ADVERTENCIA: Este libro está hecho con sumo cuidado de tratar el tema del omegaverse y el destino en su juego de unir personas desde su nacimiento, se pide que se abstengan de malos comentarios a las escritoras y la editorial, todo comentario fuera de lugar y sacando de sitio lo que ha sido escrito será borrado. 

Esᴄʀɪᴛᴏ ᴘᴏʀ:Benigbe_Castillo

Sʜɪᴘ/Cᴏᴜᴘʟᴇ: Anyone

Descuidado y agotado, sudando en dolor por una semana donde la naturaleza hizo una mala jugada para un joven cachorro que solo deseaba continuar en una tranquila vida con juegos y aventuras en cada salida a los parques con sus estimados amigos. El destino había sido cruel, el tiempo se burlaba de los instintos florecientes de un niño pequeño al que le esperaba un futuro difícil por su prematura presentación, simplemente Park JiMin, un omega de lobo, no podría sentirse más incómodo con ver nacer a su omega interior cuando su pubertad apenas iría a comenzar en tiempos humanos comunes.

Rodeado de olores familiares, siendo cuidado con sumo cuidado por una madre alfa y su padre omega que sollozaban en silencio por un destino incierto a su joven cachorro. Supresores, citas médicas y un organismo tratando de adaptarse a un radical cambio temprano; feromonas flotando por todas partes, líquidos y lloriqueos que se fueron aplacando mientras los días transcurrían a una velocidad impresionante.

La escuela parecía ser un destino difícil, el volver a clases donde la mayor parte de sus profesores eran sorpresivamente alfas, incluso las enfermeras pertenecían a dicha casta le provocaba un intenso temor por la seguridad de un débil y diminuto omega que apenas estaba comprendiendo la forma en que el mundo de instintos funcionaba y la manera en que este podría ser tan peligrosa para su integridad. No, sus padres se mostraron inseguros sobre lo que podrían hacer ahora, tentándose a encerrar al dulce niño hasta que pudiera defenderse físicamente en casos extremos, ¿realmente podría esto beneficiar a su pequeño? Tal vez solo estaban exagerando y la profesionalidad de los alfas en esa escuela, además de su edad, serían un beneficio en su protección completa.

Nerviosos, un viaje en auto que se alargaba por la ventana donde los reflejos y brillos destellaban a velocidades no suficientemente procesables para un niño. Los ojos distraídos del pequeño que viajaban a un pasado y futuro continuos, pasando los árboles y semáforos mientras sus deditos rascaban por instinto aquél cinturón de seguridad y un sentimiento pesado en su pecho le quitaba el aire lentamente hasta los pequeños altos necesarios en el camino.

Sonrisas, recuerdos y juegos que no se detenían en ningún momento antes de verse envuelto en el aroma de dulces y acidez que ahora cargaba; necesitaba sentir algo más, el joven lobo que se acomodaba cómodamente en su interior a la espera de una llegada divina o de un ser que le complementase por la diosa luna. El corazón de un niño que late al ritmo de un lobo adulto, deseoso de vivir y proteger al frágil cuerpo físico que poseía su "yo" humano, el alma joven que ha sido unida por el universo y ahora se reía de la diversión futura.

La gran academia de artes de Seúl, diferentes grados y niveles separados y sonrisas por todas partes. El pequeño lobo había bajado del auto en cuanto su madre le trajo de regreso a la realidad, observando a los demás niños que corrían emocionados por ver al nuevo profesor que se rumoreaba iba a llegar... Esta situación no hizo más que erizarle la piel, apretando los tirantes de su mochila y jalando las muñecas de las mangas del sueter escolar para poder ocultarse en su propio mundo.

Algo no estaba bien, un cosquilleo singular que rodeaba a su pecho y alma, era el presentimiento de algo más allá de su inocente comprensión, un llamado a su pequeño omega que olfateaba inquieto y curioso por descubrir qué eran aquellos 6 bellos y confortantes aromas llamándolo de forma inconsciente. Este era el auténtico destino.

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02.10.21