Capítulo 38
-¡Kia!
Me lanzan al suelo con brutalidad pero conseguí levantarme. Naomi y Brenda vienen a ayudarme junto a los demás. Sonreí al verlos y volví a pelear. Salté sobre un vampiro y mordí su cabeza arrancandola.
Víctor, al ver como iba perdiendo guerreros, se levantó y miró por alguna forma de escapar.
Al ver sus cobardes intenciones, corrí hacia él esquivando a los que se me acercaban. Me mira y luego a su alrededor, hasta que vio una ventana abierta y sonrió abiertamente. Salta, pero yo tambien lo hice, empujándolo y rompiendo la ventana junto a nosotros. Se sostiene del borde para no caer y luego me golpea para que lo suelte.
-¡Suéltame, estúpido perro! - Mordí más fuerte su hombro.
Se impulsa y caemos en un balcón. Yo me solté por los golpes pero me levanté rápido y rugí antes de correr hacia él quien me muestra los colmillos y se me lanza encima. Mordí su costado y él me golpeó.
Lo solté y comenzó a golpear mi rostro repetidas veces hasta que atrapé su puño en mi boca y lo lancé contra una pared, rompiendo esta. El polvo que se levantó no me dejó ver por lo que cuando me golpeó no lo vi venir.
Quedé colgando del balcón y me volví humana para agarrarme mejor. Miré hacia abajo y sabía que si caía me haría mucho daño y cuando acabara el efecto de la poción, probablemente moriría...
Hice fuerza con mis brazos y conseguí subir de nuevo para darle una patada en el rostro y caer dentro del balcón nuevamente. Salté sobre él cuando estuvo en el suelo y sujeté su cuello pero él también sujetó el mío.
-Tú no me detendrás.
Seguido de sus palabras, muerde mi brazo sacándome sangre y haciendo que grite de dolor. Me empuja y me coloca contra el borde del balcón.
-Llegó tu momento...
-Entonces que así sea.
Me mira confundido pero yo pateé sus piernas y él perdió el equilibrio, comencé a caer, pero lo sujeté y cayó conmigo. Me golpeó la cabeza pero yo lo puse bajo mi cuerpo y luego sujeté su cuello.
Narra Brenda
Por fin pudimos deshacernos de los guardias de Víctor, vimos entonces cuando este y Kia caen desde un balcón. El grito de algunos se hace presente pero nosotros corrimos hasta afuera, llegando justo en el momento en que estos dos chocan contra el suelo levantando una gran pantalla de polvo.
-¡Kia!
Salimos corriendo hacia ellos, pero antes de entrar en la pantalla de polvo vimos algo volar hacia nosotros. Dimos un paso atrás con asco y sorpresa al ver que se trataba de la cabeza de Víctor.
Escuchamos que Kia tosía y cuando el polvo se desvaneció por completo con el viento, vimos a Kia levantándose.
-Se acabó.
Ella sonríe de lado mientras se equilibraba, mis ojos se cristalizaron pero pude reaccionar para salir corriendo hasta ella y abrazarla a la vez que la ayudaba a estabilizarse. Comenzamos a escuchar toda la ovación de los presentes, felices porque habíamos podido ser libres...
-Gracias... - sollocé un par de veces.
-Por nada, Brenda...
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