CAPÍTULO ESPECIAL II:
LAS PALABRAS DE NEJI

Hace no mucho tiempo...

—Levántate.

Sakuma chasqueó lengua e intentó incorporarse. No obstante sus brazos temblaron y su cuerpo dio a parar nuevamente en el suelo. Exhaló agotada.

—Tu taijutsu sigue siendo igual de inútil. Por más que lo hayas mejorado, sigues pensando demasiado —Neji hablaba con la firmeza en cada una de sus palabras, mientras veía a la peliplateada tratando de levantarse del suelo luego de haber bloqueado casi todos sus puntos de chakra.

—No lo escuches, Sakuma. ¡Lo haces genial! ¡Levántate, vamos! ¡Saku, Saku, Saku! —la apoyó Lee a un lado de Tenten.

Ella miró a Neji con un ojo cerrado desde el suelo, incapaz de levantarse. Varios moretones cubrían casi por completo sus brazos y abdomen gracias a la técnica de puño suave del adolescente, sin embargo ya estaba familiarizada con el dolor luego de tanto tiempo de entrenar con el Equipo de Gai-sensei. Neji suspiró al ver que Sakuma no podía levantarse, decepcionado. Creía que está vez se levantaría una vez más.

Ya había pasado un buen tiempo desde que había accedido a ayudar a le peliplateada a pulir sus habilidades en lucha cuerpo a cuerpo. Al principio lo vio como una pérdida de tiempo de su parte el pasar parte del tiempo en el que él podía entrenar con una niña que no podía esquivar ni uno de sus ataques, sin embargo algo hizo que de todos modos lo hiciese. Sakuma era fuerte y persistente. Siempre volvía a levantarse por más dolor que sintiera y eso le parecía admirable aunque se esforzara en no demostrárselo. No sabía si la razón por la que se ponía de pie era por negarse a rendirse o por el coraje que le causaba que él la derrotara. Cualquiera que fuese la razón funcionaba para él.

Sin embargo todos tenían un límite, y el caer por décima vez al suelo era el de Sakuma, quien ya había mejorado bastante desde la primera vez que luchó con él y su límite eran dos caídas.

Neji estaba dispuesto a alejarse, dando por terminado el enfrentamiento, cuando vio cómo el tembloroso cuerpo de la chica se ponía de pie y volvía a adoptar una posición de pelea. Él alzó levemente las cejas.

Once veces entonces.

—No, aún puedo mantenerme en pie —murmuró, resoplando su flequillo fuera del rostro.

—¡Así se habla, esa es la llama de la juventud brillando en su interior!

—Ya basta, Sakuma. No te exijas tanto —Tenten se dio a notar por primera vez en todo el enfrentamiento—. Sabes que Neji es más poderoso que tú. Esto es un entrenamiento, no una lucha real que acaba hasta que estés inconsciente. Debes de entenderlo de una vez por todas.

La niña la miró, para posteriormente ignorarla como hacía la mayoría de las veces. La castaña frunció el ceño.

—¿Segura quieres seguir con esto? —habló el Hyuga, con su rostro tan inexpresivo como siempre.

—Pero por supuesto que quiere —respondió Rock Lee en su lugar.

Sakuma asintió levemente, secundando las palabras de Lee.

—Como desees.

Neji dirigió su ataque hacia otro de sus puntos de chakra esperando golpearla. Sin embargo esta vez Sakuma lo esquivó. El Hyuga notó un cambio de mirada por parte de la chica, una más calculadora y desafiante.

Prosiguió con sus ataques tratando de bloquear los últimos puntos, pero Sakuma se dedicaba a moverse leve pero efectivamente fuera del alcance de sus puños. Frunció el ceño y aumentó su velocidad, haciendo que ella además de esquivarlo tuviera que desviarlos a manotazos firmes.

El Hyuga no estaba sorprendido de que pudiese prever sus ataques y esquivarlos a tal velocidad a pesar de su debilitado estado, era algo que ella hacía luego de haber tenido suficiente tiempo de memorizarlos al haberse dejado golpear a propósito todo aquel rato para memorizarlos. Siempre supo que Sakuma tenía buena memoria, por lo que no le parecería extraño que la peliplateada hubiese deducido su patrón de lucha.

Por lo que decidió cambiar de estrategia y atacar al azar, no solo con la intención de dar justo en los pocos puntos de chakra de ella sin bloquear, ya que probablemente sabía cuales eran los faltantes.

Su palma dio a parar justo en la boca del estómago de la menor, que escupió sangre, y aprovechó su sorpresa para golpear los puntos faltantes. Ella retrocedió torpemente intentando alejarse, pero sus ojos se pusieron en blanco y cayó al suelo por última vez.

—¡Sakuma!

—¡Neji, esta vez te excediste! —su compañera corrió hacia la menor y se arrodilló a su lado, seguida de Rock Lee.

Tenten la ayudó a enderezarse a pesar de sus quejas de que podía hacerlo sola.

—No es nada —gruñó la menor.

—Estuviste genial, Sakuma. Nuevo récord. Casi me alcanzas —festejaba Lee.

—Ella ni siquiera es genin. Tú eres Jōnin. Podrías ser más blando. Mira como la haz dejado —reprochó Tenten a Neji con molestia.

—Estaba siendo "blando" —se cruzó de brazos el Hyuga ante la acusación.

Tenten lo miró enojada y se puso de pie para caminar hacia él, dejando a Lee llorando de emoción junto a Sakuma.

—Eso es mentira —lo acusó en voz baja—. La estás usando casi como un muñeco de entrenamiento para tu taijutsu —Neji la miró de reojo—. Notaste que esquiva ataques más rápido que Lee, ¿no es cierto? Aún cuando estaba haciéndose la lenta para que la golpearas era muy rápida. Querías algo de desafío —recriminó Tenten, señalándolo.

—Dices estupideces —espetó apartando su mano lejos de su vista.

—Claro que no. Si no fuera de utilidad para ti luchar con ella no habrías aceptado ni siquiera una tercera pelea.

Neji la miró en silencio.

—Tengo cosas más importantes que esto —murmuró y se dio la vuelta alejándose de allí.

Tenten rodó los ojos fastidiada por su actitud, para luego darse vuelta hacia el par.

—Lee, ya déjala —ordenó al ver al sollozante azabache, lleno de orgullo, abrazar a la chica con la mejilla pegada a la de ella.

—Sí, ya déjame —gruñó.

—¡Es que estoy tan orgulloso! ¡Hay que celebrar! —se puso de pie rápidamente—. ¡Arriba, Sakuma, tendremos una competencia! Quien hace más sentadillas —llevó el puño cerrado a la altura de su barbilla.

La peliplata se levantó del suelo y sacudió sus pantalones.

—Ni lo sueñes.

—Sí, Lee, ni lo sueñes —secundó Tenten.

—No repitas lo que digo —la miró mal.

—¡Pero si tú...! Agh, no importa. Lo que quiero decir es que tienes razón. Lee, Sakuma debe descansar.

—¿Descansar? —Lee parecía atónito—. ¡Al contrario! Ahora es cuando más duro debe entrenar. Debe superar su máximo punto de resistencia y multiplicarlo por mil —hablaba con convicción.

—Estás demente —negó Tenten.

—De hecho puede que tenga razón —comentó la menor, dispuesta a fortalecerse aún más a pesar del agotamiento.

—¡Así se habla! ¡Vamos! —festejó Lee poniéndose en la posición para hacer sentadillas. Sakuma lo imitó—. ¡Comencemos, Sakuma! Esta vez yo ganaré, te lo aseguro. Uno, dos, tres, cuatro... —iba contando a medida que subía y bajaba junto a su amiga.

Tenten los miraba sin créerselo.

—¿Sabes qué? Me da igual. Mata a Sakuma del cansancio. Yo ya me voy, no pienso tener nada que ver con esto. Ojos que no ven, corazón que no siente —avisó antes de irse por el mismo camino en que anteriormente el Hyuga.

(...)

—¿Te encuentras bien?

Sakuma alzó la mirada encontrándose con la de Neji. Su reacción automática fue asentir ante la pregunta aunque no fuese cierto.

Todo su cuerpo dolía, no podía siquiera respirar sin sentir punzadas en costillas y abdomen. Aunque, bueno, ella se lo había buscado. No tenía derecho a andar llorando por los rincones.

Minutos atrás, luego de que cayera exahusta con la céntima sentadilla, decidió irse de allí a un lugar calmado para descansar mientras Lee seguía con el ejercicio, pero se le hacía imposible gracias a las punzadas que recibía en todo el cuerpo que el Hyuga provocó. Así que simplemente se quedó sentada debajo de un árbol en el bosque.

No le extrañó que alguien conocido apareciera, siempre lo hacían cuando quería estar sola. Sin embargo el que fuese Neji si le sorprendió.

—Tenten cree que me he excedido contigo —habló Neji, sentándose a su lado.

Sakuma inconscientemente acarició su brazo donde dolía.

—Tenten sólo sabe quejarse —rodó los ojos.

Neji funció algo el ceño por la manera en la que hablaba de su compañera, mas no dijo nada al respecto.

—Creo que tiene razón —confesó con algo de enojo al haber sido expuesto por su compañera. Tenten era buena en muchas cosas, pero en lo que era mejor (obviamente después de la lucha con armas) era en leerlo a él.

Sakuma lo miró algo sorprendida. Si Tenten tenía razón quería decir entonces que a Neji le interesaba el entrenar con ella.

Hasta el momento había creído que el único motivo que él había tenido todo ese tiempo para luchar con ella era porque Gai se lo había pedido, ya que según él debía de entrenar con cada miembro del equipo hasta que llegara a la altura de todos ellos, y entonces su rivalidad con Lee sería algo más justa.

Aunque ahora que lo pensaba era imposible que obligaran a Neji a hacer algo que no quería.

—No te excediste, yo lo hice al pedir que continuaras —contradijo, rodeando sus dedos con el césped distraídamente.

—Yo soy de mayor rango que tú, por consiguiente más fuerte. Tengo que detenerme cuando lo creo necesario —replicó seriamente.

—El que yo sea débil no me hace tonta, sé cuál es mi límite. Yo busco ser mejor no que sean suaves conmigo —reprochó algo molesta, pero sin llegar a ser irrespetuosa.

Neji negó con la cabeza al Sakuma malinterpretar sus palabras.

—No eres débil —la miró.

—Tú acabas de decirlo —frunció el ceño.

—No, dije que soy más fuerte que tú —repitió.

La peliplata dejó caer la cabeza a un lado.

—Es lo mismo —se encogió de hombros.

—No lo es. Tú eres fuerte, pero yo mucho más. Sólo eso —regresó la mirada al frente—. El punto es que he estado siendo más duro contigo por mi propio beneficio. Tenten lo notó. Sakuma, no sé si eres consciente de lo interesante que son tus habilidades.

La mencionada lo miró curiosa y se sentó como indio, dándose vuelta en dirección al Hyuga, interesada sobre lo que decía.

—¿A qué te refieres?

Neji suspiró. De verdad le desagradaba el tener que hablar sobre cosas que sentía u observaba, sin embargo parecía que Sakuma lo necesitaba, después de todo se estaba esforzando demasiado esos últimos meses al estar entrenando casi las veinticuatro horas del día. Debía descansar o terminaría lastimándose, pero estaba empecinada con ser más poderosa para que la Hokage le diera su aprobación para salir de la aldea con alguna misión, cosa que no sucedería en un futuro cercano. Pero eso ella no lo sabía.

El Hyuga estuvo a punto de no decir nada, pero los moretones de los brazos y clavícula de Sakuma causados por él hicieron que hablara.

—No eres poseedora del Sharingan y aún así puedes, con algo de esfuerzo, memorizar y leer los movimientos de tus oponentes. Es algo fastidioso para mí ya que mi clan tiene un modo particular de lucha. Por lo que te utilizaba para desarrollar nuevos patrones de lucha en caso de que... en caso de que deba enfrentar algún día a alguien que sí posea ese Kekkei Genkai —confesó sintiéndose algo avergonzado pero sin demostrarlo—. Además también sabes imitar esos movimientos ya una vez sabes cómo son. Todo eso solo con tu habilidad de observación y memoria.

Sakuma pestañeó, sintiendo algo de sonrojo colorear sus mejillas. Neji jamás había hablado así sobre ella, bueno, ni siquiera recordaba que él le dirigiera más de siete palabras en más de una oración, y el que soltara todo aquello le sorprendió. Demasiado. Y el oírlo de alguien que sinceramente respetaba fue como si el creador de los dangos resucitara para cocinarle un par.

—Como sea, fui egoísta y te utilicé para mi beneficio al notar esto. Sólo eso quería deci... —cerró los ojos un momento antes de voltear la mirada hacia ella—. ¿Por qué sonríes?

Neji no recordaba haberla visto así antes, y se le hizo extraño que él provocara esa reacción.

—Gracias.

Sakuma le sonreía y por una razón desconocida él tuvo que devolver ese gesto aunque fuese con una leve elevación de las comisuras de sus labios.

—No agradezcas —asintió, deshaciendo rápidamente la sonrisa y volviendo la mirada nuevamente al frente—. De hecho no soy el único que notó lo que sabes hacer.

La Hatake alzó una ceja sin entender.

—Impresionaste a Hiashi-sama —dijo con una pizca casi imperceptible de orgullo.

La menor dirigió la mirada hacia un arbusto incapaz de pronunciar palabra, viendo como un conejo salió de detrás de las ramas saltando lejos de allí, ambos estando demasiado distraídos entre ellos como para notar que se trataba de un jutsu de sustitución.

________________________

¡Hasta aquí el relleno...! Digo, ¡Hasta aquí el Capítulo Especial! la idea es hacer uno así cada tanto ya que de verdad disfruto escribirlos y además así ustedes no de quedan sin capítulos.

Por cierto, ¡aún pueden dejar más preguntas para todos los personajes! Recuerden que las preguntas no deben relacionarse directamente con la trama para no hacer spoilers (me refiero a ti -evilarchxngel- por cierto, síganla como regalo de cumpleaños para mí, está por llegar a los 1K 💘 sus portadas son maravillosas casi tanto como ella grrr) por lo tanto si preguntaron algo así tienen otra oportunidad para cambiar de opinión.

Al final las preguntas se publicarán en una historia aparte en la que iré publicando respuestas a sus dudas a lo largo de toooodo el desarrollo de la historia.

Esto quiere decir que pueden preguntar en todos lod capítulos siguientes y aún así tendrán la oportunidad de tener una respuesta si así lo quieren.

¿Qué les pareció la relación entre Neji y Sakuma? ¿Y qué quiso decir Neji con eso de qué impresionó a Hiashi-sama?

¿De qué quieren que trate el siguiente capítulo especial? (Cofrellenocof)

¡Muchas gracias por leer! ¡Muy pronto otro capitulo, lindas! Esto de estar más vieja me da inspiración. Ahr.

¡Jenn, fuera! 🍃

PD: Disculpen las posibles faltas de ortografía o mala narración. Escribí esto en el bus.