La cena continuó con su ambiente natural, yo y mi jefe nos encontramos en el automóvil conduciendo a mi casa. Comenzé a pensar... Que tengo un sentimiento de amor hacia mi jefe.

El auto freno frente al patio de mi hogar, revise mi reloj y note que eran las 12:40 p.m. tenía algo de miedo, no quería que le pasará nada.

- Bueno, fue una linda noche...

- Uhm... ¿Jefe...?

- ¿Si...?

- Por favor... Quédese... No me gusta que la gente se valla sola sin ningún acompañante en estás horas... - un sonrojo apareció en mis mejillas.

- ¡Awww! Ternura... - dijo abrazándome - Lo haré para que no te quedes con el pendiente.

- Gracias...

Bajamos del auto y mi jefe rosaba demasiado mi mano con la suya. Al entrar a mi casa, fui directamente a mi habitación, el me siguió y entramos. Le pedí que se pusiera comido yo iba a dormir en mi sofá. Y como un gran cliché, tuvimos una pequeña pelea.

- No, por favor, tu duerme en tu cama y yo en tu sofá.

- Señor... Vamos...

- No.

- Ah... ¿Le parece si dormirnos juntos? Para que podamos estar a gustos ambos?

- Si, me encantaría.

- Bien, iré a cerrar la casa, en seguida regreso.

Baje, cerré la puerta con llave, las ventanas con seguro, la puerta de mi patio trasero también, las ventanas del baño y mi habitación y apagué todas las luces, revise bien, subí y mire al jefe en boxers...

(Oh... Mi dios...) Era fornido, pero no tanto, tenía su cuerpo marcado y pectorales, estaba sonrojado a más no poder, parecía un tomate...

- Je, je... Bueno... ¿Qué lado pides...? - dijo algo cansado. Mi cama estaba pegada a mi pared.

- Uhm... El borde.

- Bien... Durmamos... Me estoy muriendo de... - bostezó - sueño... - se acostó de lado de la cama pegada a la pared, apagué la luz y hize la misma acción y me cubrí de pies a cintura, cerré los ojos lentamente.

[...]

Estaba en una fiesta, tenía un vaso de alcohol, no me gusta por lo que simplemente me me quedé mirando.

Veía a todos mis compañeros de trabajo bailar con Ian respectiva pareja. En eso, mi jefe me tomo de los hombros y me hizo míralo de ojos.

- Uhm... ¿J... Jefe?

No pronunció ninguna palabra... Solo se acercaba mucho más, a mis labios... Yo... Me deje llevar, y me dio un profundo beso, estaba tan emocionado que tire mi vaso, dereepente todo el escenario se cayó, ahora estábamos en un lugar llenó de flores, se separó del beso...

- E... Emanuel... Y... Yo solo... Te amo... - me sonroje.

Dereepente, todo se puso oscuro, ambos estábamos flotando... Francesco fue atrapado por dos garras iguales a las mías, el se aferró a mi, y una sonrisa y ojos rojos me miraban. Mi jefe se logró soltar de las garras, estaba asustado.

- ¡Sálvame! - gritó fuertemente, su voz era una mezcla de una cachorra y un cachorro pequeño.

Desperté sudado y de un jadeo fuerte, al ver la luz del día asomarse por mi ventana, el olor y sonido de mi cocina activa y ver la ropa de mi jefe en mi mesilla de noche, me alivie...

Todo había sido un sueño...