El día de ayer pasó con normalidad luego de dejar plantadas -literal- a las chicas KIT. No hemos vuelto a cruzar palabra con ninguno de los chicos y lo bueno es que nos tocó la misma materia a los tres.

Al llegar a casa, Ryan decidió ir a la suya y Lili junto a mí nos quedamos charlando con papá nuevamente, Maggie dejó que Greg se quedara con nosotras y fue a disfrutar de un fin de semana con Robert. Al igual que mamá en casa.

Cuando papá se queda en casa por  un fin de semana mamá toma el mismo tiempo para quedarnos todos juntos, algo como un fin de semana en familia, y ya que Alex -el padre de Ryan- también se queda nos juntamos todos, en ocasiones ellos deciden venir a nuestra casa, o, como en este caso, nosotros iremos a la suya.

Ya es hora de ir a la casa de los Wilson, Lili y yo estamos preparando nuestras mochilas para quedarnos allá, porque si, nosotros dormimos en casa de los Wilson cuando queremos al igual que ellos tambien duermen aquí si se les apetece ¿ya he dicho que la amistad entre nuestras familias es complejamente unida? bueno, si no le he hecho ya lo saben.

—¡Hey, Greg! no tomes eso—reprendió Lili al pequeño que intentaba conectar el secador.

El pequeño hizo caso omiso a su hermana y continuó con lo que estaba haciendo. Lili se empezó a acercar con intenciones de quitarle el secador a Greg por lo que se puso alerta y empezó a correr por toda la habitacion con Lili detrás de él. Tomé el puente de mi nariz con cansancio, no sé cuantas veces tengo que decirle a Lili que así no es como tratas a un niño.

—¡Gregory! detente ahora si no quieres que...

—Greg, pequeño. Ven a mi—interrumpí las palabras de la pelinegra antes de que se arrepienta de decir algo que estoy segura Greg podría guardar y mencionar luego. Eso ya nos pasó y fue difícil hacer que Greg dejara de mencionarla.

El pequeño dejó de correr y caminó despacio en mi direccion. Extendí mi mano en señal de que depositara el secador y así lo hizo, sin decir nada pasó a mi lado y tomó asiento en mi cama para volver a jugar con sus carros de juguetes.

Lili suspiró en cansancio por la persecución que acaba de dar y prosiguió con lo que hacía antes de empezar un desastre.

—Aún me pregunto que es lo que haces para tener esa relación con los niños. Yo apenas y puedo hacer que mi hermano me escuche.

—No lo sé, tal vez sea un don—me encogi de hombros y Lili suspiro dramáticamente.

—¡CHICAS! NOS VAMOS —Gritó mi madre desde lo que creo que es el cuarto de estar.

—YA VAJAMOS— gritó Lili de vuelta.

Tomé la manita de Greg junto a mi mochila y empezamos a descender.

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Al llegar a la casa de Ryan no me sorprendió ver a todos esperándonos en la puerta principal para darnos la bienvenida y de paso escuchar los ladridos de un -ya no tan pequeño- husky venir hacia nosotros con emoción.

—Winter—exclamé sonriendo al cachorro que salto a mis brazos. acaricié su hermosa melena negra mientras evitaba a toda costa que no llenara mi cara de baba. Lo deposité en el suelo nuevamente y fue gustoso a los brazos de Lili.

—Tia Rebeca, Tio Alex —me acerqué a ellos para darles un gran abrazo y un beso en la mejilla a cada uno, los había extrañado mucho.

—¡Princesas! —. Ese fue el Tio Alex quien volvió a abrazarme junto a Lili

—¿Como han estado? —Esta vez hablo Tia Rebeca al alejarnos un poco de Alex.

—Bien.

Lili respondió por las dos. Nos continuaron preguntando acerca de como nos ha ido en el instituto mientras nos adentrabamos a la casa. Al entrar lo primero que hicimos fue correr escaleras arriba a la habitacion de Ryan quien nos seguía con un Greg colgando de su espalda muy sonriente y un Winter que no ha dejado de ladrar mientras corremos.

Al llegar a la habitacion nos tiramos dramáticamente en lugares diferentes de esta.

Ryan se lanzó hacia su cama con Greg y winter quien tambien subió a ella, Lili cayo en lleno sobre un sofa en forma de L a un lado del balcón, y como buena amiga que soy,  me arrojé sobre ella en el sofa

—Hay que ir a la piscina —Sugerí acomodandome mejor sobre Lili en el sofa. seguro me quiere matar pero yo simplemente ignoro sus miradas asesinas.

—¿Y si comemos primero? —Preguntó Lili encontrando la manera de no estar completamente aplastada por mi.

—Creo que moriría el día en que escuche a Lili decir que no comerá.

—Estoy de acuerdo —Concorde con Ryan. Esa mujer jamas le decía que no a la comida.

—Tio Ry ¿puedo ir tambien a la piscina?—Esa ternura me derrite cada que puede. Greg está jugando con Winter pero aún así preguntó con esa bocesita de bebe que lo caracteriza.

—Hmm, no lo sé ¿ustedes que piensan?— Ryan tomó asiento y Winter no dudo en subir sobre su regazo para estar cómodo.

—No. tu te quedas a jugar con Winter— Demandó Lili a lo que le di una mala mirada.

Me puse de pie y escuché como Lili suspiraba como si una gran roca se le hubiese quitado de encima, le pegue un manotazo, ella solo río y me lanzo un cojín de los que están junto a ella.

Ignore la inmadurez de Lili y extendi mis brazos de modo en que Greg comprendió y se acercó a mí corriendo, lo tome en mis brazos a pesar de pesar un buen poquito y estar grandecito. Lo llené de besos en la cara y cuando dejé de hacerlo él tomó mi rostro con sus pequeñas manos y empezó a llenar mi cara de besos, eso me hizo sonreír.

—Claro que irás. Pero primero a comer ¿de acuerdo? —El pequeño asintió y lo volví a poner sobre sus pies.

—¡Winter, ven! —Le llamó y empezó a correr fuera de la habitacion a lo que el cachorro corrió en su direccion.

Suspiré y me lancé sobre la cama de Ryan y dejé mi cabeza caer sobre su regazo, no pasó mucho tiempo cuando Lili se habia lanzado sobre mi en donde estaba.

—Debes dejar de consentirlo Emma—Lili rompió el silencio que había reinado entre nosotros desde hace unos minutos.

—Y ustedes deben dejar de negarle todo—Defendí, aunque por un lado estaba de acuerdo con ella, pero su ternura era suficiente para no negar le nada —Y dejar de aplastarme Li, pesas demás.

—Es karma querida Emma.

—Karma te voy a enseñar yo a ti después de que rebajes unos kilos. Me aplastas hasta con la cabeza mujer. Ryan, apóyame—Casi suplique por la ayuda del castaño, pero como siempre sus comentarios que no ayudan a nadie.

—Estas loca.

—No Ryan. Estamos locos —Le corregí con una sonrisa después de darle un fuerte manotazo como pude.

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La tarde se torna mas agradable y todos estamos en el patio trasero de la casa de los Wilson entreteniendonos en un momento en famila. Aunque no tengamos los mismo lazos de sangre, lo somos por la amistad que existe entre todos nosotros. De hecho, es agradable disfrutar de las personas que te hacen llorar, reír como si no hubiese un mañana, que te hagan enojar y a la vez te hagan tan feliz. Yo, disfruto de todos ellos, observando desde un lado de la picsina con amor a los Wilson que llamo tíos junto a mis padres reír de algo que ha dicho Alex. Al pequeño Gregory jugar con Winter por todo el lugar ya que él es el unico pequeño de la casa y ama jugar con aquella bola de pelos.

Todos con diferentes bebidas en sus manos excluyendo a Greg.

Al estar tan distraída casi caigo de bruces al sentir una pequeña cantidad de agua salpicarme tomandome por sopresa. Miro al responsable de mi casi infarto con mala cara, y es nada más ni nada menos que Ryan, ruedo los ojos sacudiendo mis manos sin despegar mis ojos del pequetrefe-palabra que no se si existe- de Ryan, debí imaginarlo.

Está a mi izquierda dentro de la pisina apoyando sus codos del borde a mi lado.

—¿En que pensabas Enana? ¿que ya te enamoraste de Izan?

Jugó con sus cejas en coro de arriba hacia abajo en modo coqueto por lo que recibió un golpe en su cabeza de mi parte que disfrute darle por idiota.

—¡Serás idiota! estaba admirando lo hermoso que...

—¿Que son los ojos de Izan? —Cortó mi frase y se alejó un poco de mi, creo que en mis ojos está más que claro mi deseo por atravesarle el cerebro para darle un manotazo que lo reinicie.

—¿Quieres dejarme...? —Y nuevamente el idiota vuelve a cortar mi frase para darle su final deseado.

—¿Dejarte en paz para que en tu mente lo sigas imaginando? claro Emma, será un placer.

Dicho esto, se acerca a la orilla, se impulsa con sus manos apoyadas en el borde de la pisina y de un salto sale de ella como si nada hubiese pasado y mi pasciencia jamas se hubiese agotado. Porque si, Ryan puede ser un poco mas irritable que Lili cuando se lo propone, lo que me recuerda ¿donde esta Lili? miro en todas direcciones buscando una cabellera negra, al pasar unos minutos sin señal de ella vuelvo mi vista a mis pies dentro del agua y esta vez sí pienso en Izan.

Pienso en aquella ultima vez que lo vi, aquella vez en la que disfruté pasar por los pasillos de la cafeteria junto a Lili y Ryan como si fuesemos los reyes del lugar luego de dejar a las chicas K.I.T sin intenciones de que siquiera respondieran el mensaje para nada moderado y completamente directo de Lili White, simplemente, esa chica está loca, y tal vez sea por eso que Ryan y yo la amemos tanto, por algo la llamamos "bruja" ¿no?

Mis pensamientos son nuevamente interrumpidos por un pequeño-pero potente-golpe en la espalda que esta vez si me hace caer de bruces en la piscina sin ningun aviso, el impacto se sintió al momento de caer y al sumergirme a la superficie pude escuchar la risa de Ryan quien terminó por atragantarse con lo que sea que estuvo bebiendo, a pesar de haber resivido un gran golpe sonreí.

Simple karma querido Ryan.

Mientras el no dejaba de toser como loco por estar intentando dejar de reírse y no poder porque su risa lo traicionaba y volvía a toser, salí de la pisina y me acerque con intención de ayudarlo.

—Déjame ayudarte hermanote —Le doy golpecitos en la espalda un poco suaves que van aumentando de presión poco a poco hasta que él decide alejarse de mi, cosa que para su mala suerte, se alejó en direccion equivocada y al dar un paso en falso cayo de culo a la pisina.
Casi grite al verlo emergir a la superficie, y con no muy buenas intenciones.

Se acercó a mi y me abrazo fuertemente. sonreí y lo abrace.

—Buena jugada Enana—Dijo aún sin soltarme —¿Le damos un chapuzón a Lili?

Sonrió con maldad fingida a lo que sonreí por igual —:Sabes que si.

Corrimos en direccion a Lili que estaba a unos cuantos metros de nosotros, la tomamos entre los dos y corrimos de vuelta a la piscina, sin más  nos lanzamos con ella en brazos.

En hacer eso había algo seguro con la señorita White: va a matarnos.

Al salir a la superficie los tres, Ryan y yo no perdimos tiempo y salimos corriendo de la pisina, nos escondimos detras de nuestros padres en busca de proteccion. y si que quisimos correr al ver a Lili con una escoba en manos ¿de donde habrá sacado una? bueno, lo seguro es que estamos muertos.

Empezamos una pequeña recorrida del patio rodeando a nuestros padres quienes depositaron sus bebidas a un lado para empezar a rodearnos a nosotros en un intento de atraparnos, por lo que terminamos huyendo todos de todos y con tantas risas que terminamos por abrazarnos todos con mucho amor olvidando completamente las tremendas ganas de mutilarnos de hace un momento.

Y claro que deben de estar preguntandose un “¿que carajos se supone que acaba de pasar?” o tal vez un “¿pero que coño...?” y ya ven, así es.

¿Ya les mencione que nuestra amistad es un poco para nada normal? bueno, si no lo hice se los dejo saber ahí. Es como decir que estar algo tostados de cerebro es lo que mejor tenemos en comun, y eso es lo que se necesita en una amistad: que nuestras diferencias sean tan iguales a su manera que nos hagan cuestionar si merecen el nombre "diferencias" que ser nosotros mismos aún si tu cerebro tiene partes tostadas como las de nosotros encuentres a personas que te sepan enteder a pesar de tener trastornos diferentes a ti. Yo encontré eso, con ellos. Son tan locos como yo y tan cuerdos como ellos, y tal vez por eso nos hemos llevado tan bien, porque somos tan diferentes que terminamos por ser completamente iguales a la vez.

Nota de la autora: lloraré y no será por ustedes, jajaja soo.

Hola hermosuras, nos volvemos a encontrar. No suelo decir muchas cosas o tener algo que decir con exactitud, así que, espero y les haya gustado los capítulos escritos y los que faltan por escribir.

Y como se me van acabado las palabras hermosuras no leeremos luego.

Sin más que decir, me despido.

Los quiere, Stefany 🌹