Capitulo 3: La espada sagrada aparece
Issei: -suspira de tranquilidad al saber que no estaría en problemas- Menos mal -sacando el cubo- Supongo que nos veremos en otro momento.
Asta: Así es -se despedía con un apretón de manos-.
Issei correspondía aquel apretón de manos y este tocaría de vuelta el cubo y regresa de nuevo a su casa como si nunca se hubiera ido.
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Ya había pasado unas horas desde que nuestro protagonista regreso de entrenar con Asta en la base de los Umbras, entrando en casa sin hacer ruido alguno y volver a la cama, mientras que Rias estaba abrazando a una almohada de forma tierna, hablando en sueños:
Rias: Issei...
Issei: Que tierna -pensaba, mientras se movía para ser el que recibe el abrazo- Te amo -le da un beso en la frente y este se vuelve a dormir.
//A la mañana siguiente//
Los primeros rayos de sol entraba por la ventana de nuestro protagonista, dándole en la cara, mientras muestra cara de molestia, empieza a bostezar:
Issei: Un nuevo día empieza hoy -intentando levantarse, pero notaba su cuerpo pesado- Que raro... Se supone que al regresar de la base, mi cuerpo estaría como si no hubiera pasado nada... Entonces, ¿por qué siento mi cuerpo...? -no termino de hablar, porque vio algo, que le hizo sonrojar mucho-.
Podíamos ver a Rias, totalmente desnuda, ya que durmió así porque no le gusta dormir con ropa, sobre el pecho de nuestro castaño, durmiendo de forma tierna y dulce, apegándose más al protagonista, haciendo que sus enormes pechos se peguen mas al cuerpo trabajado del castaño, mientras Rias balbuceaba en sueños.
Issei: Rias... Rias, despierta. Ya es de día -empezó a acariciar su cabello carmesí de forma suave y delicada, mientras que Rias, poco a poco, empieza a despertar-.
Rias: -nuestra amada y querida pelirroja waifu empezaría a despertar, frotando sus ojos, hasta ver el rostro de su querido novio castaño- Buenos días, Issei~
Issei: Aún no me creo que esto sea real -acariciando su cabello- Pero cada vez que te veo, se que es real.
Rias: -esta le empezaría abrazar con cariño, apegándose más a nuestro protagonista- Pues es muy real... Mi futuro esposo
Issei: -este se ríe un poco- Es verdad que estamos comprometidos. Y tus padres y hermano me aceptaron muy bien.
Rias: ¿Verdad? -se acercaría a la frente de nuestro protagonista y de da un pequeño beso en la frente- Y ahora estamos juntos, pero hay algo que me ha preocupado bastante.
Issei: ¿Y de qué se trata?
Rias: ¿Dónde has conseguido todo ese poder en tan solo 10 días?
Issei: Tranquila, mi princesa carmesí -le da un pequeño beso en los labios- Todo a su tiempo.
Rias: Esta bien, confío en ti -sonriendo y se apega más a nuestro castaño de forma coqueta- ¿Por qué no nos divertimos un poco antes?
Issei: ¿Acaso me estas provocando? -sonriendo-.
Ambos se miraban a los ojos y sus rostros empezaron a acercase hasta dar un tierno beso en los labios, hasta al punto que empezó ser un beso con lengua, mientras ambos disfrutaban del otro, acariciando sus cuerpos con sus manos. Pero como siempre, siempre hay alguien que interrumpe la diversión.
*Knock, Knock*
Izumi: Nii-chan, ¿estás despierto? El desayuno está listo -hablando a través de la puerta-.
Issei: Si, onee-sama. Ya estoy despierto. Dame un momento
Rias: Si, Izumi. Danos tiempo a cambiarnos -hablando, causando que el castaño sintiera escalofríos-.
Izumi: ¡¿Rias-boucho?!
Cuando Izumi escucho la voz de la Gremory, sin pensarlo 2 veces, uso algunos aumentos de la Boosted Gear, y la golpeo, causando que tire la puerta de la habitación de su hermano, puedo ver algo que la hizo sonrojar mucho: ver su presidenta, ahora cuñada, desnuda, encima de su hermano mayor, causando que se ve una posición muy comprometedora.
Issei: Bu-Buenos días, Izumi onee-sama -con una sonrisa nerviosa-.
Rias: Buenos días, Izumi -sonriendo-.
Izumi: -totalmente sonrojada y avergonzada al ver esta escena, que agarra la puerta y la coloca en su sitio, como si no hubiera pasado nada- ¡L-LAMENTO LA INTERRUPCIÓN! -saliendo de allí, totalmente sonrojada-
Issei: Menuda manera de empezar el día -suspirando-.
//Comedor//
Todos los miembros de la casa ya estaban desayunando, disfrutando de sus momentos en familia exceptuando por unas cosas: una Izumi muy sonrojada por la escena que vio antes, un Issei con una sonrisa nerviosa, una Asia feliz, una Rias dándole de comer a su futuro esposo; y sus padres con una sonrisa de felicidad y con lágrimas en los ojos.
Gorou: Mi hijo se convirtió en hombre. Estoy tan feliz -llorando de forma cómica-.
Issei: Oto-san, para, por favor. Me avergüenzas.
Miki: Es nuestro deber como padres. Aunque es algo temprano para darnos nietos -riéndose en bajo-.
Izumi: ¡Okaa-san! -muy roja de vergüenza- ¡Si sigues así, la imagen que vi va ha regresar!
Todos empezaban a reírse un poco. Esto era pasar tiempo en familia, hasta que la pelirroja habló:
Rias: Oto-san, okaa-san... Me gustaría pediros un favor.
Miki: Claro. ¿Qué es lo que necesitas?
Rias: Verás, van a limpiar el salón del club, y por lo tanto quería pediros si podríamos hacer la reunión aquí.
Gorou: Claro, Rias. Podéis hacer la reunión si queréis -sonriendo, pero la madre de los Hyodo... estaba poniendo una sonrisa tétrica-.
Issei/Izumi: Onee-san/Nii-chan... Si me estas escuchando a través de la mente... Tengo un mal presentimiento sobre la sonrisa de Okaa-san -pensando, mirándose entre los hermanos, muy preocupados-.
//Academia Kuoh//
Todos los alumnos de la academia estaban viendo una escena bastante única: podían ver a Issei Hyodo, uno de los mejores alumnos de la academia, siendo abrazado del brazo por una de las Onee-samas de la academia: Rias Gremory, siguiéndoles detrás estaban Asia e Izumi, bastante felices, aunque la segunda ya estaba algo mas relajada, causando que todos murmuren cosas:
Alumno 1: ¿Por qué Rias-sama esta abrazando a Hyodo?
Alumno 2: ¿Como se atreve estar cerca de Rias-sama?
Alumna 1: Kyaaaa, se ven tan tiernos.
Alumna 2: Aunque me da un poco de envidia.
Y siguieron así hasta que llegaron a la entrada principal, donde nuestra pelirroja favorita miraría al castaño, haciendo que todos miren.
Rias: Bueno, ya me voy a clases. Nos vemos en casa... D-A-R-L-I-N-G~ -dando un pequeño beso leve en los labios de nuestra protagonista, haciendo que todo el alumnado abran la boca hasta el suelo, y con los ojos en blanco-.
Issei: Si, no vemos en casa, princesa mía -correspondiendo el beso para luego ver como su amada se marchaba a clase- Asia, onee-sama, también nos vamos -estas asiente y se dirigen a clase-.
Alumnos: ¡¿QUÉ DEMONIOS ESTA PASANDO AQUÍ?! -gritando como si no hubiera un mañana-.
//Aula de Issei: horas después//
Nuestro castaño, estaba sentado en su sitio, recogiendo sus cosas tras un día intenso de clases, mientras recibía las miradas de sus compañeros, aun incrédulos de lo que vieron está mañana.
Issei: Y ahora para casa para hacer la reunión. Solo espero que okaa-san no haga lo que creo que va hacer.
???: Vaya, vaya... No sabía que estabas en una relación sentimental con Rias, Issei -el castaño giraría su cabeza, y podemos ver a una chica de cabello castaño con coletas, ojos dorados y llevaba gafas circulares de color rosa-.
Issei: Ah, hola Aika -conocemos ya la identidad de las chica- Pues es verdad. ¿Vas a opinar algo como hicieron todos?
Aika: No, no, no... Simplemente me alegro mucho. La verdad es que se notaba a kilómetros que la amas.
Issei: ¿De verdad era tan ciego? -antes de que la castaña hablara, se adelantaron 2 chicos: uno es con una apariencia algo deforme por la parte de las orejas, pelo corto de una tonalidad azul grisácea y unas cejas caídas gruesas: Matsuda; y el otro chico: de cabello castaño oscuro hasta los hombros y cejas negras delgadas, y usa anteojos cuadrados sin montura que casi siempre están resplandecientes, de estatura promedio y una constitución ligeramente atlética: Motohama-.
Matsuda: Pues si. Estabas más ciego que Rompetechos -riéndose un poco-
[NOTA: Rompetechos es una serie de historietas española creada por Francisco Ibáñez en 1964, donde su personaje tiene muy mala vista, por si no pilláis el chiste]
Issei: Ja, ja, ja, ja -riéndose de forma sarcástica- Muy gracioso.
Motohama: Si, somo graciosos -hablando de forma sarcástica- Pero en serio, me alegro por ti y Rias Onee-sama.
Issei: Gracias de verdad. A pesar de que sois muy, pero muy pervertidos -señalando a los dos chicos- Habéis sido mis mejores amigos desde primaria, al igual que tu Aika.
Mat/Mot/Aik: Igualmente -sonriendo-.
Izumi: Vamos, nii-san. Debemos volver a casa para la reunión del club.
Aika: ¿Reunión del club?
Issei: Así es. Van a limpiar el viejo edificio y Rias le pidió a mis padres si podíamos hacer la reunión en casa.
Matsuda: ¿Y por qué le tendría que pedir permiso?
Asia: Porque ella vive con nosotros -la ex-monja sonreía de forma tierna, soltando la sorpresa-.
Motohama: Es broma, ¿verdad? -los tres no hablaban, causando que abriera los ojos como platos- No jodas...
Aika: Vaya, vaya.. Parece que haces las cosas rápidas, ¿eh, Issei? -dándole codazos en las costillas-.
Issei: Ya, ya... Ya vale -deteniendo los codazos- Pues si, vivimos juntos.
Mat/Mot/Aik: La debes querer mucho -riéndose-.
Issei: Quererla es quedarse corto... La amo, y no nadie lo va cambiar. Nos vemos mañana -retirándose de la aula, junto a Asia y Izumi-.
Aika: Increíble... Si antes Issei era la personificación de la alegría, estar con Rias onee-sama hará este lugar un valle de felicidad.
Mat/Mot: Concuerdo -hablaron a la vez-.
//Casa de Issei//
Al llegar a la casa de nuestro protagonista, empezó una reunión sobre los resultados de los contratos con los clientes que habían solicitado los servicios de nuestro séquito de demonios favorito. Hasta que su madre entro:
Miki: Hola, chicos. Os traigo té verde y galletas -ofreciendo a los miembros de club-.
Izumi: Muchas gracias, okaa-sama -sonriendo-.
Miki: Y también traigo una sorpresa -sonriendo de forma tétrica, sacando un libro, haciendo que los hermanos Hyodo se pongan azules-.
Izumi/Issei: ¡OKAA-SAN, NO LO HAGAS!
Era muy tarde. Durante unos minutos, los miembros del club, exceptuando a los Hyodo, estaban conociendo el pasado vergonzoso de ellos gracias al "Álbum de recuerdos" que ha traído su madre.
Izumi: Que vergüenza, de verdad -su rostro estaba rojo de la vergüenza que estaba pasando-.
Issei: Sabía que la sonrisa de Okaa-san por la mañana me daba muy mala espina -suspirando, mientras todos ven sus recuerdos, hasta que miro a Kiba, y vio que tenía un semblante serio- Kiba, ¿ocurre algo?
Kiba: Issei-kun, ¿te acuerdas de esta foto?
Podíamos ver a dos chicos, que eran un chico de cabello anaranjado y a un Issei chikito.
Izumi: Espera, ¿ese no era nuestro vecino cuando éramos niños?
Issei: Si, Izumi. No pensé ver otra vez esta foto -riéndose un poco-.
Kiba: ¿Y se acuerdan de esto? -señalando la espada de la foto-.
Issei: La verdad es que no. Fue hace mucho tiempo -frotándose la cabeza-.
Kiba: Ese tipo de cosas suceden, eh. Para encontrarla en un lugar inesperado.
//Días después//
Después de la reunión, empezó el Torneo de Pelotas, donde todos los clubs de la Academia Kuoh, participan. Todo iba muy bien, pero Issei y Izumi estaban algo preocupados por Kiba. Desde que vio la foto, estaba muy distante y más serio que de costumbre.
Issei: Hmmmm -pensativo-
???: {¿Ocurre algo, Issei?} -hablaba en la mente de nuestro protagonista un hombre bastante alto, superando el promedio japonés, de piel clara y bien fornido, de cabello oscuro, fuerte mandíbula, cejas marcadas y ojos claros, mientras vestía gorra ornamentada, desgarrada por detrás mezclándose con su cabello, y suele llevar un abrigo largo que llega hasta la mitad de la pantorrilla, con unas cadenas añadidas; y detrás de él, un hombre similar al que habla, pero este flotaba y era de color morado, y sobre todo, era musculoso. El era uno de sus maestros, Jotaro Kujo y su Stand: Star Platinum-.
Issei: Maestro Jotaro, no es nada. Es que me preocupa algo mi compañero Kiba. Desde hace días, ha estada muy raro.
Jotaro: {¿Y cual crees que puede ser la causa?}.
Issei: La verdad es que no lo sé -este miraría al cielo- Pero intentaré hablar con el. Después de todo, somos amigos.
Jotaro: {Me alegro mucho que te preocupes por tu amigo} -este sonreía, mientras que su Stan, levantaba su pulgar-.
Issei: Jejeje, gracias.
Izumi: Nii-chan, ¿a quien le estas dando las gracias? -preguntaba, curiosa-.
Issei: ¿Eh? -se ponía nervioso, inventando una excusa- L-Le doy gracias a la vida por lo maravillosa que es.
Izumi: -mirando fijamente a su hermano de forma acusadora, mientras este desviaba la mirada, silbando- Esta bien, te creo.
Issei: Gracias por creerme -sonriendo y entonces nota como le cae unas gotas de lluvia- Va empezar a llover. ¿Sabes lo que significa?
Izumi: Si -sonriendo-.
Issei/Izumi: ¡A CORRER! -empezarían a correr, y durante la carrera, este empezaría a llover-.
//Al otro lado de la ciudad//
Ya estaba lloviendo bastante, y podíamos ver un rubio con un lunar en su rostro, completamente serio, mientras este se mojaba por la lluvia. Pero al momento de continuar, noto una presencia extraña y saco una de sus espada de su Sacred Gear y este se protegió.
???: Pero bueno... Ha pasado mucho tiempo, demonio de mierda -hablaba Un joven de pelo corto blanco y ojos rojos, mientras vestía ropas de sacerdote, mostrando una sonrisa psicópata-
Kiba: Freed Sellzen -mirando al ahora conocido enemigo, mientras empuñaba su espada-.
Freed: Aún me recuerdas, que felicidad -girando como una peonza- Pero seguro que... No recuerdas que tenía esta espada.
Kiba: Esa espada es... -al ver esa espada, empieza a temblar y empieza recordad cosas de su pasado- Excalibur.
Freed: ¡Así es! -gritando como un psicópata- A ver cual es la espada más fuerte: tu estúpida espada demoníaca o mi maravillosa Excalibur -este desaparece para aparecer detrás de Kiba, pero este lo bloquea a tiempo-.
Kiba: Es rápido. Antes no era así -pensaba-.
Freed: ¿Qué ocurre, demonio de mierda? ¿Acaso soy demasiado rápido para ti? -seguía dando golpes con su espada, y Kiba las bloqueaba a duras penas-.
Kiba: Maldición, no se si podré aguantar más -seguía bloqueando, mientras pasaba por su pensamiento-.
Freed: Muere -antes de dar el último golpe, un círculo mágico aparece en su oreja, para luego guardar la Excalibur- Te has salvado. ¡Nos vemos! -lanzando una bomba de luz, haciendo que Kiba se cubra sus ojos para luego vea que Freed ya no esta-.
Kiba: Chicos... -este empieza a recordar a niños pequeños, diciendo que huya- Os vengaré.
//De regreso con los hermanos//
Izumi: Maldición, sabía que teníamos que traer los paraguas, nii-chan.
Issei: Si, si. Tenías razón -suspirando, mientras se cubría con la lluvia, hasta que siente un hormigueo en su espalda- Izumi... ¿Lo has sentido?
Izumi: Si. Es un poder sagrado muy grande. Y viene de... ¡NUESTRA CASA! -empieza a correr-.
Issei: Izumi -esta la empieza a seguir- Maldición, si esto se pone peligroso, tendré que revelar mis poderes antes de tiempo -pensando, mientras corría detrás de su hermana-.
Izumi: ¡Mamá! -abriendo la puerta de un golpe, y escucha risas en el salón y entra-.
Miki: ¿Qué ocurre, hija? -mirando, algo preocupada, mientras que en otro sofa se puede ver a dos chicas: una hermosa joven de de ojos violetas, de pelo castaño largo que suele estar atado en dos colas, cada una sujeta con una goma azul; y la otra mujer joven de cabello azul hasta la barbilla con una franja teñida de verde en el lado derecho y ojos marrones, vestidas con túnicas, pero al lado de la peliazul había algo muy pesado a su lado, cubierta por vendas-.
Issei: Izumi, ¿estás bien? -entrando corriendo a la casa, encontrándose con el mismo panorama- ¿Qué... ocurre aquí?
???: Issei-kun, Izumi-chan. Ha pasado mucho tiempo -la castaña se levanta, acercándose a los hermanos Hyodo-.
Issei/Izumi: Perdona, pero... ¿Quién eres? -preguntaba los hermanos-.
???: Que malos. ¿Ya no os acordáis de mi? -haciendo un tierno puchero-.
Miki: -agarrando la foto de Issei chikito, y señala al chico castaño de la foto- Es este chico: Irina-chan.
Issei/Izumi: ¡¿Pero qué demonios?! -gritando sorprendidos- ¡¿Pero no eras un chico?
Irina: Jejeje -riéndose un poco- Perdonad si os hice creer que era un chico. Actuaba muy masculina.
Izumi: No pasa nada. Ni siquiera sospeche de que eras una chica.
Issei: -en blanco-.
???: Irina, nos retiramos ahora mismo -se levantaba la chica peliazul, cargando aquella funda, para luego acercarse a nuestro castaño y susurrarle- Dile a tu ama que nos vemos mañana.
Issei: ¿Qué? -fue lo único que respondió-.
Irina: Nos vemos después, Izumi-chan e Issei-kun. Espérame, Xenovia.
Las dos exorcistas salían de la casa de los Hyodo, suspirando que todo se había acabado, al menos por ahora.
//1 hora después//
Issei: Y eso fue lo que paso -comentando lo que ocurrió en casa a Rias y Asia, que la ex-monja estaba comprando, junto a Gorou-.
Rias: Así que esas exorcistas quieren reunirse mañana con nosotros.
Izumi: Buchou... Cuando estábamos cerca de casa, sentimos un enorme poder sagrada, y procedía del brazo de Irina-chan y esa funda. ¿Qué diablos era?
Rias: Eso era la Excalibur.
Issei: ¿Excalibur? -preguntaba- ¿La espada legendaria de la leyenda del Rey Arturo? Pensé que solo era una.
Rias: Así era. Pero parece que en algún momento de la historia, la espada se rompió y ahora esta en fragmentos.
Asia: Pero no entiendo que hacían aquí.
Issei: Rias, ¿te puedo preguntar algo?
Rias: Claro, Issei. ¿De qué se trata?
Issei: Lo de la Excalibur... ¿Está algo relacionado con Kiba? -preguntando serio-.
Izumi: Nii-chan... ¿A qué viene esa pregunta?
Issei: -agarra la foto de cuando era niño y señala la espada- Desde el día que vio esta foto, se a comportado raro.
Rias: Eso es una espada sagrada -declaraba- Pero no es tan fuerte como la Excalibur.
Asia: Buchou... ¿Qué tiene que ver Kiba-san con las espadas sagrada?
Rias: Hace tiempo, la Iglesia creo un proyecto: Proyecto Espada Sagrada.
Issei/Izumi: ¿Proyecto Espada Sagrada?
Asia: Nunca había oído de ese proyecto.
Rias: Era un proyecto secreto. Era para crear a portadores de Excalibur -explicaba- Las espadas sagradas: las últimas armas contra los demonios. Si nosotros, los demonios, tocamos la espada sagrada, entonces vamos a quemarnos a nosotros mismos. Si nos cortamos con ella, entonces seremos eliminados sin dejar rastro. Podría decirse que es el arma definitiva para los que creen en Dios y ven a los demonios como el enemigo.
Izumi: ¿Pero qué tiene que ver Kiba con ese proyecto?
Rias: Kiba formó parte de ese proyecto, junto mas niños de su edad en aquella época, recibiendo tratado artificial para portar la Excalibur.
Issei: ¿Y pudo portar una espada sagrada?
Rias: -negando con la cabeza- Yuuto no pudo adaptarse a la espada sagrada. No sólo Yuuto, pero parece que todos los que recibieron un tratamiento y tampoco pudieron.
Izumi: ¿Y qué les paso? -preguntando, un poco asustada, temiendo lo peor-
Rias: La gente de la Iglesia decidieron ver a los que no pudieron adaptarse a las espadas sagradas como "productos defectuosos" y se deshicieron ellos. Muchos de ellos murieron aquel día -haciendo que Izumi y Asia se tapen la boca de horror- Cuando lo reencarné en demonio, juro venganza hacía ellos, incluso al borde de la muerte.
Issei: Kiba... -se levantaba y miraba al exterior por la ventana- Por eso se comportó así. Después de tanto tiempo, al ver esa foto, sus deseos de venganza regresó.
Izumi: Nii-chan... ¿Qué planeas hacer?
Issei: Voy intentar hablar con Kiba. No puedo hacer que ese odio y rencor lo ciegue, porque si sigue ese camino, podría convertirse en un renegado... O morir a manos de una de esas espadas.
Rias: Espero que mañana aparezca. Ahora a dormir.
Tras esas palabras, cada uno fue a su habitación. Exceptuando a Rias, ya que se estaba desnudando delante de nuestro protagonista porque no puede dormir con ropa, y porque iba a dormir con su novio y prometido.
//Club del ocultimos: Al día siguiente//
Después de las clases, nos encontramos en el club: Rias y Akeno sentadas en un sillón, enfrente de Irina y la conocida anteriormente como Xenovia, mientras que Issei y los demás estaban detrás de Rias y su reina, y el ambiente digamos que era tenso. Y era normal, dos enviadas de la Iglesia, con sus espadas sagradas, estando delante del ellos, era como mandar un cerdo al matadero.
Rias: ¿Y qué necesitan las enviadas de la Iglesia de unos demonios como nosotros?
Irina: Lo que pasa es que recientemente se robaron las espadas sagradas Excalibur que fueron guardadas por la Iglesia Católica, con Sede en el Vaticano, la Iglesia Protestante y la Iglesia Ortodoxa Oriental.
Rias: ¿Robadas?
Xenovia: Así es. La espada sagrada Excalibur se rompió durante la guerra. Pero con magia, ahora se ven así -tomó su arma, que estaba cubierta de tela, y me la reveló, lo que apareció era una espada larga-,
Tras eso, todos los presentes sentimos un escalofrío , como si la propia muerte se hiciera presente ahora mismo.
Xenovia: Este es uno de los siete fragmentos: Excalibur Destruction -mostrando la espada- Esta en posición de la Iglesia Católica.
Irina: Y esta es la mía -mostrando un lazo en su brazo, que paso a convertirse en una katana- Es Excalibur Mimic, propiedad de la Iglesia Protestante y puede cambiar de forma a mi voluntad.
Xenovia: Irina, no digas las habilidades de la espadas.
Irina: Vamos, Xenovia. No creo que se atrevan a tocar las espadas porque son demonios.
Issei: Que directa -pensando, mientras le cae una gota de sudor-.
Este giraría la cabeza, y pudo ver a Kiba, con un rostro serio, apoyado en la pared, mientras miraba a las espadas Excalibur.
Issei: Kiba... Por lo qué mas quieras, no saltes contra ellas -pensando, suplicando que no haga una locura-.
Rias: ¿Y quien fue el responsable del robo de las espadas?
Xenovia: Fueron los ángeles caídos. Para ser exactos, fue Kokabiel: uno de los líderes.
Irina: Se enviaron exorcistas y sacerdotes, pero fueron eliminados.
Xenovia: Y ahora, les pedimos un favor: no quiero que intervengáis en la batalla entre nosotros y los ángeles caídos por las Excaliburs.
Akeno: ¿Nos estas pidiendo que no intervengamos, sabiendo que es nuestro territorio? -sonriendo, mientras se ríe un poco-.
Xenovia: Los altos mandos no se fían de los demonios y los ángeles caídos. Se nos ordenó que: "[Si las espadas sagradas se alejaban del lado de Dios, entonces los demonios estarían felices ¿no?]". Los ángeles caídos también se beneficiarían de ello. Por estas razones, no sería raro para ellos el aliarse. Es por eso que les estamos dando una advertencia. Si forman una alianza con el ángel caído Kokabiel entonces vamos a eliminarlos a todos.
Rias: Sabes que soy la hermana del Rey Demonio, por lo que te puedo prometer que no nos aliaremos con los ángeles caídos.
Xenovia: -este se ríe un poco- Con escuchar eso basta. Tenía que advertirles de que Kokabiel se esconde en esta ciudad, junto con las tres Excaliburs. Si algo llegara a suceder, yo sería odiada por el pelotón en la sede de la Iglesia. Bueno, no vamos a pedir cooperación. Si llegaran a formar una alianza con el lado de Dios temporalmente, entonces afectaría al equilibrio de las tres facciones. Sobre todo si es la hermana menor del Maou.
Issei: ¿Y dime, Irina? ¿Dónde están los otros exorcistas? -empezó hablar el castaño-.
Irina: No solo estamos nosotras, Issei-kun.
Issei: ¡¿Pero qué?! ¡¿Acaso os mandan al matadero contra un líder?! -gritando, golpeando el sofá-.
Rias: Issei, cálmate.
Izumi: No, Buchou. Niin-chan tiene razón. Es un suicidio mandar solo a dos.
Xenovia: Lo que haga la Iglesia no es de vuestra incumbencia. Y ahora nos retiramos -las dos exorcistas se iban a marchar, pero la pelizul se fija en la ex-monja- Acabo de darme cuenta algo. ¿Tu eres Asia Argento?
Asia: S-Si -un poco intimidada-.
Xenovia: Jamás pensé ver a la bruja de la Iglesia en este lugar -causando que Asia se entristezca bastante-.
Irina: ¿Es ella? -señala levemente a Asia- ¿La primera doncella santa? Se le dice que tiene un poder que también puede curar demonios y ángeles caídos, ¿verdad? He oído te enviaron a algún lugar después de ser exiliada, pero nunca pensé que te convirtieras en demonio.
Asia: Yo... no....
Xenovia: Tranquila, no voy a decir a los altos cargos que estas aquí. Solo responde a mi pregunta... ¿Aún crees en Dios?
Irina: ¿Pero que dices, Xenovia? No hay manera de que ella, que se convirtió en un demonio, aún crea en Dios.
Xenovia: No, puedo oler su "creencia" de ella. Puede ser que sea una forma abstracta de decirlo. Pero soy sensible a estas cosas. Hay personas que traicionan las enseñanzas y todavía tienen la culpa en su interior, ya que no pueden olvidar las enseñanzas.
Irina: ¿Es eso cierto? Asia-san, ¿tú todavía crees en Dios aunque te hayas convertido en un demonio?
Asia: No puedo dejarlo de lado. Yo he creído en él durante toda mi vida -lo decía con tono de tristeza-.
Xenovia: ¿Es así? Entonces deberías ser cortada en este mismo instante. Si es ahora, puedo cortarte en el nombre de Dios. Incluso si tienes pecados, nuestro Dios te perdonará -apuntando a la ex-monja con su espada-.
Pero antes de que hicieran algo, una espada hace retroceder a la peliazul: era Issei, pero esta vez tenía una enorme espada negra (Danma) en la mano derecha, y otra más delgada (Shukuma), con un libro flotante delante de nuestro castaño, cubierta por una aura rojiza, mientras miraba a la peliazul con una expresión muy seria y furiosa.
(Imaginaros que es Issei)
Issei: Ni se te ocurra tocarla si no quieres que te corte.
Gremory: Un nuevo poder... -mirando al castaño, mientras se sorprende del nuevo poder del castaño, pero sentían incomodidad por la presencia de esa aura-.
Xenovia: ¿Acaso nos amenazas? Tu, alguien que no tienen poder mágico -mirando al castaño-.
Izumi: -activando la Boosted Gear- ¿Pero que dices? Issei tiene un enorme poder... -no termino de porque Akeno la interrumpió-.
Akeno: No siento magia en Issei-kun -sorprendida-.
Rias: Issei... ¿Qué te ha pasado? -preocupada-.
Issei: Izumi onee-sama... ¿Me ayudarías a luchar contra ellas?
Izumi: Claro que te ayudare. Han insultado y amenazado a Asia. Pero luego tendrás mucho que explicar.
Kiba: Yo también te ayudaré, Issei-kun -hablaba el espadachín rubio-.
Xenovia: ¿Y quien eres?
Kiba: Yo soy tu superior. Aunque yo fui un fracaso.
Issei: Escuchadme vosotras 2 -llamando la atención de las dos exorcistas- No pienso contenerme en nada... porque habéis hecho enfadar a un demonio.
Este empezaría a sonreír y emite por su cuerpo una aura rojiza y negra, haciendo que todos sintieran un poco de miedo, pero... Para las exorcistas, a los ojos de ellas, podían ver una sombra muy tétrica, que traía muerte y destrucción: un verdadero demonio.
(Imaginaros que es Issei)
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Hasta aquí el capitulo de Jump Force. Espero que le deis mucho apoyo y estrellas, y espero que os este gustando las historias que estoy escribiendo.
Otra cosa más: luego os mostrare una sorpresa, que tengo que preparar, hasta entonces tened paciencia.
Nos vemos, mis queridos lectores y hasta otra.
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