10. Final
Naruto
Aquella escena me tenía perturbado en más de un sentido, mis amigos, las personas de mi aldea y otros ninjas luchaban a mi lado contra aquel desastre.
Todos estaba depositando su esperanza en mí y aquello definitivamente me hacía sentir abrumado.
La última mirada que le di a Satomi, aquella sonrisa que compartimos y como su cuerpo se interpuso ante aquel ataque...
«—Te amo, Naruto.»
Jamás podría imaginar mi vida sin aquella chica. Sin la chica a la cual amo.
«—¡Satomi-chan!
—Termina con esto, Naruto. No hagas que mi sacrificio sea en vano.»
Satomi había estado conmigo desde que éramos unos niños solamente, sus sonrisas alegraban mi corazón y yo sentía que al menos alguien me quería en mis momentos de soledad.
«—Naruto-kun tiene una sonrisa muy linda, no deberías llorar por cosas que personas tontas dicen. ¡Tú sonrisa puede alumbrar hasta al más oscuro de los corazones!–dijo la pequeña pelinegra para lanzarse a abrazar al pequeño que lloraba.»
Satomi siempre impulso mis sueños, me apoyo, curó mis heridas y espero por mi incluso cuando tuve que dejarla.
«—Puedes lograrlo, Naruto. Sé que llegaras muy lejos. ¡Serás el mejor Hokage de todos! Ya verás que volverás siendo todo un hombre.–balbuceo la chica entre lágrimas mientras le abrazaba a la entrada de la aldea.»
Después de todo Satomi y yo éramos demasiado parecidos en muchos aspectos y ambos estábamos solos.
«—Sabes, Naruto, desde que tengo memoria hemos sido vecinos y fuimos huérfanos desde siempre... Tal vez el destino quiso juntarnos para que no nos encontráramos tan solos.–anunció la chica mientras ambos observaban las estrellas en cielo. Esa fue la primera vez que ambos habían tomado sus manos con un nuevo sentimiento en sus pechos.
Desde aquel día supieron que jamás volverían a estar solos, al menos mientras se tuvieran el uno al otro.»
Cuando Sasuke se fue ambos sufrimos de la misma manera, Satomi adoraba a aquel idiota como si fuera su hermano y el, él era mi mejor amigo.
«—Ese... Ese teme...–las lágrimas no dejaban de caer por su rostro mientras abrazaba al rubio en aquella camilla de hospital.—Es un imbécil... ¿Cómo pudo haberte hecho esto para irse con la serpiente? ¡Lo odio!
Con sus pocas fuerzas el chico le abrazaba, el también se cuestionó aquello, pero compartir el dolor era mejor que cargarlo el solo.»
Recuerdo los días pasar, cuando Satomi estuvo conmigo en mis peores momentos y también en los mejores, cuando hablamos de gustarnos, cuando hablamos de nuestros sueños y metas.
«—Lo siento tanto, Naruto.–murmuró la chica mientras le abrazaba fuertemente.
Ella sabía muy bien lo mucho que él quería a su pervertido sensei.»
«—Tu... Tu salvaste a la aldea.–la chica le abrazo fuertemente.—Estoy tan orgullosa de ti, rubio idiota.»
Cuando descubrimos que ambos queríamos formar una familia en un futuro.
«—Algún día quisiera tener mi propia familia.
—También yo, Satomi-chan, así dejaríamos de estar tan solos.
—En un futuro... ¡Tú y yo tendremos nuestra propia familia Naruto!—anunció la chica con entusiasmo.
Aquel fue el día donde ambos se besaron haciéndose aquella promesa.»
Y ahora, aún cuando todos los problemas habían terminado y me enfrentaba en una última pelea con Sasuke no podía evitar sentirme triste y perturbado al recordar todos aquellos momentos.
Porque Satomi Haruki, mi Satomi.
La chica a la cual he amado desde que éramos solo unos niños ha muerto.
Y eso es algo que el tiempo no podrá cambiar jamás.
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Wait whaaaaaat?!
P.d. Aún falta el epílogo c:
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