Mukuro: Encontrémonos en las pesadillas
—Ghn, ahg... ¡Ah!
—Que ruidoso. ¡Despierta dame-Tsuna! —Ordenó Reborn, pateando al castaño que se removía en sueños.
—¡Agh! ¿Q-qué pasa? ¿Reborn?
—Me desperté por culpa de tus murmullos al dormir. Aquéllos que perturban mi descanso... —Transformó a León en una pistola y le quitó el seguro.
—¡Aah, espera, espera, espera! ¡No me dispares por hablar dormido! —¡Bang! —. ¡Hieeee!
—No habrá una próxima vez.
—¡Sí! —Exclamó con parte de su cabello quemado por la bala que pasó sobre su cabeza.
En verdad pensé que iba a morir...
—Por cierto, ¿qué sueño tenías?
—¿Sueño?
—Te veías muy perturbado, ¿no habrás tenido una pesadilla? ¿Como ser perseguido por un perro o sacar 0 en un examen? —Dijo con algo de burla.
—Mmm, no me acuerdo. Pero me da la impresión que sufría... ¿Será mi imaginación?
Reborn observó por un momento a Tsuna, su semblante se veía muy serio para ser solo una pesadilla.
—Como sea, arréglate para ir a la escuela. Hoy no llegarás tarde gracias a mí.
—¡No me alegra que me despiertes de esta manera! —Un rato después Tsuna iba caminando a Namichu.
Me desperté de mala manera pero evite ser asesinado. Pude comer en paz mi desayuno. Y no voy a llegar tarde a la escuela... ¡Hoy podría ser mi día de suerte!... ¿Pero qué sueño habré tenido? Me intriga mucho pero no puedo recordar.
Iba tan absorto en sus pensamientos que chocó contra alguien
—¡Auch! Lo siento, no estaba prestando aten... ¡Hibari-san!
—Eres tú.
—¡Lo siento muchísimo! ¡De verdad no fue a propósito!
¡Tonto yo! ¿¡Por qué tenía que chocar justo con Hibari-san!? ¡Me va a morder hasta la muerte!
—Veo que hoy no vienes tarde. ¿Qué tal si entras rápido a la escuela?
—¿Eh?
—Estoy revisando quienes llegan tarde. Estorbas si te quedas ahí.
—¡Ah, el trabajo del comité disciplinario! ¡Buen trabajo!
Hibari-san está haciendo trabajo normal del comité.
—Morderé hasta la muerte a los que lleguen tarde.
¿¡Eeeeh!? ¡Lo sabía! Hibari-san es Hibari-san. ¿Qué me habría pasado si hubiera llegado tarde hoy? ¡Gracias por despertarme Reborn!
—Em, yo tengo que repasar en mi aula así que me despediré. ¡Con permiso! —Tras decir esto salió corriendo hacia su clase.
—Ahora que lo pienso. —Tsuna paró al escucharlo y lo miró.
—¿Pasa algo? —Preguntó nervioso.
—¿Hoy no está el bebé contigo?
—Ah, sí. Reborn no vino conmigo.
Aunque podría estar en una de sus bases secretas. ¡Pero si Hibari-san se entera que hizo eso en su escuela se enojará mucho así que no puedo decirlo!
—Ya veo, ¿podrías preguntarle entonces?
—¿El qué?
—¿Cuándo podré luchar contra Rokudo Mukuro?
—¿¡Mukuro!?
Ahora que lo pienso, Reborn había dicho eso antes.
—Quiero volver a luchar con ese hombre no importa qué.
—¡Uah! Yo... ¡Le diré a Reborn! —Tras esto Tsuna volvió a correr, aminorando el paso una vez en los pasillos—. Haaaa, que miedo tuve...
Así que Hibari-san no ha olvidado lo de Mukuro. Bueno, es alguien que odia perder, pero no puedo decirle dónde está Mukuro. Y aunque le dijera ni él podría ir... No, si es Hibari-san creo que se colaría sin importar el lugar.
—Oh. ¡Tsuna, buenos días!
—¡Yamamoto! Buenos días, ¿qué haces sin entrar al aula? —Preguntó al verlo frente a la puerta.
—Aaaah, bueno...
—¿Ocurrió algo en el aula? —En eso Tsuna escucha varios chillidos de las chicas—. ¿Por qué las chicas están reunidas? ¿Eh, el que está en medio de ellas es...? ¿¡Gokudera-kun!?
—¡Te digo la verdad! Pienso que últimamente te has vuelto muy linda. —Le dijo a una de las chicas.
—¿¡Eeeh, de verdad!? —Preguntó sonrojada.
—¿Gokudera-kun, y yo? —Le preguntó otra chica.
—Tú también eres linda por supuesto. Y el color de tu brillo de labios es genial, te queda bien.
—¿Qué... Qué es eso? —Preguntó Tsuna en shock.
—Pues... Justo cuando pensaba que era raro que él llegara temprano se la ha pasado todo el rato con esa actitud. ¿Es un poco raro cierto?
—¡Nada de un poco, es demasiado raro que Gokudera-kun hable de esa forma con las chicas!
—¿Verdad? Siempre que las chicas le hablan las ignora o les grita y se acaba.
—Lo siento, tengo que irme. —Se despidió Gokudera de las chicas que empezaron a soltar exclamaciones de decepción—. ¡Décimo, buenos días! —Lo saludó sin su usual intensidad—. Perdóneme por no notarlo antes.
—Gokudera... ¿Kun? —En eso Tsuna sintió que su hiperintuición se activaba—. No...
—¿Tsuna? ¿Qué pasa?
—¿Décimo?
—¡No eres Gokudera-kun!
—¿Eh? ¿Qué estás diciendo Tsuna?
—¡Sal de Gokudera-kun Mukuro!
—...Ah, ya veo. La hiperintuición Vongola. En verdad es problemática. Kufufufu, y yo que creía haber actuado bien como este guardián de la tormenta. Es una lastima que me descubrieras tan rápido.
—¿¡En qué parte estabas bien!? ¡Fue super extraño! —Le gritó Tsuna.
—¿De verdad? Ya que se crió en Italia pensé que sería así de suave con las chicas. La próxima vez que lo posea investigaré más.
—¡No tienes que hacerlo! ¿Y por qué estás aquí? Incluso estás poseyendo a Gokudera-kun...
—La prisión de Vindice es demasiado aburrida, así que salí a dar un paseo. Pensé aprovechar y observar su vida diaria, por lo que poseí este cuerpo con el que ya tenía un contrato.
—¿Por qué esto?
—Porque debo tener la mayor cantidad de información del enemigo al que debo derrotar.
—¿Enemigo?
—¿No lo habrás olvidado verdad? Yo quiero destruir toda la mafia, por supuesto, la famiglia Vongola incluida.
—Pero tú ahora...
—Sí, soy tu guardián de la niebla. Pero dije que esa no es mi voluntad.
—Pero...
—Kufufufu, bueno, ya que me descubriste no hay remedio. Devolveré este cuerpo.
—¡Entonces vuelve tranquilamente!
—No puedo hacer eso.
—¿Eh?
—Quiero saborear un poco más la libertad de estar afuera, así que poseeré otro cuerpo.
—¡Eso significa...!
—Kufufufu, ¿podrás encontrarme de nuevo? Sawada Tsunayoshi.
Tras esto el cuerpo de Gokudera cayó al suelo.
—¡Gokudera-kun!
—¡Gokudera!
Ambos corrieron a revisar a su amigo y Tsuna suspiró.
—Que alivio, Mukuro de verdad se fue.
—¿El de antes en serio no era Gokudera?
—No lo era.
—Mmm... —Gokudera comenzó a despertar—. ¿Eh, Décimo? ¿Qué ocurrió?
—¡Gokudera-kun! Qué alivio.
—¿Eh? —Un rato después Gokudera iba por los pasillos con la ira siendo evidente en su rostro—. Maldita sea, no me jodas. ¿Cómo se atreve a usar mi cuerpo para engañar al décimo? ¡No lo perdonaré!
—Ya, ya. No hubo ningún daño al final. —Trató de calmarlo Tsuna—. Bueno, sí que te hizo decir cosas que nunca dirías mientras te poseyó...
—Ugh. ¿Qué rayos fue lo que dije?
—Ah, ajajaja... Bueno... No fueron cosas malas.
—Cierto, creo que tu reputación con las chicas mejoró mucho Gokudera.
—¡No hay forma de que eso me haga feliz!
—En todo caso, ¿a dónde fue Mukuro?
—Se supone que poseyó a alguien más y que tú puedes detectarlo, ¿no Tsuna?
—Sí, pero no puedo hacerlo si no me acerco. Ojalá no esté haciendo algún desastre otra vez.
—Décimo, ahora que lo pienso. Hubo más gente que él poseyó aquella vez.
—¡Oh! ¿¡Que haya poseído a Gokudera-kun significa que podría volver a poseer alguien que ya poseyó una vez!? Si ese es el caso... ¿¡Bianchi o Hibari-san!?
En otro lado de la escuela, se escuchaba el himno de Namichu siendo cantado por una pequeña ave amarilla.
—Ese es... El ave que cuidaba Birds. ¿Por qué está aquí?
El ave siguió cantando el himno hasta que de repente.
—¡Mukuro! ¡Mukuro!
—Oya. —Se sorprendió al ser llamado por el ave—. Así que hay algo además de la super intuición Vongola que puede detectarme. ¿Será instinto animal? ¿O solo una coincidencia?
—¿Qué haces ahí? —Preguntó Hibari al verlo—. Se prohíbe la entrada de forasteros a la escuela.
Hibari Kyoya. Ahora que lo pienso él también era un estudiante de esta escuela. Luchar con él en este momento no es conveniente, pero... Bueno, no me reconocerá estando en el cuerpo de la escorpión venenosa.
—Oh, lo lamento. Mi hermano pequeño asiste aquí y quise ver cómo le iba, pero me perdí.
—Hibari, Hibari, Hibari. —Lo llamó Hibird mientras volaba a su alrededor.
—Esa ave está muy apegada a ti, ¿verdad?
—Solo me sigue por su cuenta así que la dejo hacer lo que quiera. Como sea, si tienes algún asunto...
—¡Ahí está! Hibari-san y... —Exclamó Tsuna al encontrarlos.
—¡Hermana! ¡Uagh! —El rostro de Hayato se puso azul al verla y cayó sujetando su estómago.
—¡Ah, Gokudera-kun!
—¿Estás bien Gokudera? —Le preguntó Yamamoto.
—¿Por qué... Estás aquí... Hermana? —Preguntó con dificultad por el dolor de su estómago.
—Ustedes... ¿De nuevo están haciendo tumulto? Los morderé hasta la muerte.
—Oh, Hayato. Si duermes ese lugar te dará un resfriado. —Le dijo Mukuro en el cuerpo de Bianchi.
—¡Ah! ¿¡Por qué los dos que pueden estar poseídos por Mukuro están aquí al mismo tiempo!? —Se quejó Tsuna en un tono que solo lo escucharon Yamamoto y Gokudera.
—¿No sabes cuál está poseído Tsuna?
—Si me acerco lo sabré pero... —Volteó a ver a Hibari.
—¿Qué tanto hablan? —Preguntó este sacando sus tonfas.
¡Sí me acerco sin cuidado ahora voy a morir!
Pensó Tsuna al ver esto.
—¿Qué te pasa Tsuna? No te vez bien. —Le dijo Bianchi.
—Ustedes fueron los que metieron a un forastero en la escuela, entonces, haré que tomen la responsabilidad por ello.
—¡Aah! ¿¡Qué hago!?
—Estás siendo lamentable Tsuna. En este caso deberías saberlo aún sin tu super intuición. —Dijo Reborn apareciendo por uno de sus escondites.
—¡Reborn!
—Ciaossu Hibari, Bianchi.
—El bebé, pensé que hoy no habías venido.
—Reborn, ¿tú también habías venido?
—¡Ah, ya lo sé! ¡Bianchi es la que está siendo poseída! —Exclamó Tsuna al ver que no reaccionaba de forma melosa con Reborn.
—¿¡Eh, es así!?
—Mi hermana...
—¡No hay forma de que Bianchi esté tan tranquila al ver a Reborn! ¡Lo abrazaría al momento luciendo super feliz!
—Ahora que lo dice es cierto. —Murmuró Gokudera.
—Asi son las cosas. —Dijo Reborn.
—Kufufu... ¡Jajajaja! Descubrirme por algo así, como se esperaba de un arcobaleno.
—¿No habrás olvidado el contrato con Iemitsu verdad Mukuro? Tú aceptaste ser el guardián de la niebla de Tsuna por tu propia cuenta.
—Lo sé, hice un trato con la mafia que tanto odio. Y recibí una recompensa equivalente a eso, por eso todavía no tengo intención de atacar en serio al décimo Vongola.
—¿Eh? —Se sorprendió Tsuna.
—De verdad solo estaba aburrido. Es cierto, ¿debería hacer que me acompañen para matar el aburrimiento un poco más?
—¡Alto! ¿¡Qué piensas hacer ahora Mukuro!? —Le preguntó Tsuna.
—Vamos, ¿pueden encontrarme esta vez también? Kufufufu. —Tras esto la pelirrosa cayó al suelo inconsciente.
—¡Bianchi!
—Hermana... —La llamó Hayato mientras se acercaba a pesar de su estómago.
—Mukuro salió de Bianchi. Entonces el siguiente...
—Ahora... —Todos voltearon al escuchar la voz enojada de Hibari—. Me parece que escuché una risa muy desagradable.
¿Hibari-san? Pero también...
Volteó a ver a los hermanos Gokudera.
—Hermana... Maldito Mukuro, la próxima vez... Me vengaré... —Dijo Hayato todavía sujetando su estómago.
Podría estar poseyendo a Gokudera-kun otra vez. No, podría estar poseyendo a alguien diferente también.
—¿Está bien la hermana de Gokudera? —Le preguntó Yamamoto.
—No hay que preocuparse. —Intervino Reborn—. Solo perdió la consciencia.
Mientras esto pasaba se escuchó el himno escolar y un aleteo, era Hibird otra vez.
No puede ser... Aah, ¡pero no lo sé! ¿Por qué? Hace un momento podía saber dónde estaba Mukuro.
—Kufufu, ¿qué ocurre Vongola? Date prisa y encuéntrame. —Resonó la voz de Mukuro en su cabeza.
No tiene caso, no lo sé.
—Kufufufu.
—¡Para yaaaaaa! —Tras gritar esto Tsuna abrió los ojos de repente—. ¿U-un sueño? Espera, ¿dónde es esto? ¿Por qué estoy parado en un campo de flores?
—¿Te divertiste Vongola?
—¿¡Mukuro!? ¿¡Por qué estás aquí!?
—Porque esto es dentro de un sueño.
—¿Eh, un sueño? ¿Todo esto es un sueño.
—Así es, esto es dentro de tu sueño. O puede que tú te hayas colado dentro de mi sueño. No, un cielo tan deslumbrante y sin límites no podría existir en mi subconsciente. —Dijo admirando el paisaje—. ¿Por qué será? Parece que fuí absorbido por tu sueño.
—¿Eh? ¿Por qué? ¿Por qué pasó eso?
—¿Quién sabe? Yo tampoco sé la razón. Pero pude interferir un poco con mi poder, así que probé a mostrar un sueño interesante. ¿No te divertiste?
—¡No hay forma que me divirtiera! Como sea, ¡si este es mi sueño entonces vete!
—Lo haría aunque no me lo dijeras. Ya llegué al límite después de todo.
—¿Eh?
—Adelante, vete ya. Y ojalá no nos volvamos a encontrar aquí. —A pesar de sus palabras, el tono de Mukuro era gentil.
—¿Eh? ¿Por qué?
—Esto es un sueño. Un sueño que no hay necesidad de recordar una vez despiertes. Porque tú vives en la realidad.
—¿Mukuro?
—Me divertí bastante. —Le dijo mientras su silueta se iba alejando.
—¿Mukuro? ¡Espera! ¡Tengo algo que decirte! ¡Mukurooooooooo! —Todo se volvió negro y Tsuna volvió a abrir los ojos agitado—. ¿Lo de ahora fue todo... Un sueño?
—¡Eres muy ruidos Tsuna! No interrumpas mi descanso. —Le dijo Reborn.
—¡Ah, lo siento! ¡Dormiré en silencio!
—Hmp, esta vez sí duermete bien. Ya sabes lo que pasará si vuelves a despertarme. —Lo amenazó con Leon en la mano.
—¡L-lo sé, buenas noches!
—Por dios. Shupiii. —Suspiró Reborn volviendo a quedarse dormido.
...Encontrémonos de nuevo algún día. No dentro de un sueño, si no en la realidad.
Pensó Mukuro en la prisión de Vindice.
Fin
Yo: ¡¡¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhh!!! ¿¡¡Cómo 💩 se supone que no los shipee!!? ¡¡¡Maldita piña rompecorazones, le hablas a Tsuna de forma más dulce que a Chrome!!! ¡¡¡Aaaaaaaaaaaaaaahhh!!! ¡¡¡Entre este y el anterior drama CD me va a dar algooooooooo!!! ¡¡¡Necesito más 6927!!! ¡¡¡Alguien deme doujinshis de elloooooooooooooooos😭😭😭😭!!!
PD: No, mi cerebro 6927 shiper no inventó nada de lo que hay escrito. Todo esto es canon mis amores😭. Les super recomiendo descargar el drama CD para que escuchen los diálogos mientras leen, sentirán mucho más la emoción si lo hacen🥺💗.
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