Fritz.

Se que de por sí ___ es una persona callada, pero había algo en el que daba una especie de aura relajada. El estaba callado, pero esa aura había desaparecido. Aún estaba temblando y parecía luchar para tener una respiración regular.
Estaba apoyado en mi hombro sano, yo lo abrace con un brazo y le acaricie el cabello. Me sentía un poco nervioso de tenerlo tan apegado, pero no podía dejarlo solo en un momento como este.
Poco a poco su respiración se calmo, incluso llegué a creer que se había quedado dormido.

- debí escucharte... - lo miré, el aún tenía la mirada perdida en alguna parte del asiento del conductor - no debí ir de noche - su voz estaba algo quebrantada.
- tranquilo, también fue mi culpa, debí decirte lo que sucede allí por las noches - trate de consolarlo, se veía muy mal.
- es que no lo entiendo, Toy Freddy me llegó a atrapar, estoy seguro que precione para desactivarlo - el se aparto de mi hombro y me vio, se veía tan perdido - pero el seguía como si nada...
- ___, hay algo raro con esos animatronicos, de día actúan bien, pero algo sucede con ellos de noche - mire al pobre chico - he revisado su software, el código fuente y no encontré la razón de ese comportamiento.
- pero hay algo aún más raro, mientras que Toy Freddy me tenía, otro animatronico lo atacó y me dijo que corriera - no podía creer lo que me dijo.

¿Otro animatronico lo defendió? Incluso Ballon boy, que es un niño, ha conspirado contra los guardias. Esto es muy raro, sin duda es algo que hay que discutir.
Al llegar a la casa de ___, lo acompañe hasta la puerta. El volvió a agradecer y antes que entrara, le dije que si lo necesitaba, que me llamara. El simplemente asintió y entro.
Solté un suspiro y volví al auto. Mire a Mike, el asintió. Tome mi teléfono y llame a Jeremy.

- Jeremy, lamento molestarte tan temprano.
- ¿Es sobre ___? ¿El está bien? - se notaba preocupado, y no lo culpo.
- si, está bien, lo acabamos de dejar en su casa, es justamente de el que tenemos que hablar, contigo y con...

___

Estaba recostado en mi cama, miraba las marcas que me habían quedado en las muñecas. Creo que luego de hablar por Fritz por teléfono me desmaye, eso o me golpearon en la cabeza.
Además, algo me daba vueltas en la cabeza, podría jurar que presioné el lugar donde se desactivan, pero siguió como si nada...
Yo solo se que no quiero volver allí. He tenido ataques de pánico, pero la última vez que me desmaye por uno fue hace años.
Por otro lado, estoy tan agradecido con Fritz, si el no me hubiera encontrado, no se que habría pasado conmigo. Claramente hay algo mal en esos robots...
Me acomode bien, con algo de suerte, podría dormir un buen rato.

Estaba entrando en la sala de partes y servicios. Allí estaba Toy Freddy para reparar. Mis manos temblaban y sentía un frío que me recorría la espalda.
Tome las herramientas y comencé a repararlo. El no reaccionaba, simplemente parecía estar desactivado.
Escuché lo que sería un ruido metálico destraba de mi. Al darme vuelta, algo se envolvió en mi cuello deje de sentir el suelo y aquel cable o soga se enterró más. Mire al animatronico que antes estaba sentado, se paró y me acaricio la mejilla. Su expresión era tranquila, incluso podía ver una pizca de decepción. Trataba de alejarme pero cada movimiento que hacía era peor.

— ¿Que haremos contigo ___? ¿Conservarte? — sentí como la presión en mi cuello se aflojó un poco — ¿O acabar contigo? — la presión volvió, está vez evitando por completo que pueda respirar.

Tenía mi respiración agitada me lleve la mano al cuello, no tenía nada. Me levanté de la cama y fuí al baño. Vi mi reflejo en el espejo, no tenía nada. Solo fue una pesadilla. Sentí como unas náuseas subían por la garganta. Aún teniendo el estómago vacío, termine vomitando bilis.
Me lavé la cara y volví a la cama. No recordaba que los nervios me hacían poner tan mal. Miré mi teléfono, eran alrededor de las 12 del medio día, tenía un mensaje del jefe y otro de Fritz.
El jefe me dió unos días de descanso, sabía que pudo ser un momento difícil y que era mejor que me calmara. El mensaje de Fritz decía de juntarnos para hablar de algo importante. Me hago una idea de cuál es el tema de conversación tan importante.
No quiero ir, no quiero saber nada sobre los animatronicos, la pizzería o cualquier otra cosa...

Omnisciente.

Paso el primer día de tu descanso lo aprovechaste para despejar tu mente. Incluso aprovéchate la tarde para salir a jugar fútbol con Eliazar y Eric. Claramente no mencionaste nada sobre lo sucedido en la pizzería. Atribuiste tu mala cara a qué no pudiste dormir bien por quedarte hasta tarde viendo una saga de películas.
El segundo día arreglaste con Fritz para ir a hablar a un bar. El te dijo que no irían solos, también irían Mike, Jeremy y otra persona. Te preguntabas quien era y que vela tenía en ese entierro, pero decidiste no preguntarle.

Llegaste al bar, no tardaste en encontrar a Fritz. Podías ver qué estaba con Jeremy y Mike. No conocías a la cuarta persona, pero más o menos podías sacar que era una persona mayor que ustedes 4.

— ___, que bueno que viniste — Fritz fue el primero en saludarte.
— hola, lamento llegar tarde — tomaste asiento al lado del pelirrojo.
— tranquilo, no hay problema — respondió Jeremy — ¿Cómo te sientes?
— aún algo abrumado, intente distraerme, pero cuando dejaba de pensar en otra cosa, volvía a mi mente el tema de la pizzería — de solo volver a hablar del tema, sentías como se te erizaba la piel de los nervios.
— de verdad lamento lo que te sucedió ___, los chicos ya me tienen al tanto — miraste a aquel hombre — me presento, mi nombre es Henry Emily.

Sabías que su nombre te sonaba de algún lado, no tardaste en recordar dónde lo habías leído.

— u-usted es...
— así es, soy el creador de los animatronicos.