☆6
Al día siguiente de estar practicando todos, se encontraban por salir de la clase, esta vez Ziva no se había percatado mucho del lío que era terminar antes de tiempo las clases de Cementos y pedir salida temprana. Iba paseando por los pasillos y tenía entendido que ya era la casi salida de las clases de primer año, por lo que al acercarse a clase 1-A frunce el ceño al ver la gente que estaba arremolinada ante esta.
—Permiso...
Empezó a decir unas cuantas veces hasta llegar a la parte principal ninguno parecía molestarle dejarla pasar, pero uno en especial la miró mal cuando la vio pasar como si nada a la clase casi cayéndose por tropezarse con la cabellera morada.
—A la mierda, casi me caigo. Ten más cuidado.
Las palabras serias y determinadas fueron las primeras que habían retumbado en la clase, callando a los alumnos de la Clase A.
—¡Ivanov-san, que gusto verla de nuevo! —dijeron las chicas emocionadas.
—Je... Lo siento por no pasarme muy seguido por aquí. —se rasca la nuca la rubia de ojos celestes.
—Oye tú, puedes callarte queremos hablar con la clase 1A —dijo un alumno de primer año de negocio, mientras que algunos se alejaban del mismo.
Al parecer no la conocía, Ziva tan solo empuñó las manos tanto que la fricción al doblarse y rozar con la misma resuena tenuemente la cueriza de sus guantes negros. Que usaba de vez en cuando para mantener ocultas sus extensiones de más.
—Ziva, tranquila, no pasa nada, ¿sí? —Intenta calmar el peliazul de manera robótica moviendo sus manos, mientras se giraba a mirar atentamente a los chicos que rodeaban la clase.
—Si no es molestia, ¿quiénes son y que quieren con la clase 1A? —pregunta cortésmente y serio Iida Tenya, mientras se posaba frente a la rubia.
Por otro lado, Bakugo Katsuki chasquea la lengua fastidiado.
—Son extras mirando la competencia.
Al tan solo decir aquello, e intentar salir de la clase, el chico de cabello morado y piel morena, junto a algunas ojeras lo mira con desinterés casi decepción.
—¿¡Qué es todo esto!? —exclama sorprendida Uraraka.
—¿Qué necesitan de la clase A? —pregunta Iida bien alto y claro, vuelve a repetir un tanto molesto.
—No podemos irnos... —dice preocupado Minera, mirando la horda de gente, entrando en crisis.
—No tiene sentido hacer cosas así—dice Bakugo serio, acercándose a la puerta—A un lado, extras.
Intimidando a algunos que se encontraban allí. Al haber dicho eso exalta a todos de la clase entre ellos Iida, Uraraka y Midoriya.
—¡Deje de llamar "extras" a las personas, solo porque usted no los conoce! —regaña Iida a su compañero, Bakugo Katsuki.
—Llegué a ver cómo era la famosa clase A de héroes. —comenzó diciendo Hitoshi Shinsou— Ver algo así me desilusiona.
Dice mientras se rasca con desinterés la nuca con el brazo izquierdo, aunque de reojo mira a rubia con cierta molestia. Lo cual no pasa desapercibido.
—Interesante, parece que solo sabes juzgar por lo que vez en la portada, es razonable todos son niños impulsivos después de todo —comenta sin mucho interés Ziva mientras se acerca a Tenya y le besa la mejilla— Te espero en la salida, no quiero hacer lío.
Logrando que Tenya Iida se sonroje un poco asintiendo, aun le costaba demostrar tan abiertamente su relación ante los demás. Sin embargo, notó como al pasar entre el pelimorado y la rubia explosiva masculina se sintió un ambiente tenso, aunque nadie se esperó la acción de ambos rubios.
—Vámonos bakugo, no podemos perder tiempo.
Ziva pasó la puerta y algunos de alumnado acumulado en la puerta le hacían espacio tembloroso, era raro verla tan tranquila. En especial para la clase 1-B.
—Usted es la que está perdiendo el tiempo en una clase como esta, además hay pocas personas que están enrolladas en esto... Ellos consideraran transferirse al curso de Héroes. Y parece que pueden transferir a la gente. —comenta serio.
—Realmente, decido donde quiero o no perder mi tiempo.
Ziva realmente le molestaba un poco esta clase de reacciones que a veces los alumnos nuevos tenían, pero debía ser considerada después de todo el primer día había sido más explosiva que ese niño soltando la lengua cual si fuera un espanta suegras, justamente a uno de sus superiores del Tercer año, aunque ahora fuesen mejores amigos. Aunque luego explaya su mirada a su alrededor entre cerrando un poco la mirada. Sintiéndose así la tensión para los que estaban más cerca, bastante palpitante.
—¿Explorando a los enemigos? Esa persona es muy audaz. —dijo un chico de la clase 1-B.
Sin embargo, frente a frente se miran Bakugo vs Hitoshi bastante serios ambos e intimidantes. Este rubio explosivo solo lo ignora y pasa de él, pero lo paran de nuevo, justamente con una voz sumamente molesta para el ojirubí.
—Oye, Oye, Oye, ¡Soy de la clase 1-b en la clase de al lado! —aparece irrumpiendo el ambiente un chico de cabello gris casi parecido a Kirishima pero un poco más extraño.
—¡Si ladras demasiado, será demasiado embarazoso para ti estar durante una pelea real! —dice totalmente serio Bakugo.
Mientras empiezan a quejarse entre Iida, Kirishima y los demás, diciéndole que por su culpa es que todos los odien, haciendo que detengan un poco el caminar del rubio cenizo.
—No importa. Con tal de llegar a la cima, es lo que menos me interesa.
Fue la contestación de Bakugo, haciendo que Kirishima se enojado del coraje e impotencia ante su desinterés. Siendo así que ambos rubios se marchan juntos
[...]
Poco después Iida al salir de aquella pequeña represalia de los demás alumnos de la Academia, fue directo al lugar donde se encontraría con su prometida, pero se asombró bastante al encontrar a ambos rubios practicando seriamente mientras que Ziva, literalmente estaba lo estaba machacando.
—¡Vamos Bakatsuki! Esto no es nada, rubio.
Bakugo estaba haciendo como podía flexiones de brazos, pero sobre ella esta una gran masa redonda blanca casi como un panda y luego encima la rubia de ojos celestes, parada con un excelente equilibrio.
—¡Maldita... bastarda, cállate, joder... eso ya lo sé!
Los caracteres de ambos sin duda alguna eran tan contrarios, pero resulta que en un punto se podían llevar bien, porque se parecían.
—¿Te dije acaso que dejarás de contar rubio? ¡Si sigues despotricando empezaré a aumentar el peso! Vuelve a contar.
Bakugo tenía una mirada de mil demonios mientras que se encontraba solo con la remera que llevaba bajo la camisa, mientras transpiraba y jadeaba sin cesar.
—102...103...104...
Por primera vez podía ver como el chico rubio y maleducado se mordía la lengua para seguir contando, pero el número también lo sorprendió. ¿tanto se había tardado en la clase?
—Disculpen, perdón la demora.
Interrumpió Iida Tenya mientras se inclinaba en forma de respeto y las cosas más o menos se calmaban. Pero una vez que Ziva entrelazo la mirada con el peliazul sonríe levemente, feliz de verlo, por lo que sin dudarlo antes de saltar de encima de Bakugo Katsuki creó un montículo más pesado una vez saltó, haciendo que el rubio chasqueara la lengua, pero sonriera complacido. Estos desafíos enserio eran los que más le gustaban. Pero ante ojos de Iida Tenya eso ya era pasarse de raya, y más siendo que parecía ser masoquista su compañero ante la crueldad de su novia en el "entrenamiento" que parecía más castigo.
—¡Tenya-kun! ~ al fin llegaste, ya estaba por ir a explotarlos para rescatarte —sonríe desafiante y burlona a la vez.
Iida sonríe nervioso, algo incómodo ante el aire que los encierra siendo visto públicamente por Bakugo, aunque luego cae en cuenta en su compañero empezando a preocuparse por su estado descuidado y agotado que mostraba a gritos.
—¿No estás exagerando con su entrenamiento?
—Para nada, Bakugo tiene mucho potencial por delante y yo, yo no lo subestimaré —añade con firmeza Ziva, ya que al decir aquello y escuchar un 200 provenir de Bakugo, sonríe ampliamente.
—Esa sonrisa la conozco... Ziva, no estarás pensando en...
No pudo decir nada más porque esta chasquea sus dedos índice y pulgar, interrumpiéndolo.
—¡Es hora de demostrarme tu velocidad, Bakatsuki! ¡Ahora! —dijo sacando un cronometro, para empezar a medir el tiempo que se tardaba en salvarse. —¡Katsu!
Sin más el rubio con los brazos temblorosos por el peso logro librarse el peso más cercano a él de la masa amorfa blanca una vez que la primera había explotado, para luego el empujarlo y alejarlo de él con una explosión al tiempo que luego este reventaba.
—¡MUERE! ...—resonó en el ambiente la típica frase del rubio.
Sin embargo, se desestabiliza quedando sentado en cuclillas jadeando ante tales impredecibles planes de su sempai.
—Bastante bien, para ser la segunda vez que lo intentamos.
—¡QUE QUIERES DECIR ZIVA! CASI MATAS A BAKUGO, ERES UNA...
Sin embargo, es de nuevo interrumpido por Bakugo que a duras penas y con un orgullo de mil demonios había llegado a él, agarrándolo del cuello del uniforme blanco de la camisa. Para luego mirar a la rubio mayor, y suspirar.
—No te atrevas, a reprenderla y que me trate de mediocre, esto es lo que merezco aprender. Si ella me exige más, yo la reviento, pero superando así que... No te atrevas a decir nada, imbécil —su voz detonaba furia y cansancio a la vez del ojirubí.
Lo único que Bakugo no permitiría es que lo subestimaran porque en definitiva Ivanov no lo hacía con él, y no lo iba a admitir abiertamente pero solo por eso, la respetaba.
—P-pero...
—Ya lo escuchaste, no puedo negármele, después de todo. El será el mejor héroe, después de mí, claro está —exclamó al último, mientras se notaba retrocediendo unos pasos precavida.
—Ziva... —dijo sorprendido al verla tan segura pero feliz, aunque sentía una molestia ante la seguridad que lo había dicho.
Iida Tenya quería también que ella hablara así de él, frente de él. No siempre estaba seguro de que ella estaba orgullosa de él. Estaba... Estaba celoso de Bakugo Katsuki.
—¡¿TE MATARÉ MALDITA!? SOLO YO SERÉ MEJOR QUE TU, ¡NO SERÉ UN EXTRA DESPUÉS QUE TU!!!
Siendo así que el mismo al estar enfrente de la chica con ganas de explotarle la cara, esta lo detiene al dejar el cronometro frente a él, dejándolo estático.
—...
—¿Es malo el resultado Ziva, Bakugo? —preguntó extrañado ante la reacción.
—Previamente en la primera vez lo había hecho en un total de 45 minutos, cosas que no es tan malo, pero mi demostración lo superó y pues... —se rasca la nuca incomoda, pero evita sonreír a la par que ve la sonrisa del menor enfrente.
—¡JODER! LO LOGRÉ, EN TU CARA MALDITA, ¡12 MINUTOS!
Desafía con la miraba rojiza Bakugo mientras Ziva se acerca a su prometido. Sintiendose de lo mejor el rubio por la felicidad tanto estaba que explotaba fuegos artificiales.
—Se superó... Por mucho.
Dice con la voz sorprendida Tenya mientras mira incrédulo a ambos rubios, mientras que ella se acerca a él, y lo abraza.
—Lo sé, es igual a ti, siempre se supera más de lo establecido. Por eso estoy orgullosa.
Aquellas palabras lo conmovieron, una vez más su novia le arrebataba las palabras, pero antes de que pudiera decir algo el celular de Ziva volvió a sonar, esta con mucha pereza contestó sin alejarse de él.
—Da?, s ney ona govorit (¿Si?, con ella habla)—la voz seria de la rubia cambio al contestar.
—U nas problema s bossom, nam eto nuzhno.
(Tenemos un problema jefa, la necesitamos)
Bakugo había prestado inconscientemente atención, y solo supieron ambos entender que aquellas palabras no eran buenas porque el calor era palpitante y más cuando esta con cierto deje se separó de Tenya sonriendo sin ganas, excusándose para hablar con el celular, mientras este asentía preocupado. Mas no tardaron en escuchar maldiciones raras, y gritos enojados de la rubia, siendo así que cuando terminó esta tenía un sabor amargo.
—Tal parece no podré ver en vivo y en directo, vuestro desenvolvimiento en el festival. Aunque eso no significa que ambos no se esfuercen, supérenlos y por sobre todo no sean mediocres —animó a los chicos.
—Ja, no dejaré que ningún extra me supere, ya verás. Seré mejor que todos. Esperaré mis entrenamientos más difíciles.
La mira con burla, ocultando todo posible sentimiento de enojo, para luego marcharse. Mientras que Tenya tan solo se dedicó a tomar la mano de su prometida y ponerle los guantes con delicadeza.
—¿Quieres hablar de ello?
—Sí, pero... En casa, no me siento bien, necesito unas vacaciones.
Bromea mientras siente como su novio deja que se suba en sus hombros para llevársela a su casa, sería una larga tarde, sin lugar a dudas, a saber, que líos de seguridad de nuevo había.
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Hoa! Perdoneme la tardanza estoy muy ocupada con las clases, examenes y demas extras de mi vida cotidiana, pero aquí esta un nuevo cap. ¡espero lo disfruten!
Muchas gracias por su paciencia y estar leyendo.
¿Qué parte les gustó mas?
¿Ziva está sobre explotando a Bakugo o esta bien que no le subestime?
¡Nos leemos pronto! ¡Salud y mucha lokura!
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