Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 22

Hola chic@s nos estamos acercando al final
Espero la estén disfrutando. Dejen sus votos y mensajitos. Realmente alegran mi día. Bss❤

**************************************

La tercera es la vencida.

Había pasado una semana de la boda. Y la vida había vuelto a la normalidad. O al menos todo lo normal que se podía estar teniendo a Dylan como pareja y mejor amigo. ¿Me estaba quejando?, no. ¿Lo disfrutaba?, demasiado. Llegué a casa y estaba todo en silencio, hasta que mi pequeña Lita fue a saludarme.

Dylan llevaba varios días llegando tarde del trabajo, por todos los preparativos para ampliar el negocio. Así que fui a la cocina a preparar algo para merendar.
Quedé un poco sorprendida con la nota que había colgada en mi nevera

- tenemos una cita, ponte guapa, pequeña Junio. Nos vemos a as 7-

Sonreí porque a pesar de lo ocupado que estaba había sacado tiempo para nosotros. Fui al cuarto y preparé la ropa que me pondría. Miré complacida cuando saque la ropa interior que había comprado el día anterior.Consistía en mucho encaje color azul claro. Una chica tiene derecho a soñar. Me apuré para entrar al baño porque faltaba poco para la hora de la cita y no quería ser impuntual.

Después de darme un baño merecedor me decante por un vestido que había comprado en uno de ms viajes a la gran ciudad. Me peine y maquille solo lo justo, me vestí y suspiré esperanzada cuando me mire en espejo. El vestido era verde, del mismo tono que los ojos de Dylan y ese había sido por qué lo había comprado. También porque me hacía resaltar mis curvas. Me puse unas sandalias de tacón alto que eran lo suficiente cómodas para cualquier ocasión y por último me eché algo de perfume.

Sonreí al ver a Dylan en la puerta delantera esperando por mí.

- Estas preciosa, como siempre - me alago dándome un pequeño beso en los labios para no estropear mi maquillaje. Lo miré molesta y después de unos segundos me besó un poco más profundo.

- Tú tampoco estas mal- y lo decía muy en serio. Tenía un pantalón negro ajustado, que le hacía ver sus piernas largas y musculosas. Y lo acompañaba una camisa negra que llevaba remangada hasta los codos.

- ¿nos vamos?- pregunté y asintió.

Agradecí la elección de mis zapatos cuando tomamos rumbo al restaurante donde él trabajaba. No estaba lo suficiente lejos como para ir en coche, pero que con otros zapatos hubiera sido imposible la caminata. - ¿todo está bien? - pregunté para aligerar un poco el silencio que tuvimos por todo el camino. Nunca habíamos estado tanto tiempo sin nada que decir.

- ¿Eh? si si todo bien -sonrió y pasó las manos por el pelo, el cual estaba más revuelto de lo normal.

- ¿ A dónde vamos?- murmuré confundida al ver que me llevaba a la parte trasera del restaurante.

- Sabes que Will y yo hemos estado incrementarle una nueva fusión al restaurante- asentí en conocimiento. y
Ya habíamos hablado de esto- pues decimos también darle una nueva área. y hacer como un reservado - aclaró mientras subimos unas escaleras

- Oh- fue todo lo que dije sorprendida
al ver lo que habían hecho haya arriba

- Aún no lo hemos abierto al público, pero quería tener una cita y este es un buen lugar para ello - habló y yo solo seguí mirándolo todo. La amplia terraza tenía algunas mesas acomodadas de forma estratégica para darle cierto aire de intimidad. Las mesas eran de madera al igual que las sillas y aunque todo el lugar daba un aire rústico la combinación te dejaba sin aliento. Pero lo que me tenía fascinada era las pequeñas luces que daban la sensación de estar bajo un manto de estrellas.

Dylan me tomó por la mano y me guió hacia una mesa que ya estaba preparada. Sonreí cuando abrió mi silla para que me sentara, después se sentó frente a mí y sonrió con timidez.

- En estos días he estado preparando algunos platos para cuando sea la inauguración del lugar y esos serán los que cenaremos, ¿te importa?

- ¿Qué si me importa?. Dylan llevo días intentado probar tus nuevas recetas aclaré para que no le quedara duda - y por cierto este lugar es hermoso

- Me alegro que te guste. Estaba un poco nervioso con eso. Quería que fuera perfecto.

- ¿Esto lo has hecho tú?

- No todo, solo los toques finales. Will tenía muchas cosas sin hacer puesto que faltan varios días para abrir. Yo solo adelanté el proceso

- Hiciste un buen trabajo

-Gracias - murmuró sirviendo una copa de vino para ambos que ya estaba en una hielera al lado de nuestra mesa.

Abrí la campanilla que tapaba nuestros platos y mi boca se hizo agua con los olores

- Esto se ve y huele realmente bien- comenté mientras tomaba los cubiertos para comenzar a comer. Gemí gustosa por la liga de sabores en mi paladar. Alguna vez he dicho lo orgullosa que estoy de Dylan. Pues eso.

Cenamos mientras teníamos una conversación con algunos temas triviales. Cuando dimos el ultimo bocado Dylan se levantó y fue algún lugar de la barra y comenzó a sonar una suave música por los altavoces.

- Me concede esta pieza-fue todo lo que dijo y después de murmurar un sí, sonrió y me llevó hacia una parte del local donde las mesas estaban esparcidas dando paso a una pista de baile improvisad. - ¿has tenido una buena cita pequeña junio?

- De las mejores- suspiré y puse mi mejilla en su pecho logrando oír sus latidos- alguna vez me vas decir porque me llamas Junio

- ¿Recuerdas cuando nos conocimos? Cuando nos conocimos realmente.

- Creo que eso no lo voy a olvidar en la vida.

- Por ese entonces mi vida era un poco oscura. pero ese no es punto. - hizo silencio y esperé que continuara - hubo un tiempo que nuestra familia, no era así - suspiró - éramos felices, o eso era lo que mi mente de niño veía. De esa época hay un recuerdo que esta fijo en mi mente. Era principios de junio y el verano acababa de comenzar y mi padre nos llevó a la playa. Fue la primera vez que vi el mar, y te juro que a pesar de tener una corta edad, sentí una sensación de felicidad absoluta que a día de hoy aún no lo puedo olvidar. Fue un buen verano, creo que el único que recuerdo con una sonrisa en los labios - lo miré y en efecto tiene una sonrisa melancólica en los labios.Me dio un corto beso cuando ve mi mirada y después continua el lento baile. - Cuando viniste a abrazarme ese día a mi patio, fuiste ese verano. El sol intenso pero que no quema. El aire con olor a sal, fuiste la risa de mi mamá por verme correr como loco por la arena. Fuiste la sonrisa de mi padre cuando me enseñó a volar un cometa, pero también el mar, a la espera, quieto, buscando el momento preciso para moverse y envolverte en las olas. Ese día fuiste todo eso junto- me besó la frente y continuó - ese día fuiste ese verano. Ese día de junio que me dio tanto y a la vez no me dio nada - le sonrío porque siento que si hablo se va a desatar el nudo que aprieta mi garganta - después supe por mamá que tu nombre era Abril, y me dije, porque no correrle unos meses y llamarla de otra forma. Al final tus padres habían decidido nombrarte Abril, no había nada de malo que yo decidiera que para mí fueras Junio

- No sabía que había tanto detrás de esa historia

- Ya vez soy un tipo romántico - dijo para aligerar el ambiente, haciéndonos reír

- ¿Puedo hacerte otra pregunta?

- Vale, pero después me toca hacerte una a ti- pidió y asentí confirmando

-¿Porque siempre marcabas una letra en la nota de mi café? - pregunté y río - ¿eh porque te ríes?

- Bueno, la primera vez que lo hice fue por accidente - sonrío- quería hacer una especie de renglones debajo de las letras, en forma de adorno, pero la tinta murió. Y cuando después viniste toda curiosa, decidí seguir con eso.

- Así que todo este tiempo no era más que una broma, para desesperarme.

- Si- dice con fingida inocencia- oh vamos Junio, eras graciosa toda desesperada por saber.

- No era gracioso. Llegué a pensar que era tu firma o algún plan secreto. Y cuando estaba empezando a enamorarme de ti, pensaba que era alguna especie de carta de amor- bajé la mirada avergonzada sintiéndo las mejillas acalorarse

- Umm, ¿lo siento?- dice pero sigue con una sonrisa posada en sus labios que impide que me moleste.

- Ambos sabemos que no lo sientes realmente - refunfuño - pero igual acepto tu intento de disculpa- digo bajito mientras me ponía de punticas para besarlo.

- ¿Estas lista para irnos a casa?- preguntó dejando de besarme y tomándome de las manos.

-¿ Vamos a dejar todo este desorden? - dije preocupada

- Tranquila uno de los dependientes me debe un favor- me tranquilizó y comenzó a caminar hacia la salida aun tomado de mi mano.

- ¿Cuál era la pregunta que ibas hacer? - pregunte.

- Esta es nuestra tercera cita. Ya estas convencida de lo bien que estamos juntos.
- Mis dudas se fueron en el momento que abrí los ojos en ese hospital, y lo unico que podía pensar era en ti.

***

Llegamos a casa entre risas. Había sido una buena cita pero yo quería algo más. Llevaba tiempo deseosa de dar el paso definitivo. Y quería que Dylan estuviera igual de seguro que yo.

- Quiero que te quedes hoy.

- Nena, si lo que quieres es dormir, por mi perfecto - paso una de sus manos por el pelo - pero si la invitación viene con segundas intenciones necesito que me lo dejes claro. Porque ahora estoy un poco en shock. - sonreí al ver su cara.

- Quiero que avancemos. Quiero que me veces y me hagas sentir bien. Quiero estar contigo Dylan.

- Vale - hablo y soltó una gran cantidad de aire por la nariz - Necesito que estés segura Junio. Necesito que sepas que estas firmando por el para siempre.

- Eso fue algo que firmé hace mucho tiempo - murmuré.

Dylan no me dejó hablar mucho más. Tomó mi cuerpo en sus brazos y nos transportó a mi habitación. Fuimos desnudandonos despacio. No queríamos perdernos de nada. Y en el momento en que caímos en la cama solo nos separaba una pequeña capa de sudor. Dylan me besó dejándome deseosa y con la respiración agitada. Me dio una vuelta en la cama. Comenzó a besar mi espalda con calma. Hasta llegar a mi trasero el cual apretó a gusto.
Me desespere queriendo tocarlo. Me levanté sentándome que horcajadas encima suyo.

- Te ves sexi, toda despeinada y tomando el control - murmuró besando mis senos.

- Quiero tenerte dentro Dylan - gemi removiendome encima de el. Una de sus manos bajo hasta llegar a mi lugar maa íntimo y sonrio con picardía al sentir mi humedad.

- Estas tan lista para mí - hablo poniéndose un preservativo. Con sus manos guió mis caderas y con una estocada profunda estuvimos unidos.
Ambos gemimos por el impacto y comencé a moverme, mientras Dylan me guiaba con sus manos.

Perdimos el control, y nos convertimos en dos masas sudorosas en busca del orgasmo. Caímos en la cama, y sonrei porque no sentía parte de mi cuerpo.

- ¿ Todo bien por aquí? - pregunto Dylan besando mi nariz de forma tierna. Sonrei y lo besé en los labios con la última energía que quedaba en mi cuerpo.

- Todo perfecto.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro