Claire's POV

Desperté abriendo los ojos, encontrándome con mi cuerpo lleno de sudor por culpa de mi pesadilla.

Sabía que Hyde había venido a visitarme y había sido real. Con él todo era real, él era real.

Cerré los ojos, la imagen del joven Hyde impactó en mi mente.

Tenía una sonrisa burlona dibujada en los labios, haciéndolo parecer más siniestro de lo que era.

-¿Que quieres de mí ahora?-susurré.

-Es sencillo, quiero que me dejes escapar. Vamos, hazme realidad.

-No, Hyde. Nunca.

-Te ayudaré a luchar contra Blake, contra Octavio, contra todas esas personas que odias. Nos vengaremos de Di Angelo.

-No quiero vengarme-apreté los puños- Solo quiero que me dejes en paz.

Mi orgullo me impedía ver la realidad, lo único que pensaba en aquel momento era que si Darks estaba molesto debía conformarse porque yo no iría arrastrándome hasta él para que me perdonase.

Si alguien tenía que pedir perdón, era él.

-Estás enfadada con él porque no sabe lo fuerte que eres, pero yo puedo ayudarte a demostrárselo y hacerle saber que estaba equivocado.

La voz de Hyde se intensificaba por momentos, eso significa que se estaba alimentando de mi odio, ira y ansias de venganza.

Debía controlarlo por el bien de todos.

Pero solo podía pensar en como quería odiar a Octavio y a Blake, como quería demostrarle mi poder a Darks.

Un dolor punzante se instaló en mi cabeza, palpitante e incesante. Arañé las sábanas de puro dolor, grité más dolorida que nunca. Sabía lo que estaba pasando y debía detenerlo.

Al cabo de lo que pareció una eternidad el dolor cesó, en su lugar, cuando abrí los ojos encontré mi peor pesadilla.

Allí estaba, tumbado a mi lado, mirándome con sus crueles ojos grises, con su nariz recorrida por alguna que otra peca, sus labios con pequeñas heridas del pasado, su pecho desnudo recorrido por cicatrices...

Y aún así en mi pesadilla le había dejado acercarse a mí.

-Estás muy linda así, ¿Lo sabías?-ronroneó.

-No, no lo sabía.-me cubrí con los brazos al descubrir que había  y dormido en ropa interior- Pero puedes ir dejando eso de los halagos porque no funciona conmigo.

-No lo creo, te has sonrojado.-susurró acercando su mano a mi rostro y acariciando mis mejillas.

Me aparté bruscamente, ¿Es que pensaba que siendo parte de mi mente tenía derecho a tocarme?

Ni hablar.

Pero mi gesto solo le sacó una sonrisa de lado.

-¿Ahora me evitas, Claire?-alzó una ceja.

-No dejaré que te acerques a mí.-me incorporé para levantarme de la cama.

-¿A dónde vas tan rápido?-puso una mano en mi pierna, acercó sus labios a mi oído y susurró- Sabes que no te dejaré ir hasta tener lo que quiero.

-Te he dicho que no me toques, Hyde.-intenté sonar lo más firme posible.

-¿Y que me harás si lo hago?-susurró casi como un ronroneo.

-Puedo defenderme sola, te dejaré sin fantasmal descendencia.

-Que atrevida.-sonrió.-Pero la única que puede decirme esto es la linda chica que tengo en mi cama ahora.

-Primero, no me llames linda. Segundo, está no es tu cama. Y, tercero, deja de tocarme ya.

Sonrió de lado, juntó su nariz a la mía y se acercó lentamente. Le empujé antes de que pudiera hacer algo de lo que me pudiera arrepentir.

-Y tampoco me beses, idiota.-le espeté de mal humor.

-Vamos-se sentó sobre mis piernas- Ni que fuera tu primer beso. Tu... ¿Exnovio? ¿Novio? ¿Amigo con derechos? No lo sé, pero el te robó tu primer beso, así que.... No sé que tiene de especial que intente besarte.

-La diferencia es que sentía... Siento... -sacudí la cabeza- Algo por él.

-Bueno, no lo importará compartir.-se acercó.

La aparté de un empujón, me puse en pie y me vestí utilizando mi poder.

-No soy un objeto, ni un juguete. Yo soy mía y lo que haga con mi vida no debe importarte.

-Claro que me importa-ronroneó- Porque soy parte de ti y tú de mí. Tú eres mía y yo soy tuyo.

-No Hyde, eso es lo que quieres creer.

-Esa es la realidad.-se puso en pie- La que tú no quieres aceptar.

-Hyde, eres producto de mi imaginación, de mi mente. Preferiría tener esquizofrenia antes que tú fueras real.

Soltó una sonora carcajada, negando con la cabeza como si fuera lo más gracioso que hubiera escuchado en su vida.

-No es una broma-dije seriamente- Si soy esquizofrénica puedo vivir con ello, pero que tú seas real... -sacudí la cabeza- Eso no.

Tomó mi mano, sonriendo de lado, pareciendo más un lobo que un ser humano o un fantasma de mi mente creado para torturarme.

-Claire, quieras o no...-respiró hondo- La pesadilla ha vuelto.