Capítulo 5
Narra Monette
Después de pensar tanto llegue a la conclusión de qué Harry no me va a escuchar y sinceramente no quiero arruinar mi estancia en Londres por eso, además el me ve como algo pasado y yo debería de empezar a verlo de la misma manera. Si llegamos a ser amigos bueno, y si no, también. Había comprendido que las cosas no giran entorno a él; debo concentrarme en el presente y vivirlo.
Hoy por la tarde después de la escuela nos juntaremos todos en el departamento de Louis y Harry, ya que los chicos nos quieren dar una gran noticia; debo admitir que aun me pone nerviosa el saber que lo vere, y es que en clases es fácil ignorarlo y hasta no notar su presencia. Las dos últimas clases se me hicieron eternas, y más por los nervios de tener que fingir conversaciones "normales" con Harry, de vez en cuando me preguntaba como es que no había tenido la confianza de contarles a todos los chicos lo qué paso entre Harry y yo, así todo seria mas sencillo. Gracias a Dios el sonido del reloj y la campana anunciaron que las clases habían terminado, tome mis cosas y camine fuera del salon, me dirigí al lugar donde siempre estábamos, ahí ya estaban todos los chicos- solo faltabamos Louis y yo- y por lo qué veía llevaban buen tiempo.
—Dios creí que nunca saldrias— dijo Marina molesta.
—Hasta pensamos en ir a buscarte— aseguro Niall—. Aunque luego pensamos que también tendríamos qué buscar a Louis...
—Y ya era mucho esfuerzo— rió Zayn—. Así que mejor decidimos esperarlos aquí.
—Las clases de geometría son un espanto— dije riendo—. Pero gracias por pensar en ir a buscarme.
—Ahora solo falta Louis— dijo Harry buscándolo con la mirada—. Aunque a él no tendremos que buscarlo, ahí viene.
Louis llego corriendo hasta nosotros, venia cargado de papeles y muy agitado, todos al verlo comenzamos a reír y el solo nos lanzo una mirada asesina, Liam y Zayn lo ayudaron con los papeles y nos dirigimos a los coches. Liam se ofreció a llevarnos a Marina y a mi, pero mi prima ya tenia pensado irse con Niall, así que termine por irme yo sola con Liam y Vale; durante el camino Vale y yo tratamos de sacarle algo de información sobre la sorpresa a Liam, pero mi mejor amigo era mas callado que una tumba. Llegamos al departamento y todos los chicos nos dejaron solas en la sala, tanto Vale, como Marina y yo no entendíamos porque tanto misterio.
—¿Alguna tiene idea de lo qué pasa?— nos preguntó Marina confundida—. Trate de sacarle información a Niall, pero fue imposible.
—Nosotras hicimos lo mismo con mi hermano— dijo Vale riendo—. Pero obtuvimos el mismo resultado.
—Mas vale que lo que nos digan estos chicos sea algo bueno— dije soltando un suspiro—. Porque si no, enserio los matare por dejarnos con tanto misterio.
Marina iba a decir algo pero justo los chicos salieron de quien sabe donde, los 5 venían murmurando y con una cara bastante sospechosa, Vale, Marina y yo nos volteamos a ver confundidas. Los chicos se sentaron y durante unos segundos nadie dijo nada, hasta qué mi paciencia reventó.
—Okey chicos, ya me cansé— les dije mirándolos frustrada—. ¿Por que están tan extraños?
—Tranquila Monette, todo a su tiempo— dijo Harry guiñandome un ojo.
¿¡Pero qué demonios!?
Eso si era más extraño que hasta su propio misterio, ¿acaso había visto bien? ¿me estaré volviendo loca?, no para nada, había visto completamente bien el guiño de Harry. Baje la mirada y comencé a jugar con mis manos, no podía dejar qué todos me vieran sonrojada y mucho menos nerviosa después de lo que había hecho Harry. Los chicos siguieron sin pronunciar palabra alguna, hasta que por fin Niall se digno en hablar, aunque no fue para decir lo que esperábamos.
—Bueno chicos, creo que es hora de pedir algo de comer— las tres soltamos un bufido—. ¿Qué? ¿Por qué ese bufido?
—Niall no queremos comer, queremos saber que onda con su sorpresa— dijo Marina mirándolo seria.
-Como ya le dijo Harold a Monette, todo a su tiempo, además las sorpresas con pan son buenas— todos miramos confundidos a Louis—. O bueno, algo así.
Los chicos pidieron comida china, y mientras esperábamos ellos iban y venían, nosotras platicábamos de lo primero que se nos viniera a la mente, de vez en cuando alguno de los chicos se sentaba y platicaba con nosotras pero después se marchaba de nuevo. Así fue hasta qué la comida llegó, todos nos sentamos en la sala a comer; yo aun seguía pensando en lo que minutos atrás había pasado, yo se qué ese no era un acto de coqueteo de parte de Harry, pero entonces ¿que debía pensar sobre eso?. Hace unos días ni quería que le dirigiera la palabra- a menos que estuvieran los chicos- y ahora hasta me guiñaba un ojo, tal vez estaba sobre actuando, pero no sabia ni que pensar. Por momentos volteaba y lo veía mirándome, y en lugar de quitar la mirada él me ofrecía una sonrisa, o simplemente soltaba una que otra risa, eso me confundía de sobremanera, ¿acaso este chico esta jugando conmigo?, porque si es así, yo también se jugar el mismo juego. Todos terminamos de comer y los chicos nos dieron a Vale, Marina y a mi una galleta de la fortuna a cada una, cada galleta tenía un número.
— ¿Por que están numeradas las galletas?— pregunte confundida.
—Ustedes solo abranlas— dijo Liam ¿emocionado?
Las tres habríamos las galletas y lo que la mía decía era de lo más extraño: audicionaremos, ¿acaso están mal estas galletas?. Mire a mis amigas y al parecer tenían la misma expresión de confusión que yo.
— ¿Y bien? ¿que dicen sus galletas?— pregunto Zayn—. Leanlas.
—Chicas...— dijo primero Marina.
—Audicionaremos...— dije después yo.
—En X-Factor— completo Vale—. Chicos esto si que es... Esperen ¿¡Hablan enserio!?
—Si linda— dijo Zayn mirando a Vale—. Mañana audicionaremos.
Las tres nos volteamos a ver y soltamos un grito de alegría, todas sabíamos cuanto deseaban los chicos tener esta oportunidad, y ahora la tenían en sus manos. No me podía sentir más que feliz por ellos, ya qué desde hace un tiempo, Liam me había contado que trataban de conseguir la audición como banda pero no se animaban, al igual que recordaba todos esos sueños que Harry me contó sobre ser un cantante famoso. Mire rápidamente a Harry, el no me quitaba la vista de encima, así que hice algo impensable, le di una sonrisa y mordi mi labio, el solo me miro confundido y con un cierto brillo en sus ojos, yo me gire y no le preste atención.
—Chicos esta si que es una estupenda noticia— dije emocionada.
— ¿Nos perdonaran por hacerlas sufrir con tanto misterio?— nos preguntó Liam.
—Obviamente hermanito— dijo Vale abrazándolo—. Esta noticia si que no nos la esperábamos.
—Si, hasta Monette pensó en matarlos por si era una mala noticia— le lance una mirada asesina a mi prima—. Aunque yo creo que ahora piensa diferente.
—Pero claro qué pienso diferente— dije soltando una risita—. ¿Mañana a que hora es la audición?
—Temprano— dijo Louis—. Así que ahí las queremos.
—Pero claro que estaremos ahí— exclamo Vale emocionada—. No puedo creer que su sueño se esta haciendo realidad.
—Bueno aun no esta nada decidido— dijo Harry serio—. Aun no estamos dentro del concurso.
—No seas pesimista Harry— dije mirándolo fijamente a los ojos—. Yo se qué ustedes lo lograran.
Harry no aparto su mirada de la mía, nos quedamos así por unos segundos hasta que Louis interrumpió nuestro trance.
—Bueno...¿que tal si vemos unas películas?— dijo Louis mientras carraspeaba la lengua.
Todos corearon un sí; las chicas y yo llevamos los platos a la cocina mientras que los chicos ponían la película, y ahí ellas no dudaron ni un segundo en acorralarme.
—¿Que fue eso que paso allá afuera?— me pregunto Marina con una sonrisa pícara.
—No sé de que hablas— dije evitando mirarla a los ojos.
—Bien que sabes de qué estamos hablando— dijo Vale subiendo y bajando una ceja en mi dirección—. Por lo que veo una nueva pareja se formara.
—Chicas ustedes si que alucinan— dije riendo por los nervios—. Entre Harry y yo no pasa nada.
— ¡Aja!— grito Marina señalándome—. Nosotras nunca dijimos que fuera Harry.
Me quede callada, no sabia que contestarles, ellas me miraban emocionadas, pero tenia que bajarlas de esa nube.
—Bueno sea con quien sea no pasa nada— camine hacia la salida de la cocina—. Y ya no digan nada.
Seguí mi camino hacia la sala, ellas seguían haciendo comentarios como: aquí huele a romance y cosas por el estilo, yo solo me reía internamente.
Me senté junto a Liam, necesitaba hablar con él sobre lo que había pasado, al igual que necesitaba alguien que me dijera que demonios estaba ocurriendo con Harry. Aunque este no era el lugar ni el mejor momento para hablar, así que tendré que esperar hasta que llegue al departamento. Durante la película mi cabeza no dejaba de dar vueltas con respecto a la actitud de Harry, era tan extraño que se comportara así y más después de casi casi pedirme que no le volviera a hablar, me sentía confundida y a la vez me gustaba la forma en la que actuaba. No por el hecho de su actitud bipolar, si no, por como sonreía cuando me miraba y esa forma tan linda de no quitarme la vista de encima, hacia simplemente que mariposas revolotearan dentro de mi.
Después de la segunda película Marina y yo nos despedimos, teníamos un par de tareas y también queríamos dejarle a los chicos tiempo para que se relajaran y prepararan para mañana. Al momento de despedirme de Harry, él me dijo lentamente en mi oído: te extrañare, hasta mañana, provocando qué mi pulso se elevara hasta el cielo. Gracias a dios la luz ya era muy poca y nadie logro notar qué me había sonrojado. Niall nos llevo hasta el departamento, durante el camino no deje de pensar en Harry, osea por más que quiera negarlo debo aceptar que sigo enamorada de él, como el primer día.
Me desperté super temprano, los chicos nos llamaron por la noche para decirnos que nos veríamos todos en el departamento de Louis y Harry, y de ahí todos irnos juntos. La verdad es que me sentía muy emocionada por ellos, el saber que podían llegar a cumplir su sueño me ponía muy feliz, se que ellos se lo merecen. Para mi desgracia tuve que despertar a Marina, a pesar de saber que teníamos qué llegar temprano mi prima parecía decidida a no despertar nunca; por más que brinque y le grite ella parecía muerta, así que mi única opción fue decirle que Niall la esperaba afuera, ella inmediatamente se paro de la cama y corrió al baño a arreglarse. Salimos casi corriendo del departamento, teníamos mil y un mensajes de los chicos pidiéndonos que nos apuráramos.
Al llegar con los chicos, ellos traían una cara de emoción que apenas podían con ella, nos subimos todos en el coche de Harry y nos fuimos directo al lugar de la audición. Durante el camino los chicos venían practicando su canción, sinceramente tenían muchas posibilidades de que los aceptaran; llegamos y había muchísima gente formada, los pobres chicos estaban más que nervioso y el ver a tanta gente no les ayudo de mucho. Fácil esperamos como 2 horas- o más- para que les tocara, nos llevaron a una pequeña sala y a ellos los metieron a un cuarto, las tres les gritamos que les deseábamos lo mejor y que todo saldría bien.
— ¿Creen que los acepten?— pregunto Vale nerviosa.
—Tienen qué—dijo Marina con una media sonrisa—. Son bastante buenos.
—Ademas en ningún lado encontraran voces como las de ellos— asegure.
—Lo qué no entiendo es porque tardan tanto— dijo Vale preocupada.
—Tal vez les están preguntando cosas a cada uno— dije jugando con mis dedos por los nervios.
—Sí, eso es lo más proba....
Lo que Marina quiso decir se vio interrumpido por el sonido de la puerta, los chicos salieron pero no tenían cara de emoción, más bien tenían caras inexpresivas. Las tres nos pusimos de pie y caminamos hasta ellos, no sabíamos ni que preguntarles.
— ¿Como les fue?— pregunto Marina lentamente.
—La verdad es que nos fue— comenzó a decir Niall con un par de muecas—. ¡De maravilla!
— ¡ESTAMOS DENTRO!— gritaron el resto de los chicos.
Todos empezamos a gritar y a brincar de la emoción, ellos estaban a nada de cumplir por completo su sueño. Todos nos abrazábamos y gritábamos de emoción, pero entre abrazo y abrazo, termine en brazos de Harry. Lo abrazaba tan fuerte que ni siquiera prestaba atención a nuestro alrededor, el tenia su cabeza entre mi hombro y mi cuello.
—Fuiste mi amuleto de la suerte— me dijo él al oído—. Gracias por estar aquí.
Giré mi cara hacia él, provocando que quedáramos a escasos centímetros, nuestras narices chocaban y las respiraciones sé fundían una con la otra, sabia qué en cualquier momento ocurriría y no sabia si podría pararlo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro