sorpresa al ver cómo la chica repentinamente dio un brinco, la siguió con sus tentáculos, atravesó una de sus piernas pero eso no impidió que ella inyecte la medicina, sostuvo su pierna y la dejo caer brutalmente al suelo.

—Sabito por favor recuerda, tengo fe en ti...—

—_______...—Giyuu murmuró su nombre.

Los ojos de él cambiaron, al igual que su expresión, tarde se dio cuenta de lo que hizo, su vista se dirigió a dónde estaba ella, en el suelo, sin responder ya, le asustaba el hecho de que parecía no respirar, solo espera que sea su imaginación.

La medicina actuaba lentamente, alguien lo ayudaba a ir hacia arriba, mientras Muzan se aferra a él para que se quede en la oscuridad. —Te has convertido en mi, ya nadie te recibirá.—Es cierto, él la mató a ella, lastimó a Giyuu y sus compañeros, el volver no es algo que quiera.

Pero entonces una mano lo sujeta fuertemente, y después otra, sabe de quienes se tratan, y él llora pensando que no merece su perdón. —Sabito...—Ella murmura su nombre con cariño.

Entonces la ve a _________ le sonreía. —Vuelve pronto, o Giyuu se pondrá triste.—Sujeta su rostro con gentileza.

El abre sus ojos al fin, allí estaba Giyuu quien le lloraba, rápido busco con la mirada a _________, atendían sus heridas pero no sé veía nada bien, él le hizo tanto daño, alzo su mano para tratar de sujetarla aunque fuera un segundo, pero los kakushis ya la habían levantado, debían actuar rápido para salvarla.

Pasaron tres meses, ella no despertó, Giyuu la cuidó, y mantenía su palabra de que se casaría con ella, o al menos estaría a su lado hasta el final. —Lo siento.—Sabito dice cómo siempre.

—Deja de decirlo, ella no quisiera eso... Ella te ama.—Responde Giyuu quien sostiene la mano de __________, tratando de hacerla reaccionar, después de todo si no despierta pronto pueden perderla. —Sabito tu luchaste, me salvaste, por favor ya no te odies.—

—Si no hubiera cedido...—

—A ella le gusta mucho tu sonrisa.—Dijo, cambiando por completo el tema. —Tu sabías que le gustabas, aún así guardaste silencio por mi ¿No?... Piensas en la felicidad de los otros antes que la tuya.—El Tomioka sonrió.  —Eres el mejor amigo que se puede tener.—

—Lastime a la persona que amaba.—

—Pero no lo hiciste a propósito.—

Ambos se quedaron unos minutos en silencio.

Entonces Giyuu sintió como la mano de ella se mueve, abre sus ojos lentamente, mira a ambos. —¡___-______!.—La miran, se trataba de un milagro solo podían pensar.

Habían dicho que despertar podía ser muy difícil, que era mejor darle paz, pero ellos creían en la fortaleza de __________ aunque también hubo egoísmo al no querer dejarla ir. —¿Qui... Nes son?.—

El precio por tenerla de vuelta era que ella no los recordará.

Aoi explico la situación, lamentablemente, despertó sus marcas tras la batalla contra Muzan, sus años estaban contados junto con los de Sabito.

—Somos personas que te aman.—Contesto Giyuu con una sonrisa natural, que hizo sonrojar a la joven, después vio a Sabito, el parecía estar dolido por todo esto, la chica parpadeo varias veces.

Entonces las lágrimas descendieron pero no entiendo porque, las limpio. —¿Porque estoy llorando?.—No sentía dolor, tampoco angustia o tristeza, y aún así las lágrimas no pararon hasta que Giyuu la abrazo.

Él lo entendió. —Lo siento...—Murmuro muy bajo.

El precio por traerla de vuelta fuera que ella olvidará todo, cuando llegara a recordar su tiempo estaría contado, así era el cruel destino, quien da oportunidades pero a cambió de llevarse algo a cambio.

Sabito también se acercó, todos se abrazaron, y la chica correspondió poco a poco, cerrando sus ojos. —Lo siento.—Ella también dijo.

El primero que se partió fue Sabito, y la chica pudo recordar después de su muerte, se sintió destrozada, cuando al fin hubo paz no pudo estar con Sabito, lo único que le consolaba era que pronto lo alcanzaría.

—¿Porque no estoy muriendo?.—Cumplio treinta años, y seguía viva, estaba segura que las marcas despertaron pero seguía aquí, al lado de su esposo Giyuu, después de todo cumplió con su palabra de casarse con él, aunque decidieron no tener hijos.

—¿_______?.—El llegó del trabajo, ella lo recibió con una sonrisa para después abrazarlo, se sintió realmente mal al desear algo como la muerte.

Ahora ella cuidaría a Giyuu, aunque amo a Sabito intensamente eso debía quedarse atrás, pues al Tomioka no le daría un amor sobrante, no, le dará todo, y lo amará hasta sus últimos días. —Te amo Giyuu.—

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No me linchen (?), Iba a agregar algo sobre reencarnaciones, pero mejor lo dejamos así todo trágico xDDD