— Tranquilo. Debemos de encargarnos de limpiarlo primero, luego de eso el rey vendrá — dijo el doctor sonriendo

Unos sirvientes me limpiaron, pregunté muchas veces el por qué me dolía tanto cada movimiento, el doctor solo me sonrió y me dijo que tome un té que trajeron, no quise pero lo tuve que beber, era amargo, me dió asco y además estaba muy caliente.

— Tome todo, joven Taehyung — dijo Jeongyeon — lo hará sentir mucho mejor —

Miraba como sacaban las sábanas manchadas, al igual que mi ropa. Terminé aquel asqueroso líquido, el dolor de mi espalda fue menor, pero mi vientre seguía doliendo mucho, tenía moretones en mi brazos y piernas, se veían muy mal.

— ¿Por qué sangré? — miré al doctor

— Joven Taehyung, es hora de que descanse — dijo Jeongyeon tapándome

— Per-... —

— Descanse, joven Taehyung — dijo el doctor saliendo de la alcoba

— Joven Taehyung si necesita algo solo dígalo, lo trae-... —

— A mi señor, tráelo, quiero verlo — 

— Ahora mismo — dijo retirándose con los otros sirvientes que estaban dentro

○●○●⊙●○●○

— Rey Jeon, el doctor quiere hablar con usted — escuché la voz de un sirviente, no respondí, solo seguí tomando

— Rey Jeon, necesito que me escuche — dijo el doctor

— Pase — dije viendo el cielo oscuro desde mi ventana

Estaba dándole la espalda a la puerta, me encontraba sentado en mi sillón con una botella en la mano, mirando la noche.

— Antes que nada mis condolencias, no se pudo hacer nad-... —

— Si vienes a decir solo eso mejor retírese —

— Rey, el joven Taehyung neces-... —

— No quiero escucharte más, sal de aquí o te mato, no estoy de humor — dije sin dejar de ver a la ventana

— Pero el joven Taehyung tiene qu-... —

— ¡Dije que te largues! — me puse de pie y tiré la botella contra la puerta

— Re-rey... —

— Lárgate, ¡No quiero ver a nadie! —

— Entiendo. Lamento la insistencia — salió de inmediato

Me quedé mirando a la nada, no sabía que hacer, me dolía el pecho, pero no quería llorar, eso es de débiles, yo no lo soy.

— Todo esto es tu culpa —

○●○●⊙●○●○

Ni Jeongyeon, ni mi señor, ni nadie volvió, estuve solo en tan grande cuarto, viendo la oscuridad que me rodeaba.

— ¿Mi señor? — me levanté un poco al ver una sombra afuera, una sombra que desapareció rápidamente

No dormí, me dolía todo, incluso respirar me era difícil, tenía frío y con nada podía sentirme mejor. A la mañana siguiente volvió el doctor, las sirvientas miraban todo lo que hacía y traían lo que pedía.

— ¿Estoy bien? — pregunté sin recibir respuesta alguna — ¿Mi bebé está bien? —

— Mañana por la mañana vendré a ver su estado, por favor descanse — dijo poniéndose de pie

— Pero... —

— Ya está la comida lista para usted, joven Taehyung — dijo Jeongyeon a mi lado, poniendo con cuidado la bandeja encima mío

— Doctor, quiero sab-... —

— Es hora de comer, jov-... —

— Estoy hablando con el doctor, cierra la boca — dije mirándola mal, viendo como ella me miró con asombro — el exijo que me diga lo que pasa, no soy estúpido y... dígame que pasa, se lo pido — 

— Joven Taehyung... —

— Hable, por favor — lo miré fijamente

— Usted está delicado, los caballos pasaron encima suyo y... le provocaron muchos golpes, es por eso que le recomiendo que no se pare, sus piernas están muy golpeadas y brazos igual —

— ¿Mi bebé está bien? —

— No hay cremas así que por el momento pondremos compresas cali-... —

— ¡Responda a mi pregunta! — tiré la bandeja al piso

— Jo-joven Taehyung, cálmese —

— ¡Entonces responda de una vez! —

— No puedo, es difícil —

— ¿Le pasó algo? — pregunté poniendo mis manos en mi vientre, retorciéndome un poco, me dolía mucho

— El bebé... lo lamento mucho, no había nada que hacer, si lo hubieran encontrado antes puede qu-... —

— No-no, no es cierto — negué viendo al doctor

— Lo lamento mucho —

— No, ¡NO ES CIERTO! —

— Por favor cálmese —

— Joven Taehyung, tranquilo — me abrazó Jeongyeon

— No-no es cierto, Jeongyeon dime que no es cierto —

— Él está en un mejor lugar, joven Taehyung cálmese — me abrazó con fuerza — usted es fuerte, va a salir adelante —

— Mi-mi bebé —

— La cigüeña lo está meciendo sobre las nubes, no se preocupe, él  está bien, duerme pacíficamente sobre las nubes —

— ¡No-no!, ¡No!, de-denme a mi bebé... —

○●○●⊙●○●○

La voz se corrió en todo el castillo, todos lo sabían, la lamentable noticia. Todos sabían sobre la perdida del joven Taehyung.

— Mierda — maldije al escuchar al joven Taehyung llorar

Lloró durante mucho tiempo, era desgarrador, llamaba al rey, pedía por él pero nunca llegó, el rey se había encerrado en su despacho desde ayer, no quería ver a nadie.

— ¿Qué haces? — 

— Comiendo todo lo que puedo — dijo Hoseok — debo irme y tú también deberías, ha perdido a su bebé y seguro nos van a arrancar la cabeza — dijo metiendo comida a una bolsa

— Fue nuestra culpa —

— No, fue su culpa, todos lo saben, todos le dijeron que no salga solo, por algo estábamos cuidando de él — dijo molesto — pero de todos modos nos van a matar, así que me iré para evitar tan castigo —

— Le duele mucho — dije viendo las escaleras

— Me voy. Ten un buen futuro... o una muerte digna, yo que sé — se fue corriendo con muchas bolsas

No me moví, no tenía ganas de perseguirlo. Todo el castillo había perdido su color, las cortinas no se abrían mostrando luto, pero además de eso, el día lucía triste, el cielo era deprimente.

○●○●⊙●○●○

Me tomé cada gota de las botellas que encontré, miraba la ventana, esperando algo, no sé que esperaba realmente, tal vez esperaba que esto sea una pesadilla, no lo sé.

— Rey Jeon, el joven Taehyung pide verlo — escuché la voz de alguien afuera, no respondí, solo miré el cielo

Las horas pasaban y no sé en que momento me dormí, pero cuando abrí mis ojos todo ya estaba oscuro. Salí del despacho y me dirigí a la sala, pasando por mi alcoba, me detuve un momento, pensando en entrar, pero no lo hice, lo que hice fue dirigirme a la sala sin mirar atrás. Comí poco, no tenía tantas ganas como creí, luego de lo poco que comí subí con dos botellas más, encontrándome con alguien adentro.

— ¿Qué quieres? —

— Jungkook, que bueno que al fin te veo — 

— ¿Qué quieres? — pregunté abriendo la botella para tomar de ella

— Quería verte, esto debe de ser difícil para tí —

— Un poco — caminé hasta la mesa, poniéndome a su lado — debes de estar contenta con esto, no finjas pena cuando sientes todo lo contrario — 

— Claro que no, ¿Cómo podría estar contenta por algo así? — preguntó acercándose a mí, pasando sus manos por mi pecho — fue una desgracia lo que le pasó — 

— Ah — dije viendo su pecho descubierto

— Sí, pero cosas mejores vendrán, ya verás que sí — sonrió

— Cosas mejores, ¿Cómo cuales? — pregunté pasando mi mano por su cintura

— Pues, una nueva prometida por ejemplo — 

— Lárgate — la agarré fuerte de la cintura para empujarla

— Solo piénsalo, queda cada vez poco tiempo — se acercó a la puerta sin borrar su sonrisa — si quieres consuelo puedes buscarme, mi alcoba siempre estará abierta para ti —

Tomé sin medirme, estaba borracho, lo admito, y quería estar peor, todo me dolía y quería dejar de sentirlo. Cuando no quedó más que tomar salí y caminé hasta mi alcoba, abriendo lentamente la puerta.

— Mi señor, lo estuve esperando —

A la mañana siguiente desperté al sentir unos pies fríos a mi lado, además de darme cuenta de que estaba en una cama, que no era la mía.

— Mierda — me levanté de inmediato al ver a Nayeon desnuda a mi lado

— Buen día, mi señor — sonrío de oreja a oreja mientras llevaba su cabello suelto hacia atrás — era cierto lo que decían, eres una bestia en la cama — se río

— No-no, ¿Tú y yo...? —

— Así es, mi señor — se volvió a reír

— Mierda — agarré mi ropa y me vestí rápido

— Vamos a comer, estoy hambrienta — se acercó a mí

— No me toques — salí de su alcoba

Esto no podía ser cierto, mierda, ¿Cómo pude acostarme con ella?, ¿Cómo?, mierda, me siento del asco.

— Rey Jeon, su desayuno —

— No. Dame más licor —

— Pero... —

— Dije que me des más licor — miré mal al sirviente

— Como ordene — de inmediato trajo una botella de vino

Tomé en silencio, viendo a algunos sirvientes verme de reojo mientras hacían sus tareas.

— Pero qué hermoso día — vi a Nayeon sentarse al frente mío — ¿Qué hay para el desayuno hoy? —

— Salmón ahumado con ensalada de lechuga, huevos escalfados, sopa de algas, jugo de pera y uva, también tarta de mora —

— Bien, recuerda que como poco dulce así que poca tarta —

— Ahora mismo preparemos su desayuno, princesa —

— Puedes demorarte, hoy estoy de buen humor — dijo guiñándome el ojo

Me puse de pie con mucha molestia, no quería verla a la cara, me daba asco. Subí con la botella en mi mano, iba a ir a encerrarme de nuevo a mi despacho pero vi a Taehyung en medio del pasillo, se veía delgado de nuevo y muy pálido, cuando lo vi sentí algo raro.

— Mi señor... — sonrío ligeramente

Lo ignoré, miré al frente y caminé, pasando por su lado, pero no pude avanzar mucho ya que sentí como me agarró del brazo.

— ¡SUÉLTAME! — grité empujándolo con fuerza — ¡NO ME TOQUES! —

— Mi-mi señor... —

— Aléjate de mí, por tu culpa pasó esto — dije viéndolo fijamente, me sentía enfermo, cada vez que lo veía tenía ganas de golpear algo

— No... mi señor — dijo intentando acercarse

— Por tu culpa murió mi bebé — dije viendo como se detuvo en seco

— No es cierto eso... —

— Lo es, debías de quedarte dentro del castillo y no lo hiciste, fue tu culpa —

— No-no, mi señor... ¡Mi señor escúcheme! — no lo escuché más, seguí mi camino hasta el despacho, encerrándome ahí

— Fue tu culpa —

Continuará...

¡Nos vemos el próximo domingo!
Ahora sí no creo poder actualizar el viernes.

Espero les haya gustado. Gracias por todo el apoyo y amor que le dan a esta historia, estoy realmente agradecida 💋💋💋