Los Campeones
Los kryptonianos descubrieron que pueden tener la misma fuerza, velocidad y resistencia que Kal-El, Apocles, simplemente exponiendose a la atmósfera de la Tierra, cuyas partículas gracias a la luz del sol amarillo de la Tierra, se fortalecen por la radiación solar, obteniendo un aumento en sus capacidades físicas, siendo Flash y Green Lantern los primeros en sentir ese aumento de poder a manos de Non y Ursa, siendo la soldado la que se lanzaría contra Barry quien logra esquivarla para después intentar golpearla pero ella esquivaba y bloqueaba sus golpes con mucha facilidad.
Para después golpear su vientre y su cara estampando al velocista contra el suelo a punto de patearle en la cara, pero Flash logra reincorporándose corriendo lejos de ahí siendo seguido por Ursa causando ondas de choque por toda Metrópolis, si bien Barry la superaba en velocidad, la kryptoniana daba giros más precisos logrando acercarse a la espalda del humano pero fallando sus golpes que causan dichas ondas de choque al golpear a todo lo que se les pusiera en frente.
Flash: *pensando* ¡Carajo! ¡¿Porqué siempre logra acercarse?! ¡A este paso terminará...!
No pudo terminar de pensar ya que se quedó en shock al mirar a Ursa justo en frente de él conectándole una patada que estrelló a Barry contra varios autos rompiendo algunos de sus huesos, a cada segundo que avanzaban, el cuerpo de Ursa comenzaba a generar y absorber su propio calor gracias a la fricción, aumentando su velocidad hasta ese punto. Non mantenía a Green Lantern entre sus brazos, dispuesto a golpearle con mucha fuerza, pero en eso, varios misiles impactan en el cuerpo del alien junto con un tridente que lo separa del linterna.
Batman y Aquaman habían llegado en el batiavión, iban de camino a la base militar de Estados Unidos pero al ver a Green Lantern en problemas decidieron ayudar a su compañero, por lo menos hasta que se recupere. Aquaman se lanzó contra Non golpeándolo varias veces con su tridente dorado, incluso generó una onda sónica usando el agua derramada de una fuente del parque donde estaban, pero el gigante atraparía su arma y de un golpe estrellaría la cara del atlantiano contra el suelo agrietándolo en el proceso, el alien iba a atravesarlo con el tridente.
Pero Batman le disparó un disco sónico en el pecho del kryptoniano activando varias ondas sónicas que comenzaron a aturdir a Non quien es obligado a tapar sus oídos al mismo tiempo que Green Lantern, con mucho esfuerzo, creaba un martillo con el poder de su anillo para golpear al alien mandándolo a volar varios metros atrás, en eso, Ursa se da cuenta del escándalo, por lo que a gran velocidad llega a la escena viendo a Aquaman en el suelo, a Green Lantern sosteniendo su pecho y a Batman con dos discos sónicos en sus manos.
La alien estaba a punto de atacar al caballero de la noche pero este activa los discos aún en sus manos mandando a volar tanto a Ursa cómo a él mismo, por suerte, había activado unos tapones en sus orejas para no sufrir por el sonido de los discos, caso contrario a la alien quien sentía un fuerte dolor de cabeza por el daño a sus tímpanos, al mismo tiempo que Batman le lanzaba una red de metal capturando a Ursa, pero esta con una gran fuerza rompe la red cómo si fuera de papel lanzándose hacia el caballero de la noche pero Aquaman la golpearía mandándola a volar.
En eso, Batman recibe una llamada de Cyborg.
Cyborg: Oye Bats, ya descubrí cómo destruir las naves sin causar daños globales.
Batman: Te escucho.
Cyborg: Lo bueno es que es posible, lo malo es que no te gustará saber a quien necesitamos para ello.
Batman: *suspira* Ve por él entonces.
Lo que no sabían es que el General Zod iba en camino hacia la Isla de Themyscira, donde Apocles y Diana lo estaban esperando con un plan que incluía la nave en la que Kal llegó a la Isla hace tantos años, debido a que la nave usa la energía almacenada en el "Motor Phantom", es capaz de doblar el espacio, siendo la razón por la cual pudo llegar en la época y lugar tras ser enviada desde krypton, la nave nodriza de Zod tiene la misma energía, si hacen que ambas colisionen, se creará un agujero negro, cómo el de la zona fantasma que los tuvo encerrados.
Y sólo absorberá aquello que sea de origen kryptoniano, así que Metrópolis no se vería afectada, pero tienen que ser rápidos antes que el estado de la ciudad empeore. Diana decidió llevar la nave dentro de la nave exploradora hacia Metrópolis ya que Apocles debía ir al Océano Índico a destruir la otra parte de la nave y evitar que el campo gravitatorio que estaba terraformando a la Tierra siga expandiéndose y de paso alejar a Zod que iba en camino hacia la isla por dicha nave.
Diana: Cuídate Apocles.
Apocles: Tú también Diana.
Ambos se dan un beso de consuelo ante la vista enternecida de sus madres y el resto de las amazonas, para después el campeón de la isla despegar y dirigirse al Océano Índico. Zod iba acercándose más y más, pero de repente en un radar detecta la nave exploradora que hace unos minutos pasó a su lado gracias al camuflaje, las naves que acompañaban al general comenzaron a dispararles, a lo que el general recibe una llamada holográfica de la conciencia digital de Jor-El, el padre de Apocles y de su esposa, Lara Lor-van.
Jor-El: Detén esto Zod, aún hay tiempo.
Zod: *molesto* Nunca dejarás de darme sermones ¿Verdad? incluso en la muerte.
Lara Lor-van: No dejaremos que uses el Codex así.
Zod: No tienen el poder para detenerme, cuando los haga caer destruiré toda su memoria digital y acabaré con la esposa de su hijo.
Jor-El: Debes dejar que el planeta exista.
Zod: *serio* ¿Acaso para adaptarnos por un siglo cómo tu hijo lo hizo?
Jor-El: Lo que vas a hacer es provocar un genocidio a escala global.
Zod: Si y lo estoy discutiendo con dos fantásmas.
Jor-El: Ambos lo somos Zod, no puedes verlo, pero el krypton al que te aferras desapareció.
Zod: ¡¡Cierra tu maldita boca!!
Jor-El: Silenciarme no cambiará nada *lo mira a los ojos* mi hijo...es más de lo que tú fuiste y terminará lo que tú y yo empezamos.
Zod demostraba ira en su rostro, combinado con las ganas de hacer sufrir a quien tenía delante, sin recordar que no estaba ahí y que era solo un holograma.
Zod: *furioso* Dime algo, tienes la conciencia de Jor-El...¿Acaso puedes sentir su dolor? Yo voy a sacar cada gota del códex del cadáver de tu hijo amado y voy a reconstruir a kryptón sobre sus huesos.
Acto seguido, el general rompió el panel dejando de ver a los dos hologramas yendo a toda velocidad por la nave exploradora, por otro lado, Cyborg estaba yendo hacia Europa a buscar a Apocles, pero notó que este estaba volando hacia él, así que el moreno frena y lo espera para hablarle de cómo destruir esa nave sin daños globales.
Cyborg: Sólo debes ir al centro del rayo gravitatorio y destruir la nave desde abajo, de este modo, la onda de choque será enviada hacia arriba, el único problema que veo es que al tener la energía de tu mundo, esta te podría afectar.
Apocles: No si tú me ayudas.
Cyborg: ¿Ah si? ¿Cómo?
Apocles: La nave puede detectarme al ser un Kryptoniano, pero no a tí, la energía que tu tienes en tu cuerpo no se parece a nada visto por el ser humano, ¿Correcto?
Cyborg: Así es, una caja de color azul me salvó de una muerte segura remplazando partes de mi cuerpo con material metálico pero con su propia energía.
Apocles: Pues esa energía la podemos usar para aturdir la nave y que no me afecte su atmósfera.
Cyborg: Me gusta la idea Sups, hagamosla.
Así el príncipe y el moreno fueron hacia la nave, Apocles se iba a situar debajo de la nave pero esta comenzó a crear tentáculos de metal líquido con puntas de ganchos que atacaban sin cesar al amazónico, quien recibió un pequeño corte en su mejilla derecha, por lo que Cyborg se situó arriba de la nave, concentró mucha energía en sus manos y la lanzó en forma de rayo directamente hacia la nave, quien comenzó a verse afectada por dicha energía. Apocles aprovechó esto para situarse debajo de la nave y con todas sus fuerzas volar hacia arriba.
Y gracias a esto atravesó la nave kryptoniana mandándola hacia arriba y sacando a Cyborg del camino para que esta explotara y solo creara grandes brisas en un rango de 20 kilómetros a la redonda, el moreno estaba agotado, no había usado tanta energía en un solo ataque, acto seguido, debían ir a Metrópolis para asegurarse de que el resto del plan vaya bien. Zod seguía a Diana en la nave exploradora con tres naves de ataque detrás de ella, en eso, Faora sale de la de en medio y llega a la compuerta de un salto rompiéndola de un golpe.
Los suegros de la amazona le dijeron que vaya mientras ellos controlaban la nave, de este modo, Diana se había colocado bien su escudo y su espada dispuesta a luchar por su mundo y su gente, quedando frente a frente con la alienígena, quien, para sorpresa de Diana, estaba sin su casco.
Faora: Uno a uno, tú y yo.
Diana: Me parece perfecto.
Faora se lanza contra Diana con un derechazo que es bloqueado por el escudo de la amazona, pero esta pudo sentir la diferencia de fuerza desde la última vez que pelearon, había aumentado, por lo que sin dudar lanzó un tajo con su espada mandándola contra una pared comenzando una pelea entre ambas guerreras. Faora atacaba sin descanso con sus puños, nunca antes había sentido una fuerza similar en sus manos, eso la emocionaba bastante, sobre todo si su primera victima era la esposa del traidor de su gente y enemigo de su comandante.
Diana por otro lado hace mucho que no se esforzaba tanto en una pelea, y temía que si dejaba que Faora continuara de pie ella pudiera superarla con solo su fuerza, cosa que al final sucedió porque la alien la estaba mandando a volar atravesando varias paredes dentro de la nave causando que esta tambaleara recibiendo varios disparos de las otras naves que los perseguían, hasta que finalmente Faora la sacó de la nave de un puñetazo pero Diana la atrapa con su lazo cayendo ambas en Carolina del norte mientras las naves seguían su camino a Metrópolis.
Faora le atina un puñetazo en la cara sacándole sangre de un raspón por el golpe, habían aterrizado en una zona sin árboles ni casas, por lo que la luz del sol le daba de lleno a la kryptoniana, absorbiendo más energía poco a poco aumentando su fuerza con ello, Diana pasó de la ofensiva a la defensiva tras recibir una lluvia de golpes por parte de Faora, quien la estaba haciendo retroceder dejando marcas en el terreno debido a la fuerza de sus golpes, que eran unas potentes ondas de choque que comenzaron a llevar el escudo de Diana al límite.
Ya que tras unos segundos, uno de esos golpes logró abollar ligeramente una parte del escudo dejando en shock a Diana, nada en este mundo había logrado abollar su escudo, pero claro, esa mujer para nada era de este mundo, acto seguido, la alien embistió a Diana llevándola por los aires comenzando una pelea aérea. Volviendo a las naves que ya habían llegado a Metrópolis, Zod estaba apunto de dejar fuera de juego a la nave exploradora, pero en eso, Apocles llega atravesando el techo y con sus ojos láser dorados parte la nave a la mitad explotando las otras dos.
Dejando que Zod cayera al suelo en una gran explosión mientras que Jor-El y Lara prepararon la nave de su hijo para dispararla como si fuera un misil hacia la nave nodriza, al activarla abrieron una escotilla debajo comenzando a alejarse del lugar, en el suelo, Non y Ursa notan lo que estaba pasando por lo que intentan saltar para interceptar la nave, pero Green Lantern usó lo único que le quedaba de energía para crear una cadena que los retuvo un poco, lo suficiente cómo para que la nave impactara en la nodriza liberando una explosión de color azul y comenzando a absorber ambas naves.
Y tras esto, Non y Ursa también fueron absorbidos debido a que tenían sus armaduras puestas junto a Nam-Ek que se había quedado en la nave nodriza, quien junto a las últimas dos naves de asalto que quedaban fueron absorbidos por el agujero negro que habían creado, por suerte, la nave exploradora estaba muy lejos cómo para ser absorbida. La Liga de la Justicia al fin podían descansar, esa fue una de las peleas más duras que tuvieron después de la de Paralax cuando Green Lantern se había unido al equipo.
Apocles y Cyborg llegan donde los demás, notando el príncipe cómo Batman tenía algunas arrugas en su traje y que se estaba sosteniendo un brazo.
Batman: Ni se te ocurra decir que me salvaste.
Apocles: Jeje, lo siento.
De repente, escuchan un estruendo desde el cielo, notando Apocles cómo Diana y Faora estaban luchando en el cielo en su dirección y que de un potente golpe, la alienígena había destruido el escudo de su esposa, siendo mandada al suelo cerca de él generando un cráter por el impacto.
Apocles: ¡Diana!
Diana: *se levanta de un salto* Descuida, estoy bien.
Apocles: *suspira* Me alegro.
Faora aterriza en el suelo mirando el desastre que los terrícolas hicieron, así que levanta unos escombros dejando salir a Zod, quien tenía su armadura completamente rota tras la caída y la explosión, por lo que se levanta y mira furioso a Kal por lo que hizo, acto seguido, se quitó su traje y su casco, recibiendo la atmósfera de la Tierra, y tras solo unos segundos...se supo adaptar, ahora ambos kryptonianos tenían energía solar fluyendo a través de sus células, Apocles y Diana se miraron y se tomaron de las manos acercándose a la pareja.
En eso Zod toma un poco del polvo del lugar y le reprocha a Kal lo que hizo.
Zod: Mira esto, pudimos haber construido un nuevo Kryptón en este basurero, pero escogiste a los humanos antes que nosotros, yo solo existo para proteger mi mundo, esa fue la misión que he tenido desde el día de mi creación...y cada acción que tomo, sin importar cuan violenta sea o que tan cruel, es por el bienestar de mi civilización *deja caer el polvo en su mano teniendo un nudo en la garganta* pero ahora...ya no existe, mi alma *voz furiosa* eso fue lo que arrancaste de mí.
El General rápidamente se lanzó contra Kal, quien solo pudo atraparlo con sus manos siendo arrastrado hacia atrás por el aumento de fuerza de Zod, que esperaba que lo igualara ahora que no tenía puesto su casco. Faora se había lanzado contra Diana, pero ella logró atrapar su puño para derribarla con sus piernas y de una patada alejarla de los dos hombres, las peleas no debían interferirse entre sí, por lo que la amazona decidió ir con todo esta vez, ambas mujeres habían vuelto a pelear generando varias ondas de choque con el choque de sus puños en la otra.
Zod: *forcejeando* Estos humanos que elegiste cómo compañía y pareja, a todos te los voy a arrebatar uno por uno.
Apocles: Eres un loco Zod, y voy a detenerte.
El príncipe le dio un cabezazo al general que lo aturdió por unos segundos, el tiempo suficiente cómo para darle un golpe tan fuerte que lo mandó a volar, y cuando este intentaba levantarse, Apocles le dio otro golpe alejándolo aún más de ahí, yendo hacia el Oeste de Estados Unidos, en las zonas desérticas, ahí, nada podría esconder a Zod, pero, ¿Eso no lo beneficiaría?, bueno, si, pero más a Apocles, ya que él no sólo tiene sangre Kryptoniana, sino que tiene la experiencia de 120 años, todo ese poder acumulado desde la niñez contra un día de apenas haber sentido la luz del sol.
Ambos hombres llegan al lugar donde sería su pelea, el desierto de Utah.
Sin árboles, sin casas, solo algunas colinas y la luz del sol, sería mortal para cualquier humano, pero no para dos alienígenas que se alimentan de la luz solar.
Zod: *se levanta* ¡¿Acaso me subestimas, Kal?!
Apocles: No, simplemente espero que puedas luchar mejor sin tu armadura, no me parece justo.
La armadura del general no era muy útil en ese momento, por lo que Zod decidió hacerle caso y quitársela, ahora ambos solo tenían sus trajes que dejaban ver sus cuerpos musculares y el resultado del entrenamiento y crianza de cada uno, por un lado, Apocles fue criado tal cómo un niño normal, con algunas lecciones de las Amazonas que lo acogieron cómo si fuera uno más, mientras que Zod, fue diseñado para la lucha, para ser un soldado, para ser un guerrero, para ser un General, el Gran, fuerte y poderoso General Zod, pero ahora mismo, justo en frente de él...
Había alguien que, teniendo menos conocimiento marcial que él...lo miraba desde arriba al veterano, cómo si el inferior fuera Zod.
Pero eso estaba dispuesto a ser cambiado por el General, quien de una se lanzó al ataque con un potente golpe que levantó mucha arena por la velocidad, pero Kal simplemente le daría un derechazo que mandaría a Zod hacia unas colinas agrietándolas por el impacto, Apocles se lanzó a por él pero para su sorpresa el General lo esperaba con una patada vertical que estrelló al príncipe de las Amazonas contra el suelo haciendo temblar el campo de batalla, no solo por la fuerza del impacto, sino también por el esfuerzo de Apocles de mantenerse de pie en el suelo.
Zod volvió a lanzarle un golpe pero vuelve a fallar siendo él el que recibió el golpe siendo mandado a volar dejando un rastro de destrucción por el suelo. Batman y Cyborg habían ido al lugar con el batiavión para asegurarse de que ningún civil sufriera por la pelea que sabían que se estaba armando, sólo que al llegar al desierto vieron cómo algo se desplazaba por el suelo cómo si fuera un gusano de tierra, pero notaron que era ese tal Zod al verlo sobresalir de la tierra acumulada, quien sólo podía pensar en el poder de su adversario comparado con el de él.
Zod: *pensando* ¡¡¿Qué pasa con este tipo?! ¡¡Es absurdamente fuerte, a pesar de que estoy expuesto al Sol él me sigue superando!!
Apocles se estaba acercando flotando sin mucha prisa, habiendo notado el batiavión, pero sabía que Zod no descuidaría su espalda para tratar de tomar de rehenes a los superhéroes, sabía que lo que quería era desquitarse con él, con el que terminó con su propósito en la vida, proteger un mundo que ya no existe, eso era lo que quería Zod. Diana había comprendido el patrón de ataque de Faora, ya que ahora tenía un aumento de fuerza, de vez en cuando dejaba sus trucos para concentrarse en su fuerza sobre ella, pero a pesar de eso, la alienígena seguía poniéndola en apuros.
Sobre todo porque ahora la obligaba a protegerse con sus brazos, y al chocar con los brazaletes de Diana, ella podía sentir cómo estos vibraban ante tales golpes, por lo que los chocó para ocasionar una onda de choque que hizo retroceder a Faora, haciendo que Diana lograra atacarla en todos sus puntos débiles, su hígado, su estómago, su cuello, entre otras, pero para su sorpresa, Faora le dio un directo puñetazo en la cara alejando a la amazona de inmediato.
Faora: ¿Sorprendida humana? No importa las técnicas que utilices, o los trucos que tengas, mientras esté aquí afuera...
En eso, la alien comenzó a flotar elevándose un poco del suelo.
Faora: *sonriendo* Tengo la misma fuerza que tu marido.
La kryptoniana se impulsó contra la amazona arrastrándola por todo el lugar para después de una patada mandarla a un edificio cercano, al llegar de un salto, la soldado comenzó a cerrar sus ojos y concentrar una gran energía en ellos, para después soltar dos rayos láser de sus ojos directo hacia Diana, pero al no tener control de su nuevo poder, comenzó a atacar a todas direcciones moviendo su cabeza dándole la oportunidad a la amazona de poder esquivar ese ataque, pero también provocó que las columnas que mantenían el edificio se destruyeran.
Los pisos superiores comenzaron a caer, por lo que Diana corrió hacia Faora embistiéndola aterrizando en el edificio de enfrente mientras que en el que estaban se derrumbaba sobre la calle levantando mucho polvo bajo la impactada mirada de los habitantes de Metrópolis que habían visto eso desde las afueras de la ciudad. Faora de una patada saca a Diana hacia un estacionamiento, la alien al bajar carga un camión de gasolina y se lo tira a la amazona, pero ella se desliza por el suelo debajo del camión dejando que este explote detrás de ella.
Faora se le lanza con un puñetazo pero Diana se agacha y da un salto lateral intentando golpear la cabeza y el abdomen de la soldado, pero esta los bloquea golpeando su abdomen para luego de un derechazo hacerla retroceder para intenta volver a golpearla, pero Diana logra esquivarla y de un izquierdazo la manda contra la pared y de un derechazo estrellarla contra el piso, y estaba por darle otro golpe, pero Faora lo esquiva y de una patada la hace retroceder para luego darle un derechazo y un UpperCut mandándola a volar hasta arriba de un edificio.
Diana al ir cayendo se dio cuenta de que Faora había dado un salto hacia ella preparando un golpe, a lo que la amazona hace lo mismo chocando sus puños generando una onda expansiva que destruye una buena parte del edificio pero de una patada Faora manda a volar a Diana aún más arriba y ya estando en el aire, la alien le da un puñetazo certero en toda su cara mandándola contra el piso en las afueras de la ciudad bajo la mirada de sorpresa de todos los habitantes de Metrópolis que habían sido evacuados tras la llegada de las naves hace rato.
Faora llega al suelo generando un cráter por el impacto, mirando cómo las personas la miraban con temor.
Faora: Mira a tu al rededor amazona, estas personas son demasiado débiles, y tú lo sabes, ¿En serio valen tanto cómo la especie de tu marido?
Diana: No...*se limpia la sangre de la nariz* ellos valen más que ustedes.
Faora simplemente le dio un puñetazo a lo que Diana se cubrió con sus brazos en forma de X con sus brazaletes, Faora volvió a golpearla pero Diana seguía defendiéndose, pero para su sorpresa, sus brazaletes comenzaron a romperse, tras esto, la alien le dio una lluvia de golpes que empotraron a Diana contra el suelo, y de un último derechazo de Faora...los radiantes brazaletes de Diana se rompieron cómo si fueran de cristal dejando salir una pequeña explosión de energía naranja.
Faora de una patada estampó la cara de Diana en el suelo.
Faora: Dime, princesa, ¿De qué se supone que eres diosa?
De repente, un temblor se sintió por todo el lugar, el cielo comenzó a oscurecerse, y no sólo en Metrópolis, en algunas partes del planeta, varias nubes se habían acumulado recargadas en tormentas eléctricas a punto de soltar sus rayos. En la isla de Themyscira, la Reina Hipólita y su hermana Antíope, notaron cómo el escudo que camuflaba la isla se desvanecía dejando ver unas nubes negras tapando el sol, el día donde el Mundo conocería a la verdadera Diana había llegado, las amazonas tenían previsto este día desde el día de la creación de la Mujer Maravilla.
Según la leyenda, Diana fue esculpida en arcilla y tras darle una gota de la sangre de su madre y recibir la descarga de un rayo de su padre, la niña terminaría tomando vida, pero también había algo más, el día siguiente al que Apocles llegó a la isla, desde los cielos surgieron desde una luz, dos brazaletes, con un mensaje escrito en griego antiguo que decía:
"Estos brazaletes le permitirán a Diana controlar su poder divino, serán un contenedor para que su propio poder no la termine destruyendo"
Pero esa leyenda tuvo un error, un error que fue dicho para no preocupar a las demás amazonas y evitar que rechazaran a la niña, para que no la consideraran un monstruo, el mensaje fue alterado por Hipólita, los brazaletes no son para proteger a Diana de su poder divino, ni siquiera para evitar que ella misma se lastimara al usar su poder, la verdadera razón de la creación de esos dos brazaletes...era para proteger al planeta Tierra del poder de la hija de Zeus, ya que en ella, no sólo recide el poder de su padre, sino, el de todos los Dioses del Olimpo.
Esa cantidad de poder, sería capaz de partir a la Tierra en pedazos, por lo que Zeus creó los brazaletes para que su hija no destruyera el mundo por accidente, pero ¿Porqué darle tanto poder a una semidiosa? Simple, porque Zeus sabía que en este Universo habían seres muy poderosos, tanto cómo él, tanto cómo su padre, tanto cómo su abuelo, inclusive...
Seres más poderosos que un Dios
La Tierra tembló, la gente de Metrópolis se quedó en shock al ver cómo rayos caían del cielo justo al rededor de Diana, quien de un salto se levantó quitándose a Faora de encima, cuya cara era una de shock absoluto, ya que frente a ella, no estaba una semidiosa.
Era una Diosa hecha y derecha.
Diana: *voz poderosa* ¡¡Yo soy Diana, hija de Hipólita, la Reina de las Amazonas, y Zeus, el Rey de los Dioses!! ¡¡Yo soy la Amazona más poderosa de todos los tiempos!! ¡¡La Campeona de Themyscira!!
En eso, unas voces empezaron a susurrar:
Rayo...
Mar...
Muerte...
Tierra...
Hogar...
Matrimonio...
Amor...
Guerra...
Comercio...
Forja...
Fiesta...
Sol...
Caza...
En eso, Diana mira fijamente a Faora bajando sus manos.
Diana: Y también soy...LA DIOSA DE LA HUMANIDAD.
Continuará...
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