Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Ojos


En esa abovedada habitación donde tantos intentos fracasados, en tantas batallas aferrado, su tiempo se diluía al igual que su resquebrajada esperanza. ¿Cuanto había pasado ya desde que todo comenzó? y él seguía igual, dolido e impotente ante el escaso fruto de sus cada vez más desastrosas tentativas.


Huraño, reacio a todo, lejos de su ufano yo, solo se mantenia por su recuerdo y por ese lastimero quizás...pasan las horas, los días y nada cambia, él envuelto en la desesperación y ella...ella apartada en su crisálida de acero a la espera de que él pueda algún día purificar la imprudencia cometida.


Nada queda, nada perdura, hasta la memoria se difumina, el tiempo es un mal compañero que sin avisar toma los recuerdos para convertirlos en meros delirios febriles. Más lamentable es su suerte que pende de las manos de dos imberbes héroes que por su propia desgracia fueron nombrados.


Daba igual con cuantos hermosos apelativos se les conociera, ni a cuantos poetas hubieran inspirado. Para él ya no eran más esas fulgurantes esmeraldas con las que recibía el nuevo día, esa paz que por la noche le hacían anhelar, ahora solo eran dos tímidas estrellas que se ocultaban tras sus níveos parpados. Su alma se desgarra al saber que la vida de su vida estaba encerrada en ellos.


El ahora recorre a ciegas su sendero, sin ella a su lado, como ese marinero en la penumbra de la noche al que le falta el faro que lo guie al calor de su hogar. Los atardeceres han perdido su encanto, el otoño su color y él la razón por vivir.


¿Que milagro tendría que pasar para volver a ver a sus dos luceros brillar una vez más?, al igual que Ícaro se quemó al tratar de tocar el sol, el gustoso volvería a arder en la intensidad del fuego de sus iris de oliva. Todo es poco por volver a tenerla a su lado.


Pero aun le quedaba él, su hijo, su ancla a su angustiosa existencia. Que a sabiendas de no ser el modelo de padre amoroso que debiera, aun así se mantenía impasible ante los hirientes envites del destino, solo por él.


El era su pequeño remanso de paz, en el volvía a soñar en un prometedor futuro, porque él tenía sus ojos.

FIN

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro