×××2×××
Nuestro segundo día de clases.
Entre el desastre de familia que tenía, almorcé rápidamente y fuí hasta el autobús escolar.
Y allí estabas tú agitando tu mano sonriente.
Yo correspondí algo avergonzado.
Tomaste mi mano y un inocente sonrojo subió por mi rostro, para luego ser prácticamente arrastrado escaleras arriba en el autobús.
-Hola nenitas-ese matón estaba allí de nuevo.
Tu finjiste que no existía y te sentaste ignorandole.
-¿Tienes almuerzo?-me preguntaste.
Yo solo negué con la cabeza.
-No importa-sonreíste acomodando tus gafas - yo te compartiré.
Ese día lo pasé junto a ti.
Al regreso, estábamos cansados. No es que en el primer año de primaria hagas tanto, pero en ese entonces parecía lo más complicado del mundo sumar y restar.
Durante el trayecto a casa, te quedaste dormido en mi hombro.
Al llegar a casa no despertabas y esos mantones empezaron a decirme que te besara como a la bella durmiente.
Despertaste de golpe y les escupiste, sacaste la lengua, tomaste tu mochila y de nuevo me jalaste.
Caminamos hacia nuestras casas, y Cuando era hora de separarnos, me abrazaste con fuerza.
Aún puedo oír tus palabras:
"Siempre que haya injusticia, te defenderé Touta"
Solo sonreí y me fui corriendo a casa.
¿Donde quedó aquel niño?
¿Por qué Teru? ¿Por qué?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro