Diferente, esa era la palabra que lograba definirme, no sentía que encajaba en este lugar, pero de todas formas hacia lo posible por hacerlo. Encajar, algo tan complicado cuando todos ya se conocen. Sacar tema de conversación nunca había sido tan difícil, pero es que cuando todos ya se conocen lo único que puedes hacer es escuchar y esperar que alguien se fije en ti y te preste atención. Pero eso no sucede, era tímida, reservada y entre tantas otras cosas que dificultaban el relacionarme con otras personas. Sin embargo, me preguntaba qué demonios hacía aquí.