Ethon aterrizo sobre la rama del árbol donde Apolo pintaba, El territorio del dios es cálido agradable a cualquiera por su frescura y belleza. El territorio era hogar de la más hermosa flor, Ethon miro a su salvador, siempre estaría agradecido de hacerlo salvado de un destino tan horrible.

El ave ya era libre de irse y dejar a Apolo pero no lo había hecho porque entre ellos había tal grado de lealtad que a pesar de tener miles de soldados a su disposición el dios había decidido que el seria su mano derecha.

— ¿Cómo está mi hija Ethon? — Pregunto el dios sin apartar la mirada de su lienzo — ¿Cómo sobrelleva la muerte de Miranda?

—Como cualquier guerrero la princesa Kira sobrelleva su dolor con fuerza y valentía — Ethon suspiro — pero como cualquier humano ante tal desgracia sufre en una silenciosa agonía

Apolo no se sorprendió ante aquellas palabras — Supongo que no debí haber esperado buenas noticias

—Me temo que no

— ¿Los vampiros? — Apolo dio suaves pinceladas a su lienzo — ¿Son aliados o enemigos?

Ethon recordó la enorme felicidad que de Kira desprendía cuando estaba con los Cullen como si de alguna manera Kira se sintiera que casa

—Son aliados — respondió el ave — Tratan a Kira como el regalo que es

—Kira siempre tuvo ese efecto sobre las personas — Murmuro el dios — Es tan encantadora como cualquier hija de Afrodita.

Ethon no negó aquella afirmación — ¿Cuál es la razón de mi presencia aquí?

Apolo lo miro por primera vez desde que Ethon había llegado — llego una profecía del Oráculo de Delfos

— ¿De quién trata la profecía?

—Kira

[...]

—Mueve ese trasero tuyo un poco más rápido Emmett — Murmuro Kira con diversión — Estas empezando a aburrirme

Emmett gruño frustrado, mientras que el resto de la familia Cullen miraban el gran espectáculo que tanto la joven de ojos verdes como el vampiro con complejo de oso daban. Emmet refunfuñaba ante sus continuas derrotas, mientras que Kira se regodeaba en su enfado

—Cuando te agarre hare de ti una hermosa decoración hogareña — Rosalie rio ante lo dicho por su esposo — Una alfombra por ejemplo

— ¡Oh! Para que eso pase tienes que atraparme — Kira señalo su cuerpo — Yo no me veo atrapada por ti

Emmett volvió a atacar a Kira pero la rubia logro moverse lo suficientemente rápido — Me tenías tan cerca Emmett — Kira fingió tristeza — Lastima que los años empiezan a pesarte ¿quieres que te pase tu basto?

Jasper sonrió divertido mientras besaba la frente de Alice, Esme a pesar de saber que Kira era muy capaz de defenderse se mantuvo cerca al igual que Edward.

—Maldita sabandija escurridiza — Kira sonrió como si aquel insulto hubiera sido un cumplido — ¿Cómo es que te mueves tan rápido?

—No sé — Kira se encogió de hombros — ¿Cómo es que te mueves tan lento?

Emmett volvió a gruñir, Rosalie lo abrazo y miro a Kira con una sonrisa — Deja de molestarlo Kira luego te estas quejado de que te hizo una broma muy pesada

—Él sabe que lo quiero y que solo lo hago para molestar ¿verdad Emmett? — Emmett a pesar de su disgusto asintió

El celular de Kira sonó, la rubia desbloqueo el aparato y leyó en su mente el mensaje de Charlie: "Ya vamos en camino, ¿Estas en la casa o sigues con los Cullen?"

Kira respondió: "En unos momentos llego a la casa, estaré esperándolos"

Kira salto de sorpresa al sentir unos brazos alrededor de su cintura pero no se apartó conocía perfectamente esos brazos — ¿Tienes que irte ya? — levanto levemente la cabeza para mirar a Edward, Kira amaba y odiaba la diferencia de alturas entre ellos. Asintió con la cabeza ante su pregunta y sin previo aviso Kira beso levemente los labios del vampiro — ¿Quieres que te vaya a dejar?

Kira negó con la cabeza — Tienes que ir a cazar Edward en dos días hay clases — La rubia enredo sus brazos por detrás del cuello de Edward acercando aún más sus rostros — acompañarme solo te retrasaría

Edward negó con una sonrisa — No es pérdida de tiempo si estoy contigo — Kira sonrió radiante — Además tengo que convencer a Charlie de que soy un buen partido

Kira soltó una carcajada — Dudo mucho que eso pase

Charlie no había tenido una buena impresión por parte de Edward pues los había encontrado besándose en el pórtico de su hogar.

—Fue tu culpa — Acuso Edward — Me besaste frente a tu casa

—Perdón por no tener sentidos súper desarrollados — Inquiero Kira con sarcasmo — Tu eres el culpable debiste haberlo sentido llegar — Kira lo miro con un poco de picardía — No te he visto quejarte de que te bese pero si quieres puede dejar de hacerlo...

Curiosamente Edward tenía una manera peculiar de callarla. Y sinceramente a Kira no le molestaba, pues la joven tenía una adicción a sus besos. Edward siempre la besaba como si fuera lo más delicado del mundo, Kira se atrevía a pesar que la besaba hasta con miedo de romperla en mil pedazos de cristal sin reparación alguna.

—Adoro tus besos Kira — le susurro sobre sus labios, Kira se estremeció — y admito que tuve un poco de culpa

Kira sonrió — Tengo que irme ya — Aunque ella quisiera quedarse no podía le había prometido a Charlie que ella estaría ahí para recibirlos — Te veo en el bosque en la noche ¿sí?

El vampiro asintió. Kira siempre iba al bosque a entrenar y por alguna extraña razón acosadora a Edward le encantaba observarla hacerlo.

Edward jamás se lo diría pero le gustaba verla practicar por que la joven parecía la más feroz guerrera sus movimientos eran tan precisión tan coordinados casi como si estuviera bailando. Le encantaba el olor que de ella desprendía. Flores silvestres y rayos de sol, se sentía tan relajado al observarla. Kira podía ser feroz y peligrosa pero seguía siendo una niña que veía al mundo con luz sin prestar atención a la oscuridad que escondía.

[...]

Kira había llegado antes que Charlie y su hija por lo que la rubia se ocupó de arreglar todo para que se viera bien e Isabella se sintiera cómoda. Kira se disponía a sentarse y ver la tele pero sin previo aviso Kira gimió de dolor tocándose el corazón, de nuevo ese sentimiento de opresión, aquel agudo dolor que se presentaba en sus sueños junto a las voces que le decían "Lo siento" ella sabía que era alguien a quien conocía pero no podía identificar de quien era.

Kira jadeo repetidas veces, tratando de que el aire llenara sus pulmones tratando que aquel sentimiento que la oprimía desapareciera o que por lo menos supiera identificar qué es lo que avecinaba para estar preparada.

Su vista se nublo, sus sentidos dejaron de funcionar, pero aquel sentimiento no se fue seguía ahí. Pero su mente era transportada a un tranquilo claro de agua cristalina y de pequeñas aves volando

Kira miro su vestimenta, ya no portaba sus pantalones ni su ramera, no ahora tenía puesto un hermoso vestido blanco con detalles de plata y oro. Un vestido de cortesana griego

—Me sorprende que te muestres anonadada por lo que ves — Kira se sobresaltó por aquella seductora y hermosa voz — Has visto este paisaje cientos de veces, te has sentado a plasmarlo en lienzo y aun así te sigue pareciendo mágico ¿No es así Kira?

Poseidón un hombre hermoso como letal vestido con ropas griegas sin su conocida armadura de plata que lo caracterizaba como guerrero, Aquellos ojos tan azules como el Atlántico era la marca de la sangre de Poseidón corriendo por sus hijos, tanto el Dios como los mellizos Atlas eran parecidos físicamente

Y dolorosamente guapos. Casi un crimen.

—La belleza de tu territorio es incomparable — Kira suspiro — Te meterás en problemas si mi padre se entera que me secuestrarte para traerme aquí

—No te secuestre transporte tu mente aquí tu cuerpo está en la casa de ese mortal pero tu mente consiente está aquí conmigo — Poseidón señalo el paisaje — Necesito de tus concejos

— ¿Es la inteligencia de pensamiento lo que necesitas? — El dios asintió — Entonces te equivocaste de persona, debiste de haber hablado con uno de los hijos de Atenea.

—Atenea me hubiera ahorcado de haber hablado con uno de sus hijos — Kira sonrió divertida tanto Atenea como Poseidón tenían conflictos desde hace milenios — No quiero una guerra con ella.

— ¿Qué es tan importante para que me llamaras? — Pregunto Kira mientras caminaba por el verde césped

— ¿Qué harías por amor Kira? — Inquirió el Dios — ¿Qué serias capaz de hacer por amor?

Kira se congelo en su lugar, ¿Qué haría ella por amor? ¿Que sería capaz de hacer ella por aquellas personas que amaba?

—Todo — Respondió la hija del sol fuerte y claro — Vivimos para amar, mientras crecemos como mortales amamos de diferentes maneras, Amamos a nuestras madres, hermanos, primos. Amamos tan profundamente que a veces el hacerlo duele, pero así es el amor. Dulcemente amargo, a veces tan dulce que te mueres de ternura y otros tan amargos que mueres de dolor.

Poseidón observo detenidamente el rostro de la joven hija de Apolo, Sonrió con sorna. La profecía del Oráculo de Delfos no estaba tan equivocado, El dios del mar suspiro tranquilo. Tenían la posibilidad de que aquella profecía no se cumpliera.

—Muy buena respuesta — alego el Dios — Es hora de que vuelvas a Forks

— ¿Qué? No ¡Espera! — Pero ya era demasiado tarde de un solo chasquido de dedos el Dios de los océanos había mandado de regreso la mente de Kira a su cuerpo sin darle tiempo a la rubia de replicar

—Espero que sobrevivas a lo que se te avecina Kira Argent — Dijo Poseidón para sí mismo — Me molestaría mucho verte caer por alguien insignificante

[...]

Kira se sobresaltó mientras jadeaba por aire la rubia suspiro varias veces antes de normalizar su respiración. La opresión de su pecho seguía ahí constante en su corazón, Kira habría pensado que Poseidón era el culpable pero después de hablar con el dudada mucho que fuera el la causa de sus angustias.

— ¡Ya estamos en casa Kira! — Kira miro la puerta por la cual entraba Charlie y una castaña un poco más alta que ella, cabello castaña casi chocolate — ¡Kira!

—Aquí estoy tío Charlie, no hay necesidad de gritar — La castaña volteo a verla, la observo a los ojos. ¡Bum! Fue como si el tiempo se detuviera, como si no hubiera nada a su alrededor solo ella y la castaña de ojos café

>> Él mal va a alcanzarte hija del sol,

No podrás hacer nada para evitar su llegada.

Tú decidirás que estragos hará en ti

¿Caerás o resurgirás?

Si caes, serás confinada aun sin fin de oscuridad y dolor interminable

Si resurges, no habrá poder humano que te detenga de brillar como el sol mismo

La decisión está en ti y solo en ti hija del sol <<

Kira jadeo, ¿aquello era una profecía? El dolor en su pecho no disminuyo tan solo se intensifico ¿Qué demonios había pasado?

—Bella te quiero presentar a la hija de mi difunta hermana miranda — La castaña la miro con desagrado — Ella es Kira Argent — La rubia asintió como saludo — Kira ella es mi única hija Isabella Swan

Kira se estremeció — Es un gusto al fin conocerte Isabella

La castaña compuso una mueca de desagrado — Solo Bella

La tensión era más que palpable en el ambiente, Kira con su semblante serio y Isabella con continuas muecas de desagrado y Charlie... bueno él estaba en medio de una guerra de miradas entre las dos jóvenes

—Vamos a que desempaques tus cosas Bella — Dijo Charlie, la castaña asintió. Pero Kira necesitaba salir urgentemente de aquella casa, se estaba asfixiando allí

—Tío saldré a Seattle, le dije a Rose que la acompañaría para que comprara algunas cosas — El jefe Swan la miro detenidamente — Además quiero buscar un par de libros

—Está bien pero no llegues muy tarde —Kira asintió enérgica, y sin esperar palabras alguna salió de la casa como alma que lleva el diablo.

[...]

—Te lo juro Rose — Afirmo la rubia mientras bebía su café — Isabella me traerá problemas

Tanto la vampira como la rubia estaban en una hermosa cafetería en Seattle. Kira había llamado a Rose para desahogarse

—No creo — Aseguro Rosalie — Es una simple humana por lo que me cuestas, nada del otro mundo

—Joder Rose — Murmuro Kira agobiada — Te juro que Isabella Swan va a traerme más problemas de los que ya tengo

—Particularmente odio a todos los humanos — Kira asintió sabía perfectamente porque lo hacía — pero dejarte llevar por una estúpida profecía que no especifica que tu prima significa problemas

Kira suspiro — Tal vez tengas razón — Rose sonrió — Pero lo dudo

—Allá tú y tu paranoia — Dijo Rosalie — ¿Seguirás buscando un salón de música? — Kira asintió —Sabes que a Edward no le molesta que toques su piano, es más estaría encantado de escucharte tocar por primera vez

Kira negó con la cabeza — No tocar para mí es como besar, es algo tan íntimo que solo se comparte con aquellos por los que serias capaz de dar la vida — Kira suspiro con desgana — No sé si estoy preparada para eso

—Suenas como si estuvieras decidiendo si vas a tener relaciones sexuales con mi hermano — Rose abrió los ojos desmesuradamente — ¿Ya tuvieron relación tú y mi hermano?

— ¡Rosalie por dios soy virgen!

Amigos aquí otro Capitulo, apartir del siguiente Cap empieza la primera película de crepusculo quiero escuchar sus teorías sobre que pasara y de que habla la profecía