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Charlotte Verstappen
Una semana después
Estoy en un restaurante, se que es mucho tiempo para procesar, pero debía esperar para ver a mi familia, para decirle los de Charles.
Hace dos días hubo una carrera, la cual decidí omitir en mi calendario, decidí relajarme en Mónaco, al menos algunos días.
Hoy es 11 de Julio y la próxima carrera es hasta el 23 de este mes, así que tengo mucho tiempo para pasar con Charles.
Hoy cite a mis hermanos en este restaurante para decirle la noticia de mi regreso con Charles y que ellos me apoyen con mis padres.
Victoria es la primera en llegar.
-Dime la verdad, ¿que hacemos aquí?- dice después de saludarnos.
-Tengo que decirles algo.- es lo único que digo.
-¿Me perdí de algo?- pregunta una voz detrás de mi.
-Hola.- saluda victoria sin mucho entusiasmo.
Me levanto de mi asiento y veo a Max, mi invitado estrella, el único con el que se que voy a batallar.
Lo saludo de un abrazo y un beso en la mejilla, el me sonríe extrañado y se sienta junto a Victoria.
Ambos no comentan nada por unos minutos, pero cuando la mesera se va después de que ordenáramos, Max es el primero en hablar.
-¿Qué pasó?- pregunta. -¿Para que nos vemos en este lugar?
-Estamos desayunando.- digo.
-No es cierto.- se mete Victoria. -Nos quiere decir algo, pero no se atreve.
Abro y cierro la boca tratando de negarlo, pero no puedo.
-¿Tiene que ver con Charles?- dice Max un poco más serio.
-¿Que tiene que ver Charles aquí?- pregunta Victoria.
-Hace unos días ellos dos cenaron.- dice Max, jeje claro, cenar.
El no sabe todo.
-¿Es enserio?- dice Victoria con ma animo. Claro, ahora si me pone atención. -¿Cómo fue?- pregunta con una sonrisa.
Veo como Max le lanza una mirada fugaz, pero con eso ella puede entender todo y borra la sonrisa de golpe, Max no se ve nada contento.
-¿Qué?- dice Victoria con fingido enojo.
-Vamos Victoria, no tenemos 10 años.- le digo, me recargo en la silla un poco frustrada. -Soy lo suficientemente mayor para entender las cosas y tomar mis propias decisiones.
-No me digas que...- dice Victoria, pero se queda callada al ver la expresión de Max cambiar repentinamente.
No puedo descifrar su cara. No es de enojo, ni de preocupación, no es de alergia ni nostalgia... Es como si no sintiera nada. Sus ojos son fríos y su rostro está contraído, no se mueve ni un centímetro.
-¿Es verdad?- dice después de unos minutos.
Trate de esquivar esto lo más que pude, pero no creo que se pueda más.
-Volví con Charles.
Victoria de deja caer delicadamente en la silla con una sonrisa de triunfo. Se que a ella le agradaba mucho Charles, a pesar de lo que hizo ella nunca me habló mal de él, me hizo entender muchas cosas y me apoyo siempre y sabía que no me iba a dar la espalda en estos momentos.
Por otro lado, Max no se ha movido ni un solo centímetro, parece una estatua, su vista va directamente a un costado de mi, está pensando, su nariz tiene un pequeño tic que siempre supe se activa cuando está enojado, es como un aviso de esto.
-Bueno...- dice Max finalmente. -No es mi vida.
Victoria hace una gran expresión de sorpresa y lo ve a lo ojos confundida.
-¿Estas bien?- le toca la frente. -Parece que te enfermaste.- dice por su tranquila actitud.
-Estoy bien.- dice con dureza, quita la mano de victoria de su rostro con delicadez, aunque está molesto el nunca se atrevería a tratarnos mal físicamente, verbalmente lo confirme un par de veces.
-Tenía un discurso preparado.- digo. -Creo que no lo necesito.
-Char, debo ir a llevar a Max al hospital. Está enfermo.- dice Vic con burla. A pesar de las miradas de advertencia de Max hacia ella, ella no se contiene, sigue haciendo bromas el resto de la cena.
Max conversa un poco, pero parece relajado. Se que no es así, y aún no se porque no dice nada al respecto.
-¿Nos vamos?- dice Max después de casi dos horas.
-Yo llamaré a un taxi.- dice Victoria, claro ella se está quedando en un hotel, pero para mi mala fortuna, yo estoy en casa de Max.
-No te preocupes, nosotros te llevamos.- ofrece Max, pero más que una ofrenda parece una orden.
Victoria asiente sin reprochar mucho y simplemente salimos del restaurante.
Victoria se pone en la parte trasera del auto y yo voy de copiloto, el ambiente es tenso y se que Max me dirá algo cuando mi hermana no esté, dejamos a Victoria en el hotel y Max conduce con rapidez a su casa.
-¿Que tienes?- me pregunta Max a medio camino.
¿Qué?
-¿Yo? Nada.- digo con rapidez.
-Pareces pensativa.- dice mientras baja las ventanas del auto.
-Estoy bien.- le digo.
-Okey.
¿Eso es todo? Claro que no, el tiene algo, lo conozco mejor que a mi misma. Cuando un semáforo se atraviesa me atrevo a hablar, bueno a preguntar.
-¿Tu estás bien?
-De maravilla.- dice.
-Tu pareces tenso.
-Son cosas mías, de las carreras ya sabes.- dice.
-¿Estas bien con lo de Charles?
-Charlotte...
-Espera, antes de que me regañes o digas algo, yo se que el no es de tu agrado, pero yo en verdad lo quiero, lo quise en su momento y aún lo quiero. Créeme pensé muy bien lo que decidí y se en mi interior que tome la decisión correcta.- le digo con rapidez. -Te amo, pero me amo más a mi. Así que decido vivir mi propia vida.
-Charlotte, está bien.- dice.
En ese momento veo la casa de Max a lo lejos, el llega a la entrada y estaciona el auto en la cochera.
Me quedo en shock total, salimos del auto y entramos a la casa en completo silencio, Max comienza a dejar sus cosas en la mesa y al final me decido hablar de nuevo.
-¿Enserio?
-Es tu vida y aunque antes no lo entendía, estoy para apoyarte no para juzgarte.- me dice.
Se acerca a mi y deja un beso en mi mejilla.
-Estoy bien, solo estoy cansado.- me da un pequeño abrazo. -Ir a dormir, trata de dormir tú también.
Me deja en medio de la sala completamente confundida.
¿Qué...?
***
Mis padres están en Mónaco, por fin...
Estoy tan nerviosa de decirles lo de Charles, se que ellos se enojarán, me vieron llorar por el por días y que vuelva con el como si no pasara nada... Se que no lo aceptarán.
Max lo acepto y fue algo muy sorpresivo, Victoria está encantada con Mónaco y cada que puede me invita a salir a cualquiera lugar que pueda.
Charles y yo hemos hablado mucho, demasiado... Y solo pienso en que diría Joshua en estos casos... ¿Que pensaría? ¿Qué consejo me daría? Todavía me duele recordarlo, pero se que debo seguir adelante.
-Hija, ¿estás bien?- pregunta mi padre sacándome de mis pensamientos.
Ah, claro estaba con ellos.
-Si estoy bien, pero...
-¿Pero?- dice mi padre confundido.
-¿Te pasó algo?- pregunta mi madre.
Max me observa con cautela y mi padre nota esto, se pone casi tenso al segundo y me observa con más curiosidad aún.
-Pasó algo, no es necesariamente malo.- explica Max cuando me quedo completamente callada.
-¿Qué es?- dice mi padre.
-Se trata de Charles.- digo sin rodeos.
Con solo mencionar su nombre, mi madre se comienza a atragantar con el jugo que estaba tomando y mi padre se comienza a poner rojo del enojo. El ambiente se torna muy extraño, incómodo, pero sigo firme en mi decisión.
-Volví con el.- explicó.
Mi padre me observa a los ojos, como si tratara de buscar algo de chiste en mi comentario, mi madre abre la boca en sorpresa.
Max los observa con una sonrisa fingida tratando de evitar un desastre.
-¿Qué dijiste?- dice mi padre.
-Creo que si me escuchó, ¿Quiere que se lo repita?- digo desafiante. -Volví con Charles.
-Cariño, ¿es enserio?- dice mi madre.
-Si mamá, es verdad.- digo.
-¿Tu aceptaste esto?- dice mi padre, pero no se dirige a mi, sino a Max. -Te la dejo a tu cuidado unos días y ya volvió con ese...- cierra la boca con rabia.
-Yo no me meto en su vida.- dice Max.
-¿No? Eso no parecía hace tiempo.- avienta mi padre con veneno.
-No quiero tu aprobación.- levanto la voz. -Solo te lo estoy informando, para que no te sorprendas si salen fotos de nosotros en estos días.
-No lo aceptó.- dice mi padre. -No volverás con ese desgraciado.
-No me interesa si lo aceptas o no.
-Charlotte.- dice mi madre con un tono de advertencia.
-Hace tiempo les hice caso y eso solo me llevo a más problemas, me gustaría que la aceptaras, pero no lo necesito para seguir con mi vida.- digo.
-No te quiero ver.- dice mi padre.
-Papá.- se mete Max.
-No te metas Emilian.- dice mi madre.
-Perfecto.- digo levantándome de la mesa.
-Charlotte.- habla Max.
-Pero recuerda algo padre, poco a poco tu solo vas a alejar a las persona de ti...
-Nos vamos.- dice Max. -Si no quieres ver a mi hermana a mi tampoco me verás.
-Max.- advierte mi padre.
-Jos.- inquiere mi hermano.
Camina hasta mi decidido y toma mi mano.
-Vamos a casa.- me dice.
Yo asiento confundido.
Mi hermano...
La faceta que empezará Max es mi favorita ❤️🥰
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Maratón 4/5
Navila Mikaelson
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