─¿En serio?

─Sí.

─¿Pero, por qué?

Jungkook hizo una mueca de tristeza.

Namjoon lo miraba desde el sofá, tenía su teléfono en mano, suspiró.

─Son órdenes del manager, Jungkook, se han dado cuenta que te pasas gran parte del día en el celular.

─¿Pero por qué me lo tienen que quitar? Jimin y Tae lo tienen siempre. No se diga de Hobi hyung.

Namjoon suspira cansado por quinta vez en menos de veinte minutos. Sabía que sería difícil hacer que Jungkook dejara su teléfono en paz.

─Son órdenes Jungkook.

Jungkook frunció el entrecejo, se cruzó de brazos y apretó sus labios. Namjoon pensó que vería el enojo de Jungkook en un sin fin de palabras, pero...

─Hyung, me cae mal. Ojalá Seokjin hyung no regrese de ese viaje y no sepa que hacer y que se insendie el sofá por su culpa.

Y sin más, Jungkook se fue a su cuarto, no sin antes dejarle su teléfono. Se fue enfurruñado hacia su habitación, pero ya fuera de la vista de Namjoon sonrió.

Si tiró a su cama y abrió la laptop.

─Quiteme el celular, pero tengo mi laptop.

Y sonrió triunfante. Nadie lo alejaría de sus fics.

─¡Muajajajaja!

Chicas, hay algunas historias que no puedo ponerlas por aquí, ya que tienen prohibido las menciones y esas cosas, y no me quiero meter en problemas.

Tengo algunas que no hay problema pero son pocas. Igual muchas gracias por recomendar historias.