— ¡¡Maestro!! ¡¡Maestro!! ¿Dónde estás? ¡Maestro, sal rápido!

— ¡¡Maestro! ¡¡Sal rápido, nos vas a matar!! ¡¡Maestro!!

Una pequeña figura escondida en la oscuridad del jardín se movió, y su cabecita que había estado mirando la luna brillante en el cielo se giró lentamente. Finalmente, saltó de una gran piedra pulida, se dio unas palmaditas en la ropa y salió de la oscuridad.

— ¡Uh! ¡Maestro! — La criada vestida de verde esmeralda corrió rápidamente, se agachó y comenzó a sacudir al niño, diciendo: — Estabamos tan ansiosos, Maestro, ¿a dónde fuiste?

— Aprecio la luna. — la voz clara de un niño parecía mezclarse con la luz de la luna, y el oyente se sintió suave en el corazón. Mirando a través de la luz de la luna, vio que era un niño de unos cuatro o cinco años, con una cara tan delicada como la porcelana, sus ojos eran grandes y llorosos, una punta recta de la nariz, una boca delgada y de color rojo brillante, una cara pequeña de forma ovalada con una elegante punta en la barbilla y una cabeza de cabello negro brillante con rizos rebeldes. Por toda su cabeza, Este niño se veía un poco ridículo, pero con un rostro tan exquisito, también muy lindo.

Es una lástima que este niño que es tan hermoso tenga mala actitud, cuando vio a la criada acariciando su ropa, su carita inmediatamente se arrugó, la empujó, y este se tambaleó y con su voz inmadura infantil gritó con disgusto. — No me toques.

Esta doncella vestida de verde era nueva aquí, por lo que, naturalmente, no estaba calificada para servir al joven maestro. Hoy fue enviada a buscarlo a toda prisa. Se olvidó del problema del joven maestro con el contacto físico y miró al niño limpiándose con las manos lavropa con cara de disgusto. Parecía aturdido por aquel acto.

El niño se limpió las manos mientras las sacudía, y regañó sin levantar los ojos: — Eres un cerdo, hoy en día hasta los cerdos pueden vender a sus hijas... ¿Nadie te dijo que no me tocaras cuando entraste en nuestra casa? Si no puedes recordar una cosa tan pequeña mereces ser una sirvienta el resto de tu vida, date prisa y lárgate.

Aquella criadita solo tenía quince o dieciséis años, al ser humillada por un niño que de altura era más bajo que la base de su muslo, sus ojos se pusieron rojos y casi lloró.

En ese momento, comenzaron a sonar pasos a lo lejos, y una criada vestida de rosa tierno corrió apresuradamente: — Joven amo ah, la próxima vez no juegue con nosotras así, el pato mandarín rojo casi se muere de ansiedad.

Aquel pequeño joven maestro la miró de reojo y dijo con desdén. — Eso es porque son estúpidos, si me quedara en el lugar donde ustedes me buscarían, ¿no sería igual de estúpido que ustedes, humph?

Después de decir eso, se dio la vuelta con sus pequeñas manos en la espalda y se alejó, su mirada juvenil y madura dejó estupefactos a los adultos presentes.

A pocos kilómetros de la Aldea de la Familia Wang.

— ¡Xiao Hu! ¡Pequeño Tigre! Vamos a jugar! — Un niño de siete u ocho años, de cabeza ancha, cara grande y aspecto sucio, se paró frente a su patio y gritó con todas sus fuerzas.

— ¡Ven! Voy a comer mi último bocado! — En menos de un segundo después, un niño salió corriendo de la casa.
Era un niño, de unos cinco o seis años de edad, bronceado, tenía un par de grandes ojos blancos y negros. Se veía particularmente brillante y toda su persona tenía un aire de ser un poco tonto. Estaba lleno de energía y sus brazos y piernas no podían estar quietos por mucho tiempo. Hizo algunos saltos mortales aprendidos en el escenario, que le parecieron bastante buenos.

Una mujer de mediana edad le persiguió y gritó a todo pulmón: — ¡¡¡El niño aún no ha terminado de comer!!!

El grupo de niños se rió y salieron corriendo sin dejar rastro.

El niño llamado Xiao Hu preguntó emocionado al chico que le había llamado: — Da Wei, ¿a qué jugamos hoy?

Da Wei fingió una sonrisa misteriosa. — Hoy he encontrado un lugar divertido, te garantizo que nadie ha estado allí antes, esto es un secreto. Todos deben mantenerlo en secreto. Nadie puede contarlo, quien quiera que lo cuente, ¡Nunca más volverá a jugar!

Cuando el niño escuchó el secreto, sus ojos se abrieron con emoción, asintió con la cabeza y dijó que nunca se lo contarían a alguien.

Da Wei es el mayor aquí, es como el rey de los niños en esta zona. Aunque a veces le gusta intimidar a los demás, siempre puede encontrar a alguien que piense en divertirse. Además, es el más grande, por lo que todos le tienen miedo. Le gusta seguirlo y nadie se atreve a ofenderlo, de lo contrario nadie se preocupará por él en el futuro.

Los niños siguieron los movimientos de Da Wei durante casi media hora, riendo y haciendo ruido, y llegaron a un lugar en el que nunca habían estado antes.

— Vaya, qué valla más alta. — Wang Erhu levantó el cuello y miró un muro imponente frente a él. Este muro no solo era alto, sino también largo tanto que ni siquiera podía mirar a su alrededor.

Da Wei palmeó la valla con orgullo: — ¿Saben qué es este lugar?

Los niños se esfuerzan por apretujarse en la maleza que es casi tan alta como ellos, imitaron a Da Wei y acariciaron la pared rugosa, como si hubieran descubierto un nuevo tesoro. Después de todo, nunca encontrarían una pared tan alta en su Shaojia. Decir que hay alguna familia rica y noble en unas pocas millas a la redonda, sólo puede ser ......

— ¿La residencia del General Yue?

Da Wei dijo con orgullo: — Así es, es la Mansión del Gran General.

Esta ciudad de Dayue es la ciudad natal del general Yue Yinggui. El General Yue luchó en batallas victoriosas en la frontera sur de Xinjiang y se hizo famoso, pero de repente renunció y regresó a su ciudad natal, por lo que construyó una mansión en su tierra ancestral.

Se dice que esta Mansión Yue es lujosa y grande. Aunque el General Yue ya no es un general activo, la gente de la Ciudad de Dayue todavía lo adora como a un dios.

Se dice que esta mansión Yue es extremadamente lujosa, más grande en toda la Aldea Wangjia, nadie sabe exactamente qué tan grande. Todos saben dónde está la entrada principal, pero nadie sabe cuántas millas se extiende por dentro.

Varias niños miraron a Da Wei con adoración, preguntándole cómo lo había encontrado.

Da Wei sonrió con orgullo: — Mi tío trabajó a tiempo parcial en la Mansión Yue durante el Festival de Mayo y estaba quitando las malas hierbas junto a la Mansión del General. Vine con él en ese momento, pero no esperaba que las malas hierbas crecieran tan rápido... Entonces fue cuando descubrí un secreto.

Varias personas estaban tan ansiosas que babeaban y todos miraron a Da Wei con ojos brillantes.

El rostro de Da Wei casi se echó a reír. Agitó la mano: — Esperen un momento, buscaré la marca que hice. — Después de decir eso, Da Wei se agachó junto a la pared y comenzó a mirar. De hecho, vino aquí varias veces después. Esta vez, vió dónde estaba la marca de un vistazo, pero deliberadamente intentó presumir ante ellos.

Efectivamente, no mucho después, gritó exageradamente que lo había encontrado.

Los niños se arremolinaron y preguntaron qué buscaba.

Da Wei estaba casi enterrado, ocupado en apartar a la gente que le rodeaba. — ¡Sé sincero! ¿Por qué se amontonan?. Tómense su tiempo. Vamos, Xiao Hu, Xiao Tao, Daming, arranquen la maleza de este suelo.

Algunas personas quedaron atónitas por un momento, luego inmediatamente se dieron cuenta de lo que estaban haciendo y comenzaron a arrancar la maleza. Las personas a su lado, que no fueron nombradas, pensaron que eran lentas y comenzaron a arrancar la maleza también.

Después de un tiempo, se arrancaron todas las malas hierbas, la pared desnuda quedó expuesta gradualmente y también quedó expuesto un agujero oscuro en la raíz de la pared.

Todos los niños gritaron sorprendidos y Wang Erhu se arrastró por el suelo sin decir una palabra y miró dentro del agujero. Desafortunadamente, el agujero estaba demasiado oscuro, por lo que solo podía ver un poco. Miró el tamaño del agujero y éste era suficiente para que un niño de su tamaño entrara.

Por un momento todos entendieron y se emocionaron, pero habían algunos que estaban un poco asustados.

Da Wei señaló la entrada del hoyo. — ¿Qué te parece? No sé cómo se creó este hoyo para perros. De todos modos, cuando mi tío y yo vinimos a arrancar las malas hierbas, lo enterré con tierra para que nadie más se diera cuenta. Con este agujero tal vez podamos ir directamente a la Mansión del General.

Todos los presentes contenían la respiración y estaban demasiado nerviosos para hablar.

Para niños como ellos, la Mansión del General es un lugar tan misterioso y sagrado, y las personas que viven allí son tan inalcanzables como dioses. La hija de una familia de la aldea de Li de al lado fue seleccionada para ser sirvienta en la Mansión del General. La aldea de Li estaba muy orgullosa de esto. En años anteriores, cuando la hija de la familia Li regresaba a casa, la recibían con una ceremonia en el pueblo lo más solemne.

Escucharon a la hija de la familia Li hablar de lo lujoso y magnífico que era la casa del general. Los aleros tienen incrustaciones de oro y los pisos están cubiertos de plata. Las puertas tienen incrustaciones de perlas luminosas del tamaño de un puño. La gente de toda la aldea de Li es tan guapa como ángeles. Los niños como ellos están inundados de saliva. No sé cuántos niños están decididos a ir a la Mansión del General para hacer algo cuando crezcan. ¡Hazlo, realmente sus antepasados estarán orgullosos!

Todos miraron con deseo el oscuro agujero de perro, como si al pasar por allí encontraran el mundo de los inmortales.

Pero por un momento todos dudaron. Aunque todos querían probarlo, nadie se atrevió, ni siquiera Da Wei. De lo contrario, ¿por qué les contaría a los demás algo tan bueno y no se lo guardaría para él solo?

Si esta agujero para perros no conduce a la Mansión del General, se sentirán decepcionados por un tiempo, pero y si es verdad, serán decapitados si son atrapados por la gente de la Mansión del General.

Por un momento todos miraron a Da Wei.

Da Wei gritó: — Mírame, no puedo entrar. No se dan cuenta de que el agujero es tan pequeño. — Todos lo midieron con sus propios ojos. Da Wei era alto y gordo, cubierto de carne. Efectivamente sería un poco difícil meterse.

Los niños miraban a Da Wei y este miraba a los niños a ver quién se atrevía a entrar primero.

Da Wei les gritó: — Quisiera ser capaz de entrar. No estoy dispuesto a decirles algo tan bueno sin hacer nada. Es porque ustedes son mis subordinados. El jefe no puede simplemente aprovechar las cosas buenas solo. No me decepciones. Hemos llegado muy lejos hoy y alguien debe entrar y explorar el camino.

Por un momento, todos encogieron la cabeza. Aunque la Mansión del General era una gran tentación, si los decapitaran, no quedaría nada.

Cuando Da Wei vio que nadie se acercaba, se molestó un poco. Señaló a todos y dijo: — ¿Por qué son tan cobardes? Simplemente van entrar a explorar el camino y no a entrar a robar algo. Si no funciona, olvídalo no es necesario. Entra, da un vistazo desde el agujero y regresa inmediatamente. También tendrás la oportunidad de ver la mansión del general. En el futuro, además, esta cueva será más pequeña. Incluso si alguien la descubre, ¿no se puede simplemente volver a cavar?

Dicho esto, nadie se atreve a hacer esto.

Da Wei se impacientó y señaló con su dedo corto y gordo junto a él. — ¡Wang Erhu, entra!

El niño al que llamaron se quedó atónito por un momento y luego gritó: — ¿Por qué... por qué debería ir yo?

Da Wei lo jaló por los hombros y casi lo arroja contra la pared. Señaló el agujero y dijo: — Mira lo delgado que estás, puedes entrar.

— Ellos también son delgados. — señaló Wang Erhu a varios otros niños.

— Ambos son hijos únicos. ¿No tienes dos hermanos?

El niño dijo ofendido y agresivamente: — Entonces Daming y Bao Sheng también tienen hermanos, y Bao Sheng también tiene una hermana ...

Da Wei lo fulminó con la mirada y dijo enojado: — ¿De dónde sacas tantas tonterías, vas a entrar?  Si no entras, no jugaremos más contigo.

Los demás también asintieron vigorosamente.

Después de todo, todos quieren saber qué tipo de mundo hay al otro lado de la cueva, y nadie se atrevía a ofender a Da Wei, sobre todo dejar que Wang Erhu, ese niño estúpido, entrara en su nombre era bueno para todos.

El niño estaba tan incómodo que casi lloró. Maldijo mentalmente a Da Wei, ese bastardo lo intimidaba. Cada vez que debían hacer algo sucio, agotador o peligroso le pedían que lo hiciera. Otros están esperando verlo hacer el ridículo, pero si no juegan con él, nadie se preocupará por él, así que solo puede soportarlo, porque su familia es pobre y no puede permitirse comida deliciosa ni diversión. Da Wei tampoco es inteligente. Nadie es amigable con él ni lo mira.

Esta vez también, todos querían saber qué había adentro, pero nadie se atrevió a entrar. Él también tenía miedo de que lo decapitaran, pero nadie entró, así que tuvo que entrar. Si no entra ya nadie jugaría con él en el futuro.

El niño miró a Da Wei con lágrimas en los ojos. Da Wei también tenía algo de conciencia y lo consoló: — No tengas tanto miedo. ¿No te dije hace un momento que es posible que no puedas pasar por el agujero? Incluso si lo consigues no salgas del agujero del otro lado. Mira. Sólo una mirada será suficiente. Si alguien te encuentra, regresa inmediatamente. Si vuelves rápido los adultos no podran atraparte. Te esperaré afuera. Prometo esperar a que regreses, ¿de acuerdo?

El niño miró vacilante hacia el agujero, Da Wei le dio una palmadita en el hombro. — Mientras vayas esta vez, te dejaré ser el subjefe a partir de ahora, ¿qué te parece?

El chico se emocionó un poco y miró a Da Wei: — ¿De verdad?

— Claro que es verdad, a partir de ahora serás más grande que todos ellos, ¿lo han oído todos? Mientras Xiao Hu nos lleve a abrir el camino, será nuestro subjefe a partir de ahora.

Los niños respondieron y asintieron.

Da Wei también fue inteligente. Le dio una palmadita en el hombro de Wang Erhu y dijo: — Pero no hagas bromas. Si vuelves antes de llegar al final y luego insiste en que no puedes. Si lo dices, enviaré a alguien para que lo mire. Si mientes no jugaré más contigo, ¿entiendes?

El niño Wang Erhu asintió y luego, muy trágicamente, miró con la mirada ansiosa a sus amigos, luego se metió en el oscuro agujero de perro.

Este libro se va a actualizar muy lentamente. Así que si quiere guardarlo en su biblioteca y leerlo dentro de unos meses puede.

Voy a tardarme porque estoy trabajando en otro libro, no les he contado pero me dedico en la vida real a traducir libros que van a salir al mercado latinoamericano. Obviamente es como un grupo y soy parte, pero wattpad es mi mundo anónimo y aparte no me gusta decirlo por todos lados. Este es mi lugarcito para hacer otras traducciones que me gustan. ¿Y ustedes a que se dedican?

Bueno luego voy a colocar días de actualización, pero por el momento aun no se cuando subiré el otro cap.

Si hay algún error no olvide avisarme, soy traductora no editora por lo que por ahí se me pasan las cosas.