Narra Erick

Todos festejamos por la victoria de hoy, estábamos tan felices que algunos no podían evitar llorar de la emoción y querer hacer una fiesta por esto.

-¡Majestad... !

Me di la vuelta como todos los presentes, la sonrisa de todos se desvanece de inmediato al ver a quien ese guardia traía. Algunos soltaron jadeos de sorpresa y espanto. La madre de Kia deja escapar un grito desgarrador que hace callar a todo el mundo.

-La encontré así... en un callejón cerca de aquí... lo siento, ya era tarde...

Me fui acercando a ellos y él me dejó a Kia, mis piernas flaquearon y caí de rodillas con ella en mi regazo.

-Kia...

Mis ojos comenzaron a picar, veía borroso... se sentía raro pero horrible... ¿Por qué tiene que pasar esto... ?

-No... no, no... por favor... - traté de reprimir el sollozo -. Kia... no... Estabas tan cerca de ser libre por siempre... no te vayas ahora... No así...

Apoyé mi frente en su pecho y sollocé varias veces, abracé su cuerpo con la necesidad de no soltarla... Estaba fría... sin color y sin un corazón latiendo... Naomi cae al frente nuestro y mira a Kia.

-Haz algo... por favor... haz algo.

Era la primera vez que rogaba, y más frente a tantas personas, pero en realidad... eso no me importaba...

-Me curaste, haz lo mismo con ella...

-Y..Yo... yo no... no sé como... ella ya no está...

-¡No! - grité -¡Ella no puede estar muerta!

Abracé con más fuerzas el cuerpo de Kia. No quería que esto fuera verdad... no quería perderla de esta forma... Preferiría una y mil veces que ella fuera feliz, en su casa con su familia y que yo fuera el torturado hasta la muerte por toda mi vida eterna.

Ella no...

-Hay una forma, majestad... - una mujer se acerca, era una del reino.

-Mary, no... - Brenda se le acerca.

-Querida, yo ya estoy vieja así que es mi elección y obligación, ayudar al rey... y la reina.

-Pero... morirás tú... - Brenda comienza a lagrimear.

-Lo sé... pero... si puedo hacer algo para ayudar, realmente no me importan las consecuencias.

-¿Qué sucede? ¿De qué están hablando?

-Así es el trato... - La madre de la Alpha: Vanessa. De la manada de Kia, se acerca -. Hay un hechizo que puede traer a alguien ya muerto... de vuelta a la vida. Pero... el precio para alterar la naturaleza es pagar con otra alma...

Miré sorprendido a aquella mujer, no sabía que podía hacer eso, nunca nadie ha mencionado nada sobre un hechizo como ese.

-Nadie usa ese hechizo por miedo y porque lo prohibieron hace miles de años ya que corrompe las leyes de la naturaleza y puede ser mortal para los que están presentes...

-Pero yo quiero dar mi vida por mi reina - Mary se arrodilla frente a mí -. Es mi desición.

-Pero esta prohibido ese hechizo, ¿no? - pregunta Naomi -¿Qué pasará si lo usamos?

-Se supone que usamos la vida de otra persona, es un intercambio si esa persona está de acuerdo. Pero si se usa más de dos veces o la persona la cual morirá no está de acuerdo con esto, esto matará a los que estén haciendo este hechizo..- explica Vanessa.

-¿Estas segura de querer hacerlo? - Brenda vuelve a hablarle a Mary.

-Muy segura, no le temo a la muerte, querida. - ella le sonríe a Brenda y ella la abraza.

-Te extrañaré, nana...

-Yo también, y a Emily... dile que me tuve que ir. No me gustaría que sepa que morí...

Brenda asiente sollozando y bas se acercan a Kia.

-Mamá... - Naomi agarra el brazo de Vanessa.

-Estaré bien, Nami, tranquila... Por curiosa me aprendí este hechizo así que lo sé a la perfección. - dijo ella sonriendo.

Naomi asiente y suelta a Vanessa no muy convencida.

-Déjala en el suelo. - me dice Vanessa -. Mary...

-Sí.

Ella se acuesta junto a Kia y yo me levanté y retrocedí un par de pasos. Kristal me sostiene la mano para darme ánimos.

-Estará bien, hermano.

-Eso espero... Ella no se merecía esto...

-Cuando empiece con el hechizo, todos cubranse los ojos y manténganse callados. Si abren los ojos morirán al instante.

Todos asentimos, algunos se vieron asustados por las frías palabras de Vanessa. Al igual que ella, todos comenzamos a cerrar los ojos y Vanessa comienza a decir unas palabras en un idioma inentendible.