-Perdona pensé que eras mi madre, ¿Que cuentas?... Chizuru-

-Pues nada quería escuchar tu voz-

-¿Para que me necesitas?- enfatice frunciendo el seño mientras me sentaba en la cama.

-Veo que jamás caerás ante mi encanto, bueno solo llamaba para ver cómo estabas, ¿Quieres que hablemos en algún lado?-

-¿Tienes tiempo?-

-Bueno es solo una pequeña charla, la agresividad con la que contestate me preocupó, ¿Paso algo nuevo con tu familia?-

-Puedo manejarlo- expresé colocando mí mano en la frente observando el techo para así dejarme caer sobre la cama.

-Bueno, entonces no te molestare, así que... Hasta luego-

-Espera ¿En donde nos juntamos?-

-Eh pero dijiste que no-
-No lo dije en ningún momento, así que ¿en donde?-
-Te parece... el parque cerca de mi departamento, despues de todo vives a dos cuadras de aqui-
-Bien lo que digas entonces...-
-Sip mañana a las 3 y tomamos algo-
-Okey, hasta mañana-
-Hasta mañana descansa-

Corte mi teléfono y dejé caer mi brazo sobre la cama, cerré mis ojos un momento pero escuché que Rita-san me llamaba, así que decidí bajar.

En el pasillo escuché una voz llamándome lo cual no me gustó.

-Yooohoo-decia en voz baja.

Ese tono era el tono del fastidio, mire una puerta que estaba a mi derecha la cual se abrió de golpe y una chica de pelo castaño oscuro salto sobre mi a abrazarme y obligatoriamente con sus manos enterró mi cara en su pecho.

-Jiji se que esto realmente te gusta Satochin-
-Ah Rin ya basta suéltame si que eres fastidiosa-decia tratando de safarme de su agarre, Rin es la hermana mayor de Mashiro.

Si muy bonita pero en realidad como ya dije es una holgazán, puede que trabaje y estudié pero no hace deportes en lo absoluto, se la pasa jugando videojuegos y comiendo porquería y con eso no le basta ya que se la pasa molestandome a mi y a Mashiro, con cosas pervertidas.

-Oye, oye, Satochin, ¿te parece un trio? Tu, yo y Mashiro no te ahg...- no quería que dijera una palabra más así que retorcí su nariz hasta que se rindió.
-Jeje ya veo no será que solo me-quie-res-a-mi..-deletreo con un tono cariñoso, el cual me fastidio, pero como siempre hago la tome de la mano y nos metimos en su habitación.
-Oye, esto...¿Que haces? ¡O-oye!-la levanté y la arroje a su cama y me subí encima de ella la mire seriamente y me acerque a su rostro, podía ver como se sonrojaba para luego desviar la mirada y decir.

-E-Esta bien tu ganas me rindo no te molestare más, por el momento-con una sonrisa de satisfacción me quite de encima de ella y me fui sin decir nada.

-Dios...casi se me sale el corazón, esta vez estuvo realmente cerca, si sigue así no seré capaz de controlarme...y eso que tenemos la misma edad-dijo ella mientras tocaba su pecho, aunque eso yo no lo escuché.

Baje al comedor y vi a Rita-san y Mashiro cocinando.

-Sato-kun ¿porque no comiste lo que te deje?-dijo haciendo un tierno puchero.
-Oh cierto lo olvide es que, pasaron cosas...-dije para así desviar mi mirada al refrigerador.
-Ya veo... Entonces entiendo, no pasa nada, lo ¿comerás ahora?-
-Si, bueno te tomaste la molestia de prepararlo, así que andando-dije para así acercarme a la mesa tomar y arrastrar la silla y sentarme, mirando los detalles de la madera de la mesa levanté mi cabeza y vi que Rin y Mashiro se habían sentado, Rin me miraba con una sonrisa y se movía de un lado a otro tarareando y Mashiro estaba con su cara enterrada en su celular.
-Bien ya está listo-Rita-san llegó a la mesa con una olla y la puso perfectamente en el medio, tomo los tazones de arroz de cada uno y fue sirviendo uno por uno.
Luego de eso no paso nada más simplemente charlamos como todas las noches y me fui a mi habitación.

Al día siguiente como todas las mañanas me levanté y cepille mis dientes lo hacía tranquilamente sabiendo que en cualquier momento Rin entraría directo a molestarme y así fue entro con su pijama aunque su pijama era una camiseta mía, robada por cierto, negra y unos shorts muy cortos.

-¡Satochin buenos días! déjame darte un beso de buenos dias ahumm-dijo haciendo pico con sus labios pero como siempre retozí su nariz hasta rendirse, ella agarro su cepillo y comenzó a cepillarse mientras se miraba al espejo al igual que yo.
-¿Hoy no vash a la univershidad?-decia cepillándose.
-No hoy tengo el día libre-
-Vaya te vash a dar cariño todo el día si quieresh puedo ayudart.. auch-un pie de fuera del baño le dio una patada en el trasero a Rin que al asomar su cabeza era Mashiro quien estaba aún dormida y toda despeinada.
-Buen día Mashiro-
-Buenos días Sato-decia frotando tiernamente sus ojos.
-¡Buenosh diash Ma-shan!-
-No me hables mientras te cepillas los dientes-

Sin decir nada más termine de cepillarme iba volver a mí habitación pero Mashiro me habló.

-Oye Sato me preguntaba si pudieras acompañarme a la librería, no es como si quisiera que me acompañes pero necesito ayuda con la cosas que voy a comprar-
-No puedo hoy, ¿te parece mañana?-dije para así ver que Mashiro se puso pensativa.
-Ahh está bien, desde cuándo estás tan ocupado-decia volviendo al baño.
-Estoy obligado a ir a un bar con Haru y su amor platónico y sus amigas-dije vagamente para así ambas asomarse asombradas.
-¿Sato con mujeres? Eso.... ¡es una cita!-dijeron las dos a la vez.

Lo único que hice fue irme y encerrarme en la habitación, bueno más bien le puse seguro a la escotilla del ático.

Luego de eso tome mi teléfono y miré la hora aún faltaban dos horas para encontrarme con Chizuru y de ahí irme a beber con Haru, lo único que hice en la próximas dos horas fue sentarme a mirar por la ventana del ático.

Y así pasaron las horas salí de casa me puse una sudadera ya que estaba un poco fresco, como siempre salí por la parte del restaurante solo para tomar un caramelo de sabor a café y salir en dirección al parqué, camine por un rato y pasó lo que siempre pasa.

-Oh no esto otra vez, mierda...-detuve el paso y veía a las personas pasar las cuales se teñian de un color gris al igual que el cielo...

Todo se volvió gris como siempre cada vez salgo la gente me mira por fuera y no por dentro.

-Mira a ese chico es tan lindo-
-Que galán, es un papucho-
-Pidele su número-

Dejen mirarme....ya basta, por favor basta....

Mi mundo se vuelve gris todo el tiempo, así que dejo de escuchar...dejó de ver y simplemente me sumerjo en mi mundo donde nadie me dice nada donde la personas no son superficiales y tontas, aunque ese mundo solo lo hábito yo...

-Daiki, hey Daiki..¡Daiki!-

De pronto escuche una voz levanté mi cabeza y vi a Chizuru...

-Ah... Chizuru eres tú-dije jadeando un poco.
-Si llevo un buen rato llamándote, ¿Estas bien?-
-Si lo estoy ahora que estás aquí-
-Eso fue tierno, dime paso de nuevo ¿no?-
-Si pero me siento mejor, estoy bien-
-Bueno entonces vamos a algún café o ¿algo?-
-Pues no lo sé eres Chizuru Mizuhara la novia de alquiler, la número 1 la favorita, la gran estre...-
-Es suficiente-ahi saco su lado agresivo, me miraba con repugnancia y también algo enojada.
-B-bueno lo que trato decir es que te conoces la mitad de la ciudad has tenido citas en todos lados así que...-
-Solo tomemos un refresco de la máquina expendedora y sentémonos en esa banca-dijo dando un suspiro y señalando la banca

Chizuru fue a sentarse mientras que yo iba a la máquina expendedora tome un refresco de limón para mi y para Chizuru uno de fresa era su favorito.

-Toma-dandole la lata.
-Sabor fresa con esto ganaste muchos puntos, gracias...¿Cuanto es?-dijo husmeando en su bolso.
-No, soy un hombre, un caballero no puedo dejar que pagues-dije intentando no sonar sarcástico, pero aún así Chizuru me miro enojada.

-¿Sono demasiado sarcastico?-dije ladeando una pequeña sonrisa.
-Pues si baka-
-Pues lo decía enserio-
-Bueno dejemos el dinero para después ¿Entonces? ¿Que a pasado?-
-Lo de siempre depositaron dinero que no quería-
-Ya veo, ¿no lo usarás?-
-¿Quieres que te alquile?-
-¿Que? No ¿pero que estás diciendo?-
-Solo bromeaba, aunque esto cada vez es peor es como si quisieran comprarme, es asqueroso-
-No pienses en eso, eres más feliz aquí que en Shinagawa, cuando llegaste aquí tenías una cara demacrada como si hubieras pasado un infierno, tambien tenías el cabello más corto jeje eras adorable mira esta foto-

Chizuru me mostró su celular con una foto mía de cuando aún tenía el cabello corto, al ver esa foto instantáneamente intenté quitarle el celular para borrarla.

-¡Dame eso, esa foto es horrible luzco patetico!-
-Jeje nop es mi preciada foto- dijo con una sonrisa.

Al instante de oír eso me aleje de ella...

-¿Tan preciado soy para ti?-dije dejando caer mi cabello sobre el rostro.
-Daiki...-la mire de entre mis mechones y sentí como su suave y delicada mano apartaba el cabello de mi rostro.
-Eso no se pregunta, ya sabes la respuesta, se que odias a la gente superficial, pero yo no me hice tu amiga por qué te crea guapo o algo parecido-la mire un momento de pies a cabeza y di un suspiro
-Ahh, bueno supongo que no puedo odiarte-
-Ves pero si en el fondo me adoras jeje, bueno no olvides que eres mi preciado y adorable amigo-dijo con una sonrisa.
-Oh no ya entre en la zona de amigos-dije intentando sonar dramático.
-No digas tonterías-Chizuru me dio un leve golpe en el brazo para después desviar la mirada y cruzarse de brazos.
-Chizuru-dije haciendo que ella me mire.
-Gracias... lo necesitaba-dije dandole una sonrisa.

Pude notar como las mejillas de Chizuru se enrojeciéron un poco.

-Baka-dijo mirando hacia otro lado.
-Si sonrieras más seguido muchas chicas se enamorarían de ti-
-Si fuera por mí sonrisa eso solo...-
-Seria enamorarse por lo de fuera, siempre dices eso-dijo terminando la frase por mi.
-Dios... que voy hacer contigo...bueno tengo trabajo-dijo mientras se levantaba y despeinába mi cabello con su mano.
-Nos vemos luego Daiki y ya sabes si te sientes solo, solo tienes que llamarme-
-Vaya siempre con tu frase de novia de alquiler, nos vemos-dije para así también ir en la dirección opuesta pero me detuve un momento y volteé y le grité algo a Chizuru.

-¡Oye Chizuru!-dije para así ella voltear sorprendida.
-¡Saluda a Kazuya de mi parte, después de todo el es tu cita de hoy ¿No?!- pude ver como Chizuru se ponía como un tomate.
-¡Pero que estás diciendo tonto, ahg!-dijo para así irse enojada.
-Ahh solo di que lo amas-pense en ese momento.
-Bueno aun quedan como 2 horas- dije viendo que mi celular marcaba las 3:45, pensé en que hacer mientras tanto y a mi cabeza vino que podría haber acompañado a Mashiro hoy pero ya era demasiado tarde ya estaba fuera, así que decidí recorrer un poco la ciudad, pero de pronto pensé en ir allí cuando me refiero allí es mi cuartel secreto Haru lo denominó así.

Corrí a un callejón y entre por una puerta alambrada algo oxidada para así entrar a un edificio en el cual no entra nadie.

-mmm debería seguir con eso- dije viendo una enorme cortina que cubría un paredón, tome una enorme caña de metal y con eso empezé a correr la cortina, dejando ver mi gran obra de arte.

Se que es algo extraña pero representa lo que yo y mis cuatro amigos sentimos por este mundo, aunque gran parte de ese dibujo fue ideado por Ran.

Así pase la próximas horas terminando de pintar ese mural.

-Uff bueno creo que es hora de que me vaya, ah, oh mierda-dije viendo que manche mi sudadera no era mi favorita así que no me molestó tanto pero aún así tendría que ir solo con mi camiseta, decidí no darle tantas vueltas al asunto tome mi chaqueta y la metí dentro de una caja de madera en donde siempre guardábamos bocadillos.

Luego de eso lave mis manos y simplemente salí del lugar en dirección al lugar acordado donde nos íbamos a encontrar y allí fue cuando eso pasó...la vi a ella.

Ya a unas calles del lugar de encuentro vi que gran parte de la gente murmuraba, no sabía el porque ya que como siempre estaba sumergido en mi mundo.

-Wow ella es hermosa, que adorable-
-Que chica tan linda-
-¿Estara sola?-
-Rayos yo jamás haría esperar a alguien tan bonita-

De un momento a otro decidí dejar de evitar mirar el rostro de las personas y cuando levanté mi mirada vi que todas sus miradas se centraban en mí o eso creía por curiosidad de saber si era a mi a quien miraban volteé a mi derecha y la vi ella..que al verme se sonrojó.

Continuará...