TaeHyung se despierta y se siente extraño, normalmente se levanta con unos enormes brazos rodeando su cuerpo, pero ahora está solo en la enorme cama de JungKook. Suspira y se frota los ojos, sintiéndose mejor luego de casi un mes después del entierro de su padre.

El humano busca a JungKook confundido, y al no verlo baja las escaleras hacia la cocina, donde SeeGhyu parece un poco tenso mientras desayuna con JungKook, un JungKook vestido con unos vaqueros ajustados, un henley gris y la chaqueta de cuero negro que no podía tocar. Lo extraño es JungKook en sí, es totalmente distinto a lo que TaeHyung ha conocido de él desde que vive en la mansión Jeon. 

— Hola — Saluda y se inclina para besar la mejilla del azabache, quien normalmente ama marcarlo con su aroma, pero este se aleja y frunce el ceño, apretando su mandíbula con furia. El castaño se queda congelado unos segundos antes de alejarse y mirar a SeeGhyu. 

— Siéntate y desayuna, cachorro — Dice el Alfa, y Kim se sienta más cerca de él que del que se supone que es su compañero, quien no quiere ni tocarlo — ¿Cómo has dormido? 

— Bien — Murmura, porque es cierto, durmió bien hasta que se despertó y vio que JungKook no lo quiere como compañero. Es como si lo odiase. Pero al parecer, ya ha vuelto a ser él mismo, como el que siempre ha debido ser según SeeGhyu — ¿Y tú? 

— Bien también, cachorro — Responde, ambos incómodos por la mirada que reciben del azabache — ¿Algo que decir, JungKook?

JungKook se levanta y arrastra la silla con furia antes de salir de la casa con pasos rápidos, unos momentos después, se escucha el ronroneo del motor del Camaro tomando el camino hacia la carretera. 

— Es la peor versión que he conocido de JungKook. Me gustaba su yo lobuno, era mucho más cariñoso — Dice TaeHyung, suspirando con tristeza. SeeGhyu abraza al miembro humano de su manada y trata de tranquilizarlo, o por lo menos consolarlo — ¿Por qué me trata así? ¿Es que odia tanto que sea su compañero? 

— No creo que sea eso, cachorro — Dice SeeGhyu — Ha pasado por mucho, y creo que no siente que te merezca. Mi sobrino tiene una culpa interna bastante grande y bastante invasiva, haciéndole creer que no merece nada bueno. Dejó a un lado todo lo que sentía, ahora tiene que enfrentarlo junto a los nuevos sentimientos que tiene por ti.

TaeHyung asiente, pero luego se marcha de la cocina y entra en el cuarto de JungKook, observando todo con una tristeza que lo lleva persiguiendo muchísimo tiempo. Entra en el vestidor y se queda sentado en la esquina, escondido detrás de la ropa del azabache, pensando en que su vida está estancada. No tiene metas, no tiene sueños, y ahora no tiene compañero.

Un cambio le vendrá bien. Tiene dinero ahorrado y una admisión a Yonsei. Si JungKook no quiere nada con él, TaeHyung puede superarlo, seguir adelante. Por lo que hace una maleta de forma rápida y deja una nota de despedida para ambos lobos, luego sube al jeep que rescató y se va de la mansión Jeon.