Ya era hora del almuerzo. Tate ya estaba en la mesa al igual que Peter y Jess, Courtney puso la fuente con la ensalada en el medio de la mesa entre el jugo, pan y aderezos, luego se sentó quedando frente a su hijo.

-Hoy vendrá un compañero de la escue...-antes de que ella terminara de hablar su madre la interrumpió con emoción.

-¡Jess, eso es genial!-sonrió-¡Por fin conoceré a uno de tus amigos!

-Ma, él no es mi amigo, simplemente lo asignaron conmigo para hacer un trabajo-explicó.

-¿Quién es el chico?-preguntó Tate con la boca llena de ensalada.

-Tate, modales-se quejó Peter luego de darle un trago a la copa de vino.

-Richie Tozi...-Jess no acabó de hablar cuando su hermano se atragantó.

-¡Oh por Dios!-su madre se llevó una mano a la boca-¿Mi amor estás bien?-le preguntó a su hijo.

Tate asintió con la cabeza mientras tocia y bebía agua.

~|•|~

Tate subió las escaleras algo pensativo. Tocó la puerta de la habitación de su hermana y al instante ella abrió.

-¿Qué sucede?

Tate entró y Jess cerró la puerta apoyándose en ella. La mirada de su hermano hacia ella era de preocupación.

-Bowers te matará si se entera de que Richie es tu amigo ahora...-lo interrumpió.

-¡Él no es mi amigo, simplemente la maestra nos puso para hacer el trabajo juntos!-respondió frustrada y se arrojó sobre su cama.

Su hermano podía ser muy testarudo cuando quería, jamás entendía las cosas al principio o simplemente no le creía. En éste caso pasa lo mismo.
Jess cerró los ojos y soltó un suspiro, se daba comienzo al discurso del mayor de los Lange para regañarla -o como ella lo llamaba "el monólogo del bobo" ya que repetía lo mismo con ciertas y minúsculas diferencias-.

-Sabes que Henry cree que eres su novia...-Jess lo interrumpió con un "pero no lo soy" pero le hizo caso omiso-Y te conviene estár con él, de esa forma no te molestará y no tendremos problemas aquí.

Tate tenía razón, Jess lo sabía, pero estaba harta de ser tomada como un juguete, ¿acaso ella no tenía libertad? ¿toda la secundaria sería "de Bowers"? ¿qué pasaría cuando él quisiera más que un beso? ¿debería quedarse y tener una vida siendo la "señora Bowers" y criar a sus hijos mientras Henry trabajaba?
Sin duda eso la perturbó muchísimo. Se vio en la cocina de una casa dándole la mamadera a dos bebés rubios hermosos, uno tenía los ojos verdes y el otro celestes. Henry entró al lugar y la abrazó.

"No, no, ¡no! eso no va a pasar" pensó.

Otro pensamiento cruzó por su cabeza..."pasará si no me aparto".

-Trannquilo, sólo es un trabajo.

Antes de que Tate pudiera protestar llamaron a la puerta. Richie Tozier había llegado.