Pov de Charlotte

19 de Mayo
MonteCarlo, Mónaco

Estoy sentada en mi cama a media noche cuando una llamada interrumpe mi vista en el celular.

"Número desconocido"

Un poco confundida contesto y hablo.

—¿Hola?— digo y después de algunos momentos alguien habla.

—Holaaa, ¿Cómo estás?— Esa voz...

—¿Quién es?

—¿Tan rápido me olvidaste?

Y con eso confirmó quién es...

—Charles.

—Vesss, era cuestión de pensar un poco.— Su voz se escucha diferente y es ahí donde caigo en cuanta que está ebrio.

—¿Estas ebrio?— preguntó mientras me levanto de la cama.

—Sii...— se ríe y luego escuchó como pide más alcohol.

—¿Dónde estas?— le preguntó mientras camino a mi closet.

—No lo sé...— se ríe mientras escucho como alguien le grita algo.

—¿Qué está pasando ahora?— Le digo mientras me cambio rápidamente con el celular en alta voz.

—No lo se... Me están gritando.— suelta una risa nuevamente.

—Charles, escúchame bien.— le susurro mientras bajo las escaleras de la casa con cuidado.

Quito el alta voz y pegó mi oreja al celular.

—Te escucho... bien, creo.

—¿De dónde sacaste el celular?— le pregunto defendiéndome en seco.

—Un amigo, aunque no se ve muy feliz.— se ríe mientras escucho como deja bruscamente un vaso de cristal en la barra.

—¿Okey?— Pienso rápidamente que debo hacer y... —Pásame a tu amigo.

Charles discute un poco, pero no se entiende nada y luego otra voz se escucha a través del teléfono.

—¿Que quieres?— pregunta la persona enojada y se escucha muy enojada.

—Disculpe señor, mi novio se emborracho porque discutimos y no sabe lo qué hace.— invento lo primero que se me viene a la mente. —¿Me puede decir dónde está para ir por el?

El señor piensa un momento y después me da la dirección y me dice que cuidará de mi "novio".

¡Dios en que me estoy metiendo!

***

Me bajo del uber con rapidez hasta la puerta del bar, es un bar de Mónaco que está en la ciudad y está muy lujoso.

Me adentro entre las personas buscando a Charles entre la gente.

Lo encuentro en la barra platicando con un señor, ya no se ve tan ebrio.

Siento algo raro en mi estómago al verlo después de lo qué pasó en España.

—¡Charles!— me acerco con rapidez y el señor que supongo es el dueño del teléfono se levanta con rapidez.

—Todo tuyo.— se aleja rápidamente y me deja a solas con Charles.

—Hola preciosa.— dice con una media sonrisa.

—¿Cuánto tomaste?— pregunto tocando su frente. —¿Ya pagaste?

Lo único que recibo de el son balbuceos que lo entiendo del todo.

Le pregunto al barista del pago y me dice que aún no lo han echo, saco mi trajera y pago mientras Charles trata de llegar a mi tambaleando.

Me acerco a él y pongo su brazo sobre mi hombro y lo rodeo con mi mano mientras lo ayudó a caminar.

Llegamos afuera y saco de la bolsa de Charles sus llaves.

El valet parking rápidamente las toma y se va regresando con el Ferrari de Charles.

Lo ayudó a subir en la parte del copiloto y le pongo el cinturón de seguridad.

Me subo al auto y comienzo a conducir en busca de un hotel.

—¿Por qué me ignoraste?— pregunta Charles con la cabeza recargada en la ventana.

—No hablemos de eso ahora.

—Hace mucho no me gustaba alguien.— suelta una risa. —Tu me gustabas demasiado...

Me quedo quieta y no contesto.

—Incluso pensé que si seríamos algo.— se acomoda en el asiento como si fuera a dormir.

Sigo conduciendo y mi mente trata de no alterarse con esa declaración.

***

Llegamos a un hotel y con ayuda del mozo llevo a Charles a la habitación.

Charles descansa en el sofá cama y yo estoy en la cama sentada sin poder dormir.

Me levanto de la cama y camino a el balcón, la vista es hermosa.

Mónaco es precioso y verlo de noche es una experiencia increíble.

Camino a la orilla y me recargo viendo mi vista.

Escucho unos pasos detrás mío y aunque se quien es no quiero voltear.

—Hola...— dice Charles en un susurro.

—Hola.— digo sin verlo.

Charles camina y se pone a un lado mío.

—Cuando era pequeña soñaba con venir a Mónaco, Hasselt era lindo, pero ver a mi padre hablar de Mónaco me hacía soñarlo cada noche...— sonrió mientras bajo la mirada. —Max era el único que lo sabía y siempre que podía me invitaba, pero mi padre nunca me dejaba venir hasta hoy.

—¿Por qué no te dejaba venir?

—Decía que yo era un "Estorbo"— hago comillas en el aire. —Y que perjudicaría a mi hermano si venía con él.

—Tu no eres un estorbo Charlotte.— dice completamente serio.

—Para ti tal vez no, pero para mi familia...— por primera vez lo observo y me quedo hipnotizada con su mirada.

—Nadie es un estorbo en la vida, y mucho menos tú.

Vuelvo a observar la vista y cierro los ojos por un momento.

—Dile eso a mi padre.

Volteo para caminar al interior de la habitación, pero Charles me toma del brazo y me voltea a él.

—Se lo dire de ser necesario.

Sonrió mientras miro mis pies.

Cuando estoy por ver para arriba algo se interpone en mi vista.

Charles...

Pega sus labios a los míos.

Mi corazón está por saliste de su lugar mientras seguimos besándonos.

Comienza a caminar haciéndome retroceder sin espera nuestros labios.

Y entramos a la habitación...

Ya necesitaba subir este capítulo

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Navila Mikaelson