Maratón Especial Halloween [4/4]

— Piénsalo, tío. Todo lo que queramos. Coches, casas, chuches — explicó Benny, mientras Ethan y él caminaban por uno de los pasillos de su instituto.

— ¿Sólo usas conjuros mágicos para cosas que empiezan por -C? — dijo Ethan burlándose de él.

— Antes eramos lo peor de los novatos del Insti. Ahora somos cazavampiros, estrellas del rock que hacen conjuros. Nos vamos a comer el mundo — le dijo Benny, imaginando todas las cosas que podían hacer con sus nuevos poderes.

— ¿Tú has probado el mundo? No es algo que te apetezca tragar, más bien vomitar — Ethan se encogió.

— Vale, bonita imagen para empezar el día — dijo Benny mirando hacia donde estaba Lily hablando con unos amigos de su clase de historia — Pero ahí está la que yo necesito — él sonrió y la saludó con la mano. Ella le devolvió el saludo, pero continuó hablando — Sé que tú eres el "vidente" y todo eso, pero yo la veo a ella conmigo.

Ethan se encogió ante el juego de palabras de su amigo.

— Siento decírtelo, tío. Pero no creo que ella esté interesada — dijo él, palmeando la espalda de Benny.

— No, tengo un plan, ¿ves a esa chica de allí? — Benny señaló a Della, una chica que estaba no muy lejos de ellos — Voy a usarla para poner celosa a Lily — sonrió mientras frotaba sus manos juntas, como un villano malvado.

— Celoso, ¿quieres decir cuando lo estabas de Jesse? — Ethan sonrió — Estabas tan enfadado cada vez que él se acercaba a ella que-

— Vale, está bien, ya lo pillé.

Ethan se río.

— De todos modos, ¿no es un poco duro? ¿Usar a esa chica?

— Sí, pero si salgo con Lily eso es una ventaja, ¿verdad?

Ethan negó con la cabeza.

— No uséis demasiado la magia, ¿recuerdas? La vida ha vuelto a la normalidad.

Benny se encogió de hombros.

— Relájate. Está todo controlado — sacó unas flores de detrás de su espalda y comenzó a caminar hacia Della. Cuando empezó a hablar con ella, Lily caminó hacia Ethan, sin apartar sus ojos de Della y Benny.

— Hola Ethan — saludó, todavía mirando a la pareja detrás de ella.

— Eh, hola, ¿ocurre algo? — preguntó Ethan, con las cejas levantadas.

— ¿Qué? No, solo estaba, soñando despierta — dijo ella, finalmente volviéndose a mirar a Ethan — Como siempre, ya sabes... — se rió torpemente.

— ¿Puedo hablar contigo? — preguntó Sarah mientras se acercaba a los dos, mirando a Ethan.

— Hola, ¿cómo andas? ¿qué tal? — respondió él.

— ¿Me dejas 20 dolares, amigo? — rogó ella — Es para una buena causa.

— ¿20 doláres? ¿Cómo, ahora? — se detuvo mientras los tres se volvían a mirar a Benny, que estaba con Della llorando. Los miró en busca de ayuda y Lily se encogió de hombros.

— Buenas noticias, el perro de Della ha muerto — dijo Benny mientras caminaba hacia ellos.

— ¿Eso es una buena noticia? — preguntó Lily, frunciendo el ceño.

— ¡Sí! — respondió él con una sonrisa — ¿Qué, estás enfadada porque estoy hablando con ella? Lo siento, hablando no, ¿coqueteando con ella?

Lily se burló.

— Pfft, no, en absoluto. Hasta creo que ustedes dos harían una linda pareja.

Ethan y Sarah se miraron y voltearon sus ojos.

— Vale, tengo que irme. Lily, ¿vienes?

— ¿Qué? Ah, sí. Adiós chicos — dijo ella mientras seguía a Sarah lejos de ellos.

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— ¡¿Qué?! ¿Osea que no puedo ni contar con el dinero de hacer de canguro? Genial, perfecto — gritó Sarah en su móvil. Lily y ella estaban dando un paseo cuando Ethan la había llamado. Mientras Sarah hablaba, Erica había empezado a caminar junto a Lily.

— Bueno, ¿qué tal tu friki de las mascotas? — se burló cuando Sarah había colgado.

— Oh, ya sabes — empezó Sarah.

— Friqueando — Lily terminó por ella, se miraron y se rieron.

— Mira, la razón por la que quería hablar contigo-

— ¡¿Han cambiado de idea sobre lo de volar hasta la ciudad del finde?! Lo sabía. Nosotras tres la vamos a liar — dijo Erica muy emocionada.

— Erica, sabes que los candidatos no pueden volar — respondió Sarah.

— Y, eh, las brujas en realidad no tienen escobas — añadió Lily — Bueno, yo no.

— Por favor, ¿me dejas algo de dinero? Te lo devolveré — le suplicó Sarah a Erica.

— ¿Dinero? Si despertases y olieses la sangre podrías tener lo que quisieras. ¡Y a quién quisieras!

— Lo entiendo, pero yo creo-

— Para, para — Erica interrumpió y señaló los colmillos que habían aparecido en su boca — Nuestros colmillos, nos lo regalan, los demás lo pagan — Sarah suspiró — Ahh, llega mi comida — dijo Erica, mirando a algunos chicos por la calle — Avisa cuando estés lista — ella se alejó, sonriendo a los chicos delante de ella.

— Si realmente necesitas veinte dólares, puedo prestártelos — dijo Lily, mirando a Sarah.

Ella sacudió la cabeza.

— No, me sentiría mal, voy a tener que encontrar una manera de conseguirlo yo misma.

『 ✧✦✧ 』

— Cuéntame, ¿qué demonios hicieron Benny y tú? — le preguntó Lily a Ethan mientras ella y Sarah se acercaban a él en el pasillo del instituto. Acababan de ver a Benny caminar hacia Della con una caja en sus manos, y lo que estaba dentro de la caja parecía muy furioso.

— ¿Qué? — contestó Ethan, con su voz temblando.

— ¿En qué andáis tú y tu tú más tonto metidos? — añadió Sarah, señalando a Benny.

— Nada, no sé de qué me están hablando — respondió Ethan.

— Conozco tu obra cuando la veo, tenía una entrevista para un trabajo, ¡cuando un mapache, o algo así me atacó! — comentó Sarah.

— Mira, todo lo que hice fue ayudar a Benny a hacer que Lily se- —Ethan se detuvo y aclaró su garganta — Quiero decir, eh, solo quería ayudar a Benny a rescatar el perro de una chica inocente — Lily puso los ojos en blanco.

Los tres se volvieron cuando el perro de Della, Peludo, salió de la caja y la atacó. Benny corrió tras Della, que huía.

— ¡Oh, no me ha dado ni las gracias! — dijo cuando se acercó a ellos y siguió corriendo.

— ¿Coincidencia? Mirad, puedo explicarlo- — Ethan empezó, pero Rory lo interrumpió.

— ¡Hola! ¿qué tal? — saludó él, apareciendo detrás de ellos.

— ¿Qué te ha pasado? — preguntó Lily, señalando sus dedos vendados.

— Algo raro. Anoche salí a picar algo crujiente, pero esta vez la cena se resistió. Creo que estaba poseída — se encogió de hombros.

— Pero, ¿los vampiros no pueden curarse solos?

Rory se quitó las vendas y sonrió.

— ¡Jo! ¡Los dedos vuelven a crecer! ¡Mola!

— Chicos, ¿habéis hecho lo que creo que habéis hecho? — Sarah miró a Ethan con incredulidad.

— ¿Resucitar a animales muertos para llamar la atención de una chica? — preguntó él, un poco asustado.

— Increíble — murmuró Lily, agitando su cabeza.

De repente, se oyeron gritos mientras los estudiantes salían corriendo del instituto.

Los animales corrían sueltos por toda la ciudad y todos estaban en pánico. Ethan, Benny y Lily corrieron a la casa de Ethan y cerraron la puerta tras ellos.

— Es cosa mía, o ¿esa ardilla quería comerse nuestros ojos? — preguntó Benny, jadeando.

— Vale, creo que es el momento de llamar a los refuerzos mágicos — dijo Lily, caminando hacia el sofá.

— ¿Qué? ¡No! Si la abuela se entera, a saber lo que me hace. Escuchen, si la poción provocó esto, probablemente se le acaben las pilas. ¿no? Seguro que lo peor ya ha pasado — terminó, mientras los tres se sentaban en el sofá. Vieron la televisión mientras una tortuga atacaba al reportero de noticias.

— ¡¿Ese es Tiberius?! — dijo Ethan, señalando la tele en estado de shock.

— ¡No! — exclamó Benny.

— ¡Pero es de locos! ¡Se escapó cuando tenías ocho! — Lily frunció el ceño, también viendo la televisión.

— ¡Tenemos que hablar con tu abuela, ahora! — dijo Ethan, volviendo su mirada a Benny.

— ¿N-No podríamos, mandarle un email? — dijo Benny mientras tartamudeaba, y su abuela apareció en la esquina de la habitación.

Los tres gritaron al mismo tiempo cuando la vieron.

— ¿Hay algo que queráis contarme? — preguntó ella entrecerrando los ojos hacia Benny.

— Oye, yo no fui parte de esto — dijo Lily, levantando las manos para rendirse.

— No, tú eres demasiado lista para hacer algo tan estúpido como esto.

— ¡Eh!