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Capítulo 6: Phantomium Nocturnius Stellarose Virelithia Jr. (Y Johnny)


Desesperado por respirar, Volt intento agarrar aire, pero solo salían jadeos sin aliento. El pecho se le apretó aún más, con el corazón latiéndole a mil por hora.

Se encontraba de pie en una habitación pequeña y poco iluminada. Las frías baldosas bajo sus patas le provocaron un escalofrío y sintió que las paredes se cerraban sobre él.

Intentó concentrarse en lo que le rodeaba, pero recuerdos de algo que no comprendía inundaron su mente, dificultando la diferenciación entre la realidad y su imaginación.

-Me encontró, - Volt se repetía a sí mismo como un disco rayado.

Sintió que el corazón se le aceleraba aún más y que el cuerpo le temblaba sin control.

Retrocedió a trompicones, derribando un montón de objetos que no reconoció, y se hundió en el suelo, con la respiración cada vez más acelerada.

La imagen de los ojos rojos en el denso humo pasó ante sus ojos y sintió que le invadía el miedo. Su cuerpo se tensó e instintivamente trató de retroceder, pero no tenía adónde ir en aquel espacio reducido.

Sus ojos estaban muy abiertos por el miedo y las lágrimas corrían por sus mejillas peludas. Intentó pedir ayuda, pero su voz era un susurro tenso.

Estaba abrumado por una sensación de desesperanza, de soledad.

Aterrado y vulnerable.

Aún podía ver la vívida imagen de los ojos carmesí que le miraban a través del denso humo.

Podía sentir el calor que emanaba de ese rojo, un abrasador recordatorio de la sofocante perdición que le había perseguido antes.

Parecían burlarse de él, un recordatorio de sus luchas pasadas y de la sensación de impotencia que había sentido una vez.

No podía deshacerse de la paranoia de que ÉL le estaba observando, y se sentía atrapado en el espacio cerrado.

Se hizo un ovillo, tratando de calmarse, pero el miedo era abrumador.

Temía la crudeza de sus ojos carmesí atravesando su alma.

Temía el frío de su tacto helándole el cuerpo.

Temía la agonía de sus garras raspando su peluda piel.

Temía la agonía.

Temía el sufrimiento.

El dolor.

El dolor insoportable.

El dolor agonizante.

-Guido... ayúdame... - gimoteo, con la voz apenas por encima de un susurro.

Y mientras repetía esas palabras, como si acudiera en su ayuda, apareció ante él una figura azul y borrosa, que se movía grácilmente a través de la niebla de su pánico.

Instintivamente, Volt retrocedió y soltó una descarga de electricidad, con la esperanza de mantener a raya a la figura. La figura retrocedió, asustada por el repentino ataque.

Extendió la mano hacia él, intentando tocarlo, pero el miedo de Volt se intensificó. Se acobardó, incapaz de comprender lo que estaba ocurriendo. La figura pareció darse cuenta y se detuvo, levantando las patas en un gesto tranquilizador.

-Cálmate, - le dijo suavemente, con una voz gentil. - Concéntrate en tu respiración. Inhala y exhala despacio. Todo va a estar bien.

Volt respiraba entrecortadamente mientras intentaba seguir las instrucciones de la figura, pero seguía sintiendo el pecho oprimido y el cuerpo le temblaba incontrolablemente.

-No... no puedo, - se atragantó entre jadeos. - Ayuda... Voy a morir...

La figura puso una pata en la espalda de Volt, guiándolo para que se sentara en el suelo del cuarto de baño.

-No vas a morir, Sigue respirando y cierra los ojos.

Volt cerró los ojos, intentando bloquear los recuerdos de los ojos carmesí. Trató de escuchar al borrón azul, de dejar que sus palabras lo anclaran en el presente.

-Todo va a estar bien.

La respiración de Volt se fue calmando poco a poco y sintió que la opresión de su pecho disminuía. Su corazón, que había estado latiendo con fuerza, empezó a serenarse a medida que disminuía el pánico.

A medida que recuperaba el control sobre sus pensamientos acelerados, Volt empezó a reconocer el entorno.

Se percató de las paredes alicatadas del cuarto de baño, del ligero olor a productos de limpieza y de la tenue iluminación.

Justo entonces, el borrón azul apareció de nuevo frente a él, y esta vez lo reconoció.

Era Lucy.

Volt miró a Lucy, con los ojos todavía abiertos por el miedo residual. Ella no dijo nada, pero su sola presencia pareció ayudarlo a sentirse más tranquilo. Siguiendo su ejemplo, continuó regulando su respiración, inhalando profundamente y exhalando lentamente.

Al cabo de unos instantes, la respiración de Volt se estabilizó y su corazón volvió a latir a un ritmo normal. Sintió una sensación de alivio mientras el pánico se disipaba poco a poco.

Con la mente más tranquila, se volvió hacia Lucy con una mirada confusa.

-Tú... tú me ayudaste?

Sus penetrantes ojos azules estaban fijos en él y, por un momento, Volt vio un destello de preocupación en su mirada antes de que fuera rápidamente reemplazado por su fría fachada habitual.

-Ya estás mejor - dijo bruscamente, retirando la pata de su espalda. - No le digas a nadie que te he ayudado.

Lucy se dio la vuelta para salir del baño, lentamente desapareciendo entre las sombras.

Volt se quedó solo, otra vez, sintiendo una mezcla de alivio y confusión. No pudo evitar preguntarse de nuevo por los ojos rojos, y se dio cuenta del peligro que corrían una vez más.

-E-e-espera, y el Gengar?!

La voz de Lucy resonó débilmente desde fuera del baño, fría y distante una vez más.

-Sal y ve por ti mismo.

Volt agitó las orejas al captar la respuesta de Lucy.

Respiró hondo, intentando tranquilizarse mientras el corazón le latía con fuerza en el pecho. Sus patas temblaron ligeramente mientras empujaba la puerta del baño para abrirla.

El polvo danzaba en el aire y las sombras se cernían en todos los rincones mientras la tenue luz se filtraba por las ventanas rotas, proyectando formas espeluznantes en las paredes.

Lucy se dio la vuelta y empezó a subir las escaleras, Volt siguiéndole detrás.

Cada escalón crujía bajo su peso, haciéndole estremecerse con cada sonido. No le quitó los ojos de encima a Lucy, quien parecía no inmutarse por el estado deteriorado y spooky de la casa.

Cuando llegaron al final de las escaleras, Lucy se detuvo frente a una puerta cerrada. Se volvió para mirar a Volt, con expresión inexpresiva (que?).

A medida que se acercaba, oyó leves susurros y revoloteos de telas, que le produjo escalofríos.

Lucy empujó la puerta lentamente, revelando una habitación envuelta en la oscuridad.

El corazón de Volt latía con fuerza en su pecho mientras miraba hacia el interior y sus ojos se adaptaban a la tenue luz.

Su respiración se entrecortó cuando vio un ojo carmesí, que lo miraba desde la oscuridad.

Con una oleada de electricidad, desató un potente chispazo que crepitó en el aire e iluminó la habitación con un destello cegador.

Se cegó a sí mismo en el proceso, pero a través de la electricidad crepitante sus oídos captaron un quejido, procedente de la dirección del ojo rojo.

La electricidad de Volt se apagó y la habitación volvió a quedar a oscuras. Se le hinchó el pecho al darse cuenta de lo que había hecho. Con las orejas bien abiertas, se volvió hacia donde se suponía que estaba Lucy, pero sólo encontró una barrera gigante hecha de hielo. Desde el costado, Lucy se asomó, con expresión molesta.

-Vete a la mierda.

Aliviado al ver que Lucy estaba ilesa, Volt dejó escapar un suspiro. Pero su alivio duró poco al oír una voz dramática por detrás.

-Tus habilidades sí que son electrizantes.

A Volt se le erizaron los pelos cuando se volvió hacia la fuente de la voz dramática. Sus ojos se abrieron de par en par, pero no de miedo, sino de sorpresa, al ver al Umbreon que tenía delante.

El Umbreon se erguía con seguridad sobre dos patas, su complexión esbelta acentuada por un cinturón de cuero marrón que le ceñía la cintura, adornado con una espada de madera y algún tipo de artilugio, similar a una pistola.

Un parche le cubría el ojo izquierdo, Dejando sólo uno de sus ojos rojos al descubierto. Pero lo que más llamó la atención de Volt fue la espectacular capa roja que cubría los hombros del Umbreon, ondeando detrás de él mientras se acercaba.

-Yo... no quise... - Explicó Volt, un poco más calmado.

-Admitiré que me has hecho bastante daño. - Proclamó el umbreon, sin haber escuchado a Volt- Mis felicitaciones van para ti, mi querido compañero eléctrico.

-Yo... uh, gracias?

El Umbreon rió suavemente, con su único ojo visible brillando con picardía.

-No hay necesidad de tales modales, mi querido jolteon. Pero debo de decir, aprecio que seas más amigable que tu compañera gélida.

Volt asintió, aliviado de que el Umbreon no le guardara rencor.

-Soy Sparky... digo, Volt.

El Umbreon sonrió, mostrando unos colmillos afilados mientras hacía una reverencia teatralmente.

--Mi nombre es Phantomium Nocturnius Stellarose Virelithia Jr. - proclamó dramáticamente. - Pero puedes llamarme Noir, para simplificar.

-Ok Noir... puedo preguntar... por qué llevas un parche?

La expresión de Noir se volvió seria y se llevó una pata al pecho.

-Ah, mi querido amigo - dijo en tono teatral. - Es un símbolo de mi trágico pasado, un recordatorio constante de las batallas que he librado y los sacrificios que he hecho.

-Qué... tipo de batallas?

El ojo de Noir brillo con una intensidad misteriosa.

-El tipo de batallas que dejan cicatrices, querido Volt. El tipo de batallas que ponen a prueba la fuerza y el valor de uno hasta sus límites.

Volt estaba a punto de pedirle más detalles, pero Noir se echó a reír de repente, dejándolo confundido.

-Nah, es broma - dijo echando la cabeza hacia atrás.

Noir dejó de reírse y se levantó el parche, dejando al descubierto un ojo rojizo en perfecto estado.

-Lo llevo porque se ve cool!

Volt parpadeó sorprendido, sin saber si Noir hablaba en serio o no.

-Pero no te dejes engañar, amigo mío - dijo, entrecerrando los ojos. - Puede que lo lleve por el factor edgy, pero no soy un Umbreon cualquiera. Soy un guerrero, un luchador, y no me detendré ante nada para proteger a mis seres queridos.

-Uh... ok... - dijo Volt con simpleza, asintiendo con la cabeza.

Noir sonrió, con un brillo de orgullo en los ojos.

-Así es, amigo mío... Y juntos venceremos a cualquier enemigo que se cruce en nuestro camino!

-Cool... - respondió Volt con ojos soñadores

-Estas en lo correcto, querido Volt, - Noir rió entre dientes ante la admiración de Volt. - Al fin y al cabo, siempre hay que dar la talla.

La mirada de Volt se desvió hacia la espada de Noir y el artilugio. Su aspecto era similar al de una pistola, pero más rústica y... ¿cuerdosa?

-Son de verdad?

Noir desenvainó su espada de madera con pericia, la hoja brillando en la tenue luz... de alguna manera.

-Verdaderamente verdaderas amigo mío. Un guerrero como yo siempre lleva sus armas consigo.

Volt abrió los ojos con asombro al ver cómo Noir hacía girar la espada sin esfuerzo, con movimientos fluidos y elegantes.

-Eres increíble!

-Lo sé, verdad! - exclamó con ojos soñadores y voz genuina. Pero rápidamente volvió a su teatralidad. - Yo, eh, quiero decir... ejem, pero por supuesto mi querido aliado eléctrico. Pero aunque sea incomparable, no hay necesidad de referirse a mí como tal.

-Y que es esa cosa cuerdosa?

Noir sonrió satisfecho, sabiendo exactamente a qué se refería Volt. Desenfundó el arma de cuerda y se la mostró a Volt.

-Ah, ¿esto? No es más que un gancho, - explicó, apuntando al techo.

Con un chasquido repentino, el gancho salió disparado del arma, volando por los aires y enganchándose al techo con un ruido sordo. Noir tiró de la cuerda con pericia y quedó suspendido a unos metros del suelo. El sonido de la cuerda crujiendo llenó el aire, junto con el sonido de la risa de Noir.

-Muy bonito, eh? - preguntó Noir, aterrizando de nuevo en el suelo con un ruido seco. -Es una herramienta muy útil en una pelea.

-Sí, ajá, genial, increíble, cállate de una puta vez. - Proclamó Lucy, en su típico tono gélido y monótono. - Escucha jolteon, tu amiguito Edgy dice que la mafia viene a por su culo.

-La Umbrafia sí que viene a por mi retaguardia - dijo Noir, con voz ominosa y dramática. - Qué grupo tan desagradable, traumatizante, la misma encarnación del mal.

-Recuerdo que ese umbreon, 07 o algo así, dijo que buscaban un heredero... - murmuró Volt.

-Puedes recordar eso pero no tu propia muerte? - Lucy se rio.

Volt ignoró el comentario sarcástico de Lucy y continuó hablando.

-Noir, puedo preguntarte si eres un heredero?

-Si nombran mi presencia de tal manera, que así sea. Pero que conste que no estoy orgulloso de mi herencia. - La expresión de Noir se tornó seria al continuar: - La Umbrafia no se detendrá ante nada para capturarme y utilizarme para sus nefastos propósitos. Por eso debo estar siempre en guardia y listo para la batalla, no importa el lugar ni la hora.

-Basta de teatro, chico Edgy. - suspiró Lucy, rodando los ojos. - Escucha Jolteon, acabo de recordar que el pez, mi hermano y el travesti han sido secuestrados, otra vez.

El corazón de Volt se hundió al oír las palabras de Lucy. Miró a su alrededor, con la esperanza de que Lucy mintiera, pero no estaban por ningún lado.

-Como que los volvieron a secuestrar?!

-No lo sé. Escape antes de que pudieran verme.

-Y la umbrafia no se molestó en buscaros? - Pregunto Noir.

-Esas son las ventajas de ser olvidable

-HEY! ¡YO SOY MEMORABLE! - exclamó Volt.

-Bueno, no os preocupéis por esas pequeñeces, tengo la solución a esta trifulca -proclamó Noir con una pose épica - solo vamos a decir "vaya, me pregunto qué les habrá pasado" y cortaremos a su punto de vista!

-Que--

-Vaya, me pregunto qué les habrá pasado.

***

Cuando la puerta se rompió, Adrián gritó con todas sus fuerzas.

-Santa mierda mierdosa! Lo siento Volt! Puedes luchar contra todos los matones de la mafia que quieras, pero por favor ayúdanos!

Pero cuando Adrián giró la cabeza para ver a Volt, éste salía corriendo hacia un baño.

-Tienes que estar de broma... - Suspiró Adrián, aceptando su muerte.

-N-no te preocupes Adrián! - Gritó Aqua, con lágrimas en los ojos - ¡Mi hermana es bastante fuerte, podría vencer a un par de matones, ¿verdad hermanita?!

Pero cuando Aqua giró la cabeza para ver a Lucy, ésta salía corriendo escaleras arriba.

-Tienes que estar de broma... - Suspiró Adrián una vez más, aceptando su vida.

-No te preocupes Adri! Tenemos a Ester! - Exclamó Sasha optimistamente -Es una semidiosa, así que podría vencer a un par de matones, verdad Ester?

Pero cuando Sasha giró su cabeza para ver a Ester, Ella no estaba por ningún lado.

-OK, NISIQUIERA SALIO CORRIENDO, LITERALMENTE SE DESVANECIO, QUE PUTA MIERDA ES ESTA?!

Adrián y Sasha compartieron una mirada preocupada, mientras Aqua se limitaba a llorar, sollozar y temblar con tal fervor que podría rivalizar incluso con un anciano enfermo de Parkinson.

Y a medida que los ojos seguían mirándolos, parecían multiplicarse. Sus pupilas se dilataban y se hacían más anchas, hasta que un par en particular destacó sobre los demás. Era amarillo y, a diferencia de los demás, éste avanzaba hacia el trío.

-Aqua, Sasha, antes de que nos maten, tengo algo que decirles - murmuró Adrián con mirada melancólica.

-No te rindas tan fácilmente, Adri! ¡Todavía podemos escapar!

-Sasha, eres el que menos odio en toda la casa... Y aunque eso se deba en parte porque te acabo de conocer, gracias por ser tolerable...

-Adri! ¡No es momento de deprimirse!

-S-Sasha tiene razón, n-no podemos rendirnos ahora, ¿verdad? - sollozó Aqua

-Aqua, antes de saber que eras un chico, estaba enamorado de ti... Gracias por ser querible....

-Yo... eh... tú... me intentaste matar por cantar! - tartamudeó Aqua mientras se sonrojaba furiosamente.

-Eso es porque odio los musicales más de lo que me gustabas tú. Este es nuestro adiós. Nos vemos en el infierno.

Antes de que pudieran decir nada más, la figura de ojos amarillos estaba sobre ellos.

-Hola Adrián! Cómo te va?

Los ojos de Adrián se abrieron de golpe al reconocer la voz.

-Johnny?

-El mismo!

Johnny, mientras se erguía en dos patas, sus vibrantes anillos azules resaltando en contraste con su pelaje negro, se dejó caer a cuatro patas con una sonrisa amistosa. Hizo un gesto con la pata al resto de Umbreon, indicando que les dejaran solos un momento. Oh si, y que se llevaran al guardia noqueado.

-Bro, cuánto tiempo! Cómo van las cosas en la mafia? - Preguntó Adrián con una sonrisa de oreja a oreja.

-Oh ya sabes, lo mismo de siempre. Torturar Pokémon por información, robar bancos a nivel mundial, aprender italiano... En fin, cómo te ha tratado la vida?

-Oh bro, han pasado tantas cosas que me tomaría siglos ponerte al corriente.

-Eso suena increíble! Oye, te importaría si me das tus patas un segundo? - dijo Johnny mientras levantaba unas esposas, - necesito ponerte esto.

-Por supuesto, lo que sea por ti, bro.

Mientras Johnny esposaba a Adrián, Sasha y Aqua miraban absolutamente atónitos.

-Adrián, que estás haciendo?! - exclamó Sasha, con la voz temblorosa por el miedo y la rabia.

Adrián y Johnny compartieron una mirada confusa, mientras Johnny esposaba casualmente a Adrián con gracilidad y destreza.

-Ser esposado?

-Que no se supone que Johnny nos ayudaría?!

-Ayudarlos? - pregunto Johnny en plena confusión - hay algún problema, Adrián?

-Oh sí, resulta que tu mafia--

-Vamos Adrián, sabes que no soy el líder, no hace falta tanta formalidad, - Murmuro Johnny mientras se sonrojaba levemente

-ok, pues resulta que la Umbrafia nos secuestró y nos amenazaron con matarnos, - explico Adrián como si fuera la cosa más normal del mundo, - pero yo dije que era tu amigo, para que pudieras sacarnos de aquí... sin morir, claro.

Johnny escucho con atención el relato que Adrián le contaba, y con una expresión absorta, asintió.

-Creo que puedo ayudarles, solo déjenme los secuestro en un santiamén y me comunicare con los líderes. Ver si pueden dejarlos libres, o con lesiones ligeras!

-En serio? - Replicó Adrián melancólicamente, - no podrías dejarnos libres desde ya?

-Oh Adrián... Sabes que no puedo contradecir mis ordenes...

Adrian suspiró, sabiendo que Johnny tenía razón. Asintió de mala gana y esbozó una sonrisa.

-No es gran cosa, sé que es tu trabajo. También podríamos ponernos al día mientras nos secuestras.

Johnny le devolvió la sonrisa, aliviado de que su amigo comprendiera la situación. Hizo un gesto al trío para que lo siguieran mientras los conducía fuera de la casa abandonada.

Mientras caminaban, Johnny saludó a cada umbreon con el que se cruzaban y ellos le devolvieron el saludo con el mismo entusiasmo. Al ver ese comportamiento tan poco natural en ellos, Aqua no pudo evitar preguntar.

-J-Johnny, d-de verdad formas parte de la mafia?

Johnny se volvió hacia Aqua con una brillante sonrisa.

-Sip! Pero no te preocupes, soy uno de los buenos. Nunca hago daño a pokémon inocentes... a menos que me lo ordenen, claro.

-Johnny siempre ha sido un Pokémon de buen corazón, - intervino Adrián, - incluso cuando éramos jóvenes, siempre defendía lo que era correcto.

Johnny se sonrojó ante el cumplido.

-Aw, me estás haciendo sonrojar. Pero en serio, sólo intento hacer lo mejor posible.

-Estamos totalmente a punto de morir... - suspiró Sasha, siendo ahora él el negativo.

Johnny se rió ante el comentario de Sasha.

-No te preocupes Sylveon, todo saldrá bien!

Adrián asintió con la cabeza.

-Sí, estamos con Johnny. Él se asegurará de que estemos a salvo!

-Literalmente dijo que no podía contradecir sus órdenes! Agh!

Mientras seguían caminando por las oscuras calles, Sasha no podía evitar una sensación de inquietud. Las sombras parecían acercarse y el aire estaba cargado de tensión. Aqua, sintiendo la incomodidad de Sasha, extendió una pata y le dio a su compañero un apretón tranquilizador.

-Saldremos de ésta, sé que lo haremos - susurro suavemente.

Sasha le devolvió una débil sonrisa y, aunque el malestar no había desaparecido, se sintió agradecido por su intento.

-Gracias... Parece que le estás cogiendo el truco a esto, después de consolarte todo el día...

-Supongo que sí, - Aqua rió por lo bajo.

-Hablando de consolar, - intervino Adrián, ladeando la cabeza con confusión - Por qué está aquí la mafia, Johnny?

-Bueno, verás...

***

-Bueno, mis queridos conocidos, ¿habéis visto ese épico cliffhanger?

Volt y Lucy intercambiaron miradas de desconcierto.

-No... ¿qué cliffhanger?

-porque crees que os pregunte?

Volt y Lucy intercambiaron miradas de desconcierto, otra vez.

-Tienes razón... sin duda es épico...? Y aunque no sé de qué estás hablando, deberíamos pensar en COMO RESCATARLOS! - exclamó Volt, sintiendo de nuevo pánico al recordar la situación de sus amigos (así es, se le había olvidado).

Lucy asintió, con su frialdad habitual menos gélida que de costumbre.

-Estoy de acuerdo. No es como si me importara, pero realmente no quiero que mi hermano muera, sabes?

Noir adoptó una pose dramática, con una pata en el pecho y la otra apuntando al horizonte, como si estuviera listo para liderar una épica carga hacia la batalla.

-No temáis, camaradas míos! Yo, Noir, lideraré la carga para rescatar a nuestros aliados cautivos y poner fin a los malvados planes de Umbrafia.

Volt y Lucy intercambiaron miradas de desconcierto, de nuevo.

-Bien... uh, entonces, alguna idea de cómo rescatarlos, realmente?

Noir bajó la pata y adoptó una postura más pensativa, frunciendo el ceño en señal de concentración.

-Bueno, hay un montón de umbreon fuera, ¿verdad?

-Necesitamos un plan, no solo decir lo obvio.

-En eso te equivocas, reina de hielo. También estamos en una pequeña aldea, verdad?

-Soy eléctrico! - exclamó Volt

-Qué?

-Estoy diciendo lo obvio - respondió Volt con una tímida sonrisa, - como hace Noir!

-No estás ayudando, en absoluto.

-Oh, pero si lo está, mi querida Glaceon. Verás, si la aldea es pequeña, y hay muchos umbreon... estarán aglomerados ... lo que significa?

-Lo que significa que podría ser más fácil escabullirse sin ser detectados, y tal vez incluso encontrar una manera de rescatarlos sin ser vistos... - Lucy terminó su frase, captando su hilo de pensamiento.

-Qué? No, estaba pensando en lanzar a nuestro querido compañero eléctrico y hacerle soltar un montón de chispazos.

Lucy miró fijamente a Noir a través de su alma.

-Necesitamos un plan, no un suicidio.

-Pero sería genial!

-No. No lo sería.

-Va a funcionar, créeme. - Dijo Noir, un poco serio esta vez. - Sus armas deberían desactivarse al ser alcanzadas por la corriente, así que ningún Volt debería resultar herido en el proceso.

Volt pareció sorprendido.

-Qué? Las armas funcionan con electricidad?

-Sí, ¿no te diste cuenta de la corriente eléctrica que recorría las partes metálicas? - respondió Noir.

-Supongo que no presté atención...

-Si es electricidad, entonces no usan pólvora? Cómo mierda dispara? - preguntó Lucy.

-No se, yo no las hice, - explicó con simpleza, - lo único que se, es que disparan con munición especializada que está diseñada para conducir la electricidad. Es bastante ingenioso, la verdad.

Lucy enarcó una ceja.

-Y lo sabes porque...?

La cara de Noir enrojeció ligeramente y apartó la mirada un momento antes de contestar.

-Bueno, digamos que ya he tenido bastantes encuentros con la Umbrafia. He aprendido algunas cosas sobre su tecnología y sus tácticas, - dijo, tratando de sonar despreocupado.

Lucy lo miró con escepticismo, pero no insistió. En cambio, se volvió hacia Volt.

-Y Volt no saldrá lastimado cuando lo arrojemos a una multitud de pokemon armados?

-Si es lo suficientemente rápido.

-QUÉ QUIERES DECIR CON QUE SI SOY LO SUFICIENTEMENTE RÁPIDO?!

-No tienes por qué preocuparte, amigo mío. Crearemos una distracción y desviaremos su atención de ti. Tendrás tiempo suficiente para entrar y salir antes de que se den cuenta de lo que ha pasado.

-Y aunque te maten, simplemente volverás a la vida - dijo Lucy con tono burlón.

-Sí... claro... - murmuró Volt, sintiéndose un poco inseguro.

-voy a rogarles que me disculpen ahora mismo... pero, qué significa eso de "volver a la vida"?

Volt dudó un momento antes de responder.

-No lo sé.

-No lo sabes? - preguntó Noir, frunciendo las cejas.

-Murió. Revivió. Ya está.

Noir miró a Lucy con incredulidad.

-Murió y volvió a la vida? Eso no es posible, verdad?

Lucy se encogió de hombros.

-No lo sé, pero parece ser cierto. Después de todo, lo vi.

-Bueno, con más razón deberíamos seguir mi inteligente plan! Pongámonos en marcha!

Noir desenvainó su pistola gancho con ESTILO. Apuntó a la ventana, y con una sonrisa astuta en la cara, disparó.

El sonido del gancho al clavarse en la pared fue como un disparo en la silenciosa habitación. El metal chocó con el ladrillo, resonando en el espacio. Entonces, con un nivel absurdo de casualidad, Noir se acercó a la ventana y saltó con toda naturalidad por ella.

Por un momento, no hubo más que un silencio atónito mientras los dos compañeros que quedaban se miraban entre sí, desconcertados. Entonces, Volt habló con dudas.

-Deberíamos... seguirle?

Lucy se encogió de hombros y salió por la puerta.

Volt dudó un momento antes de salir. No sabía si estaba preparado para esto, pero tampoco quería quedarse atrás.

Respiró hondo y saltó por la ventana, usando el gancho para deslizarse por la cuerda que Noir había dejado atrás.

Por supuesto, fracasó estrepitosamente y cayó de cara directamente sobre la hierba.

-No puedo evitar notar que tuviste una caída. - Dijo Noir agachándose levemente, todavía en 2 patas.

Volt se limitó a refunfuñar en respuesta, mientras Noir lo cogía con sus patas delanteras y lo levantaba con un rápido movimiento.

-Eres sorprendentemente fuerte...

-Sí, hice un contrato con un demonio que me dio superfuerza. Pero a cambio tuve que sacrificar todo mi árbol genealógico.

-Huh! En serio?!

Noir sonrió ligeramente mientras observaba la villa desde la planicie.

-No.

Noir y Volt observaban el pintoresco pueblecito de abajo, desde lo alto de la llanura. El sol apenas poniéndose, proyectando un cálido resplandor anaranjado sobre las onduladas colinas y los verdes pastos que rodeaban el pueblo. Los árboles susurraban suavemente con la brisa fresca del atardecer y el cielo estaba pintado con tonos rosas y morados, como si algún artista hubiera estropeado su obra maestra derramando la pintura por todas partes.

Y sin embargo, en medio de este paisaje sereno, había una nota áspera y discordante. El aire estaba cargado de un acre olor a humo. El crepitar de las llamas se oía a lo lejos, una constante e implacable sinfonía de destrucción.

Noir contempló la aldea. Las llamas danzaban sobre los edificios, consumiéndolo todo a su paso como una bestia voraz. Los sonidos del pánico y el caos llenaban el aire, mientras los aldeanos corrían de un lado a otro en un intento frenético por salvar sus hogares y a sus seres queridos.

-Es un espectáculo digno de ver, - comentó Noir, con un toque de sarcasmo en la voz.

Volt frunce el ceño, con los ojos fijos en la aldea en llamas.

-Noir, la aldea está ardiendo...

-Vaya, vaya, qué astuto eres, Volt, - bromeó Noir.

Volt le lanzó una mirada fulminante.

-Bueno, supongo que tienes razón en que la Umbrafia es la encarnación del mal, - suspiró Volt, tomando el paisaje una vez más, - No puedo creer que quemaran toda la villa.

-No, eso no es obra de la Umbrafia, - afirmó Noir con naturalidad.

-Qué quieres decir? Quién más podría haber hecho esto? - preguntó Volt, con un tono confuso.

-Los residentes, probablemente.

-Qué?! Eso no es cierto, cómo lo sabes?!

-Porque la Umbrafia no quema edificios. En realidad son un grupo bastante pacífico si no te metes con ellos.

-Entonces por qué están ardiendo las casas?!

-Es uno de los residentes un tipo de fuego?

-No creo...

Pero Volt se vio interrumpido por el batir de alas de un charizard sobre ellos, volando en dirección opuesta a la aldea.

Noir lanzó una mirada fulminante a Volt, quien miró al suelo.

-Bueno, ya no.

Noir dejó escapar un suspiro mientras veía al Charizard alejarse volando.

-Y nuevamente, aldeanos prenden fuego a su hogar accidentalmente, ¿por qué siempre pasa lo mismo?

-Cómo puedes estar tan seguro, - preguntó Volt, aún sin creerle.

-La Umbrafia es conocida por su destreza estratégica, no por piromanía. Además, ¿por qué querrían quemar un pueblo que no supone ninguna amenaza ellos?

-Pero... porque prenderían fuego a sus propias casas?

-Sabes lo que significa un accidente? - preguntó Noir sarcásticamente.

-No realmente.

-Oh... bueno, es algo que pasa, pero que no querías que pasara.

-Huh... Ya veo...

-Han terminado de ser aburridos? - dijo Lucy directamente a Volt, apenas acabando de salir, - Porque tu casa está en llamas.

-Qué?

Volt buscó su casa a través del pueblo con la vista, y efectivamente, pequeñas llamas chisporroteaban por las paredes de la casa como una bestia carcomiendo la madera.

-OH MIERDA!!! OTRA VEZ NO!!!

Presa del pánico, las patas de Volt crepitaron de electricidad al saltar rápidamente colina abajo. Dejando atrás a Noir y Lucy en un santiamén.

-Espera Volt! Mi plan súper inteligente!

Pero él no escucho los gritos de Noir.

La gran pradera que tenía ante sí no fue más que un viaje de 5 segundos para él, mientras corría a través de ella, con la hierba chamuscada crujiendo bajo sus patas.

Con un estallido de electricidad, Volt atravesó su casa en llamas, abriéndose paso a través de la puerta con un cabezazo. Dentro reinaba el caos. Su casa estaba destrozada, las llamas abrasaban las paredes y el humo envolvía el aire.

Los ojos de Volt se entrecerraron de rabia mientras observaba los daños en su casa. Pero entonces notó algo extraño. Las llamas parecían concentrarse en una zona de la casa... Como si... Como si hubiera sido causado a propósito.

Su rabia se desbordó. Su hogar destruido sin remedio. No otra vez, no otra vez, ¡NO OTRA VEZ!

NO QUIERO VOLVER A VIVIR EN LA CALLE, JODER, OTRA VEZ NO!

-QUIÉN MIERDA HIZO ESTO? - gritó, su voz resonando entre las llamas.

De repente, oyó un sonido procedente de la parte trasera de la casa. Un débil gemido, apenas audible por encima del estruendo del fuego. Siguió el sonido, con el corazón latiéndole con fuerza en el pecho.

Al doblar una esquina, vio una figura acurrucada en el suelo, temblando de miedo. Era un pokémon pequeño, parecido a un Equidna, con lágrimas cayéndole por la cara.

La rabia de Volt se disipó cuando miró al asustado Cyndaquil. Se agacho junto al tembloroso pokémon y le puso una mano reconfortante en la espalda.

-Cálmate. Inhala y exhala despacio. Todo va a estar bien.

El Cyndaquil miró a Volt con los ojos llenos de lágrimas.

-No quise hacerlo - tartamudeó. - Yo sólo... estaba... Los umbreon daban miedo y... no era mi intención, lo prometo... no puedo controlar muy bien mis llamas y... por favor, no me hagas daño...

La ira de Volt disminuyó mientras respiraba hondo y trataba de calmarse.

-No lo haré.

Volt miró al chico en un momento de silencio, recordando lo que Noir le había contado sobre la Umbrafia.

Que no eran pirómanos.

No te enfades, sólo ha sido un accidente.

Como dijo Noir.

Sin decir nada, Volt cogió al pequeño Cyndaquil y se lo puso a la espalda. Su pelaje volvió a crepitar de electricidad mientras echaba a correr hacia la salida.

Una vez que ambos estuvieron afuera, Volt dejó suavemente al Cyndaquil en el suelo y lo miró a los ojos.

-La umbrafia es pacífica si no te metes con ellos, aquí estarás a salvo...

Recordando a la Umbrafia una vez más, empezó a pensar, si la Umbrafia no hubiera venido, habría un incendio en primer lugar?

Contempló el pueblo quemado. No le importa que haya sido un accidente, o que no haya sido culpa de la Umbrafia.

Electrificó su cuerpo una vez más antes de correr hacia la aldea. Dejando al Cyndaquil detrás. Este día sí que está dejando gente atrás, eh?

Hacía años que no usaba sus poderes eléctricos, pero a pesar de sentirse agotado, se recordó a sí mismo que ahora NO PUEDE descansar.

Tampoco es que haya descansado alguna vez en su vida.

La mente de Volt rebosaba de emociones mientras se abría paso entre los restos calcinados de la aldea. No quedaba ni una sola casa.

Su ira comenzó a consumirlo una vez más. Sentía un intenso deseo de venganza, de hacer pagar a los responsables por lo que habían hecho. Aunque nadie era técnicamente responsable.

Mientras Volt buscaba entre las ruinas de la aldea, finalmente se topó con sus amigos. Aqua, Sasha, Adrián y un umbreon Shiny, todos ellos acurrucados, con los rostros manchados de hollín y ceniza.

Cuando Volt vio a sus amigos, se dirigió hacia ellos con una expresión furiosa en el rostro. Sasha lo vio venir y retrocedió un paso hacia atrás.

-Volt, qué pasa?

-Qué pasa? QUÉ PASA? MI CASA SE HA QUEMADO POR COMPLETO, ESO ES LO QUE PASA, MIERDA!

-Whoa, cálmate pibe, - dijo Johnny, levantando las manos. - Nosotros no hemos tenido nada que ver.

Volt miró a Johnny con discernimiento

-Quién mierdas eres tú?!

-Oh, perdona mis modales. Soy Johnny, el amigo de Adrián.

-Y por qué exactamente debería creerte?

-Porque estoy aquí, idiota, - Adrián se adelantó. - Es el que dije que nos iba a ayudar, ya sabes, a que no nos matara la umbrafia.

Volt se quedó en silencio por un momento

-Eres parte de la Umbrafia?

-Sip, pero no te preocupes, no hemos venido a matar inocentes, al menos no hoy - Se rió nerviosamente

Con los ojos entrecerrados, Volt apretó las patas, arañando los restos chamuscados bajo sus pies. Respiró hondo y continuó

-Dónde está el resto de ustedes?

-Los envié a la fuente de agua más cercana, - respondió Johnny, - Aunque no sé dónde está 07... se supone que el es quien lidera toda esta... "redada"

-Qué redada? - preguntó Aqua, observando la destrucción.

Johnny dudó un momento antes de responder

-No es nada, sólo un asunto interno de Umbrafia.

-Qué clase de asuntos? - dijo Adrián con preocupación.

Johnny evitó su mirada.

-Mira, no debería haber dicho nada. Olvida que lo he mencionado.

-No vamos a olvidarlo si no nos cuentas lo que pasa.

-Ha dicho que lo olvides. - Respondió alguien detrás de Adrián.

Los ojos de Adrián se dilataron, como los de todos, al sentir un frío metal tocar su cabeza. Johnny miró al que estaba detrás de Adrián y sonrió amistosamente.

-Oh, hola 07!

Efectivamente, detrás de Adrián estaba el mismo Umbreon de sombrero de copa, quien antes les había amenazado de muerte.

El cuerpo de Adrián se tensó cuando el frío metal le presionó la cabeza aun mas. Miró a Johnny con una mezcla de confusión y miedo.

-Qué está pasando?

-Oh, no te preocupes, - respondió Johnny con indiferencia. - 07 aquí no te matará... verdad?

-Uh, si, sobre eso... - Respondió 07 con tono cansado - Estaba a punto de matar a este.

Todos se quedaron paralizados. Los ojos de Aqua se abrieron de golpe y Sasha dio un paso atrás. El pelaje de Volt se erizó y enseñó los dientes.

-Qué demonios quieres decir?

-Oye, oye, cálmate, - dijo Johnny, levantando las manos. - Vamos a relajarnos un segundo y hablar de esto.

-No quiero ofenderte Johnny, eres el mejor y todo eso, ¡pero tiene una pistola apuntándome a la cabeza!

Johnny levantó las patas en señal de rendición.

-Lo sé, lo sé, sólo dame un segundo para hablar con él, - dijo antes de volverse hacia 07. - Por qué quieres matarlo? Los líderes no me han devuelto el mensaje, y tú lo sabes.

-No voy a matarlo ahora, - 07 suspiró - Sólo lo estoy tomando como rehén hasta que aparezca el heredero.

-De quien hablaba Johnny? - preguntó Adrián mientras temblaba

-Les dijiste, Johnny?

-Pues sí, es mi amigo! - respondió Johnny con cara de felicidad.

El enfado de Volt se calmó al hacer funcionar su mente por una vez.

Cuando le preguntó a Noir por el heredero, éste no respondió realmente a su pregunta. ¿Podría ser realmente Noir...

-Alto de una vez, insufribles miembros de la umbrafia! - Exclamó alguien desde lejos

Todos se volvieron a la vez hacia la fuente de la voz.

Noir se erguía épicamente en 2 patas, sosteniendo su espada de madera con fuerza y su aura rebosante de genialidad. Lucy le seguía detrás, a un par de metros de distancia. Caminando a su propio ritmo.

-Hola Heredero! - Johnny gritó, agitando los brazos con entusiasmo.

La tensa situación quedó temporalmente en suspenso mientras todos se centraban en Noir. Sin embargo, 07 no se dejó disuadir tan fácilmente.

Suspiró, total y absolutamente cansado de esta situación, e hizo una señal a todos a su alrededor.

-Bueno, Heredero, como puedes ver... has montado un buen lío al escapar. Así que puedes volver, por favor... o mataré a este inútil Vaporeon.

-Por favor 07, llámame Noir, - respondió Noir con reverencia.

-No te llamas así, - replicó 07.

-Ya veo... así que prefieres referirte a mí como Phantomium Nocturnius Stellarose Virelithia Jr.?

-No te llamas así!

Adrián, que seguía esposado, susurró a Volt

-Ese Umbreon es como el hijo de los líderes de la Umbrafia. Se escapó o algo así, y la Umbrafia envió un escuadrón a buscarlo.

-Se escapó de su casa?! - preguntó Volt con asombro.

-Sí, me escapé. No podía soportar quedarme allí por más tiempo. Necesitaba encontrar mi propio camino, mi propio destino.

-¡Cállate! ¡Eres sólo un puto adolescente que no puede poner su vida en orden! ¡Vuelve a casa, idiota! - gruñó 07.

Noir se mantuvo firme, con la espada de madera preparada.

-Me temo que no puedo hacerlo. Volver a una vida en la que me digan qué hacer y quién ser. Necesito descubrir quién soy realmente y de qué soy capaz.

-Entiendo que eres adolescente y todo eso, pero esto es llevar el "no es una fase, mamá" a otro nivel, - replicó 07.

-Entiendo que pueda parecer así, pero esto no es una fase. Esto es lo que soy, y necesito encontrar mi propio camino en el mundo. Estoy dispuesto a afrontar las consecuencias de mis actos, pero no puedo volver a una vida que no es la mía.

-Qué coño significa eso?! - exclamó 07, claramente frustrado. - Sabes qué, a la mierda, voy a matar al Vaporeon.

-No! ¡Libera al rehén inmediatamente, cobarde! - Retó Noir con dramatismo. - Te reto a un duelo de... ruleta rusa.

El grupo se quedó de piedra. Todos miraban a los dos con los ojos muy abiertos y la boca abierta, incapaces de creer lo que estaban oyendo.

07 estaba completamente sorprendido por el atrevimiento de Noir, pero enseguida recuperó la compostura.

-Qué?! ¡No voy a jugar a la ruleta rusa! ¿Por qué mierda haríamos eso?

Noir se mantuvo firme, con la espada de madera preparada.

-Tienes miedo? - preguntó Noir, con una sonrisa burlona.

-Somos dos personas importantes aquí! Si uno de nosotros muere, estaríamos en un gran problema.

-No es ese el punto? No quieres ver quién es el más fuerte?

-La ruleta rusa es un juego de azar! No hay nada de fuerza o habilidad involucrados! - respondió 07, frunciendo el ceño.

-Eh, chicos? - Johnny habló nervioso. -No creo que esto sea una buena idea...

Ignorando la advertencia de Johnny, Noir y 07 continuaron su acalorado debate.

La tensión en el aire era palpable. Todo el mundo estaba en vilo, esperando a ver qué ocurría a continuación.

Pero justo cuando parecía que las cosas iban a ponerse violentas, Lucy se acercó a Noir.

-Estás seguro de esto, chico edgy?

-Pfft, yo me encargo, - respondió él con indiferencia. - Nunca pierdo en la ruleta rusa.

Lucy asintió lentamente, se inclinó hacia Noir y le susurró algo al oído. Él se quedó callado un momento, sumido en sus pensamientos, y luego habló.

-Cambiemos de juego, - dijo con una sonrisa burlona. - 07... Verdad o reto?

El repentino cambio de tono pilló a todos desprevenidos. Incluso 07 parecía sorprendido por el repentino cambio de Noir.

-Uh... reto, supongo, - respondió, todavía un poco inseguro.

Con pura y entera genialidad, Noir hizo una pose, apuntando con su espada a 07 con todas sus fuerzas.

-Te reto a que juegues ruleta rusa!

07 miró a Noir con incredulidad, sin poder creer lo que acababa de escuchar.

-Sigue siendo un no por mi parte...

Pero de repente, justo cuando pronunciaba esas palabras, un haz de luz rosado, similar al que apareció Ester, golpeó el suelo con estruendo. Pero esta vez, se aceleró, porque el factor sorpresa ya había pasado y no quería alargar más la escena.

Fuera del haz de luz, quien pensaban que sería Ester, era en cambio una versión pequeña de un Kadabra. Un Abra, si tal vez no conocían su nombre.

El abra miró a su alrededor, y cuando vio a Adrián y a Sasha, exclamó.

-Oh, hola chicos, cuánto tiempo sin veros!

Adrián y Sasha se miraron confundidos, antes de que Adrián finalmente hablara.

-Ester?

-Soy yo. ¿Cómo te va la vida? No tienes que responder eso, todo esta quemado, woah!

-Umm, Ester...? - murmuró Sasha - Estás bien?

-Yo? Estoy estupendamente! Por qué lo preguntas?

-Oh, no lo sé, ¡quizás porque ERES UNA ABRA! - gritó Adrián, todavía siendo apuntado con la pistola, - QUÉ TE PASO?!

-Oh Dios mío. Esta es una historia muy divertida. Verás, hay un amigo llamado Dialga, ya lo conoces, el dios del tiempo y todo eso. Dialga y yo tenemos una relación muy fraternal, y a menudo nos gastamos bromas. Resumiendo, perdí piedra, papel o tijeras y mi castigo fue rejuvenecerme. Oh, pero no sé preocupen, todavía sigo siendo muy fuerte!

Adrián y Sasha intercambiaron una mirada de incredulidad, sin saber muy bien qué decir ante la absurda explicación de Ester. Noir y 07 también parecían confundidos por la aparición repentina del Abra.

Noir se acercó lentamente a Ester, con una expresión de curiosidad en su rostro.

-Así que eres un Abra... -dijo él, acariciando el pelaje del Pokémon con la punta de su espada. -Interesante.

07, por su parte, se rascó la cabeza, todavía sin poder creer lo que estaba viendo.

-Porque es mi vida así?

Ester se volvió hacia él, con una sonrisa radiante.

-¿Y tú quién eres? ¿También eres un amigo de Adrián y Sasha?

-Uh, no realmente, en realidad estaba a punto de dispararle al Vaporeon, antes de que el heredero me retara a jugar ruleta rusa.

-Oooooh, así que tu eres el que debo de matar? Ok, ok, buen trabajo yo!

-No, no, no, espera un momento, - Exclamó 07 - como que matarme?!

Después de que Ester explicara felizmente su rol como semidiosa y su trabajo de asesinar a las personas que no cumplan retos o verdades, Noir sonrió maliciosamente.

-Lucy, eres muy inteligente!

-Lo sé.

-Disculpen mi mala educación - Dijo Johnny nerviosamente - pero que esta pasando?

-07 aceptó el reto de Noir y, como resultado, Ester ahora tiene la tarea de matarlo si no cumple el reto. - Explico Lucy con indiferencia. - Es simple.

-¡¿Qué?! -gritó 07, retrocediendo unos pasos. - ¡Eso no es justo! No sabía en lo que me estaba metiendo.

Noir sonrió satisfecho ante la reacción de 07.

-Lo siento. Reglas son reglas. Tú aceptaste el reto, y ahora no hay marcha atrás. ¿Qué tal si empezamos a descargar ese revólver? Sólo necesitaremos una bala después de todo.

07 se quedó en silencio, sosteniendo el revólver temblorosamente en su mano.

07 aceptó renuentemente el reto, más cansado y frustrado que asustado.

Con un suspiro pesado, comenzó a descargar el revólver, preguntándose cómo había llegado a esta situación ridícula en primer lugar.

Después de que 07 descargara el revólver, Noir sacó una sola bala y la colocó en una de las ranuras del tambor del arma. Giró el tambor y lo cerró con un Clic.

Ester materializó una mesa de la nada, Noir y 07 poniéndose frente a frente entre esta.

-Bienvenidos a el mejor duelo que verán en la historia! De este lado, el heredero! Y del otro, 07! - Exclamó Johnny con entusiasmo - Sí 07 muere, el heredero será dejado en libertad, a pesar de los deseos de los líderes. Si el heredero muere, mataremos a todos aquí!

Mientras Noir y 07 se miraban en silencio, Volt aprovechó para susurrarle algo a Noir.

-Noir, por favor gana, no quiero morir, sabes?

-No te preocupes, mi amigo eléctrico. Lo tengo todo bajo control. El destino está en mis patas!

La cara de Volt se arrugó de preocupación, sobre todo porque estábamos hablando de Noir. Aunque acabara de conocerlo hoy.

La tensión era palpable en el aire. Sasha y Adrián se miraban, preocupados por lo que pudiera pasar. Aqua lloraba ligeramente, oh sorpresa. Ester parecía emocionada por el duelo que estaba a punto de comenzar, mientras que Johnny estaba completamente absorto en el espectáculo que estaba a punto de presenciar.

07 parecía nervioso, pero Noir parecía confiado y seguro de sí mismo. Con un gesto de la cabeza, Noir indicó que estaba listo para empezar.

Con las patas pesadas, 07 posiciono el revólver en la mesa y lo hizo girar.

El arma giró y giró, hasta que finalmente se detuvo, apuntando a 07.

07, tomando el arma, se apunta a la cabeza y da un largo suspiro.

Noir se mantuvo impasible, observando con atención cada movimiento de 07.

07 cerró los ojos y apretó el gatillo.

El clic del arma resonó en el aire, seguido de un suspiro de alivio de 07.

Todos se quedaron mirando su enfrentamiento, sudando profusamente y susurrando entre ellos.

Noir se limitó a sonreír dramáticamente y cogió la pistola con la pata. inspeccionándola por ninguna razón aparente.

Los ojos de Volt se dilataron, al igual que los de los demás. Sabía que su vida estaba en manos de Noir, y eso no sonaba nada bien.

De repente, Noir apuntó rápidamente a 07 y apretó el gatillo varias veces.

Clic, clic, clic, ¡BANG!

El disparo resonó por el aire cuando la bala se estrelló contra su cráneo, haciendo volar sangre y fragmentos de hueso.

Se desplomó contra el suelo, su cuerpo inerte y sin vida.

El grupo se quedó boquiabierto, sin palabras, mirando a Noir con incredulidad mientras éste se limitaba a soplar el cañón del revólver y se volvía hacia el grupo con una sonrisa socarrona.

-Os dije que nunca pierdo! -declaró triunfalmente.

El grupo se quedó en silencio, paralizados por lo que acababan de presenciar.

-Eso... eso no es hacer trampa? - preguntó Adrian.

Noir se encogió de hombros y se guardó el revólver en el cinturón.

-Trampa? Qué es eso? - preguntó con una sonrisa maliciosa en los labios.

Johnny, que había estado observando en silencio, se acercó al cuerpo de 07 y lo examinó.

De algún modo, se puso de rodillas y juntó las patas delanteras, en posición de rezo.

Al cabo de unos instantes, se levantó y se volvió hacia Noir.

-La condición era morir, así que técnicamente has ganado, enhorabuena, eres libre!

-Gracias, gracias! - dijo Noir mientras hacía reverencias a todo el grupo.

Ester materializó un micrófono justo delante de ella, sujetándolo con sus poderes psíquicos y adoptando una voz fingida.

-Enhorabuena te llames como te llames! Qué harás ahora que has ganado el duelo?

Noir se inclinó ante el micrófono y habló

-Bueno, originalmente planeaba vivir en este pueblo. Pero como podrás ver... - dijo, mientras hacía un gesto hacia los restos quemados del pueblo, - eso podría ser un problema...

-y mi casa sigue quemada - Añadió Volt melancólicamente

-QUE SE QUEMO LA QUE?! - exclamó Adrián en shock, olvidándose lo primero que había dicho Volt al llegar, - EN DONDE MIERDAS VAMOS A VIVIR AHORA?!

-Y justo cuando llego a vivir en una casa de verdad... - Murmuro Sasha para si mismo.

Ester miró al grupo con una sonrisa traviesa en su rostro y levantó las manos, concentrándose en sus poderes psíquicos. Con un movimiento rápido de sus dedos, pronunció unas palabras y, en un instante, la villa volvió a materializarse ante sus ojos.

Los edificios quemados volvieron a estar enteros, las calles rotas se arreglaron y los jardines marchitos se llenaron de vida. El grupo se quedó mirando boquiabierto la obra de Ester, sin poder creer lo que acababan de presenciar.

-Wooow! - exclamó Sasha. -No sabía que podías hacer eso, Ester

-Tienes poderes asombrosos! - dijo Johnny admirado.

Ester se encogió de hombros, como si fuera algo completamente natural para ella.

Sin embargo, antes de que pudieran disfrutar por completo de la villa restaurada, Adrián rompió el silencio con su frustración evidente.

-¡Esto es una broma! -exclamó enojado- No hay ningún desarrollo de personaje real cuando todo se puede arreglar con un simple chasquido de dedos. ¿Qué tipo de historia es esta?

Volt se acercó a Adrián y trató de calmarlo.

-No sé de qué hablas... Pero yo estoy feliz de tener mi casa de vuelta!

Adrián bufó, frustrado por la situación.

-Sí, pero... ¿y las lecciones aprendidas? ¿Las consecuencias de nuestras acciones? Todo se siente vacío si sabemos que cualquier problema puede ser solucionado fácilmente.

-Perdona mi lenguaje, querido rehén, pero no creo que haya consecuencias de nuestros actos de las que aprender - respondió Noir, levantando las manos en señal de inocencia.

-EXACTO! Ahora que Ester soluciono todo, no podremos crecer moralmente! Necesitamos algo que nos haga reflexionar, crecer como personajes!

Lucy se unió a la conversación, con una mirada pensativa en su rostro.

-El pez inútil tiene un punto. Las historias necesitan consecuencias para ser realmente significativas. No podemos simplemente resolver todos los problemas con un acto de magia.

-QUE SIGNIFICA "CRECER COMO PERSONAJES?! YO SOLO ESTOY FELIZ DE TENER MI CASA! - Exclamó Volt - AQUA, HAZ ALGO!

-Eh! Uh, y-yo digo que... uh... me gusta tener la casa de vuelta? En especial porque todo no está envuelto en llamas... - Aqua se encogió de hombros y sonrió tímidamente. - El fuego da miedo...

-Aqua. Eres un flareon. - Dijo Adrián con voz arisca, - como que el fuego da miedo?

Ester, quien había estado escuchando la conversación con curiosidad, decidió intervenir.

-Dedos de mozarela! - Exclamó, para después desvanecerse lentamente.

El grupo se quedó mirando perplejo el lugar donde Ester había estado levitando momentos antes. El silencio se apoderó de ellos una vez más, pero esta vez se sentía más pesado, cargado de incertidumbre.

-Qué acaba de pasar? - Sasha rompió el silencio, con una mirada de preocupación en su rostro.

-Ester tiene su propio camino y sus propias motivaciones. A veces, simplemente aparece y desaparece sin previo aviso. Es parte de su naturaleza. - Noir respondió con calma.

Adrián frunció el ceño, aún molesto por la situación.

-TU NISIQUIERA LA CONOCES! - Grito Adrián, su cuerpo relajándose básicamente al instante, soltando un suspiro - todo esto es simplemente... demasiado extraño. Nada tiene sentido. Qué paso con la coherencia y la lógica narrativa?

Justo en ese momento, cuando el grupo estaba sumido en sus reflexiones, un estruendo se hizo eco en el aire.

Desde el horizonte, el ejército completo de la Umbrafia apareció, cada uno de sus miembros cargando un cubo lleno de agua en las manos.
Y si, corrían en 2 patas, corrían desesperadamente hacia Johnny, gritando entusiasmados.

-Johnny, tenemos el agua! Estamos aquí para salvar el día!

Sin embargo, a medida que se acercaban al grupo, sus rostros se llenaron de confusión. Levantaron la mirada y descubrieron que el pueblo, en lugar de estar envuelto en llamas, había vuelto a la normalidad.

El silencio se apoderó del lugar mientras el ejército de la Umbrafia se detenía, desconcertado y con expresiones perplejas en sus rostros.

Johnny, que no podía contener la risa, se acercó al líder del ejército de la Umbrafia, que llevaba un cubo en cada mano, y le dio una palmada en el hombro.

-¡Lo siento, amigos! Las llamas ya no son un problema. Pero gracias por traer el agua de todas formas. Si alguna vez necesitamos extinguir un incendio invisible, sabremos a quién llamar.

Los miembros del ejército de la Umbrafia, confundidos pero dispuestos a aceptar la extraña situación, se encogieron de hombros y sonrieron.

-Bueno, al menos cumplimos con nuestra misión de traer el agua.

-Hablando de misiones, ¡Miren eso! ¡Es el heredero! - Comentó uno de los umbreon, apuntando a Noir con una pata, - Johnny encontró al heredero!

El grupo se volvió hacia Noir, quien permanecía en silencio mientras el ejército de la Umbrafia lo señalaba con entusiasmo. Noir les dirigió una mirada enigmática y luego se acercó lentamente al frente del grupo.

-Como pueden ver, maté a vuestro... "Semi" líder. Así que ahora sois libres de regresar a casa, - dijo, indicando con la pata al bosque, - vamos, iros ya.

-Uh... Johnny? - Pregunto un Umbreon incrédulamente.

-Sigamos sus órdenes. Es el heredero después de todo, ¡no desobedezcamos chicos! - Exclamó Johnny, haciéndoles un gesto para que lo siguieran rumbo al bosque.

El ejército de Umbrafia, aún confuso pero confiando en las palabras de Johnny, comenzó a marchar en dirección al bosque. Podrían haber preguntado qué fue de la misión de recuperar al heredero, o la repentina muerte de 07, o por qué el pueblo no estaba en llamas. ¡Pero eso sería aburrido!

El resto del grupo los observó hasta que Johnny se dio la vuelta.

-Un placer volver a verte Adrián, espero que nos veamos en otra ocasión!

Los ojos de Adrián se abrieron de par en par al ver que Johnny se alejaba de él. Echó una mirada a Volt, que ladeó su cabeza, confundido. Entonces, a Adrián se le iluminó la bombilla de las ideas y gritó.

-JOHNNY! ¡VOLT ESTÁ BUSCANDO UN UMBREON PARA VIVIR EN SU CASA! ¿TE GUSTARÍA--

pero pronto fue interrumpido por Noir, poniéndose justo delante de su hocico.

-Un umbreon para vivir en casa de Volt dices? No hace falta que me honréis tanto por haberos salvado la vida... pero si eso es lo que todos queréis, no me negaré a vuestros deseos...

-Qué... ¡NO! ¡NO TE QUIERO CERCA DE MÍ! JOHNNY, VUELVE.

Pero era demasiado tarde, Johnny ya había desaparecido en el bosque.

Adrián quedó paralizado por un momento, mirando con incredulidad el lugar donde Johnny había desaparecido. Sus intentos de detenerlo habían sido en vano, y ahora se encontraba frente a frente con Noir, quien parecía más que dispuesto a cumplir con su petición.

Noir se acercó a Adrián con su típica sonrisa socarrona y colocó una pata sobre su hombro, causando escalofríos en el Vaporeon.

-Oh, Adrián, no te preocupes. Seré un huésped muy... interesante. Compartiremos historias bajo el umbral de la luna, mientras vemos las llamas bailar en la chimenea.

Adrián retrocedió instintivamente y negó con la cabeza con vehemencia.

-No quiero a un Umbreon psicópata en mi casa! Johnny, ¡vuelve! ¡Por favor! - Grito Adrián.

Adrián cayo al suelo, arañando la tierra bajo sus pies. Observo el cielo estrellado, oscuro y brillante.

-Este es mi fin... Se acabo... Jamás seré feliz...

-No te preocupes, mi querido amigo pez, ¡seré el humilde protector del hogar! como agradecimiento por proporcionarme un lugar en el que esconderme... digo, en el que vivir.

Adrián se limitó a mirar al cielo con ojos apagados.

***

Volt estaba tumbado boca arriba, mirando al techo de la habitación principal. Era incapaz de conciliar el sueño, su mente estaba llena de pensamientos sobre Lucy y los misterios que encerraba.

La suave respiración de sus compañeros lo rodeaba. Adrián roncaba suavemente, Sasha dejaba escapar de vez en cuando suaves suspiros y la respiración de Aqua seguía siendo inestable.

Noir, la nueva incorporación al grupo se fundía en las sombras, creando una presencia enigmática. Volt no podía evitar sentir curiosidad por su historia, ansioso por desentrañar los secretos que guardaban.

Pero era Lucy quien más ocupaba sus pensamientos.

Su fría conducta y su mordaz sarcasmo parecían desvanecerse cuando dormía, revelando una vulnerabilidad que conmovió profundamente a Volt.

Volt reflexionó sobre la pregunta que resonaba en su mente, sus pensamientos arremolinándose en un mar de curiosidad.

-Por qué me ayudó?, - susurró para sí.

El recuerdo de ella ayudándole durante su ataque de pánico perduraba, dejando una marca permanente en su corazón.

La vulnerabilidad que ella había revelado brevemente, en contraste con su habitual fachada gélida, lo dejó perplejo, pero conmovido.

En el silencio de la habitación, la mirada de Volt se desvió hacia Lucy, que dormía plácidamente. No pudo evitar sentirse atraído por el contraste entre su exterior reservado y la ternura que había mostrado en aquel momento vulnerable.

Volt cerró los ojos y tomó una resolución silenciosa. Mañana encontraría la manera de entender mejor a Lucy.

Sabía que no sería fácil, pero estaba decidido a desentrañar las capas de su distante personalidad.

Pero mientras Volt sucumbía lentamente al abrazo del sueño, un trasfondo de malevolencia bullía entre los muros de Villa Calma.

La noche sin luna envolvía las calles en la oscuridad, dejando sólo un tenue destello de luz estelar para iluminar el camino.

La bóveda celeste centelleaba con pasión inquebrantable, como si reflejara la danza cósmica de fuerzas más allá de la comprensión mortal.

En medio de este ambiente etéreo, un Jolteon, el marido de una Umbreon y una presencia que Volt odiaba con envidioso desdén, deambulaba por la enigmática noche, con un profundo sentimiento de preocupación grabado en sus facciones.

No pudo evitar observar el estado transformado de la aldea, cuyos restos carbonizados habían recuperado una calma espeluznante.

-Peculiar, - susurró en voz alta, mirando al cielo nocturno. - La aldea ya no es una ruina humeante...

Perdido en sus pensamientos, el Jolteon continuó su solitario camino, sin percatarse de la figura que lo acechaba.

Absorto en su contemplación, tropezó con una diminuta criatura púrpura. Una forma que recordaba a una mancha gelatinosa.

Sorprendido, recuperó rápidamente el equilibrio.

-Oh, perdóname, pequeñín...? No te había visto, - se disculpó el Jolteon, con voz llena de curiosidad. - Qué te trae a este callejón, solo, en plena noche?

Para su asombro, la mancha amorfa empezó a transformarse, adoptando su propia apariencia. Un reflejo distorsionado que tenía un parecido cómicamente exagerado.

-Un momento, - protestó el Jolteon, con un tono incrédulo en su voz. - Se supone que eres yo? Porque debo decir que no soy tan poco atractivo. Mi amada esposa insiste en que soy un 8 sobre 10. Y para que conste, no soy tan bajo. El tono de amarillo está un poco apagado, y mi pelaje no parece un desastre desordenado como si acabara de salir de la cama después de una noche agitada.

La figura se le acercó lentamente, con su rostro artificial sumido en una perpetua expresión monótona. Inquieto, el Jolteon dio un paso atrás, con la voz teñida de una mezcla de cautela e inquietud.

-Por favor, quédate atrás. No te acerques más!

Peroantes de que pudiera pronunciar otra palabra, un grito desgarrador brotó de loslabios del Jolteon, reverberando en la noche. En un instante, desapareció en laoscuridad de las sombras, dejando tras de sí un aire de inquietante misterio.



Hola, soy yo otra vez. ¡P4lo27, investigador de las guerras civiles del cáncer, y el capítulo 6 ya está aquí!

El capítulo 6 es el más largo que hemos escrito, con más de 9000 palabras de puro caos.

Umbreon finalmente se une a la "Found Family :)", y me encanta su personalidad! Estoy tan felíz de finalmente presentar a Noir, y no puedo esperar al caos que traerá a la casa (si el caos normal no era suficiente).

Johnny también está presente, es un adorable miembro de la mafia que no haría daño ni a una mosca. El tipo de amigo que te saludaría con una gran sonrisa :D, mientras está robando el banco en el que trabajas.

Me encantó cómo resultó la escena del "Ataque de pánico". Creo que finalmente estoy mejorando en la descripción de las emociones.

Eso creo.

Por fin un poco de historia de Lucy. Aunque me encanta su frialdad y sarcasmo, siendo parte del "cliché Glaceon" en cada fanfic y todo, su distanciamiento simplemente no le permite interactuar tanto como los demás.

¿Por qué actúa así? ¿Qué pasó con el Jolteon en el callejón? ¿Seré alguna vez amado por alguien aparte de mi familia?

Espero que os guste este capítulo tanto como a mí, como en todos los capítulos, agradecería cualquier crítica/sugerencia o pregunta que tengáis. Y prepárense para el terror que les espera a Volt y a su "Found Family :)"

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