「N/A: dedicado a strangelady2 , espero te guste, aunque seguro no entiendas nada idk.♡」

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Se habían apartado del omega porque lo que iba a confesar aquel extraño no debería de escucharlo alguien de aquel mundo. Cuando se encontraban un poco alejados, el señor se asegura de que no los escuche y, por las dudas, crea una burbuja invisible que sirve para que el sonido dentro de ella quede allí.

Se empieza a quitar lo que le cubre el rostro, sacándose el sombrero y la bufanda que usó para taparse parte del rostro, dejando al descubierto su identidad.

—Antes de que digas algo Yoongi hyung, quería decirte que nosotros nos encontraremos bien. Seokjin sabe acerca de esto y te puede observar a través del Seokjin de aquí, y tus padres ya se encuentran en su casa, felices y mejor. —el mayor de ambos todavía seguía en shock por lo que no pudo refutar nada.— Te traje a este mundo porque me lo habían asignado... no me habían dicho el porque si no hasta meses después de que te encuentres aquí, y aunque les reclamé para que pudiera traerte nuevamente a nuestro mundo, no me dejaron. ¿Recuerdas aquella vez que soñaste que volvias y nos encontrábamos en el departamento que comparto con Jin hyung? Pues, fui yo quien con ello te hice ver que nos encontrábamos bien, y que te extrañamos...

》Este encuentro fue un pequeño error mío, todavía no era el momento en que nos cruzariamos para preguntarte si querías quedarte aquí o volver con nosotros, pero se me fue de las manos el tiempo con otra persona y nos chocamos. Pero ya que te quedarás, te daré algo para que puedas comunicarte con nosotros cuando quieras... a tu familia le informamos que te habías ido de viaje a otro país, pero si quieres hablar con ellos puedes avisarme.

Mete su mano dentro del bolsillo que había dentro de la chaqueta de cuero que tenía puesta, saca un collar en forma de corazón, el cual se podía abrir a la mitad y se podía observar una foto de los tres juntos.

—Con este amuleto podrás comunicarte conmigo... solo tocas la fotografía y esperas unos minutos y ya.

Le dio un abrazo y, reventando la burbuja, desapareció. Yoongi, solo pudo acariciar el collar mientras tenía una sonrisa cálida en su rostro.

Ese recuerdo se repetía una y otra vez durante los últimos días, sabía que al estar muy pensativo estaba preocupando a Jiminie; todavía no entendía muy bien si era porque quería saber sobre su familia o hablar con sus amigos.

Pasaron unos meses luego de que Namjoon se apareciera y le explicara todo lo sucedido, en ese plazo de tiempo no se había atrevido a probar lo que se le había dicho sobre el amuleto. Pero luego de meditarlo por varios días, tomó la decisión de intentarlo.

—¡Yoongi hyung! —, se oyó el grito del omega, frunce el ceño al ser interrumpido y guardando el amuleto comienza a dirigirse hacia donde se encuentra su pareja.

Lo encuentra en la sala jugando con un gato que reconoce muy bien. Sonríe por lo tiernos que se ven. Desde que se habían mudado juntos, Jimin se había tomado algunas libertades que no se le permitía al vivir con sus padres.

—Yoonie, dile a Kookie que se deje colocar el collar... ha entrado en celo y no quiero que venga un alfa vecino —. Dice haciendo un puchero al hablar, haciéndolo lucir tierno.

—Meow~ meow, meow~

—¡No! Debes colocartelo, sino le diré a Jin hyung que ya no lo quieres más

Ante esa distracción, Yoongi se fue acercando a ambos omegas para colocar el collar que, según tenía entendido, se usaba como un supresor para cuando los omegas entraban en celo en su forma gatuna.

Jungkook al estar peleando con su amigo, le toma por sorpresa cuando de un momento a otro siente algo rodearle el cuello. Al mirar para un costado, ve que se trataba de Yoongi hyung y, aun bajo el efecto del celo, se aparta de su amigo y se pasa por el regazo del no-beta.

—Ya, Jungkookie, pronto vendrá Seokjin y te llevará a tu casa —. Habló el mayor de los tres, comenzando a acariciar al felino. Al levantar la vista se encuentra con la mirada filosa de su omega, pero solo puede soltar una pequeña risa porque sabe que se encuentra celoso.

Luego de unas horas, Yoongi y Jimin se encontraban acurrucados en la cama viendo una película de suspenso/terror. Aunque el omega todavía se encontraba un poco enfadado con su hyung por no haber apartado a su amigo de su regazo.

Pero no puede hacer nada si Yoongi seguía repartiendo suaves caricias por su cabellera, tocando con delicadeza sus sensibles orejitas. Poco a poco un suave y relajante ruido se comienza a escuchar por la habitación, y no era nada más que el ronroneo de Jimin.

—Jiminie, te amo solo a ti, nada ni nadie logrará que el amor que siento por ti se vaya como si nada.

Al escuchar esas palabras, el susodicho no puede evitar sonreir satisfecho; no es que sea posesivo, no lo era y no lo va a hacer, solo que al ver que su amigo omega estando en celo se empiece a restregar en el regazo de su beta, no no, simplemente no.

—También lo amo, hyung.

Responde entre el ronroneo, al sentir el aroma de Jungkook, suelta de a poco del suyo para que opaque el de su amigo.

—Jimin... — llama el mayor luego de unos minutos en silencio.

—¿Si, hyung?

—No te he dicho, pero... ¿te acuerdas del hombre que podía llevarme a mi mundo? —. Preguntó con un poco de cautela, todavía era un poco sensible aquel tema para el menor. Al verlo asentir, suelta un suspiro pequeño y sigue hablando,— bueno, resulta que no era un desconocido, sino que es uno de mis amigos, Namjoon, quien luego de aclarar el cómo llegue aquí me dio un amuleto para poder comunicarme con ellos... y estaba pensando en qu-

—Tranquilo Yoonie, entiendo que quieras hablar con ellos y con tu familia —. Interrumpió el omega con voz compasiva, ahora entendía porque su hyung se la pasaba perdido en sus pensamientos cada que lo encontraba solo.— no debes darme explicaciones, sé que si me separaran de Kookie o de mis padres también quisiera por lo menos tener una llamada con ellos.

—Lo sé, cariño, lo que quería preguntar es si quieres conocer a mi padres...

Aquello si lo dejó sin palabras, ¿conocer a los padres de su novio? ¿Acaso este sentimiento fue el que sintió Yoongi al conocer a los suyos? Es lo que se preguntaba Jimin luego de la sugerencia del mayor.

—Entiendo que todavía no estés preparado, Jiminie...

—¡No! Digo, no hyung, si quiero. Solo me tomo por sorpresa —, le regaló una sonrisa para luego dejar un casto beso en los labios del contrario.

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Al cabo de una semana, luego de conocer a los padres de su novio, se encontraba más contento y feliz. Sentía que en verdad la relación que tenían cada vez se fortalecía más y más.

Tuvo una buena impresión con sus suegros, realmente le habían caído bien y él a ellos; sin embargo, temía que cuando los señores Min pidieran para verlos y ellos tuvieran que negarlo se llevara la decepción de los adultos.

—Jiminie~

Llamaba Yoongi al pequeño felino que se encontraba en la rama del árbol del parque al que habían ido para que el omega se relajará.

Las pocas personas que pasaban por donde se encontraban miraban divertidos la escena, mas nadie se animaba a ayudarlo; como todos allí, suponían que Yoongi era el alfa del omega, que claramente no lo era ni será así. Ese era un pequeño inconveniente, algo que acusaba una inseguridad a Min, pero que Jimin se encargaba de distraerlo para que no se carcomiera la cabeza en cosas absurdas (palabras del menor).

—Vamos cariño, sino no llegaremos a tiempo a casa de tus padres.

Volvió a intentar, pero nada funcionaba. Soltando un suspiro solo se sienta debajo de éste a esperar por su bonito novio, se cruza de brazo y con un poco de cansancio cierra los ojos.

Todavía le resultaba frustrante oler los peculiares aromas de los demás, aunque ya no le afectaba tanto como en un principio; es más, ahora disfrutaba de algunos, aunque su favorito era el de su pequeño.

Se acuerda que cuando Jimin se graduó del colegio le presumió a todos sus compañeros que eran pareja y, como un niño pequeño, les saco la lengua al despedirse de todos para ir a reunirse con sus familiares y pocos amigos. Al igual que marcarlo cada que algún omega o alfa se le acercaba mucho.

Todo ya le resultaba normal, con el Hoseok de este mundo se había hecho amigo luego de disculparse por el golpe que le había dado. Claramente le inventó un porqué, no podía decirle la verdad, lo tacharía de loco y ya le bastó sentirse de ese modo las primeras horas de cuando apareció allí, en Busan.

Ahora, junto a Jimin, los amigos de éste y los suyos, se encontraba más que feliz y cómodo. Podría afirmar que más de lo que sencontraba en su mundo.

—Meow~

El pequeño y delicado maullido en su oído hizo que se asustara, haciendo también que saliera de sus pensamientos. Sonríe al gatito que estaba a su lado, comenzando con unas pequeñas caricias por la cabeza y parte del cuello.

—¿Ya te aburriste, cariño? —. Pregunta en tono dulce, no le molestaba cumplir con algunos "caprichos" que tenía su omega, porque debía admitir que a él también le gustaba esos momentos.

—Meow —. Maulló nuevamente, cerrando sus ojitos ante los mismo que recibía.

—Bien, entonces vayamos a casa a prepararnos Jimin-ah

Y con eso dicho, tomo en brazos al felino que con gusto se dejó llevar y el mayor comenzó su rumbo hacia la casa que ambos compartían.

Con una hermosa sonrisa, de a ratos dejaba pequeños besos al omega y aquello hizo que el relajante ronroneo se pudiera escuchar.

Una vez en la comodidad de su casa, todavía con el omega siendo un gatito, ambos se encontraban recostados en la cama. Jimin sobre el vientre de Yoongi y con éste proporcionándole suaves caricias.

—Jimin-ah...

Se escuchó el susurro poco perceptible, pero que el susodicho levantando sus orejitas y poniedose atento sobre lo que diría su pareja.

—Di meow~

Y con un sentimiento cálido, el aroma del menor se volvió más intenso. Colocándose de pie aún sobre su hyung, camina hasta quedar cerca del rostro ajeno.

—Meow~

(💮)

Fin.