❀ forbidden 1/?❀
ANGST;
El cielo se había tornado gris, una fuerte tormenta se avecinaba pero afortunadamente había salido temprano de la empresa. No tenía mucho que hacer, mi padre pedía mi presencia únicamente para trabajos menores y para que me fuera adaptando al ambiente de trabajo.
Caminé hasta el suburbano, cada vez que daba un paso miraba a los lados para estar seguro de que no hubiera nadie siguiéndome. Con el paso de los años me había vuelto un paranoico de mierda, el miedo era parte de mi rutina y este sólo se disipaba cuando estaba con él. Mi celular sonó, era un mensaje.
"Enfrente de ti" decía. Levanté la mirada y poco más allá de la entrada al suburbano estaba un audi estacionado. Miré por última vez a mis costados y me apresuré a llegar al automóvil.
-Te extrañé –Ni siquiera había terminado de acomodarme en el asiento cuando unos labios tomaron los míos con desesperación.
-Estás loco, Johnny. Pudiste haberte estacionado en la parte trasera de la empresa, espero que nadie nos haya visto.
-Tranquilo, amor. Estoy seguro de que nadie te ha visto, bueno...lo dudo, yo no te puedo quitar la vista de encima y menos con ese traje que te aprieta tan bien.
Las manos de Johnny se posaron sobre mis muslos, provocando un temblor en mi cuerpo. Podrían pasar años y mi cuerpo reaccionaría a su toque como la primera vez.
-¿Y tu chofer?
-Pidió el día libre. Y no puedo irme con mi papá porque él irá a otro lado saliendo de aquí.
-Hoy debe ser nuestro día de suerte.
Sonreí, desde que había empezado a laborar en la empresa mis encuentros con Johnny se redujeron a uno cada dos semanas y eso si encontrábamos la oportunidad. Extrañaba su calor, pasar tiempo con él, sus besos, sus abrazos...y esa sensación de protección que sólo él sabía darme.
Como siempre, el miedo había desaparecido. Pero una sensación de inquietud seguía presente, el sosiego era temporal, al igual que lo mío con Johnny. Aunque ambos preferíamos no hablar al respecto.
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-Joder, ¡Johnny! m-más rápido, mhn...
Enterré mis uñas en su espalda y gruñó en respuesta, las estocadas aumentaron de velocidad al punto en que el sonido de nuestras pieles chocando inundó por completo la habitación. Pronto también se le sumo el sonido de mi celular, por lo que Johnny bajó el ritmo y comenzó a besarme el rostro mientras yo tomaba el aparato.
-Mierda, es mi papá.
-Contesta.
-¿Bueno? –Johnny comenzó a mordisquear la piel de mi cuello por lo que lo golpee en el hombro para que se detuviera.
-¿Mark?, ¿dónde estás? pensé que saliendo de la empresa te vendrías directo a casa.
-Ah, sí, es que...-Johnny comenzó a moverse dentro de mí otra vez, por más que intenté no podía disimular, amaba la forma en que él me tomaba y tuve que cubrirme la boca con una mano ya que empecé a gemir muy bajo.
-¿Mark? ¿Estás bien? Te escuchas agitado.
-¡Sí!, estoy bien. Saliendo de la empresa vine a ver a un amigo, papá...ya voy para la casa.
-Está bien, no tardes mucho ¿de acuerdo? tenemos visitas.
-S-sí.
Dejé el celular a un lado y le solté un golpe más fuerte en el hombro a Johnny que hizo a este reír.
-Eres un idiota.
-Le hubieras dicho la verdad. "Vine a follar a casa de John, papá"
Solté una muy suave carcajada que fue callada por sus labios, me besó de una forma muy dura mientras volvía a penetrarrme de la forma que lo estaba haciendo antes de que la llamada nos interrumpiera.
-D-debo ir a casa, John...t-tenemos visitas...
-Todavía no termino contigo...-Unió nuestras frentes mientras se movía con más fuerza, incluso la cama había comenzado a rechinar - Te iré a dejar.
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Le había pedido a John que estacionara unas cuadras lejos de mi casa, la sola idea de que un empleado de mis padres nos pudiera ver en una comprometedora escena helaba mi sangre. Él no se negó, nos despedimos con un beso y comencé a caminar a casa mientras la lluvia mojaba mi traje, mi corazón seguía sintiéndose cálido después de nuestro encuentro. Las únicas veces que me sentía vivo y feliz, eran a su lado.
-Buenas noches, joven Lee. Sus padres y sus invitados lo están esperando en el salón.
-Muchas gracias, ¿de casualidad sabes quienes son los invitados de mi padre?
-Los Lee de Corea, señor.
Intenté disimular mi sorpresa, los Lee de Corea tenían bajo su mando una empresa presente en toda Asia, era de esperarse que la reunión fuera con el único fin de hacer negocios. Agradecí antes de retirarme y dirigirme al salón, no me había cuestionado lo extraño que era que mi padre pidiera mi presencia para una cuestión de negocios, nunca lo hacía así que probablemente se trataba de algo más.
Al llegar saludé, identificando rápidamente al señor y la señora Lee y a su hijo menor, Haechan.
Mis padres y los de él estaban sentados juntos en unos de los lujosos sillones que había en el salón, mientras que él estaba sentado solo en otro sillón frente a ellos y lo único que los separaba era una elegante mesita en el centro.
Al no tener opción me senté a su lado, guardando espacio entre nosotros ya que el sillón en el que estábamos era enorme.
-Chicos, iremos al grano –Mi madre sacó del saco que llevaba puesto una pequeña cajita negra, la colocó en la mesa no sin antes abrirla, dejando ver dos hermosas sortijas que me hicieron temblar en mi lugar- Se casaran en dos meses.
Si en ese momento mi corazón seguía con la cálida sensación que había dejado el encuentro con Johnny, esta ya no existía más. El chico a mi lado miró con admiración las sortijas, no dijo nada al respecto, simplemente asintió mientras mantenía una sonrisa que claramente era falsa.
Yo por mi parte sentí ganas de vomitar, mis ojos comenzaron a picar y el aire me faltó por unos segundos.
-¿Me permiten un momento?
Me levanté de mi lugar no sin antes haberme percatado de la cara de los 4 adultos frente a mí, quienes me vieron con clara indignación por mis repentinas ganas de huir. No solía negarme a la voluntad de mis padres, nunca había sido así hasta hoy. O más bien, hasta hace 2 años, cuando conocí a John en la universidad y nos enamoramos.
Mi vida amorosa antes de él no existía, claro que había besado, claro que me habían gustado personas. Pero nunca llamé a alguien "mi pareja" hasta que lo tuve a él y pensé tanto en las consecuencias que decidí que sería mi más preciado secreto.
Lo nuestro no era formal pero era sólido. O tal vez si era formal pero era un secreto de ambos, yo no salía con nadie más y él tampoco, nos pertenecíamos a pesar de todo, miles de veces me ilusione con la idea de presentarlo como "mi novio" ante mis amigos y mi familia...y aunque esa ilusión siempre había estado rota, ahora estaba hecha polvo.
Salí del salón a tomar aire, respiré profundo un par de veces antes de que mi padre llegara a alterar la poca calma que luchaba por mantener.
-Hijo, no nos hagas enojar. Regresa y ponte el anillo, no sé en que momento te volviste tan malcriado, nunca nos habías hecho una escena así.
-Perdón.
Regresé sin siquiera poder mirar a mi padre, el hijo de los Lee ya tenía puesta su sortija y, apretándome el corazón, yo tomé la mía y me la coloqué también.
-Bien...queridos, esto hará un bien a ambas empresas. Se casaran dentro de dos meses, sin embargo, estarán viviendo juntos para conocerse, etc. Tenemos todo para ustedes, una linda casa en el centro con todo lo que puedan imaginar. Ustedes dígannos cuando estén dispuestos a mudarse.
-Estoy dispuesto a hacerlo ahora mismo, suegra.
"suegra", "suegra", escuchar a ese chico llamar así a mi madre me hizo sentir pésimo otra vez.
-Yo igual.
-¡Muy bien!, esto finalmente es trato hecho.
Nuestros padres se abrazaron mientras que yo ni siquiera podía mirar al chico a mi lado, él que sería mi esposo. La lluvia se intensificó en aquel momento por lo que la mudanza se programó para la mañana del día siguiente, yo no pude pegar un ojo en toda la noche así que me dediqué a leer los mensajes de John y ver algunas de nuestras fotos. Me sentí tan masoquista e idiota.
Al día siguiente al medio día ya estaba en mi "nuevo hogar" con mi "futuro esposo", el chico era una joya. Sonriente, de actitud animada, todo lo contrario a mí que estaba demacrado y desvelado.
-Amor, hice el almuerzo. Ven a comer.
-No me llames así.
Comimos, intentó hablar conmigo infinidad de veces pero yo no salía de los "ajá", "bueno" y respuestas cortas. Persistió en llamarme "amor" y terminé dándome por vencido, las últimas horas fueron una explosión de emociones que me dejó agotado.
Cuando la noche cayó él insistió en hacer algo juntos pero me negué y me fui de casa, fue tras de mí pero lo ignoré olímpicamente. Tenía que ir a ver a Johnny.
Había comenzado a hacer mucho frío y yo sólo traía puesta una chaqueta delgada, me abracé para guardar un poco de calor mientras seguía caminando por las estrechas calles. Entonces lo vi ahí, fuera del lugar donde trabajaba mientras fumaba un cigarrillo y tenía toda la pinta de un maleante, entonces comencé a pensar en lo mucho que me gustaba.
En lo mucho que me gustaba su pinta de maleante.
En lo mucho que me gustaban sus besos y abrazos.
En lo mucho que me gustaba en sí.
Me fui acercando a él y no se percató de mi presencia hasta que estuve lo suficientemente cerca para que me reconociera, su tranquila expresión cambió a una de verdadera sorpresa.
-Cariño, ¿qué haces aquí?
Ahora que estaba enfrente de él las palabras no me salían, ¿cómo le dices a la persona que amas que tu vida ya está escrita y ella no está incluida? Hasta ese momento comencé a sentir una fuerte desesperación que terminó de partirme el corazón, el sentimiento fue tan fuerte que me derrumbe en el interior.
Yo no era consciente de que mi rostro reflejaba cada una de mis emociones, tampoco fui consciente de cuando comencé a llorar y a sollozar tan fuerte que Johnny se vio igualmente afectado.
-Me casaré en dos meses. –Mi voz salió en un hilo tan roto que me sorprendió que Johnny me entendiera.
Y entonces el brillo en los ojos de Johnny tembló. Él era mi fortaleza, él era quien me motivaba seguir día a día y ahora...estábamos igual de rotos, sin opción a siquiera ayudar a sanarnos.
El semblante volvió a uno serio y frío, la fragilidad que había visto anteriormente en sus ojos se había disipado. Volvió a darle una calada a su cigarrillo y ahora evitaba mirarme a los ojos.
-Es algo que tenía que pasar, ¿no? –El poco tacto con el que había dicho esas palabras me había terminado de matar. ¿Cómo es que podía tomar las cosas tan a la ligera?- Fue divertido, Mark. Regresa a casa con tu esposo, se está haciendo tarde.
-¿Divertido?...¿fui sólo algo que te dio diversión?...-En mis palabras se podía ver el dolor que me causaba que Johnny me hablara de esa forma, nunca lo había hecho, jamás- ¡Finge por lo menos que te duele!, ¡me he puesto en peligro frente a mi padre por ti!, ¡porque te amo!
-¿Me amas? –Una burlona carcajada salió de sus labios y yo me sentí humillado, pocas veces hablaba de mis profundos sentimientos hacia él y ahora que lo hacía se mofaba- Yo te escucho muy dispuesto a casarte, Mark.
Llamaron a Johnny dentro del lugar donde trabajaba y se alejó sin decir nada más, yo tampoco dije nada más, en realidad me sentí sin fuerzas. Estaba herido, mi corazón dolía y me sentí tan frustrado que la cabeza me empezó a doler también.
¿Se había terminado?, ¿lo mío con Johnny había terminado? Sí, completamente.
Sentí mi cuerpo pesado y antes de volver a llorar comencé a correr. Corrí, corrí con todas mis fuerzas de regreso a casa, las lágrimas me nublaban la vista pero no me importó.
Tampoco me importó cuando comenzó a llover, seguí corriendo.
Tampoco cuando me tropecé y raspé las rodillas, me levanté y seguí corriendo.
Media hora después llegué a casa, con la ropa empapada por la lluvia, las rodillas raspadas y los ojos un poco hinchados por el llanto.
Entré a casa sollozando, sólo esperaba no ser oído por Haechan. Fui al cuarto de baño para ducharme, el agua caliente me reconfortó por 15 minutos y salí emocionalmente más estable de la ducha.
Cuando llegué al cuarto Haechan estaba acostado leyendo un libro, pude sentir su mirada sobre mí cuando entré y yo únicamente traía puesta la bata de baño.
-¿Cenaste fuera? –Negué- Deja te preparo algo para cenar.
-No quiero nada de ti.
La voz de Haechan me pareció más estresante de escuchar, había tomado del armario una pijama para ir a dormir a la sala, realmente no me imaginaba compartiendo la cama con él esa noche. Estaba por pasar la puerta del dormitorio cuando sentí algo golpeándome en la cabeza, un cojín.
-¡Eres un maldito egoísta! ¿Crees que eres el único que está sufriendo con esto?, ¿crees que estoy feliz por casarme con un completo desconocido?
La voz de Haechan resonó en la habitación, aguda, rota. Tal como yo había sonado cuando fui a hablar con Johnny. No me giré para verlo, simplemente me quedé estático en mi lugar.
-Soy el menor de dos hijos –empezó a contar- hace 7 años estábamos a nada de quedar en la quiebra y entonces...casaron a mi hermana con un empresario de 50 años cuando ella había apenas cumplido 17. –Seguía sin verlo, pero estaba seguro de que estaba llorando- Él abusaba de ella, la golpeaba...pero papá no hizo nada porque ese señor ayudó a salvar nuestra empresa. ¿Tienes idea del miedo con el que he vivido desde entonces?...
Se escuchó como el colchón se movía y después unos pasos se iban acercando hasta quedar detrás de mí. Sentí unos brazos rodear mi cintura en un abrazo, ni siquiera tenía fuerzas para alejarme de Haechan otra vez.
- No pude evitar que mi padre me viera como cualquier mercancía bajo su poder, tal como lo hizo con mi hermana, pero si de algo estoy seguro es que he corrido con más suerte que ella.
Llevó una mano hasta mi pecho descubierto, donde empezó a acariciarme de una forma que me tranquilizó pero a la vez hizo que recordara una cosa más.
Johnny.
El toque de Johnny era dulce, lleno de afecto, lleno de admiración. Mientras que el de Haechan era áspero y lleno de un deseo tan crudo que me hacía sentirme asqueado.
-¿Podemos disfrutar esto poco que tenemos?...podemos sanarnos juntos, amor...
Mis ojos comenzaron a empaparse de nuevo. ¿Podíamos sanarnos juntos?, ¿Haechan podría hacerme olvidar a Johnny?
Me giré y lo besé, lo besé con tanta fuerza que gimió debajo de mí y por un momento quise alejarme de él pero no, seguí, y también seguí cuando le comencé a quitar la ropa y él a deshacer el nudo de mi bata.
Todo fue duro, frío, tan superficial. Entonces tuve la respuesta: No.
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¿Qué puedo decir?, prometí este AU desde hace mucho y recién lo subo xd lo cierto es que ya lo tenía desde hace tiempo pero finalmente aquí está y no será únicamente de una parte👀
Por otra parte, ¡Johnmark room ya tiene más de 100 votos y 800 vistas! gracias por el apoyo😭💕
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