
𝐄𝐱.
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Jungwon tenía un novio, Park Jay, si, como leyeron bien, tenía.
Devolvamos en un tiempo atrás, en dónde Jungwon conoce a Jay de una manera peculiar, en dónde tuvieron sin fines de citas y salidas juntos, hasta que hubo un prolema.
La intimidad.
Jungwon era alguien que no se denominaba cómo penoso, timido o inseguro, el sabía que él era un buen hombre en todos los sentidos, tenía un cuerpo que hasta el hombre más heterosexual desearía follarse, un cuerpo de envidia para las mujeres.
Pero Jungwon quería hacer las cosas bien, a él le gustaba Jay de una manera inigualable, sentía que era su otra mitad, el hombre de su vida y sus sueños.
Que equivocado estaba.
En la actualidad, Jungwon estaba en un dilema de preguntas en dónde se suponia que respondería la duda más grande, ¿Podría hacer el amor con Jay? El se estaba preparando para aquella noche, iban a cenar, luego a no se, talvez un bar y luego al gran penhouse de Jay, en dónde dejaría sus miedos y daría ese paso por primera vez en tres años.
Jay no llego ni a la cena, así que Jungwon decidió pasarse por el penhouse de este a saber cómo estaba, estaba preocupado.
Error.
Se acercó a la habitación, había algo que no le cuadraba mucho, la chaqueta de Jay estaba en la sala, habían copas de vino recientes porque el vino aún estaba fresco y no del todo seco, la habitación se encontraba entre abierta, y de ella, saliendo sonidos claramente obscenos.
Quedó con cara de poker, ¿que estaba pasando?, era una de las preguntas más imbeciles que se le habían cruzado por su cabeza, pues era más que obvio lo que pasaba allí, Jay lo estaba engañando, con otra persona.
Se retiró de ahí lo más rápido posible, pero antes dejando cerca de una copa el anillo de noviazgo de cuando cumplieron 1 año, y con despecho salió del lugar, intentando no vomitar ante los tantos sonidos repugnantes que salían del lugar.
Camino solo por las calles frías de Seúl hasta que llegó a el famoso bar al que iba a asistir con Jay, quería olvidar aquellos de sus pensamientos, no quería saber nada de él y el alcohol fue lo primero que penso.
Llevaba una hora y media tomando, no tenía intenciones de irse aún, ya que no había tomado lo suficiente, según el.
Hasta que sintio cómo alguien se sentaba a su lado, casualmente, pidiendo whisky, Jungwon lo miro, el tipo estaba concentrado en su celular pero el suyo lo saco de la ensoñación.
—Digame—contesto.
—Jungwon, lo siento, estaba ocupado con unos proyectos de la empresa, amor, ¿que tal si vienes a mi casa, en dónde estás?—Jay...
—Jodete Jay—fue lo último que dijo antes de colgar y pedir otro vaso de lo fuerte que están tomando mientras lloraba en silencio, la música del lugar no dejaba salir sus sollozos pero el tipo y el camarero si habían visto que estaba llorando, reclamando el vaso, se lo tomo de golpe mientras se tomaba la cabeza entre las manos.
¿Tan descarado era par decir que estaba ocupado con cosas de la empresa?
¿Tan descarado era para decirle "amor" cuando dos horas antes se estaba follando a quien sabe quién en la cama donde dormían las mayoría de sus noches juntos?
Joder que mierda todo, pensaba.
—Oye, ¿estás bien?—pregunto alguien a su lado.
—Estoy bien, no te preocupes, solo algo mareado.—sorbio su nariz y siguió pidiendo trago.
—No deberías tomar más, ya estás ebrio.—Dijo el tipo, quitándole el vaso con el cual iba a pedir de nuevo.
—Eso no es prolema tuyo, no te metas—Le dijo con mirada sería, viendo al tipo a los ojos.
—Vamos a hacer algo, si quieres seguir tomando te invito un vino, pero en tu casa, no aquí.
—¿Porque debería confiar en ti?—le dijo con desconfianza.
—Soy Lee Heeseung, el dueño de Lee model's— y así Jungwon acepto tomar vino.
Cuatro años después.
—¿Que haces tu aquí?—pregunto viendo el tipo en la entrada de su lujosa casa.
—Vine a ver a Jungwon, Lee, eso no te importa.—Le dijo, gruñendo en sus palabras, importandole poco la poca ropa que traía el alto.
—Pues, mi grandioso esposo está ocupado en estos momentos, no tiene tiempo para ver imbéciles.—Le respondio con una sonrisa socarrona.
—¿Ah si?, porque no lo llamas y—Jay fue interrumpido por Un chillido tras Heeseung.
—Seunggie, amor, tardas mucho, estoy muy mojado—Dijo Jungwon, sonrojado, con una sonrisa coqueta y con solamente una polera de Heeseung en su cuerpo que tapaba hasta sus muslos, sin percatarse de la persona en su puerta se colgó de la espalda de su esposo.
—Estaba lidiando con un imbecil bebé, pero no te preocupes vamos a solucionar tu culo mojado ahora.—Dijo con una sonrisa socarrona y sin quitarle el contacto visual a Jay.
—¿De que imbecil—y se cortó a si mismo viendo a Jay en su puerta.
¿Que había pasado? Bueno, cuando Jungwon conoció al caliente de Heeseung en un bar el mismo día que rompió con Jay, este le había ofrecido tomar vino en su casa con tal de que ya no siguiera bebiendo, pero no sé esperaba que antes de llegar a la casa Jungwon ya estuviera durmiendo, se lo imagino, era predecible, pero habían posibilidades de que el chico a su lado despechado y con el corazón roto quisiera beber más.
Así que ese mismo día Heeseung durmió al lado de Jungwon, escuchándolo a la madrugada levantandose a llorar, el estuvo uniendo partes del chico que no sabía que estaban rotas.
Y la actualidad Jungwon y Heeseung ahora eran esposos, después de 1 año de amistad y 3 años de noviazgo lograron casarse y dar aquel paso que tanto temía Jungwon.
Jay, bueno, el sin saber que Jungwon ya sabía de aquella traición, y sin querer reconocer su error de haber dejado ir al chico más precioso del planeta, siguió tras Jungwon, insistiendo en que todo fue un error, que el se arrepentía de aquello.
Claro que Jungwon tuvo crisis existenciales por aquello, pero el nunca dudo de su relación con Heeseung, no ahora que estaba casado y en unos años un hermoso hogar funcional.
Y aquella visita de Jay era una de muchas en la semana en diferentes partes, la casa y el trabajo, en mensajes y llamadas, no sabía que pasaba con Jay, estaba seriamente obsesionado con el tema de hace 4 años.
—Basta Jay, vete, te he dicho más de quinientas veces que NO te quiero ver, es más que obvio, deja de estar rogándome, estoy casado con Heeseung y ya no te amo, el tonto que lloraba por ti ya no existe, el Yang Jungwon que buscas no está, ahora es Lee Jungwon, así que vete y no vuelvas.—le dijo con el seño fruncido molesto de las interrupciones en la parte más interesante del juego con su esposo.
—Ya escuchaste al jefe, largate Park, no vuelvas.—Le dijo cerrandole la puerta en la cara, Jay se quedó aquí helado en la puerta escuchando los pasos y las risas dentro de la casa cada vez más lejos.
—Te amo seunggie, ahora, ¿porque no continuabamos en dónde estábamos?—le dijo coqueto subiendo las escaleras con perversidad sabiendo que Heeseung estaba mirando sus piernas y su culo, que estaba tan mojado que había comenzado a derramar de aquel líquido por sus piernas, cosa que lo hizo más caliente.
—Joder que si, esperaba el momento en el que Jay se fuera para joderte, aunque bueno, pude haberte follado frente a el, para que viera que tú ya no le perteneces pero no toleraria que el mirara tu cuerpo.—Le dijo tomandolo por la cintura, sentandolo en sus piernas ya una vez sentados en la cama besándolo en el proceso.
—Nunca le pertenecí, supongo que me estaba guardando para mi alma gemela, mi caliente alma gemela—Gimio gustoso con una sonrisa la última frase al sentir como Heeseung introducía dos dedos dentro de su mojado agujero.
—Joder Jungwon, eres tan follable, no aguanto más.—Saco los dedos de el, volteandolo sobre la cama, poniéndolo en cuatro, comenzando a quitarse el boxer y masturbarse un poco ante la caliente escena de Jungwon con sus piernas abiertas y su apetecible culo para el y solo para el, dejando de tocarse, azotó uno de los glúteos de su esposo, introduciéndose en el a la vez que este se quejaba en un gemido placentero por aquel golpe y aquella penetrada de imprevisto.
—Oh Heeseung!~ mgh~— le dió una y otra vez en el mismo lugar, dejándole el glúteo rojo, y maltratandole el punto dulce.
—Oh que estrecho estás Jungwon—Le dijo mordiendole el hombro, mientras le penetraba más profundo, Jungwon cambio de posición y se sentó ahora sobre Heeseung.
—Oh Heeseung ~ seunggie, seunggie~—Gimio con ganas, saltando sobre el, viendo que el otro le tomaba por la cintura con una mano y con la otra le quitaba la camisa para luego proceder a chuparle el pecho, mordisqueando su cuello y clavícula, junto a los pezones después.
Hasta que los dos se corrieron.
—Te amo, te amo mucho seunggie.—Le dijo acostándose junto a Heeseung mientras se recostaba en su pecho.
—Yo te amo más mi bebé, te amo más de lo que te puedes imaginar siquiera —Le dió un beso cariñoso, sentido con amor y Jungwon rio con ternura.
—¿Salimos?—pregunto Jungwon.
—Si, acepto.—Y rio feliz al sentirse cargado al estilo princesa hasta el baño.
El anterior capitulo no llego a la meta pero yo quería actualizar por el día de San Valentín y porque hubo vlive HeeWon teniendo una cita!! 😭😭
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