Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Dear future husband~✦

Tipo de historia: Romántica.
AU: Realeza.
Parejas secundarias: MetalSara y ShikaJin
Palabras: 6167
Info. Adicional: Hablaremos de la hermosa realeza, y solo quería decir... ¡perdón por la demora! Espero me perdonen por sacar historias de manera tan tardía, mis razones son algo personales pero espero les guste :")

◤                                         ◥
KawaBoru One-shots
◣                                          ◢

¿Casarse?

Era algo sumamente ridículo, sabía que debía hacerlo por lo menos para seguir el linaje o las ganancias de su propio reino. Era el siguiente rey, el próximo heredero al trono. ¡Aquel que sería el próximo al mando! ¡El que tomaría el control de todo el reino y del cual podría tener muchas riquezas! Sin embargo, su única respuesta era...

"Qué aburrido."

Algo que sacaba de quicio-la mayoría del tiempo- a su padre, el actual rey del país del fuego. Naruto insistía en que Boruto debía casarse ya que nunca podría encontrar al amor de su vida y ni siquiera podría seguir con el linaje familiar u obtener el trono. Puesto que debía de tener un acompañante que le ayudara de forma sentimental y le ayudará a continuar. Aunque siempre persistía con eso, comenzaba a perder la esperanza.

- ¿por qué no puede ser Himawari?- Dijo Boruto cruzado de brazos, molesto.

- Es demasiado joven para tomar el trono, además tú eres el legítimo sucesor- Volvió a explicar lo de siempre.

- ¿No puedes cambiar de sucesor?- Dijo con una solución.

- Tch, Boruto eso lo decidimos entre tu madre y yo. Ya no se puede cambiar.- Dijo con tedio.

- Tomaré el trono.- Dijo dándole la espalda a su padre, mientras caminaba hacia el gran ventanal en la habitación que se encontraba. Sonaba completamente desinteresado de su decisión, pero ya se estaba cansando de las réplicas de su padre.

- ¿De verdad lo harás?- Se sintió un poco aliviado.

- Sí, como sea, tengo que ir con Sarada o si no me matará por llegar tarde.- Dijo con total fastidio, guardando la espada que estaba usando anteriormente.

Y con ello, se retiró dejando a su padre otra vez en una conversación pendiente.

Si aceptaba el trono, ¿con quién se iba a casar?

Y eso, molestaba mucho a Boruto.

∙── ∙ 🌼 ∙ ──∙

- Te dije que llegaras temprano, ¿acaso si sabes escuchar?- Dijo con acidez, su vestido era una completa molestia puesto que su madre le había obligado a usarlo. Aumentando su enfado.

- ¿Y tu, sabes actuar normal?- Respondió con otra pregunta.

- ¿Y tú, sabes ser un príncipe?- Arremetió.

- ¿Sabes ser una chica normal?- Se burló.

- ¿Piensan callarse alguna vez?- Inojin observó con una sonrisa al dúo, el cual se miró fulminante.- Oigan, ¿por qué no se casan ustedes dos?

- Es una buena idea.- Con ironía respondió ChouChou, la cual había acompañado a la Uchiha por mera distracción.- Serían la mejor pareja.

Sarada y Boruto miraron a ambos chicos, para soltar unas risotadas.

- ¿Yo? ¿Casarme con ese idiota?- Su risa tan irónica, puso un poco nervioso a Inojin.-¡¿Es una maldita broma?! ¡Yo ya estoy comprometida!

- ¿Así que, eso era lo que nos ibas a decir?- Dijo Boruto mirando de soslayo a la azabache.

- Sí, pero esta princesa idiota me arruinó la sorpresa.- Dijo cruzándose de brazos, con molestia.

- ¡Oye! ¿A quién le dices princesa?- Se quejó el Yamanaka.

- ¿Qué no es obvio? A ti, rubia teñida.- Apuntó al ojiturquesa, para sonreír victoriosa.

- ¿Y con quién estás comprometida?- Indagó la Akimichi.- ¿Con algún príncipe? ¿Un noble? O tal vez...¿un príncipe de otro país?

- Esas cosas solo te suceden a ti, ChouChou.- Habló con un tono obvio Inojin.

- Já! No es mi culpa que un chico de otro país se haya fijado en mí, soy simplemente una belleza divina~!- Dijo alardeando de su suerte, ya que se iba a casar con Shinki el país de la arena (o tierra) y eso sería dentro de un año.

- Si, claro, como digas bola de grasa.- Se burló de la Akimichi, recibiendo una mirada fulminante.- Pero, ¿quién es, Sarada?

- Mhm...- Pensó en la forma más correcta de decirlo, pero lo mejor era ser sincera.- Me voy a casar con un caballero real. No es con ningún príncipe pero, tampoco es gran problema.

El silencio entre los presentes se hizo notable, aunque estuvieran en un lugar un tanto privado de igual forma podían escuchar sus conversaciones o gritos. Y eso fue lo que pasó.

-¡¡¿QUÉ COSA?!!-

O sea, la gran Sarada Uchiha. Una noble de élite y que tenía gustos exigentes, no tenía gran simpatía por las demás personas o un gran interés en ellas. Había sido cautivada por alguien que tenía menor posición social que ella, incluso estaba la posibilidad de que ni siquiera fuera cercano a algún noble. Simplemente parecía algo irreal y poco probable que sucediera alguna vez.

Pero sucedió y eso no lo podían cambiar.

- Dios mío, no puedo creer eso.- Se veía sumamente sorprendido, Inojin estaba en shock.

- ¡Felicidades, Sarada!- ChouChou de cualquier forma, apoyo a su amiga. Ya que si se veía sumamente feliz con esa noticia, ¿por qué habría de arruinarla? Sabía que sí la Uchiha lo había elegido como su acompañante de vida, era porque de verdad debía ser alguien muy bueno.

- Sus gritos de verdad son molestos.- Una voz externa a ellos les dirigió la palabra, por supuesto. Nadie más que el esposo de Inojin.

- Oh Shikadai, sabías que- Sarada no pudo terminar ya que el Yamanaka le interrumpió.

- ¡Mi querida Raquel! Sabías que la ensalada se va a casar? ¡Y con un caballero real! ¡No es eso, algo increíble!- Y como si de un niño pequeño fuera, toda su atención se dirigió al Nara. Era su capricho que siempre estaría con él.

- Sí, ya lo sabía. Se va a casar con Metal Lee. Como sea, ChouChou debes acompañarme.- Dijo con completo fastidio.

- ¿Y eso por qué?- Con duda respondió.

- Mi primo ya está aquí, tienen que conocerse y socializar. Básicamente.- Dijo siendo seguido por la Akimichi y el Yamanaka.

Como si de un equipo de tratara...

- ¿Y tú no dirás nada?- Sarada miró directamente al Uzumaki, el cual se veía algo incómodo.

- ¿De verdad te vas a casar?- Sonaba muy sorprendido, a la vez que confundido.

- Sí, ¿hay algún problema con eso?- Dijo con una sonrisa amable y un poco cariñosa.

- ¿Qué tan segura estás de casarte...?- Murmuró, bajó su mirada por un instante. Pensando en la ridiculez que había dicho.

- Casarse no es algo muy simple, Boruto.- Dijo con una sonrisa, estaba al tanto de las responsabilidades que debía tomar el Uzumaki y la persistencia de que tenía que casarse dentro de poco.- Pero, cuando encuentras a esa persona especial, estarás muy seguro de casarte y ni siquiera dudaras del matrimonio.

- Tch, es algo muy tonto.- Criticó de manera banal al término matrimonio. Estaba seguro de que no era algo para él.- No creo que sea algo para mí, ni siquiera me he enamorado de alguien alguna vez.

- Claro que sí, ¿recuerdas a...-

- Ni se te ocurra pronunciarlo.- Habló con resentimiento.

- ¿Por qué no? Sigue siendo nuestro amigo a pesar de su noviazgo. Mitsuki ya está casado con alguien más, así que eso no significa que debas evitar el casarte a toda costa.- Dijo notando que el tema más sensible para Boruto volvía.

- Ya lo sé, solamente...- Se veía frustrado y molesto, todos tenía su final feliz. Entonces, ¿por qué él se negaba a hacerlo? ¿Tal vez lo seguía amando? o tal vez... ¿tenía miedo?

¿Miedo?

Probablemente eso era imposible, la única razón posible por la que no se casaba era porque el matrimonio era algo ridículo-al menos, para Boruto- ya que no había gran diferencia a cuando se es novio de alguien. O eso era lo que pensaba.

- Todos sabemos lo difícil que es para ti, sé muy bien cuánto lo amaste pero no te preocupes- Apoyó su mano en el hombro de Boruto.- en algún momento, conocerás a alguien que te ame.

Boruto simplemente, no respondió a eso.

Las palabras de Sarada le habían ayudado bastante, pero cambiar su forma de pensar luego de largos años de estar enamorado de alguien más y que estuvieran a menos de un mes de casarse, era difícil. Complicado de sobrellevar para él. Pero, ¿realmente podría con esa responsabilidad con una persona diferente? No estaba seguro y tampoco quería intentarlo, le molestaba muchísimo. Era algo que odiaba.

Pero, eso ya no se podía evitar.

☆═━┈┈━═☆

- Qué aburrido~- Movía sus pies al mismo tiempo, era joven y los estudios comenzaban a aburrir. Observó a su hermano mayor que leía un libro, tal vez sobre alguna historia fantástica o misteriosa. Pero ella, ni siquiera terminaba aquel ejercicio de matemática.

Himawari desvió su azulada mirada a un lugar distinto, a la ventana que estaba detrás de ella para observar el paisaje que siempre se formaba en días tan bonitos como eso. Su vista estaba curiosa, buscaba cualquier excusa para distraerse y olvidarse por un momento los estudios.

- Me pregunto, ¿cuándo volverá oka-chan?-Dijo luego de no encontrar nada, además ni siquiera recibía respuesta de su hermano ante lo que decía.

Eso le molestó un poco, no le agradaba ser ignorada.

Hizo un puchero por la poca atención que su hermano le ofrecía en ese momento, pero a veces lo entendía. Su hermano tenía casi 20 años y aún no se casaba, ni se había tomado la decisión del siguiente heredero. Podía entender que la presión y responsabilidades de su hermano le hacían tener poco tiempo libre, aquello le deprimía un poco puesto que no tenía tiempo para jugar con ella. Ella ya tenía unos 16 años y aún así, prefería seguir actuando de forma infantil. Bueno, solo un poco ya que ser una doncella tenía sus propias dificultades pero eran muy fáciles comparadas con las exigencias del heredero al trono. Sin embargo, Himawari estaba preocupada por otra cosa.

- Onii-chan, ¿cuándo te vas a casar?- Preguntó sentándose a su lado, logrando que el rubio se sorprendiera.- Ya ha pasado un año de tu anterior matrimonio y solo lo has apla-

- Himawari- Su tono de voz sonaba fastidiado, pero al tratarse de su hermana menor quiso sonar menos agresivo.- ¿por qué tanta curiosidad?

- ¿Eh? Bueno, hace mucho que onii-chan parece triste- Jugaba un poco con sus dedos, no sabía como expresar su inquietud.-, luego de lo que pasó con Mitsuki-niisan no has vuelto a tratar sobre ese tema.

Boruto observó lo preocupada que estaba su hermana, tenía algo de razón. No servía de mucho seguir aplazando su nombramiento de rey y casamiento, a pesar de que se culpaba por lo sucedido ya no había vuelta atrás. Debía casarse y aceptar el destino que llevaba por delante. ¿De verdad aceptaría algo como eso? Era frustrante y muy molesto, pero quería que su padre y hermana dejaran de preocuparse tanto por ese hecho. Tampoco deseaba obligar a Himawari a tomar el trono, siendo que no le correspondía ya que era demasiado joven como para heredarlo.

- Es algo muy complicado- Respondió desviando sus fanales, intentando disminuir la intranquilidad de la menor.- pero ya he hablado con oto-chan y... pensé que estaría bien casarme pronto.

- ¿Hablas de un matrimonio arreglado?- Interpretó lo dicho por el Uzumaki, el cual asintió.

- Algo así.- Mintió un poco, viendo que la peliazul se notaba convencida.

- Supongo que mientras onii-chan encuentre a alguien que le haga feliz, estará bien.- Dijo levantándose del lado de Boruto y correr fuera de la habitación en que se encontraba.

Boruto dejó escapar un suspiro, ¿de verdad tenía que llegar a eso?

Es decir, no estaba seguro si se volvería a enamorar de alguien puesto que aunque fuera algo sumamente tedioso, debía hacerlo. Aquello le entristeció y molestó, todos sus amigos se habían casado con la persona que amaban. Él, en cambio, no tuvo la misma suerte.

Siempre se preguntaba, ¿de verdad era obligado a casarse?

...

- ¡Oka-chan!- Himawari abrazó con mucha alegría a la duquesa del reino, la cual después de un largo tiempo había regresado.

- Hima!- Correspondió el abrazó con la misma emoción que la peliazul, Hinata estaba muy feliz de haber vuelto al reino.

- ¡Estoy muy feliz de volver a verte! Pensé que no volverías hoy.- Disolvió el contacto que tenía con su madre, se podía notar que estaba muy contenta de verla.-¡Te extrañé mucho, oka-chan!

- Yo también, Hima.- Con una sonrisa cariñosa respondió.

Fue saludada de igual forma por las sirvientes y caballeros del castillo, mientras caminaba hacia el despacho real. Donde sabía que se encontraría su esposo, muy estresado por el trabajo que tenía que hacer e incluso había olvidado que ella regresaba ese mismo día. Suspiró con gracia, de igual forma lo amaba y eso no cambiaría.

A pesar de eso, le preocupaba algo más.

¿Cómo reaccionaría Boruto al saber que ya estaba comprometido?

Estaba un poco preocupada por distintas razones, pero ella misma se había asegurado de que todo pudiera salir bien. Y por eso mismo, debía hablarlo con Naruto para saber que había pasado los últimos meses y saber como explicarlo.

- Cariño, veo que estás muy ocupado.- Dijo entrando a la habitación con una sonrisa, viendo que el rey estaba agotado. Aun así, se sorprendió por ello.

-Hinata!- Sonaba sorprendido, para reprenderse mentalmente. El trabajo y las distintas situación familiares, le hicieron olvidar el día de regreso de su esposa.

- Sé que olvidaste que regresaba hoy, pero...- No logró terminar, al sentir que Naruto le abrazó.

Parecía que de verdad le extrañaba.

- Uh...N-No creí que- Se avergonzó un poco y un leve sonrojo apareció en sus pómulos. Detuvo sus propias palabras ya que correspondió el abrazo con cariño.

- Lamento haber olvidado tu regreso.- Dijo con pena, separándose del contacto dirigiendo una sonrisa.- Es algo complicado recordar cosas con todo el trabajo que tengo.

- No te preocupes, puedo ver que Boruto no se decide aún.- Dijo con pesar, al ver que el rubio asentía.

- Sí, dijo que aceptaba el trono pero el matrimonio sigue siendo un fastidio para él.- Dijo con cansancio.

- Pues, tengo una buena noticia para Boruto.- Dijo deslumbrando una sonrisa.- Al notar que no se decidía ni buscaba alguna persona especial para él, encontré un príncipe que de verdad está interesado en Boruto.

- ¿Interesado?- Preguntó volviendo a su asiento, pensando en quién podía ser.

- Así es, pero lo único que me preocupa un poco...es que los dos se lleven mal.- Dijo con un tono un tanto angustiado.- Ya sabes como es Boruto y pienso que tal vez, deberían conocerse primero.

- Tienes razón.- Dijo con el mismo semblante que Hinata, uno preocupado por como reaccionaría su hijo ante eso.

El único dilema era que ya no había necesidad de decírselo, Boruto ya había oído toda la conversación. Estaba realmente molesto y fastidiado, tal vez no tenía gran lógica que se sintiera de esa forma pero... ¿por qué ni siquiera pensaron en cómo se sentía realmente? Boruto no estaba preparado para eso, hace menos de un año había perdido a quién pensó que sería el amor de su vida y estuvieron a nada de casarse. Estaba muy enamorado de Mitsuki, pero las circunstancias fueron diferentes y se casó con Sumire. El enfado era demasiado grande.

- ¿Cómo se llama el chico?- Volvió a preguntar Naruto, intrigado por saber quién era.

- Se llama Kawaki Otsusuki¹.- Dijo con una sonrisa, notando como Naruti se sorprendía bastante.

- ¿Ese apellido...?- Trató de recordar el haber oído sobre aquel apellido, hasta que su mente hizo "click" y pudo saberlo.- Los Otsusuki son los más poderosos de casi todos los reinos y quienes iniciaron una guerra hace unos años, no?

- S-Sí, pero el padre de Kawaki quiso hablar conmigo- Comenzó a relatar.- ya sabes, mientras estaba conversando y hablando con los distintos países por nuestros negocios y tratados de paz, él quiso conversar conmigo sobre un tema importante. O al menos, eso fue lo que dijo.

- Qué inoportuno.- Respondió escuchando atentamente el relato de Hinata.

- Sí, cuando acepté esa pequeña conferencia lo que me pregunto fue si Boruto estaba comprometido.- Bajó su perlada mirada por un instante.- Respondí que eso era información que no podía decirle. Ya que ese reino es bastante misterioso y aislado.

- ¿Y qué fue lo que te dijo?-

- Me dijo que quería que su hijo y Boruto se casarán. Dando por terminado el resentimiento de la guerra, o de una pronta confrontación.- Suspiró, aunque no lo pareciera había sido una decisión difícil para la duquesa.

¿De verdad iba a imponer la felicidad de su hijo así?

O ese fue su pronto pensamiento cuando le dijo eso, pero una pequeña idea se le ocurrió.

- No estaba segura de esa decisión y esa propuesta, así que acepté pero primero- Se detuvo por un momento, era algo muy extraño cuando le sucedió.- ambos debían conocerse.

- O sea, la decisión está en Boruto?- Preguntó un poco asustado ,ya que esa propuesta significaba un trato bastante grande.

Básicamente se resumía a lo siguiente;

Sin guerra y tratado de paz = hijos de ambos reinos se casan.

¿Era algo injusto?

Por supuesto que lo era.

- Sí, l-la decisión está en nuestro hijo.- La presión que sentía era inmensa, Hinata deseaba que no ocurriera ninguna guerra entre ningún reino. Estaban en un momento de paz absoluta pero eso no significaba que debían bajar la guardia, y eso ya era algo preocupante.- Por eso, en una semana más, Kawaki vendrá a nuestro reino. Para conocer a Boruto y así, es como se decidirá si quieren casarse o no.

Algo demasiado extremista.

・✦▭▭▭✧◦✦◦✧▭▭▭✦・

- ¿Estás molesto por qué te vas a casar?- Sarada se notaba confundida, al igual que Shikadai.

- Tch, ustedes no comprenden!- Con impulsividad habló, se cruzó de brazos con molestia.- Ambos se casaron con la persona que aman, en cambio yo, me casaré con un total desconocido.

- ¿Acaso no se van a conocer?- Preguntó con fastidio.

- No lo sé.- Dijo desviando la mirada con enfado.

Shikadai y Sarada se miraron con fastidio, ¿podía ser más idiota?

- uhg por lo menos, sabes como se llama?- Dijo Shikadai en un intento de cooperar a Boruto, o por lo menos, tal vez conocía a esa persona.

- Creo que...- Trató de recordar, había pasado unos cuatro días de esa conversación entre sus padres y no había tenido posibilidad de reunirse con sus amigos por los distintos deberes que tenían. Complicando más la reunión.- Creo que se llamaba Kawaki Otsusuki.

. . .

- ¡¿Es una broma?!- Sarada se veía totalmente sorprendida con lo que decía el Uzumaki, no podía creer lo que le decía.

- ¿Cómo demonios lograste involucrarte con él?- Shikadai preguntó, se podía notar a leguas que conocía bastante de ese chico.

-¿por qué la reacción?- Confundido preguntó.-¿Acaso lo conocen?

- Bueno, el apellido Otsusuki es bastante antiguo y muy influyente-Comenzó a decir el Nara, obteniendo la atención de Boruto.- fueron quienes iniciaron la última guerra, además de la increíble y basta masacre que tiene su historia. Pero, sus actuales gobernantes no han hecho tanto acto de presencia en los reinos.

- Sin embargo, su actual rey es muy hostil y modesto.- Siguió explicando la Uchiha.- En cambio, el siguiente heredero de ese reino casi nadie lo conoce.

- Yo logré verlo una sola vez- Interrumpió la Akimichi la cual se había aparecido de la nada.

- ¿Y tú, qué demonios haces aquí?- Dijo el Nara con molestia.

- ¿Lo viste?- Sarada intrigada volvió a preguntar.

- Sí, como saben yo me voy a casar con Shinki- Dijo con una sonrisa, encantada por la apariencia de su próximo esposo.- así que, en una oportunidad tuvimos que pasar por ese reino. A decir verdad, Shinki no me permitió entrar al castillo de los Otsusuki pero si pude explorar un poco.

- ¿Qué fue lo que viste?- Sarada escuchaba atentamente el relato de la Akimichi, tal como los dos chicos presentes.

- Era un lugar bastante hermoso, sin embargo, demasiado silencioso y repleto de vegetación.- Dijo con una sonrisa al recordar la maravilla de reino.- Luego de un rato, me fui al jardín y ahí logré verlo.

Su voz cambió de inmediato, como cuando veía a su prometido. Estaba encantada con la apariencia.

- Vaya acotación, ¿algo más?- Preguntó desinteresado Boruto.

- Solo te diré, que es bastante guapo.- Dijo totalmente encantada con la apariencia de Kawaki, pero a ella ya le gustaba alguien más y ese era Shinki.- Demasiado guapo.

- Pero, al parecer no es nada amable.- Acotó Shikadai, por fin logrando hablar.

- ¿Cómo lo sabes?- Boruto volvió a hablar.

- No tengo ni idea, pero es una suposición que acabo de idear.- Dijo confundiendo y enfadando más al Uzumaki.

¿Había funcionado de algo hablar con sus amigos?

Probablemente no, pero había logrado olvidarse por un momento que debía tomar la responsabilidad de casarse y que su prometido, era alguien que estaba apunto de casar.

Algo muy curioso y extraño.

(...)

¿Cómo podía describir el día?

Algo completamente tedioso y molesto.

O quizá ni siquiera esas palabras podían explicar lo fastidiado que se sentía en ese instante, ¿de verdad necesitaba prepararse tanto? Se había puesto uno de sus mejores trajes, a pesar de que no era algo incómodo de usar prefería usar cosas simples. Su enojo no podría empeorar, o eso fue lo que pensó, su madre de verdad se había molestado con él por su poca obediencia y responsabilidad ante lo que sucedía.

¿Era un crimen desear dormir más horas?

Tal vez sí, o solo era ese día.

De cualquier forma, se sentía muy enojado.

A veces, no lograba conseguir lo que quería y Boruto solo deseaba escaparse de ese momento. Como su madre insistía en cómo debía comportarse ante los presentes y por qué debía hacerlo bien, en realidad, no prestaba atención a absolutamente nada de lo que le estaba diciendo su madre. Estaba un poco somnoliento, pero sabía que una pequeña siesta recuperaría esa energía. Lástima, que ni siquiera podía hacer eso.

- Qué molestia...- Dijo luego de un largo rato sin salir de su cuarto, se había escapado de las manos de su madre y sirvientas. Iba a tolerar que le obligaran a usar ropa que ni le gustaba o que se negara a usar su colgante, pero tocar su cabello y arreglarlo, jamás.

Deseaba quedarse ahí todo el tiempo, no le deprimía el conocer a su próximo prometido puesto que ya debía olvidarse de la primera persona que amó en antaño. Era algo obvio y que debía hacer, así que estaba preparado para comprometerse. Aunque, ¿estaba preparado para amar a alguien más?

Ese pensamiento le hizo sentarse en su cama, estaba tan distraído en divagar que nunca se había planteado eso. ¿De verdad seguía amando a Mitsuki? Realmente no estaba preparado para amar a ese chico, no deseaba amar a Kawaki ya que aún no aceptaba del todo que su anterior matrimonio había sido un total desastre. De cualquier forma, su opinión no importaba demasiado. Estaba a unas horas...o tal vez minutos de conocer a su prometido y en realidad, no estaba lo más mínimo interesado.

Pero, no podía quejarse ahora. Su madre lo había elegido para él y conocía bastante bien a Hinata como para saber que debía obedecerle sin chistar. Le molestaba demasiado, pero ya no había opción. Quiso divagar más y pensar en lo que acontecía su futuro de ahora en adelante, sin embargo, el sueño le ganó. Se tiró nuevamente a la cama y cerró sus ojos, era una completa molestia esperar.

Y sin ninguna demora, se quedó dormido.

***

— ¡Uzumaki Boruto!—

Una voz bastante maternal, pero que de verdad sonaba molesta. Claro, era su madre.

Se negaba a despertar, aunque debía hacerlo de todos modos. Sabía muy bien que si lo hacía podría conocer a Kawaki y de paso, se llevaría un sermón por su poca cortesía al quedarse dormido. Tenía el conocimiento de que eran personas importantes, pero ¿de verdad le importaba? No era de gran interés, después de todo, daba igual si decía que no quería casarse. Sus padres le obligarían.

— ¡¿Cómo se te pudo ocurrir quedarte dormido?!— Luego de ese pequeño grito, temió un poco por su vida.

No disfrutaba ver a su madre molesta y nunca lo haría, le aterraba un poco hacerla enojar.

— Lo lamento...— Habló somnoliento, admirando por un momento los rincones de su habitación para luego mirar los fanales perlados de Hinata.

— Solo ve a lavarte la cara y baja al salón real.— Dijo para irse de la habitación dejando la puerta abierta, agregando algo más antes de irse.— Y hazlo ahora, es muy importante.

— Ya lo sé...—Dijo haciendo caso a las órdenes de su madre, yéndose al baño privado de su habitación.

La mejor palabra que podría describir su situación sería "fastidioso". Hasta ya le copiaba a su amigo Shikadai.

«Qué irónico.» Pensó con una sonrisa, mientras salía de su habitación con dirección al salón real.

¿Estaba preparado?

.
..
...

La respuesta era un completo no, había llegado a la conclusión de que sería una completa molestia socializar con su próximo esposo, pero no había alguna opción o excusa que sirviera para escaparse de eso. Hasta que se cansó de tanto divagar, abrió la puerta del salón real en completo silencio para ser recibido por su hermana menor.

— Oh onii-chan, veo que ya estás fuera de tu habitación.— Dijo enfrente del rubio, se veía que estaba sola. Aparentemente estaba esperando por Boruto.— Oka-chan y Oto-chan están hablando con Otsusuki-san², pero no creo que sea prudente que te presentes en esa conversación.

— Ah...— Suspiró con molestia, ¿por qué se había apresurado? Eso le fastidió y prefirió irse al jardín real.— Estaré en el jardín, ve a buscarme si me necesitan.

Boruto se fue rápidamente sin dejar a Himawari hablar.

— ¡Onii-chan!— En un vago intento par hacer que vuelva, pero lamentablemente no funcionó. Su hermano ya había desaparecido.— Qué mal... olvide decirles que Kawaki-niisan también está en ese lugar.

¿Una buena forma de conocerse?

Tal vez no.

☆゜・。。・゜゜・。。・゜★

— Qué molestia...— Dijo caminando sin un rumbo fijo, solamente se quejaba en lo que paseaba.

Lo único que podía oír era el movimiento de los árboles al moverse por la brisa y el sonido del agua del estanque, pero en realidad no estaba para nada tranquilo. Tenía muchas problemáticas sentimentales como para lidiar con un próximo matrimonio y a pesar de que buscaba una respuesta con sus amigos, no la consiguió. Bajó la mirada con el ceño fruncido, su molestia era lo único que sentía en ese instante, caminó un poco más y sin querer chocó con alguien más.

Así es, con su próximo prometido el cual le miraba de forma muy neutral.

— Eh...— Fue lo único que pudo decir, ya que Kawaki era completamente opuesto a él y eso le parecía tedioso. Kawaki era mucho más alto que él, parecía mucho más apuesto de lo que era él y la aparente paciencia que parecía tener, le molestaba a Boruto.

— Ten más cuidado, idiota.—

Las primeras mejores palabras en un próximo matrimonio.

— Lo lamento.— El apodo tan fastidioso, le hizo enojarse. Pero como un buen príncipe, lo ignoró completamente.— Estaba algo distraído y no pude oírte.

— Ya veo.— Respondió de manera tosca, creando un incómodo ambiente entre ambos.

Se miraban fijamente hasta que Boruto desvió sus fanales zafiros, no estaba para nada cómodo con la presencia a su lado. ¿De verdad debía casarse con él? Ni siquiera una sonrisa podía fingir y unas pequeñas palabras se crearon en su mente.

« Vete al diablo.» Pensó de soslayo, para seguir mirando a su alrededor.

— ¿No piensas hablar?— Boruto solo decía lo primero que se le venía a la mente, recién lo había conocido y ya le molestaba.

— No si tu lo haces primero, ¿acaso ni siquiera piensas presentarte?— Dijo fijando sus fanales plateados en el Uzumaki.— Vaya idiotez. Creí que–

— Soy Boruto— Habló entre regañadientes.— ¿nos vamos a casar y ni siquiera sabes mi nombre?

— De hecho, solo lo hice por molestarte.— Dijo virando su mirada a un pequeño animal que subía al árbol.— Tu madre me contó varias cosas sobre ti, pensé que serías más útil y hablarías de algo interesante cuando nos conociéramos.

Boruto solo sonreía de manera falsa, pero cada vez sentía como su enfado se acumulaba. ¿Podía ser alguien más molesto de tratar...?

— ¿Que hay de ti?— Respondió, evitando elevar la voz y comenzar una pelea.

— Me llamo Kawaki.— Dijo sin prestar atención al ojiazul, el cual cada vez se molestaba más por la actitud que tenía.

— ¿Qué tanto te dijo mi mamá?— Aparentaba con bastante facilidad.

—...Lo necesario.— Respondió de forma cortante, fastidiando a Boruto.

Boruto recordó lo dicho por Shikadai y pudo estar totalmente de acuerdo con el Nara, Kawaki era una completa molestia que le sacaba de sus casillas.

¿Mandarlo al diablo estaría bien?

Probablemente sí, pero dudaba tener esa autoridad de renegar ese matrimonio arreglado. Simplemente debía aceptarlo.

— No es una gran molestia para ti el casarte?— Preguntó sin aviso Boruto, luego de un largo silencio.

— En realidad, no me interesa.— Dijo para volver a mirar al Uzumaki, después de estar un rato ignorando su presencia.— En cambio tú, ¿por qué no te has casado?

— ¿De qué hablas?—

— Escuché que hace menos de un año iba a haber un matrimonio con el hijo del Rey del país del fuego— Dijo devolviendo un triste recuerdo a Boruto, pero a Kawaki no le interesaba.— Aunque luego se canceló. ¿Acaso sucedió algo?

— No es algo importante.— Detuvo su caminar al tratar de acercarse a Kawaki, sus zafiros de demostraban algo tristes.— Solo fue un problema con mi anterior matrimonio, ¿acaso influye en algo?

— Para nada, solo no puedo creer que aún no te hayas casado.— Dijo cruzándose de brazos, con poco interés.

— ¿Por qué no lo puedes creer?— Estaba confundido e intrigado.

— ¿Qué no es obvio? Eres el hijo del Rey más poderoso del país del fuego. ¿Quién no querría casarte contigo?— Dijo sin cambiar su semblante, confundiendo más a Boruto.

— ¿Eso es un halago?— Al no entender, tuvo que preguntar directamente.

— No. Pienso que tal vez, no eras un buen esposo y por eso nadie quiso casarse contigo.— Y con ello, de verdad irritó a Boruto.

— Ja! Mira quien lo dice.— Cerró su puño con fuerza, sería de muy mala cortesía dejarse llevar por sus impulsos y comenzar a elevar la voz a un chico tan importante, pero era lo mismo para Kawaki.— ¿Y qué pasa contigo?, ¿acaso nadie prefirió estar contigo?

— No digas estupideces, yo fui el que no quiso casarse.— Dijo con acidez, molestando aún más a Boruto.— Y sigo pensando de esa forma, no quiero casarme.

— Tch! ¿Y por qué te vas a comprometer conmigo?—

— Por obligación de mi padre.— Respondió con simpleza, para que una pequeña sonrisa se formara en su semblante.— ¿Por qué? ¿acaso tu anterior prometido te–

— ¡Eres una molestia!— Interrumpió con agresividad, de verdad ya no soportaba su enfado.

— ¡Y tú, eres un completo idiota!— Le respondió de la misma forma, acercándose al rubio.

— ¡Ja! ¡¿Quién querría casarse contigo?!— La cólera que sentía, le hacía desafiar sin importar la posición social que tenía.

— ¡Pues tú, idiota!— Le respondió con obviedad.

— ¡Es un matrimonio arreglado! ¡Jamás querría casarme contigo si así tuviera opción!

La tensión entre ambos había empeorado en un par de segundos, ¿de verdad podían ser un matrimonio?

──✿•✿•✿──

— Veo que ya no estás tan ocupado como antes, ¿cómo te fue?— Sarada vio que Boruto se veía molesto, pero un poco...feliz?

— Supongo que bien.— Dijo mirando por a los alrededores del jardín de la familia Uchiha, no era tan grande como el del Palacio Real pero de cualquier forma era bonito.

— ¿Supones...?— Se veía bastante intrigada, sabía que hace mucho que no hablaba con Boruto. Ser nobles les tomaba demasiado tiempo y no permitía tener tiempo libre, incluso en ese mismo instante ambos tenían las horas contadas.

Puesto que Sarada tenía que ver su vestido de bodas, y asegurarse de que fuera perfecto.

Mientras que Boruto, debía decidirse por la respuesta a su matrimonio.

—Sé que hace mucho que no hablamos, pero he estado demasiado ocupado.— Dejó escapar un suspiro cansado. Mirando de reojo el postre que le habían servido anteriormente, lo dejó a la mitad y el apetito ya se había quitado.— Mi prometido es demasiado molesto y fastidioso.

— Así que, después de todo si te vas a casar?— Dijo tomando un poco de té, viendo con una sonrisa al Uzumaki.— Pero, ¿por qué dices que tu prometido es molesto?

— Nuestro primer encuentro no fue el mejor— Dijo con un semblante neutral, recordando lo sucedido.—, digamos que fue una pequeña discusión y luego lo mandé directo al diablo³.

— Uh...— Su semblante decayó por un momento, procesando lo dicho por el rubio para molestarse en verdad.— ¡¿Acaso eres idiota o qué?! A pesar de que tu posición social es un poco más alta que la de su familia, eso no te da el derecho de decirle eso.

— Ya lo sé, y por eso estos últimos meses hemos "tratado" de arreglar muestra convivencia.— Dijo con tedio, demostrando que era todo lo contrario.

— ¿Cuánto te queda para elegir tu respuesta?— Volvió a preguntar otra vez.

— Menos de dos meses.—

— ¿Qué es lo que te molesta tanto?— Indagó, sus fanales ónix se fijaron en los zafiros.

— ¿De qué hablas?— Confundido respondió.

— ¿Por qué no quieres casarte con Kawaki?— Dijo revelando su curiosidad.

— Eh? En realidad...— Bajó un poco su mirada, con un notorio sonrojo en sus pómulos.— eso no es lo que me inquieta.

— ¿Entonces?— Dijo con impresión. Era un avance.

— Bueno...—

— ¿Tienes miedo de que vuelva a suceder?— Leyó la mente de Boruto, el cual asintió con disimulo.— Boruto, debes confiar en Kawaki. Ni siquiera me has permitido conocerlo, así que no puedo darte ninguna opinión tan específica. Considerando de que soy tu amiga más cercana, pero al parecer disfrutas pasar tu tiempo con él.

—¿eh? ¡P-Por supuesto que no!— Negó con nerviosismo, y sin querer recordó lo sucedido hace unos cuántos días atrás. Sintiendo como sus pómulos se calentaban aún más.

Se cubrió sus mejillas por la vergüenza, para escuchar una pequeña risa de Sarada.

— Puedo notar que, a pesar de lo que le hiciste la primera vez al conocerlo, lo aprecias. No deberías dudar del cariño y amor que te ofrece, eso es algo importante.— Dijo con una sonrisa enamorada, recordando los mimos que le hacía su prometido a ella.

—...— Su semblante cambió un poco, recordando que en realidad ni siquiera se habían dado un abrazo pero ya habían hecho todo lo que se supone que no se hace antes del matrimonio. (Al menos, era la excepción en la realeza).— S-Sí, tienes razón.

— Así que, ¿por qué no le das tu respuesta final?— Dijo aumentando su sonrisa, mostrando lo alegre que le hacía.

— Oi, Sarada!— La voz de su madre interrumpió su conversación que mantenía con Boruto.— Boruto ya debe irse, su prometido vino a buscarlo.

Sarada quiso aprovechar de conocerlo, pero el rubio se le adelantó. Y su madre también la buscaba para otra cosa.

Sarada maldijo su mala suerte en ese momento, de verdad quería conocer al prometido de su mejor amigo para saber qué era lo que le avergonzaba a Boruto.

...

— ¿No se suponía que estabas ocupado?—Dijo con los brazos cruzados, ya sentado en el carruaje.

— Quedé libre mucho más pronto de lo que creí.— Respondió de forma vaga, Kawaki sonrió un poco al ver a Boruto otra vez.— ¿Acaso no quieres pasar tiempo conmigo?

— Nunca dije que no quería.— Desvió su mirada, evitando que su leve sonrojo fuera visto.

Kawaki le sonrió por un instante, pero deshizo de inmediato aquella acción. Y aunque Boruto no lo quisiera admitir, le había hecho muy feliz ver esa sola acción. Pensó nuevamente en lo que le dijo Sarada, si daba su respuesta cuanto antes podía casarse mucho más pronto. Incluso, antes de cumplir 20 años y por eso se decidió por fin.

— Tal vez volveremos a estar ocupados por distintos problemas, pero no creo que– Kawaki le estaba hablando sobre un problema que a veces sucedía, pero Boruto le interrumpió.

— Mi respuesta es sí.— Murmuró con vergüenza, deteniendo a Kawaki el cual le miró con más atención que antes.

— ¿Qué estás diciendo?—

— Tch, si me quiero casar c-contigo.— Dijo con dificultad, admitiendo por fin luego de un largo tiempo.

¿Se había enamorado?

Por supuesto que sí, era algo problemático pero a veces podía funcionar.

— Ya lo sabía.— Le respondió el ojigris con una sonrisa, provocando que el Uzumaki se sonrojara.

¿Tan obvio era...?

De cualquier forma, estaba feliz.

Sabía que después de todo, iba a amar mucho a Kawaki.

My Dear Future Husband

I love you


○●○●○●○●

Otsusuki¹: Como Kawaki no tiene un apellido oficial, decidí ponerle ese apellido por si tenían dudas uwu.

Otsusuki-san²: Himawari en ese momento se refiere a Jigen, además no soy muy buena con esto de los honorífico. Me disculpo si hay algún error en particular.

Mandarlo al diablo³: Es una expresión que sería interpretada como; "no me interesas, vete!".

En fin, espero que las haya gustado este One-shot que me tardé dos días en hacerlo :"u lamento la demora y pronto sacaré otra historia bien tierna uwu. Además de la segunda parte de la historia Hanahaki ;u;

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro