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¿Esa es su defensa, señorita?

Perdón por cortar antes, tenía que arreglar unas cosas con... 

NO, NO, NO SPOILER.

Perdón.

Me desperté y me la pegué, ¿a qué queda muy poético? 

Está bien, os lo contaré por completo.

Veréis, estaba muy cómoda dormida, porque, claro, yo había querido quedarme "dormida" en medio de clase. (Nótese la ironía)

Desperté en la enfermería (ya me había empezado a encariñar con la camilla), me senté de un salto, gritando a pleno pulmón:

-¡JURO QUE ÉL FUE QUIÉN EMPEZÓ!

Me asustó el golpe que me pegué con Darks, su frente se había golpeado con la mía. Y, si os interesa, sí, todavía recuerdo el taco que gritó.

-Lo siento, lo siento, lo siento.-repetí una y otra vez comprobando su frente.-¿Estás bien, Darks?

-Sí, tranquila. Estoy bien. Yo me preocuparía más por ti.

-¿Por qué?

-Golpeaste a Octavio.

-¿Y?

-Que le rompiste la nariz. A ver, yo también le habría golpeado, pero, ¿con esa fuerza? Por Hades, Claire, le has roto la nariz. Mark se desmayó al ver la sangre.

-Es lo que...-empecé con determinación, me detuve al darme cuenta de lo que había hecho.

¿Había roto alguna vez algo? Sí, por ejemplo, mis apuntes de mates, un par de peluches, algunos botes de Nutella vacíos. Pero nunca había roto nada  a un humano, es más, nunca había pegado a nadie (que no fuera de broma).

-Darks, ¿qué pasó cuando me desmayé?

-Octavio se cayó al suelo, Will te sujetó. Cuando la profesora volvió acusó a Will, pero poco después vio tu puño con... sangre. Estás metida en un buen lío, el director quiere: "Hablar contigo y con todos los que presenciaron la escena", palabras textuales. 

-¿Cuánto tiempo tengo para buscar a alguien que me apoye?

-Ey.-puso una  mano en mi hombro- Yo te apoyo. Todos en la Clase te apoyan, excepto Blake y Charlie, ellos son unos hijos de...

-Está bien, está bien, no hace falta que nos pongamos a insultar. Dime, ¿cuándo quiere verme el director?

-Cuanto antes.

-Mi historial de niña buena se va al Tártaro.-suspiré pesarosa.

-Mira el lado positivo.

-¿Hay algo positivo en todo esto?

-Por supuesto, has conseguido que el augur te tema y te respete.

-Yupi.- dije sin demostrar entusiasmo alguno.

-¿Estás mejor?

-Sí, solo me he desmayado. Estaré bien si me acompañas hasta el despacho del director.

-Vamos, quiero ser tu abogado.-me tendió la mano.

-¿Sabes algo sobre ello?-dejé que tirase de mí mientras me ayudaba a levantarme.

-Ni puñetera idea.- dijo riendo.

-Qué bien.- dije estirándome una vez que estuve en el suelo- Vamos a devolvérsela a Octavio.

Salimos de la enfermería (menos mal, porque el olor a antiséptico ya me mareaba) y recorrimos los pasillos vacíos del instituto hasta llegar al despacho del director.

Yo nunca había estado allí, siempre había visto la puerta de madera blanca cerrada, de modo que fue una novedad verla abierta de par en par.

Entramos juntos, ya estaba allí media clase.

Sipre pensé que el despacho sería un sitio grande, pero, al era al contrario, era casi tan grande como mi clase.

Octavio se hayaba sentado junto a Blake y Charlie. Hablaban como si fueran amigoa de toda la vida, cosa que me inquietó.

-Bien, señorita Evergreen.-dijo el director.

Era un hombre de casi treinta años, aunque a formal no le ganaba nadie.

-Quiero hablar con usted seriamente. Su profesora de inglés me ha dicho que ha roto la nariz a su nuevo compañero de clase aquí presente, Octavio.-señaló al rubio- ¿Qué puede decir en su defensa?

Respiré hondo, los semidioses me animaron junto a Naila. Me sentí con ganas rebatir las ideas idiotas de Octavio, a saber que le había contado.

-Verá, Octavio estaba insultando a mis amigos, además de que me miró...-en seguida me quedé cayada, no quería más problemas de los que tenía.

-¿Esa es su defensa, señorita?

-Así es.-asentí.

-Me temo que debo expulsarla.-dijo colocando los folios de su escritorio, dando más enfásis a sus palabras.

-¡¿QUÉ HAY DE LO QUE NOSOTROS VIMOS!?-gritó Darks, furioso.

-Me temo que no puedo fiarme de ustedes, son amigos de la señorita y la defenderán aunque tengan que mentir. De modo que la señorita Evergreen queda expulsada de este instituto de forma permanente.

-¿Sí?-dijo en tono amenazador- Entonces yo también me iré.

-¿Te atreves a retarme, chico?

-Por supuesto. No tiene derecho a echarla de aquí sin escuchar a los testigos, de modo que, si ella se va yo también.

Otros chicos dieron un paso hacia delante, dispuestos a hacer lo mismo, pero el director les detuvo con una mirada.

-Bien, quedan expulsados. Los dos. Pueden irse.

No supe que decir, me limité a kurar a Darks. Me devolvió la mirada, supe que estaba verdaderamente enfadado. Decidí hablar con él más tarde.

-No quiero volver a verles en mi instituto.

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