Después de la comida y una plática entre amigos Sabito y Makomo fueron los primeros en irse de casa de Giyuu.

Shinobu: Gracias por invitarme me gustó mucho.

Tomioka: Me alegro que pudieras venir.

Shinobu: La próxima vez solo podríamos ser solo tú y yo.

Un ladrido hacia que Tomioka y Shinobu desviaran sus miradas hacía el chocolate que se sentía algo excluido.

Shinobu: Bueno, supongo que tu perro también puede estar.

Tomioka: Espera aquí.

Tomioka se levantaba del pequeño sofá dejando sola a Shinobu con chocolate.

Shinobu: ¿A dónde vas Tomioka? No me dejes a solas con tú perro, aun no me acostumbro a él.

Tomioka: Si eres buena con él, no te hará nada, y chocolate, no la asustes demasiado.

Fueron las últimas palabras de Tomioka antes de desaparecer del lugar para ir a su cuarto.

Shinobu: (Que no me asuste demasiado, debe estar loco)

Shinobu también quiso seguir a Tomioka, pero en cuanto puso un pie en el suelo, chocolate soltó otro ladrido, Shinobu soportaba la presencia del perro pero aún no se acostumbraba a él por completo, el larido del chocolate hacía sentir a la peli morada algo de pánico.

Shinobu: Lindo perro, no me vayas a hacer nada.

La voz de Shinobu era de miedo y pánico mismo que chocolate podía sentir.

Una vez más Shinobu intento moverse pero esta vez con más lentitud, pero al igual que su primer intento chocolate volvió a ladrar haciendo que Shinobu se sintiera impotente ante la situación.

Shinobu: No puedo creer que un animal más pequeño que yo pueda intimidarme, no voy a permitir que me estés ladrando.

Decía Shinobu con una mirada enojada hacía el perro, que solo se limitaba a mirarla sin sentir alguna amenaza por parte de la fémina de ojos color violeta.

Shinobu se puso de pie viendo al perro fijamente.

Shinobu: Voy a irme y tú te quedaras ahí.

Shinobu le daba una orden a chocolate con un tono firme.

La pequeña mariposa estaba emocionada al ver que esta vez parecía que ella estaba tomando el mando, dio su primer paso y nuevamente chocolate ladraba pero con una diferencia, el perro ya no solo veía a Shinobu sino que también estaba en posición de ataque mostrando los colmillos, Shinobu no pudo en esta ocasión, ahora estaba aterrada por ver al perro aún más cerca de ella por lo que solo se quedó quieta de pie sin hacer un novimiento.

Shinobu: (¡Maldita sea Tomioka como pudiese dejarme sola con tú perro!)

Tomioka ya estaba de regreso quien al ver la escena también se quedó quieto y con una pequeña sonrisa al ver como Shinobu estaba quieta viendo a chocolate fijamente hasta que decidio romper el silencio.

Tomioka: ¿Qué está pasando?

Shinobu al escuchar la voz de Tomioka no dudo en correr hacia Tomioka y abalanzarse sobre el pecho de su novio, chocolate movía la cola al ver que nuevamente a su amo que estaba de regreso.

Tomioka: ¿Te hizo daño?

Shinobu: ¡Estoy bien, pero no me vuelvas a dejar con esa máquina de matar Tomioka!

Tomioka: Kochou, yo le preguntaba a chocolate.

Shinobu: ... ¿¡Es una maldita broma Tomioka, prefieres preguntarle a tu perro si yo le hice algo en lugar de preguntar por mí!?

Tomioka: ¿Qué tiene de malo? Sabía que no te haría nada, no le he dado esa orden.

Shinobu: ¿Te preocupas más por tú perro que por mí?

Tomioka: ... ¿De verdad quieres saber?

Shinobu: ¡Eres un desgraciado Tomioka! ¡Por eso todo el mundo te odia!

Tomioka cargaba en brazos a Shinobu hasta el sofá, después Tomioka sacaba de sus bolsillos unas golosinas para su perro como una recompensa y después centro su atención en Shinobu, Tomioka con una mano tomo el rostro de Shionbu para que ambos se verán directamente la mirada de enojo de Shinobu cambio por completo cunado Tomioka le dio un beso en la majilla y después se acercó aún más a shinobu para susúrrale unas palabras.

Tomioka: A mí, nadie me odia.

Al instante, la piel de Shinobu se erizo por completo, la voz de Tomioka no sonaba con ese tono de tranquilidad y calmada con la que siempre hablaba, en su lugar la voz de Tomioka sonaba seductora, Tomioka nuevamente depositaba un pequeño beso en la mejilla de Shinobu provocando que ella se sonrojara, la actitud de Tomioka como alguien dominante y seductor era emocionante para bella mariposa ella no lo decía con palabras pero dentro ella tenía ansias de tomar a Tomioka solo y únicamente para ella. 

Nuevamente se veían a los ojos, solo Shinobu esta desconcertada no sabía muy bien lo que podría pasar y Tomioka por su lado, él si estaba seguro sobre qué hacer pero no haría nada que Shinobu no quisiera o algo para lo que no estviera preparada, así que opto por algo más tranquilo, dar el primer beso en los labios que tendría con Shinobu, Tomioka se acercaba sin hacer ningun ruido, el corazón de Shinobu latia tan fuete que casi se podía oír, no fue hasta que los labios de ambos estaban a solo pocos centímetros de estar unidos.

Una vez más, chocolate hacía de las suyas, el fiel compañero de Tomioka saltaba del suelo hasta el sofá aterrizando bruscamente entre Tomioka y Shinobu haciendo que se separaran chocolate que ahora estaba en medio lamia la cara de su dueño demandando también algo de afecto y atención.

Los enamorados se sentían algo frustrados por el momento, Shinobu reía al ver como chocolate lamia la cara de Tomioka quien por su lado intentaba que chocolate parara de seguir lamiéndole el  rostro.

Tomioka: Iré a lavarme la cara, chocolate, no le hagas nada a Kochou.

La voz de Tomioka volvía escucharse a la habitual, chocolate se acostaba en suelo y Shinobu veía a chocolate con cierto enfado por haber interrumpido momento emocione con Tomioka.

Shinobu: Ganaste esta vez, pero no te acostumbres no siempre estarás cerca de Tomioka.

Shinobu hablaba en un tono serio a chocolate que simplemente ignoraba las palabras que decía aquella chica.

Tomioka: Se hace tarde, debería llevarte a tú casa.

Shinobu: Pero apenas son las 7 aun podríamos pasar tiempo juntos, ¿acaso no quieres que me quede?

Tomioka: Me gustaría que te quedaras, pero no quiero meterte en problemas con tus hermanas por llegar tarde a casa.

Shinobu: No me meterías en problemas con mis hermanas, a Kanao le agradas y estoy segura que a Kanae también le agradarías.

Tomioka: Son tus hermanas, también debes estar con ellas.

Shinobu: Entonces vendré mañana, aún nos quedan algunos días de vacaciones podríamos aprovechar ese tiempo para estar solo nosotros antes que volver a la universidad.

Tomioka se sentaba en el sofá y abrazaba a Shinobu por la cintura dándole pequeños besos en los hombros de su pequeña mariposa.

Tomioka: Si quieres venir mañana está bien, así podríamos comer esta vez solo nosotros.

Shinobu: Me gustaría mucho.

Tomioka: Toma, casi lo olvida.

Shinobu: ¿Qué cosa?

Tomioka sacaba de otro bolsillo lo que había ido a buscar a su habitación y procedía a tomar con cuidado una mano de Shinobu colocando un anillo que hace demasiado tiempo que Shinobu no veía.

Shinobu: ¿Es el anillo que ganamos cunado fuimos al arcade de juegos?

Tomioka: Lo he tenido guardado desde que supiste que estuve casado, quise tirarlo pero no pude, me recordaba mucho a ti.

El anillo que cambiaba de color según las emociones pasaba de ser una piedra de color negro a ser una de color morado significando felicidad, lágrimas de felicidad también se hacían presentes en la habitación.

Shinobu le daba un beso un beso en la mejilla a Tomioka, chocolate otra vez quería estar entre Shinobu y Tomioka pero en esta ocasión basto una breve mirada de Tomioka a chocolate para que se quedará acostado en el suelo.

El resto de esa noche Tomioka llevo a Shinobu hasta un par de calles cerca de la residencia Kochou y después se retiró.

Shinobu entraba a la casa, no ve a sus hermanas en un inicio hasta que se aproxima a la cocina y pude ver que sus hermanas estaban preparando algunos postres.

Kanae: ¡Shinobu! ¿Cómo estuvo tú cita?

Shinobu: Hermana, te dije que solo era una comida.

Kanae: Si, como no.

Kanao: Llegaste algo temprano ¿todo bien?

Shinobu: ¿Ah? ¿Por qué la pregunta?

Kanao: Kanae y yo apostamos sobre tu cita.

Kanae: No le hagas caso, no sabe lo que dice.

Kanae de inmediato le tapaba la boca a Kanao.

A Shinobu solo le parecía divertido lo que decía Kanao, con una sonrisa y sin decir nada a sus hermanas Shinobu se dirija a su habitación.

Kanae: Kanao, si haces una apuesta no debes decir que es una apuesta.

Kanao: Entiendo, pero gane yo, ahora me tendrás que llevar al zoológico, podré dormirme hasta tarde y no olvides que me deberás de llevar el desayuno hasta mi cama durante un mes.

Kanao celebraba su victoria llevándose consigo un plato con varios postres.

Kanae: No debí aceptar su apuesta.

Tomioka descansaba en su habitación, esta sería la primera noche en su nueva casa y aunque estaba feliz por eso, hubiese preferido que Shionbu se quedara tal vez solo una noche.

Comienza otro día.

Shinobu

Es extraño, la relación que tengo con Tomioka me parece algo casi irreal, nuestras personalidades suelen ser diferentes, y de algún modo nos complementamos, tal vez parezca alguien poco expresivo y bastante reservado, algo que no está lejos de la realidad, pero también estoy segura que es alguien diferente cunado está conmigo, me gusta mucho la sensación que me provoca al estar a su lado, hace que me sienta muy feliz, pero no es la misma felicidad que siento cunado estoy con otras personas o incluso mis hermanas, no tengo muchas experiencias de pareja y las pocas que tuve no fueron de lo mejor, pero estoy segura que con Tomioka me siento mucho mejor, me gustaría no tener que ocultar nuestra relación, y tampoco sé cómo reaccionaría Kanae al saber lo mío con Giyuu, quisiera que mi relación no fuera algo de que ocultarla, salir tomados de las manos por los todos lados como lo hacen las parejas normales, pero por ahora es mejor que entre menos personas sepan es mejor, confió en que Mitsuri no le diría a nadie, Sabito y Makomo, no los conozco tanto como Giyuu pero si él confía en ellos también puedo estar tranquila en que no dirán nada, aprovechare al máximo los días que tenemos antes de volver a clases.

Shinobu comenzaba su mañana mirando primero el anillo que seguía siendo de Tomioka, después de apreciarlo por uno minutos se levantó de la cama y bajo para desayunar donde vio a Kanae que llevaba un desayuno consigo.

Shinobu se pasó gran parte de la mañana leyendo un libro y ayudando en las tareas de a casa hasta que por fin comenzaba nuevamente la tarde y se prepararía para ir con Tomioka.

Shinobu se alistaba en su habitación cuando oye que alguien llama a la puerta, y acude a abrir.

Shinobu: Hermana, ¿pasa algo?

Kanae: ¿Puedo pasar?

Shinobu: Claro pasa.

Kanae: Es un poco extraño que te pida permiso para entrar a tu habitación cunad fui yo quien compro la casa.

Shinobu: Tienes razón, pero sería poco educado si solo pasas sin decir nada o no pedir pemiso para entrar a mi habitación.

Kanae: Relájate Shinobu, solo intentaba hacer una broma.

Shinobu: Nunca fuiste buena con las bromas, de niñas cada que intentabas hacer una simple broma terminabas mal o hacías enojar a papá y mamá.

Kanae: Es verdad, nunca fui buena con nada de eso, que buenos tiempos aquellos.

Shinobu: Sabes, a veces quesera volver a ser niña y poder estar con mamá y papá, los extraño mucho.

Kanae: Yo también los extraño, estoy segura que estarían felices de ver como tú y Kanao han crecido.

Shinobu: Eso no es verdad, estarían muy orgulloso de ti, tú has hecho tanto por mí y por Kanao, papá y mamá siempre estuvieron orgullos de ti, eres la mejor, Kanao y yo te admiramos por todo lo que has hecho por nosotras.

Kanae: Gracias, he tratado de ser una buena hermana y un buen ejemplo para ustedes.

Shinobu: Pero dime ¿Qué es lo quieres decirme?

Decía Shinobu limpiándose algunas lágrimas de nostalgia.

Kanae: Quiero preguntarte 2 cosas ¿A dónde vas? Y ¿Con quién vas?

Shinobu: ¡Eh! ¿Por qué preguntas eso?

Kanae: Shinobu, no soy ciega te conozco, sé que debes estar saliendo con alguien, pero me inquieta un poco que no me hayas dicho nada.

Shinobu no sabía cómo debería responder, y quedarse callada solo afirmaría lo que Kanae y sabía.

Shinobu: ¿Por qué quieres saber Kanae?

Kanae: ¿De verdad preguntas eso? Es porque eres mi hermanita y me preocupo por ti y Kanao.

Shinobu: Ya no soy una niña Kanae, aprecio tu interés, pero también debes dejar que yo misma comenta mis errores y mis aciertos, eso incluye a quien conozca.

Kanae: Tienes razón Shinobu, para mí a veces suele ser complicado, a veces las veo como mis hermanas y otras veces las veo como si fueran mis hijas desde que papá y mamá y no estan, pero debo dejar que tú misma conozcas el mundo y a las personas a tú manera.

Kanae abrazaba fuerte a Shinobu que con gusto aceptaba y devolvía el gesto de afecto.

Kanae: Solo no olvides que somos hermanas y que estaré apoyándote, y también que espero conocer al afortunado que sale con mi hermana.

Fueron las últimas palabras que dijo Kanae antes de salir de la habitación de Shinobu.

Shinobu: (Me recuerdas mucho a mamá Kanae)

Shinobu salió de su casa y tomo un taxi con dirección hacia un centro comercial, donde Tomioka la esperaría.

Pasado unos 25 minutos de viaje, Shionbu pudo ver a Tomioka en la entrada del lugar, pago al chofer y bajo del auto.

Tomioka: Que bueno que llegas.

Shinobu: También me da gusto verte Tomioka.

Tomioka: Lo siento.

Shinobu: ¿Por que me pediste vernos en este lugar?

Tomioka: Quiero comparar algunas cosas para mi casa.

Shinobu: ¿Qué hay de tus cosas viejas?

Tomioka: Dudo recuperarlas, prefiero gastar en cosas nuevas antes que tener que volver por las cosas viejas.

Shionbu y Tomioka entraron al centro comercial viendo algunas cosas que Tomioka pudiera comprar, no serían muchas cosas las que compraría Tomioka pero al menos quería tener algunos muebles más en casa, fue Shinobu la que se preoupo más por las compras que Tomioka, Shinobu se fijaba no solo en los precios sino también en aspectos como, si lo que compraba combinaría con la casa, la cocina o la sala, también se fijaba en la calidad de los productos, Tomioka solo se fijaba en el precio y si le gustaba.

Depuse de un par casi 2 horas en el lugar finalmente salieron, las cosas que Tomioka había comprado las estaba subiendo a una camioneta prestada y se dispuso a conducir a casa.

Una vez en casa Shinobu ayudaba en lo que podía a Tomioka para que el trabajo de meter las cosas no tardara demasiado.

Shinobu: ¿Por que no le pediste ayuda a Sabito para esto?

Tomioka: Porque él y Makomo estarán ocupados hoy y tu querías venir a mi casa.

Shinobu: De haber sabido que tendría que cargar, hubiera venido otro día.

Tomioka: ¿De que hablas? Yo he cargado con casi todo, solo bajaste un par de sillas y abriste la puerta de mi casa.

Shinobu: No puedo hacer todo por ti Tomioka, además a eso se le llama a hacer trabajo en equipo.

Tomioka: (Mejor le hubiera pedido ayuda a Sabito)

Tomioka se relajaba en un nuevo sofá al lado de Shinobu.

Shinobu: ¿Tienes hambre?

Tomioka: No tengo comida en casa, ayer se acabó.

Shinobu: ¿Te gustaría que fuera por algo de comida?

Tomioka: ¿De verdad?

Shinobu: Claro, te esforzaste mucho por hoy, ahora, solo descansa un poco yo iré por algo de comida.

Tomioka: Gracias.

Shinobu: No hay nada que agradecer, ¿tienes algo en mente que quieras comer?

Shinobu se acercaba a Tomioka con una intención seductora.

Tomioka: Si lo dices así, estoy seguro de que lo que quiero comer ahora.

Los cuerpos de Shinobu y Tomioka comenzaban a acercarse dejándose llevar por sus deseos carnales, antes de comenzar a besarse chocolate volvía a ladrar llamando la atención de Shinobu y Tomioka.

Shinobu: No puede ser ¿acaso para besarte o estar contigo siempre se comportará igual?

Chocolate no solo estaba labrando también su comportamiento era agresivo, Tomioka noto que chocolate de hecho le ladraba a la puerta.

Tomioka: Algo anda mal.

Tomioka cocía a su perro, y sabía que ese comportamiento agresivo en chocolate no era algo común.

El timbre de la casa de Tomioka sonaba y chocolate ahora ya no ladraba sino más bien estaba agresivo intentando atacar a la persona detrás de la puerta, en ese momento Tomioka entendió que era lo que pasaba.

Tomioka: Escóndete no hables y no hagas ruido.

La expresión de Tomioka era de disgusto, Shinobu sin saber que era lo que pasaba se escondió detrás de un sofá aprovechado su baja estatura, Tomioka comenzaba a abrir la puerta y mismo tiempo que con una mano sostenía a chocolate, una vez que la puerta estuvo abierta, Tomioka confirmo el porqué de la actitud de su perro, mismo que ahora intentaba zafarse del agarre de su dueño para atacar a la persona del otro lado de la puerta.

Tomioka: ¿Qué haces aquí?

La voz del azabache era de completo disgusto.

Daki: Tiempo sin vernos querido.

Una sonrisa de oreja a oreja era mostrada por la mujer del otro lado de la puerta.

Tomioka: No tanto como quisiera.

Daki: No seas aburrido cariño, ¿me dejaras aquí a fuera o deberé de entrar a la fuerza?

A Tomioka le disgustaba ver a su ex esposa, pero también había aprendido a ser generoso y caballeroso con las mujeres, dejar a afuera a su ex esposa no era algo educado por parte de Tomioka, pero primero quería saber por qué Daki volvía.

Tomioka: ¿Qué haces aquí?

Daki: Déjame entrar y te digo a que vine.

Tomioka: ¿Prometes no tardar?

Daki: Solo10 minutos, hay algo importante que debo decirte.

Tomioka: (No me vayas a odiar Kochou)

Tomioka: 10 minutos después de eso te marchas.

Tomioka abría la puerta para que Daki pasara.

Daki: ¿Veo que sigues con el pulgoso?

Daki miraba con disgusto a chocolate y chocolate también miraba agresivamente a Daki.

Tomioka: Si solo viniste a decir eso ya te puedes ir.

Daki: Que aburrido eres.

Una vez adentro Tomioka le indico a Daki donde sentarse más precisamente para que Daki no notara la presencia de Shionbu.

Tomioka: Y bien ¿Por qué estás aquí?

Daki: ¿Quieres ir a comer? Escuche de un nuevo lugar donde sirven comida deliciosa, podríamos beber algo, y si te portas bien, tendrás una recompensa.

Tomioka: Déjate de tonterías y responde.

Daki: ¿Te he dicho que te vez tan sexy cunado te enojas?

Tomioka: ¿Me dirás o debo pedirte que te vayas?

Daki: ¡Esta bien! Gruñón.

Daki hacia un largo respiro para hablar.

Daki: ¿Quieres casarte conmigo?

Shinobu: (¿Qué carajos acaba de decir esa mujer? ¿Será mejor si salgo?)

Tomioka: ¿Qué acabas de decir?

Decía Tomioka que había perdido la concentración al escuchar la propuesta de Daki.

Ante la expresión de Tomioka, Daki solo reía a carcajadas sin parar.

Tomioka: ....

Shinobu: .... (Está loca, ¿Cómo diablos terminaste casándote con ella Tomioka?)

Tomioka: ¡¿Qué es lo divertido?!

Daki: Nada, solo era una broma, debiste ver tu rostro de idiota.

Tomioka: No tengo tiempo para estas estupideces, lárgate ahora.

Daki: Relájate era solo una broma, aunque si quieres, puede no ser una broma.

Tomioka: ¡¿Acaso te has vuelto más loca?!

Daki: Estoy embarazada.

La furia de Tomioka desaparecía al escuchar lo que decía aquella mujer frente de él.

Daki: Puedo ver por tu tonta expresión que crees que estoy bromeando, pero es cierto, estoy embarazada.

Shinobu se tapaba la boca para asegurase de no hacer ningún ruido, pero también sentía como si su corazón fuera a romperse.

Shinobu: (Por favor Tomioka, ¿dime que no eres tú el padre? Si lo que dice esa mujer es verdad, quiero saber que tú no eres el padre)

Tomioka: ¿Qué tiene que ver conmigo? No puedo ser el padre, tu y yo no hemos estado juntos desde hace tiempo.

Daki solo sonreía al ver al preocupado de su ex esposo.

Daki: Cálmate Giyuu, no vine para decirte que eres tú el padre, apenas tengo un mes de embarazo sería imposible que fueras el padre.

Shinobu: (¿Tomioka no es padre?)

Tomioka: Si no soy el padre, ¿Por qué vienes a mí?

Daki cambiaba su expresión de alegría por una de tristeza con algunas lágrimas saliendo.

Daki: Viene porque quiero disculparme contigo.

Tomioka: ¿?

Daki: Lamento haber sido una mala esposa contigo, no merecías ese tipo de trato de mi parte.

Tomioka tragaba saliva antes de hablar, su ex posa ahora no se veía ni se comportaba a como la concia.

Tomioka: ¿Por qué te estas disculpando? ¿Por qué después de tanto?

Daki: Me convertiré en madre, no esperaba eso y tu bien lo sabes, pero cuando me entre de mi embarazo, entendí que era momento de ser mejor persona, nunca es tarde para iniciar un cambio positivo, perdón por tardar en disculparme, te hice mucho daño y de verdad estoy arrepentida por eso, lo tuyo y yo no funciono, no espero que me perdones, solo quería que me escucharas decírtelo, aunque no estaba segura de si en verdad me escucharías, han pasado varias cosas desde que nos divorciamos, nada ha sido igual para mí, me gusta a idea de volver contigo y tener un mejor inicio los dos, pero, yo estoy segura que eso es solo idea mía, no quiero quitarte mucho tiempo veo que debes estar ocupado con todo esto, Tomioka, gracia por escucharme.

Daki con lágrimas en los ojos se levantaba y caminaba hasta la puerta.

Tomioka notaba el repentino cambio de actitud de ex esposa, le parecía imposible reconocerla, Tomioka también se puso de pie y siguió a Daki.

Tomioka: Fueron muchos días difíciles para mí durante el tiempo que estuvimos juntos, me da gusto que estes cambaindo, aceto tus discupas y te perdono.

Daki estaba preparada para todo menos para escuchar que Tomioka la perdonara, se dio vuelta y abarco con fuerza a Tomioka.

Daki: Gracias.

Daki con lagrimas en los ojos no quería solar a Tomioka pero debía hacerlo por el bien de ambos, por lo tanto el abrazo no duro mucho Daki se separó de Tomioka y antes de salir llevo una de sus manos al trasero de Tomioka sujentandolo con fuerza.

Daki: Sigue firme como lo deje.

Tomioka no pudo evitar sonrojarse ante el acto.

Daki: Es mejor irme, tengo cosas que hacer, linda tarde Tomioka.

Antes que Daki estuviera más lejos Tomioka tenía una pregunta para Daki.

Tomioka: Daki, ¿Cómo me encontraste? Dudo que Sabito o Makomo te hayan dicho donde vivo.

Daki: Tú padre me dijo donde vivías.