Capítulo seis.
Doyoung se despertó debido a unos ruidos extraños a su lado. Por extraños, se refería claramente, a alguien que parecía un camión en vez de una persona.
Aún así, se movió despacio solamente para encontrarse el rostro de Jung, tan cerca del suyo que hasta llegó a sentir su respiración y mierda, se sonrojó como nunca en su vida.
Batió su propio récord de sonrojos cuando recordó además, todo lo que había pasado anoche.
Jaehyun le había pedido disculpas y aunque podría molestarlo por ser un prejuicioso y también hacer como que no había oído nada sólo para que le pidiese perdón de nuevo, se sentía feliz. Aquella disculpa le alcanzaba y le sobraba.
Volviendo a su estado, aún le dolía un poco la cabeza y se sentía un poco mareado.
— ¿Cómo te sientes? —se escuchó una voz gruesa y rasposa a su lado— Casi te mueres de nuevo.
Mierda, la voz de Jaehyun era realmente una caricia a sus oídos.
— M-Mejor. —respondió— Aunque aún me duele la cabeza y me siento bastante mareado. De seguro es una gripe nada más.
— ¿Quieres que te lleve hasta la guardia? —preguntó, sin moverse de su lugar.
— No, está bien. Algunas pastillas, un té y se me irá. —rió.
— ¿Me dices la hora, por favor? —le preguntó— Mi celular quedó en casa.
Doyoung asintió antes de tomar su celular, debajo de la almohada, y mostrarle la pantalla.
— Mierda. Son las nueve...
¿Quién es ese que está besando en su fondo de pantalla? Pensó, aunque lo estuviera besando en la mejilla.
— ¿Qué tiene eso de malo?
— Debo arreglar la Harley del señor Hall, es para la tarde. —respondió.
— Déjame te acompaño hasta la puerta. —se sentó rápidamente y casi se cae de nuevo si no fuera porque Jaehyun lo sostuvo de los hombros.
— Bien, pero despacio por favor. —rió levemente— Dejé tu ropa sobre la mesa. —avisó.
— Gracias. —sonrió.
Finalmente, se estaba por despedir del castaño cuando este habló de nuevo.
— No sé si recuerdas pero anoche te pedí disculpas. —hizo una mueca— Te lo vuelvo a decir por si lo olvidaste. —se encogió— Lo siento por haber sido grosero y haberme comportado así-
— Está bien, sí lo recuerdo. —rió— Disculpas aceptadas.
— Bien. —le besó la mejilla antes de subirse a su motocicleta— Nos vemos, supongo. —hizo señas con su mano y arrancó, yéndose a toda velocidad.
Doyoung cerró la puerta detrás de él y se rozó la mejilla.
— Ah, mierda, Doyoung. —se sentó contra la puerta— No seas idiota, no te pongas malditamente nervioso.
Se sacudió un poco y golpeó leve sus mejillas antes de irse a la cocina por algo para el dolor de cabeza que no se iba y algo para desayunar porque tenía mucha hambre.
-
Habían pasado dos semanas desde su gripe y Jaehyun pidiéndole disculpas mientras él caía en sus brazos.
Se había recuperado rápido y ahora ya se sentía mejor, aunque sus horarios eran un desastre como siempre. A veces comía y a veces no, lo mismo para sus horas de sueño.
Bien, no era intencional, no podía controlarlo porque ya estaba muy acostumbrado a ser desastroso.
Pero, lo bueno que podía rescatar era que había terminado todos los cálculos para el edificio de Ten así que ahora ya estaba libre, solo tenía que ir a visitar la obra que tenía con Seulgi los sábados y ya quedaba poco para terminar el año, así que se daría el lujo de descansar hasta el siguiente.
Por otra parte, también había estado intercambiando mensajes con Jung.
Y por nada referido a su auto.
¿O sí?
En realidad hablaban de todo un poco, a veces de autos, a veces de motos, de ellos mismos o simplemente de cualquier idiotez momentánea.
También se había hecho cercano con otro de sus vecinos, Andrew, un chico que estaba en secundaria y era muy gracioso porque trataba de coquetear con él a toda costa.
Ya había puesto sus ojos en otra persona, así que Andrew podía ir olvidándose de llegar a segunda base.
Además, aunque estuviera más sólo que un cura, no estaría ni loco con el joven. Tranquilamente podría ser su hermano.
— Oh, así que ahora andas tratando de arrodillarte frente a la misma persona, a la que me dijiste, que le ibas a recomendar un psicólogo... —rió Ten— Eres de otro mundo, mi lindo Dodo.
— ¡No lo juzgues! Si te hace feliz y la tiene grande, adelante. —reconoció la voz de Yukhei.
— Exacto, siempre piensa en grande. —ese fue Taeyong.
— Aunque seas pequeño. —Ten de nuevo.
Doyoung rió, ellos eran muy divertidos y amables, realmente se moría por conocerlos en persona, aunque ya los había visto por videollamada.
— No estoy tratando de arrodillarme frente a él... Es decir, no ahora... —rió— Sólo bromeo. —aclaró— Sucede que se ha portado bien conmigo, aunque aún es más seco que un desierto. Pero creo que sólo es su encantadora personalidad.
— ¿Tu crees?
— Sip, su personalidad es bastante complicada, en realidad. —se encogió de hombros— Es terco, bruto, gruñón y bastante prejuicioso, ya lo sabes...
— ¿Tiene algo bueno? Todo lo que me dijiste es malo, Do...
— De hecho, sí. —rió— Es atento con su trabajo y lo que apasiona. A pesar de todo lo que te dije antes, no dudaría en ayudar a cualquiera que lo necesite. También es respetuoso y demasiado honesto, realmente no teme decir la verdad a nada ni nadie. —relamió sus labios— No es su físico o su lindo rostro lo que llamó mi atención, sino su personalidad. Es algo brusco y grosero a veces, pero de alguna forma para mí está bien así. No le cambiaría nada.
— Wow... Nunca te oí hablar así. —rió— Ni de tu ex.
— Ese no se merece ni ser nombrado. —rodó los ojos.
— Es lindo que tengas esos sentimientos, aunque antes me hayas dicho que lo odiabas.
— Estaba muy enojado y lo sabes... Pero aquel día sus disculpas sonaron realmente sinceras. —se mordió el labio— Incluso me envió un mensaje después para decirme que el puente estaba lindo.
— Es imbécil pero también es adorable. Creo que lo apruebo.
— Aún así me siento culpable...
— ¿Por qué?
— Siento que voy... ¿Rápido? —se rascó la nuca— No lo sé, pero siento que mis sentimientos están muy apresurados, apenas llevamos algo así como un mes de conocernos, sino es menos.
— Eso no está mal y lo sabes. Los gustos, sentimientos y relaciones no siempre son lo que la sociedad espera. Además, ya sabes perfecto que hay amores más intensos y otros más leves, y ambos están bien siempre y cuando no sean enfermizos o perjudiciales para nosotros. —rió— Tan sólo míranos a nosotros. La sociedad piensa que somos unos ratos de mierda, pero es porque no nos entienden y están asustados de lo nuevo.
— Lo sé... Pero-
— Vamos, Doyoung. Tú eres quien siempre nos dice que no reprimamos lo que somos y lo que queremos ser u ofrecer... —lo alentó— Si quieres salir con Jaehyun un mes y que sea lo más intenso de tu vida, hazlo, porque es tuya, los demás pueden joderse.
— Siempre es un placer hablar contigo. —se limpió una lágrima.
Su anterior relación había sido caótica y había salido bastante mal de ello, por lo que a veces se le olvidaba que no estaba mal querer a alguien.
— En fin, ya no llores. Sé que estás como un niño pequeño hecho bolita en el sofá. —atinó a todo— Mejor hablemos de nuestra linda Gigi que salió de su enorme clóset.
— Oh my god, ¡sí! ¡finalmente lo hizo! —se aferró a uno de sus cojines— No sabes el gusto que me da haber sido partícipe de ello.
— La hiciste tomar demasiado coraje, realmente lo hiciste.
— Le dijo a sus padres que se jodieran ellos y el imbécil con quien querían emparejarla, además de cortarle al idiota que tenía de novio.
— Por fin dejó de ser un jodido osito cariñosito y se transformó en un oso grizzly. —festejó— Estoy orgulloso.
— Y yo celoso de su pareja, ¡tiene unas curvas de muerte! Incluso Seulgi ya tenía unas curvas preciosas. —jadeó— Yo también quiero...
— Dodo tú ya tienes curvas, estás bien así. —rió— Los chicos también piensan que así luces bien.
— Muero por verlos cuando lleguen de Zelanda.
— Nosotros igual. —rió.
Continuó hablando con Ten animadamente cuando su celular vibró en sus manos.
jaehyun mecánico
en línea
oye
si tienes tiempo y puedws
quieres aocmpañarmw a pasear a gyu
??
17:02
si no quiered no hay prpblema
17:03
estoy aburrido, así que sí.
a qué hora?
17:03
ahpra
17:04
bien, deja me cambio y voy.
17:04
tw pasamos a buscqr
not e preocupws
17:05
bien, nos vemos entonces.
17:06
Doyoung rió, avisándole a Ten que debía cortarle porque tenía que ir a pagar unas boletas.
Conocía bien al desgraciado y sabía que si le decía que Jaehyun iba a pasar a buscarlo, haría una infinidad de chistes sexuales además de llamarlo simplemente para molestarlo.
Ya después le diría.
Mientras tanto, se cambiaría el pijama y esperaría a Jung.
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