Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 28.

Eros D'Angelo.

Aulló con fuerza al pasar por el territorio de la manada de los leones. Todo está en silencio, su respuesta no se tarda en llegar, sonrió con agradecimiento aunque él no pueda verme.

Le demos una a este alfa.

Diego se adelanta saltando, frena oliendo por todos lados.

Me detengo oliendo, gruño mirando a ambos lados, al salir de este bosque nos adentraremos en el territorio de nadie y hay muchos demonios sueltos, esto debe ser culpa de ese bastardo.

Diego y yo nos damos una última mirada asintiendo.

Empezamos a correr miró por el rabillo del ojo y salto encima de Diego arrancándole con mis manos la cabeza a uno de ellos, seguimos nuestro camino.

Freno de golpe y rápidamente Diego y yo nos agrupamos.

Maldición nos tendieron una trampa, nos llevaron justo por dónde ellos querían.

Gruñimos cuando se hacen presentes, su hedor se hace presente, sus figuras grises se mueven por todo el lugar, estamos rodeados.

Me lanzo por uno de ellos lo sacudo hasta lanzarlo hacia otro lado, ambos caen al suelo, gruñó. Esquivó a uno de ellos, pero no logró con el otro, soy lanzado y mi espalda choca contra un árbol.

Caigo a su suelo, gruñe levantándome lentamente.

—¿Estás bien? —Diego se mueve mirándose.

—Estoy bien —

—¿Tan fácil se puede vencer al gran Eros? —

Niego con una sonrisa, me alzó con orgullo mirando a Carlos en la copa de un árbol, cae con gracia encima de un demonio, su hedor se intensifica al quedar complemento aplastado por mi él imbécil de mi primo.

—No sabía que mi primo se dejaba vencer tan fácil, lo hubiera sabido y yo mismo te daría una paliza —

—No te creas imbécil, solo me agarraron desprevenido, ¿Que haces aquí? Según sé, tú estabas con tu humana y tú hermano —

—Lo estaba, pero no podía quedarme de brazos cruzados sabiendo que mi linda Jan fue secuestrada, ella es mi amiga ¿Sabes?—

Gruño mirándolo.

—¿Desde cuándo sabías que los estaba siguiendo? —Lo miró saltando hacia atrás.

—Desde que salimos de la manada, ahora acabemos con esto bastardo y vamos por mi mate —

—Por fin dices algo coherente primo —

Su mirada juguetona desaparece.

El plan de pasar desapercibido ya no se usará, me vuelvo lobo erizando mi pelaje gruñendo con enojo, los mataré hasta que no quede uno.

Miro hacia el frente lanzandome al ataque, cada paso que damos los cuerpos caen, muevo mi cabeza gruñendo, sonrió lobuna mente al oler a un bastardo cerca, empiezo a correr, aulló con emoción al verlo salir huyendo, me lanzo hacia él jadeando gruño enterrando mis caninos en el estómago, arrancó la piel lentamente escuchando sus gritos de dolor.

—Por favor no me mates —

—¿Por qué mi primo no debería hacer eso?—Carlo se mece, hasta quedar boca abajo en una rama de un árbol.

Terminó de arrancar la piel lanzadola, entierro mis caninos en su brazo derecho y lo empiezo a jalar poco a poco.

—¡Por favor piedad! —El vampiro grita con dolor.

—No sabía que los vampiros también sentían dolor .—Diego bosteza mirándolo con una sonrisa.

—Yo siento dolor igual que ustedes bastardos—

Respira con dificultad.

Sin detenerme le destrozó el brazo el brazo hasta arrancarlo, llevo mi hocico hasta su cuello enterrando lentamente mis caninos allí. Sus gritos poco a poco disminuyen, pelea para que lo suelte, aprieta mi cuerpo intentando que lo suelte, pero eso solo hace que intensifique mi agarre en él hasta pasar sus huesos y escuchar el crack al quebrarle el cuello.

Lo siento lamiendo mi hocico, lo miró y él mantiene sus ojos abiertos fijos en el cielo.

Carlo cae al suelo convertido en un enorme lobo blanco, lo toma por el brazo izquierdo y nos mira.

Vamos, esto será divertido .—Empezamos a caminar hasta llegar al límite de la manada del bastardo.

El plan de pasar desapercibido con los trajes de aquellos chupasangre se fue a la basura cuando aparecieron los demonios y nos convertimos en lobos .—Diego dice.

Pero tenemos esto —

Carlo muerde el cuerpo del vampiro en los lugares justos para envolverse con su olor, Diego y yo hacemos lo mismo hasta estar cubierto de olor de los chupasangre.

Maldición huelo a muerto viviente, que puto asco .—Diego hace una mueca.

Nos adentramos mirando a nuestro alrededor, los lobos pasan y nos dan una mirada, pero siguen su camino.

No podemos matarlos a todos, hay muchos niños, mujeres y personas mayores que no tienen la culpa .—Carlo mira a nuestro alrededor.

Mi corazón se estruja al ver las condiciones en las que están.

Todos visten harapos y están cubiertos de suciedad, observó a un niño caer al suelo y uno de los guerreros golpearlo.

—Maldito ladrón ¿Crees que no te haríamos nada? A los ladrones y pocas cosas como tú lo único que les espera es la muerte —

Caminó con lentitud hacia él, levanta nuevamente el látigo, él niño se retuerce del miedo, me alzó detrás del lobo bastardo, él niño me mira asombrado con sus ojos enormes ojos grises.

Por la diosa debe tener solamente un año, Carlo llega cubriendo al niño con su cuerpo.

—¿Que…—No termina su oración.

Mi ira crece, y sin importarme nada, le arranco la cabeza, la escupo hacia un lado.

Aulló con fuerza aplastando la cabeza, mi aullido retumba por toda la manada.

Mi respiración es irregular, miró. Diego se vuelve humano y asiento hacia él.

—Todos vayanse al bosque y no salgan de allí hasta que el nuevo Alfa se alce en victoria—

—En el bosque hay demonios .—Un anciano se acerca.

—No, no los hay .—Diego vuelve a ser humano.

Carlo se aleja del niño, me acerco a él pasando mi lengua por su mejilla, él se ríe, lleva sus pequeñas manos hacia mi cabeza y cierra sus ojos.

—Alfa yo lo cuido .—Una mujer se acerca gruño asintiendo —Nada malo le pasará, confíe en mí —

Lo toma entre sus manos, él pequeño llora estirando sus brazos hacia donde estoy, me acerco a él, lamo su mejilla ronroneando hacia él.

Eros .—Carlo dice asombrado en mente.

Debemos movernos .—Nos alejamos.

Miro una última vez al pequeño y salíamos corriendo hasta la casa del alfa.

Me detengo con mi corazón a mil, al sentir a mi mate, cierro mis ojos escuchando su acelerado corazón.

Aulló al verla correr hacia nosotros, hacia mí, salta arrancándole la cabeza aún vampiro, esquiva un lobo, para luego darse la vuelta y arrancarle también la cabeza, el cuerpo lo uno de este cae al suelo.

Corro hacia ella, cierro mis ojos rojos ronroneando juntando nuestras cabezas.

Cuando nos separamos al verla a los ojos caigo en cuenta que está fuera de sí.

Janelle .—Habló en su mente y su respuesta en un aullido.

Su olor a dulce me lo hace saber.

Mataré a ese bastardo.

Janelle no es ella misma, esa la única forma de contrarrestar el afrodisíaco en su cuerpo —

—Vamos por el bastardo—

Carlo sale corriendo se lanza en contra de un muerto viviente, caen al suelo este entierra sus garras en el rostro de él hasta bajarlas y enterrarla y retorcerlas en el estómago.

Janelle lo imita lanzándose a la guerra.

Me siento observándola, pareciera que baila, juguetea con sus presas hasta matarlas.

Gruño saltando hasta agarrar a uno por la cabeza y lanzandola a la pared, este cae al suelo, se levanta y corre hacia mi. Pegó un salto volviendo ser humano, lo agarró por el cuello estrellándolo nuevamente al suelo, vuelvo a ser humano, pisó su estómago, llevó mi hocico hacia su cabeza y se la arrancó.

Mi pelaje poco a poco se tiñe de sangre, me sacudo a uno que se tira encima de mí, me volteó cayendo de espalda, cuando no lo siento me paro, aplastó su cabeza, llevo mi hocico hacia una de sus piernas jalando esta desprenderla.

Levantó la cabeza al oler un olor conocido.

Dolores intenta escabullirse.

Janelle gruñe mirándola.

Amistosamente golpeo su hombro, lamo su mejilla y ella me voltea ver con una sonrisa.

No la mates, hazle lo que quieras, pero luego déjaselo a Diego —

Aunque esté fuera de si, ella me entiende.

Salta emocionada y corre hacia ella.

—No .—Sale corriendo huyendo de mi hermosa mestiza —Eros por favor .—Me mira mientras me acerco.

Sonrió negando.

Fuiste capaz de casi asesinar a algunos de los miembros de nuestra manada, jugaste con mi mejor amigo, tu mate, lo usaste y violaste ¿Crees que te mereces perdón —

—Perdoname, yo lo hice por ti, entiéndeme te amo aún lo sigo haciendo, todo esto es por ti—

—¿Me amas? —Ella asiente —¿Todo esto es por mi? —Vuelve a asentir—Mi hermosa mestiza ya la escuchaste, otra loba quiere robarte a tu mate .—Dolores abre sus ojos negando al ver acercarse mi mate a ella.

El poderoso gruñido de mi mestiza se escucha.

—¡PIEDAD! —Grita al sentir una de las garras de mi mate pasar lentamente por su rostro.

Ella se retuerza de un lado a otro intentando zafarse del agarré de mi Janelle.

Me siento en mis patas traseras viendo está obra majestuosa, observando a mi mate feliz.

Lleva su hocico hacia la mano izquierda y se la arranca de un tirón.

—¡No! —Su grito es música para mis oídos.

Se retuerce, mi Janelle se mueve hasta con una de sus garras quitarle un dedo de su otra mano, se sienta mirándola y bosteza.

La aburriste .—Dolores me mira con lágrimas en sus ojos.

Janelle se levanta, la toma por el cabello arrastrandola por todo el lugar, Diego se sienta en sus patas traseras con una sonrisa mientras que Janelle le tira a sus pies a Dolores.

—Por favor perdóname .—Murmura escupiendo sangre.

Mi amigo niega con una sonrisa.

Un enorme lobo color cobre viene hacia nosotros, gruño, pero este salta aterrizando al otro lado y encontrandose con otro negro.

—Beta ya hice lo que me pidió .—Un joven se acerca con la respiración acelerada, Janelle le gruñe y este cae al suelo.

Vuelvo mi vista al frente observando la lucha entre estos dos alfas, el cobrizo le muerde la pata trasera y salta hacia atrás, vuelve al ataque salta y gruñe.

Lo está cansado.

Jhon se detiene gruñendo, jadea y se lanza contra el lobo cobrizo. Este busca rápidamente el cuello de Jhon y, sin esperar mucho, lo lanza hacia un árbol, camina con lentitud hacia él lamiendo sus caninos, se monta encima de él presionando su cuerpo, me mira y gruñe.

Luego mira a Janelle.

Asiento hacia ese lobo, está pidiendo nuestra autorización para acabar con él.

Es la única forma de poder reclamar esta manada, sabe que tenemos cosas pendientes, pero si no lo mata no podrá quedarse con la manada.

Le arrancan la cabeza llenando su pelaje cobrizo de sangre.

Aulla con fuerza demostrando que ahora él es el nuevo alfa de la manada.

Cae al suelo volviendo a ser humano y ante nosotros se muestra una mujer de cabellos rojos, él hombre que estaba a mi lado camina hacia ella tendiendo una manta.

Ella se levanta y camina lentamente hacia nosotros.

Miro hacia el cielo.

Debemos irnos si queremos llegar rápido.—Carlo me dice llegando a mi lado.

—No llegarán a tiempo a sí corran con todo lo que tienen, además de que la beta no está muy cuerda que digamos .—Miro a mi mate que le gruñe al verla muy cerca de mí, me alejo acercando a ella qué ronronea al colocar mi mano en su cabeza.

—No importa debemos intentar, nuestro alfa nos necesita.—Carlo vuelve a ser humano quedando desnuda, la mujer desvía la vista a él—Puedes ver más no tocar alfa, este sexy híbrido ya tiene dueña .—Estoy seguro que la humana lo va a matar si se entera de lo que dijo y más cuando sepa que está desnudo.

—Lastima, eres tan hermoso .—Ella muerde sus labios.

Una fuerte luz nos hace cerrar nuestros ojos con fuerza y ante nosotros un portal se abre.

—Perdón la tardanza Saskia .—Un hada sale parándose frente a ella.

—¿Hasta ahora llegan? ¿Saben que uno de los suyos secuestró a nuestra luna? —Carlo gruñe observando al hada.

—No es uno de los nuestros, no más, lo sabemos, pero no podíamos actuar hasta que el alfa estuviera en el territorio de las sadhas, por eso estamos aquí, los llevaremos —

—Ok, me conformo con esa respuesta.—Carlo se da la vuelta, camina y le quita la ropa a los vampiros para luego colocarsela —Ya no huele a muerto viviente.—Se encoge de hombros cuando la hada la voltea a ver, Diego lo imita.

Vuelvo a ser humano, la vista de la hada se desvía a mi cuerpo.

Mala idea.

—Maldición .—Me visto rápido —Mi mestiza mira ya me vesti .—Le hablo cuando está por arrancarle el brazo a la hada, mi Janelle me mira y ronronea moviendo su cola.

Ella gruñe junto mis cejas, bajó la vista observando una lanza atravesada en mi estómago.

Poco a poco la camisa se tiñe de rojo.

—¿Qué? —Caigo de rodillas tosiendo sangre.

—Eros .—Carlo y Diego corren hacia mi.

—Fabiola ¿Que hiciste?—La hada mira asombrada detrás de mí, con mucha dificultad miró a una rubia mirarme con una sonrisa, Janelle pasa por encima de mí y lo último que escucho es el grito de dolor de la hada antes de caer en la oscuridad.

Debí despedirme de mi mestiza, debí decirle cuanto la amo, debí....








¿Fin?...








¿Cómo están?

¿Les gustó el capítulo?

Dejen sus opiniones, me encantaria leerlos.

Muchas gracias a todas esas hermosas personas que estuvieron desde el comienzo conmigo, que se unieron y esperaron pacientemente cada actualización y también muchas gracias a las que se unieron en el camino y terminaron amando la historia. Gracias también a las que se uniran.

Espero y amén y guarden a Jeros en su corazón.

Espero y hayan disfrutado cada capítulo, reído y llorado como ello.

Este no es un final, es un hasta luego, tal vez con nuevos proyectos, otras historias.

Los quiero.

Nos leemos pronto ❤️.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro