KUROKO...

No puedo creer que en verdad lo logran, un día para organizar una boda en una locura.

Estuve descansando casi toda la mañana después de una noche tan movida con Daiki... era raro decirle de esa forma pero ahora es mi alpha y quizá seria lo mejor.

Despues de las 12 no ha habido momento que me dejen solo, mi madre y mi abuela entraron abruptamente a mi cuarto donde ya no estaba Daiki y sin darme razones me sacaron de la cama para prepararme para algo.

Me bañaron y poco después entro gente que reconocía del pueblo a arreglarme, tenían dos atuendos en la cama aunque ambos eran blancos y no podía creer lo que veía hasta que llego Kise totalmente exaltado.

-Tenemos que movernos... ya están todos listos para la ceremonia que se hará en el pueblo- anuncio Kise que veía con un traje antiguo amarillo claro con adornos dorados y sus orejas al aire.

-Tarde?-pregunte desconcertado.

-Si... tarde para tu boda...

-Ah?!

No me dieron tiempo de reaccionar cuando mi madre ya me ponía uno de los dos trajes de la cama, el que parecía para ceremonia tradicional.

-Esto será solo para el ritual de emparejamiento que tenemos en el pueblo... en la noche será la fiesta privada- me trataba de calmar mi abuela pero solo me alteró mas.

-Tienes que tener tu media forma para cuando salgamos...-ordeno mi madre cuando me empujo sobre Kise.

-Vamos...- me tomo de la mano y me jalo.

Llegamos al centro del pueblo y cada vez que nos acercamos al lugar se veían los adornos de tulipanes y enredaderas con plantas blancas, antes de llegar nos detuvimos donde estaban lo chicos.

-Sucede algo?- pregunte algo nervioso al verlos tan callados.

-Solo queríamos ser los primeros en felicitarte... -me dijo Akashi.

-Y darte unos regalos...-aseguro Midorima.

Me dieron un ramo, un pequeño brazalete, y una horquilla, al final Kise me puso su brazo para tomarlo y supuse que el me entregaría en el altar... no me oponía... seria incomodo que mi padre fuera quien lo hiciera después de todo lo que paso, aun así esperaba que estuviera entre la gente viendo.

Por fin llegamos al lugar y había un camino lleno de pétalos blancos en medio de todo aquello, ya tenia mi parte animal fuera al igual que Kise, había mucha gente en el lugar volteando a verme en cuanto la música sonó... y cuando eso paso por fin voltee hacia donde estaba Aomine Daiki...

Vestía de ropas obscuras con blanco, igual con un traje antiguo, su parte animal se notaba y tenia un aura tan alegre que no pude evitar sonreir de igual manera.

Empezamos a avanzar y me tome fuerte de Kise, no podía creer que esto en realidad pasara, veia de reojo a la gente y vi a mi familia, a los chicos y también a Kagami... lastima que no dejaran entras a humanos al pueblo... seria genial si los de Serin también estuvieran aquí.

Cuando Kise entrego mi mano a Daiki tembleque un poco por la sensación de que por fin lo nuestro seria publico... después de tantos problemas lo habíamos logrado.

Ninguno de los dos decía nada pero prestabamos totalmente atención al chamán que nos estaba uniendo a te el pueblo y cuando por fin pregunto nuestros votos...

-En algún punto me dí cuenta de que cambiaste mi mundo de una forma tan drástica, llegaste de la nada y ya lo eres todo, antes no significabas nada y ahora no puedo vivir sin ti ni un segundo... sin tu amor. Te amo mas de lo que piensas, más de lo que lo digo y mucho mas de lo que lo demuestro, no puedo prometerte que todo sea perfecto, pero si que será para siempre, se que no podré cumplir todas las promesas, pero si te prometo que haré nuestros sueños realidad, se que no soy perfecto pero... se que puedo hacerte feliz, faltan muchas batallas pero justo ahora tengo ganada la mas importante.

No podía dejar de llorar, el siempre fue de actuar porque las palabras no son lo suyo y justo ahora todo me lo decía de frente y mas seguro que nunca.

-Me encantas, me encanta la manera que me haces sentir, me encanta lo cursi que puedo llegar a ser estando junto a ti, me encanta la manera que nada parece importante cuando estamos juntos, te prometo los días mas hermosos pero también las batallas mas duras, te prometo abrazarte y estar junto a ti... cada mañana recordarte cuanto te amo, me enamoré de ti con defectos y virtudes y justo ahora iniciara una vida donde aceptaremos lo que fuimos y seremos juntos...

Entonces con todo aquello pusimos el anillo en el dedo de contrario haciendo promesas mudas  olvidamos el lugar y el tiempo... con lo mágico que se convirtió esto.

-Entonces Aomine Daiki acepta como omega y pareja a Kuroko Tetsuya para amarlo y respetarlo hasta el final de sus días?

-Acepto...

-Y tu Kuroko Tetsuya aceptas como alpha y pareja a Aomine Daiki para amarlo y respetarlo hasta el final de sus días?

-Aceptó...

-Solo me queda decir... puede besar al novio...

Y por fin, el beso que daba inicio a otra etapa de nuestra vida llego, nuestros aromas se enlazaron en medio de ese lugar tan publico pero tan especial al mismo tiempo.

-Vamos...- me cargo estilo princesa y lo único que pude hacer fue aferrarme a su cuello.

-A donde vamos?

-Es sorpresa...

Regresamos a casa y de nuevo me trajeron como su titere, me cambiaron y volvieron a arreglar. La sorpresa fue que salimos del pueblo, llegamos a un salón algo elegante para mi gusto pero cuando escuche que era propiedad de Akashi entendí todo...

-Esta es la segunda fiesta- me anuncio Aomine que llego a mi lado con otro traje y arreglado de distinta manera, daba el porte elegante y orgulloso de alpha que claro era.

Esta vez si estaban los de Serin, y todo conocido nuestro de los equipos a los que enfrentamos, el lugar era grande y aun así lo llenamos.

-FELICIDADES!- gritaron todos en cuanto nos vieron en la entrada empezando un brindis.

-Por fin eres mio- me susurro Aomine y beso mi mejilla.

-Siempre lo fui...