Una chica de veintidós años se ve embarazada de forma inesperada, no sabe quien es el padre de su bebé ya que se acuesta con todo chico que le guste, ella no podía estar embarazada, significaría dejar la vida de parranda y diversión que llevaba, piensa en abortar, pero como ve que también habrían riesgos para ella decide continuar con su embarazo, por suerte para ella vive sola y sin compromisos, no se tiene que estar preocupando por sus padres o por lo que dirá el novio.

Al nacer el bebé lo abandona en un barrio pobre, pues sería un estorbo en su vida. Al bebito lo encuentra una señora humilde, pero con un gran corazón, decide adoptar al bebé, puesto que no podía tener hijos. Pasa un año y medio y la señora es asesinada por su marido, un hombre alcohólico y violento, que abandona al pequeño nene en un basural.

Otra señora lo encuentra allí y decide criarlo para que el pequeño niño al cumplir los tres años y medio se lo pida limosna.

Cuando Charlie (Así se llamaba el pequeño) cumple los tres añitos y medio, empieza a pedir limosna por parte de la vieja que lo criaba, le iba muy bien porque causaba mucha lástima en la gente. Éso fué hasta que cumplió los cinco años y empezó a vender chicles y dulces por las calles, rara vez lograba venderlos. Ésa señora se cansó del niño y lo dejó en manos del ex esposo de doña Fidelia, la señora que lo crió hasta el día en que fué asesinada. Éste señor malvado lo enviará a pedir dinero sólo para satisfacer su necesidad de alcoholizarse.

Hasta que un día fatídico el pobre niño muere a los seis años