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Familia

Habían pasado dos semanas desde la última vez que vieron a la pequeña, no es que no quisieran visitarla, solo que Pain les había dado tantas misiones que era difícil hacer un espacio para ella. 

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Una agradable noche, los inmortales finalizaban su último encargo, como siempre Hidan terminó con varias heridas que aún sangraban y parte de su cara estaba quemada, en cambio Kakuzu solo tenía la ropa ligeramente sucia con uno que otro corte. 

-Estos desgraciados fueron difíciles de eliminar- se estiró el religioso contemplando sus sacrificios. 

-Llevamos un año trabajando juntos, me sorprende que aún no te adaptes- dijo el moreno sacudiendo su capa.  

-Oye, oye, oye, dame algo de crédito estúpido avaro, me cuesta entender a tus fenomenos con mascara- se cruzó de brazos el menor. 

-Lo que digas- el mayor tomó su amada recompensa y empezó a caminar rumbo a la guarida de Akatsuki. 

-¡Anda viejo inútil, déjame aquí sólo como maldito perro!- gritó Hidan para después seguirlo. 

Apenas habian pasado 15 minutos y el fanático ya se estaba quejando. 

-¡Kakuzu descansemos aquí!, ¡me duele todo el cuerpo!, ¡mis pies no pueden más!- ¿cuántas veces había presenciado ese berrinche el mayor?, ni él lo sabía. 

-Cierra la boca bebé llorón, no podemos descansar por aquí, seremos un blanco muy fácil para cualquiera- explicó de mala gana el avaro. 

-No importa, se que me protegerás- sonrió divertido Hidan. 

-En tus sueños mocoso sin cerebro- contestó Kakuzu con su típico tono frío. 

-Jajajajajaja, ¿te da vergüenza mostrar tus verdaderos sentimientos?, no te preocupes, esperare ansioso tu confesión de amor- entonces tuvo que agacharse para esquivar un fuerte puño que se estampó contra uno de los árboles. 

Hidan seguía sonriendo y ahora contemplaba el desastre que hizo su compañero. 

-Eres un maldito hijo de puta, ¿a quien le podría gustar un revoltoso como tú?- 

A pesar de que el mayor estaba a nada de explotar, el fanático no pudo controlar su boca. 

-Pues a ti Kakuzu-chan- y como pudo, salió corriendo a toda velocidad, pero claro, el moreno no tardó ni dos minutos en atraparlo y darle una lección. 

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Tras un fuerte castigo, el dúo zombie volvió a su camino, pero esta vez el creyente tenía varios golpes en la cabeza. 

Kakuzu miraba de reojo como su pareja, la cual fruncía la nariz y las cejas como si estuviera luchando por no llorar. 

"Es una reina del drama" pensó el tacaño molesto pero en el fondo sentía algo de culpa. Miró alrededor buscando un lugar seguro para que el exagerado de Hidan pudiera descansar pero no vio nada y aún faltaban unas horas para llegar a su destino, ¿a donde podrían ir?. 

Fue entonces que al moreno se le ocurrió una loca idea. 

-Vamos al hospital- dijo el Kakuzu cambiando de rumbo. 

-¿Ha?, ¿y para qué?- pregunto el menor confundido. 

-Es el sitio que más cerca nos queda para descansar, dudo mucho que nos nieguen la entrada- el mayor jaló a Hidan de la capa para que este no se quedará atrás. 

Unos kilómetros más tarde ya se encontraban en la instalación y claro que llamaron la atención de todos, en especial de cierto doctor. 

-¡Hidan-san, Kakuzu-san!, ¿¡se encuentran bien!?- preguntó desesperado aquel hombre tratando de atender las heridas del chico de los rituales, pero este lo empujó incómodo. 

-Joder, estamos bien, solo queremos descansar- contestó Hidan ya harto de tantas atenciones. 

-¿Están seguros?- Toudo no estaba muy convencido. 

-Podemos curarnos solos- habló Kakuzu con calma. 

-Bien, entonces los llevaré a una habitación- mostrando una sonrisa incómoda, sobre todo porque el religioso no paraba de ensuciar el piso con su sangre. 

-No, iremos con la mocosa- 

El doctor los miró un momento y después sonrió. 

-Por lo menos déjenme darles algunas vendas, alcohol y también un juego de sábanas- 

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Cuando entraron al cuarto notaron que la pequeña dormía tranquila, ambos suspiraron aliviados por verla en ese estado. 

El chico de ojos violetas no dudó en tirarse al piso, para luego cubrirse con las mantas que Toudo le había dado. 

"Realmente estaba cansado" pensó el moreno divertido, a veces Hidan era como un niño. 

Kakuzu se sentó en una silla que estaba pegada a la ventana , dio un último vistazo a los menores para luego cerrar sus ojos. 

En la habitación solo se escuchaba el viento, la respiración de la niña y los sutiles ronquidos del jashinista. 

Por un rato todo fue paz y serenidad,  pero en medio de la noche la pequeña empezó a retorcerse en su cama, como si sintiera un gran y terrible dolor. 

Aunque no eran más que terribles recuerdos que venían a atormentarla. 

"Mi pequeño tesoro, ven aquí, no me tengas miedo, sabes lo mucho que te amo" 

"¡No eres más que un objeto, vives para servirme!"

"¡Me suplicas que me detenga pero mírate, se ve que disfrutas esto!"

La niña se despertó soltando un fuerte grito que hizo que de inmediato los renegados se levantarán.

-¡AAAAAAAAAAHHHHHHH!- 

La pequeña con lágrimas en los ojos empezó a arañarse los brazos hasta dejar ciertas marcas rojas que casi sangraban. 

Hidan corrió hasta ella y la tomó de los hombros. 

-¡Mocosa reacciona!, ¡todo está bien!- pero la menor al sentir aquel tacto, mordió en pánico el brazo del jashinista y con su mano derecha le soltó un golpe en la cara al menor. 

A pesar de su agresión, el religioso no la soltó. 

Kakuzu dejó caer su mano en la espalda de la pequeña y con cuidado la comenzó a sobar. 

-Haruki, ya pasó, todo fue un sueño, estas aqui, estamos aqui, nadie volverá a lastimarte, tranquila- habló el mayor haciendo que la niña poco a poco dejara de agredir al inmortal. 

La pequeña se tapó la cara con ambas manos tratando de contener el llanto. Hidan frunció el ceño, mientras abrazaba a la pequeña permitiéndole llorar recargada en su pecho. 

Kakuzu se separó de los menores y notó que el doctor estaba recargado en el marco de la puerta. 

-Un terror nocturno- habló el especialista confundiendo al moreno.  

-¿Qué rayos es eso?- 

-Un trastorno del sueño, pasa cuando alguien ha sufrido un evento realmente traumático, en este episodio el paciente puede gritar, agitarse, agredir a otros y también así mismo- explicó Toudo cerrando los ojos con pesar. 

El mayor volvió a ver a los chicos, la pequeña se había quedado dormida en los brazos de su pareja. 

-Es probable que cuando vuelva a despertar no pueda recordar nada de esto, así que por favor, no se lo mencionen- y así el doctor salió del cuarto. 

-Oye Hidan- llamó a su compañero pero este también se había quedado dormido al lado de la mocosa, los dos se veían muy cómodos ahí acostados.

Una pequeña risa se escuchó por parte del tacaño, agarró las sábanas que estaban hechas bolas en la orilla de la cama y los cubrió hasta el cuello. 

-Descansen, estúpidos mocosos- 

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A la mañana siguiente el mayor fue el primero en despertar, y vio que el encargado de Haruki ya estaba dentro del cuarto tomando notas. 

-Buenos días Kakuzu-san- 

-Buen día- 

-Disculpe que lo moleste, pero necesito revisar a la paciente, ¿puede despertar a Hidan-san?- 

-Claro, no hay problema- 

Un fuerte golpe, más un grito de dolor se dejó escuchar por todo el piso de aquel hospital. 

-¡Maldito viejo estúpido, te juro que Jashin-sama te dara un castigo divino!- 

-¿Cuanto más pensabas descansar?, debemos llegar a la base- 

-¡No me des órdenes anciano!- 

-¡Y tu no me des dolores de cabeza!- 

Ambos peleaban ignorando la presencia del doctor y de que la niña se había despertado por todo el escándalo. 

Haruki molesta por los tonos que hacía Hidan al levantar la voz, tomó su almohada y le dio un golpe en la cara. 

-¡PEQUEÑA MOCOSA DEL DEMONIO!- y ahora el inmortal le estaba jalando las mejillas a la niña. 

-¡Paren esto idiotas!- 

-¡Ella empezó!- 

-¡Me importa un carajo quien empezó, basta!- Kakuzu estiró sus brazos tomando de la capa a Hidan y con el otro tomaba a Haru-chan. 

Trató de separarlos a una distancia más prudentes, pero los menores aún querían pelear. 

El hombre de la bata blanca sonrió nervioso al ver tal escena. 

"Parecen una familia, una muy peligrosa" 






















Aquí les dejo el capítulo nwn ❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️❤️✨️ espero les guste.  

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