Esteban comenzó a despertar al escuchar un ruido a lo lejos, pero no podia abrir los ojos, solo podia sentir un cuerpo calido a su costado y algo suave contra su pecho, pero el ruido seguia molestando hasta que por fin abre los ojos, lo primero que ve es el techo de un lugar que está muy seguro no es su casa y al bajar la mirada ve a Francisco acostado junto a él con su cabeza recostada en su pecho y que están en una tina de un baño, sin ropa. Hace memoria y agrácese a todos los dioses no haber estado tan borracho o drogado la noche anterior como para no recordar lo que paso, pero ahora su problema era abrir esa maldita puerta.

Con cuidado aparta el cuerpo del omega de él y lo recuesta lo más cómodo que puede en la tina de nuevo, al levantarse el mismo es consciente de el dolor de cuello que le ocasionó ese mal lugar para dormir, mira el suelo, toma su ropa para ponérsela, antes de abrir cierra la cortina que separa la tina de ese espacio, no quiere que nadie más mira a Fran desnudo eso es algo que quiere mantener para el.

Abre la puerta y se sorprende ver a Rafael frente a él.

— ¿Puedo pasar?, me estoy meando Esteban.

— Francisco está dormido, busca otro baño, hay como siete en la casa...

— ¡¿Ustedes también usaron el puto baño para follar?!, hay como doce habitaciones en la puta casa Esteban y se les ocurre follar en el baño, que asco me dan. — Esteban solo frunce el ceño al escucharlo, no registra muy bien la información que le grita mientras se aleja, pero agradece que se vaya; sus gritos le hacían doler la cabeza.

Se gira y decide que es un buen momento de levantar al omega, parece que ya está cerca el medio día y si Rafa ya despertó, los demás ya debían estar despiertos.

— Fran, Frani, precioso, es hora de despertar. — Está sentado al borde de la tina y comienza a mover suavemente al omega.

— Déjame dormir Estebi...

— Debemos bajar, los demás ya deben estar despiertos — Esteban ve como el omega suspira antes de abrir los ojos y sonreírle.

— Siempre pensé que después de nuestra primera vez me despertarías con un desayuna en la cama gordis.

— Bueno, yo no pensé que nuestra primera vez sería en una fiesta de Rocco, dentro de un baño — Le sonríe al menor acercándole su ropa.

— Pero tienes que admitir que es muy nosotros, ya sabes; espontáneo — Francisco se señala a sí mismo — y después de una escena de celos. — Ahora señala a Esteban.

— Por favor, no dejes que las acciones de mi lobo me definan. — Esteban suplica.

— No lo haré solo si me das el besito de los buenos días. — El omega sale de la tina ya vestido y se para frente al mayor.

Esteban solo sonríe antes de pararse al igual que el omega y tomar su cintura entre sus manos.

— Todos los que quieras... — Sellan sus labios en un suave beso que es interrumpido por el sonido de la puerta.

— Si ya terminaron calenturientos, los invito a bajar, en especial a ti Esteban, que pusimos a Pipe a cocinar solo. — Pueden reconocer la voz de Andy tras la puerta.

Toma la mano del omega y salen del baño, una vez en la planta de abajo puede ver a sus amigos: los más afectados están tirados en los sofás de la sala de estar y los más vivos recogen algunas cosas que obstruyen el movimiento, Esteban ve como Pipe es el que se mueve de un lado a otro en la cocina, ambos observan como el alfa castaño está sin pena alguna sin playera dejando ver aparentemente recientes aruñonez en su espalda, Francisco le hace una señal a Esteban y este asiente, viéndolo irse al comedor a limpiar las botellas que quedaban junto con Enzo, Diego y Rocco.

El por su parte se dirige a la cocina y se pone manos a la obra junto con Pipe para hacer un desayuno decente para todos los presentes. A la mitad de este Juani aparece colgándose de la espalda de Pipe en busca de aparentemente mimos mañaneros y Esteban tiene que seguir solo, una vez hecho con ayuda de Mati, Santi y Blas llevan todo al comedor que parece un espacio habitable.

Esteban se sienta al costado de Francisco y todos llaman a los demás a desayunar, según lo que sabían no habían llamado a todos, sólo a los que mostraban signos de despertar o los que ya estaban despiertos, igual él y Pipe habían dejado comida en las ollas para los que quisieran, estaban a mitad del desayuno cuando unos gritos de la planta alta se escucharon.

Todos se miraron asustados y cuando las voces se hicieron más claras los pudieron reconocer eran Emma y Felipe. Benja, Diego y Pardella se levantan rápidamente al ver al omega llegar al comedor a medio vestir y con lágrimas en los ojos, todos ven confundidos la escena y ven como Emmanuel llega igual de alterado que Felipe.

— ¿Qué pasa chicos? — Diego sostiene a Felipe que parece bastante alterado.

— ¡Ese imbecil me marcó!

La sala cae en silencio al escuchar las palabras del omega y todos con una mirada entienden que es momento de irse, Esteban toma la mano de Francisco y lo levanta de la mesa, ve como Enzo hace lo mismo con Mati y algunos más también se levantan, solo sabe que se quedan Diego, Pardella, Pau, Tomas y Rocco a atender ese desastre que se ocasiono.

En la sala Esteban ve a sus amigos, nota como los menores se ven algo alterados, pero al final Enzo es el que decide hablar.

— No vamos a hablar sobre eso, ayudemos a limpiar entre todos lo demás y dejemos que los que están en el comedor se queden ahí para que lidien con eso. — Todos asienten y se ponen manos a la obra.

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Para las tres de la tarde, Esteban y Francisco se dirigen a la casa del menor en el auto del papá del alfa, el camino es algo callado y el mayor lo entiende, Fran es cercano a Felipe y la situación le debe estar afectando. Al llegar a la casa el omega se gira a verlo antes de bajar del auto.

— ¿Te quieres quedar un rato?, mis papás fueron a ver a mis abuelos, es el plan de los domingos, volverán hasta la noche y no quiero estar solo...

Esteban no duda en asentir y bajar del auto junto con el omega, al entrar a la casa es justo lo que se imagina, colorido, acogedor y cómodo, todo en ese ambiente grita familia, ve los cuadros en las paredes de la familia Romero, las graduaciones de Fran y sus hermanas, la boda de la hermana mayor, la boda de los padres del menor, incluso ve unas caritas de la que supone es la sobrina de la que el omega le habla con tanto amor. Ve como el omega se dirige al pasillo y le hace una seña para que lo siga, llega a una puerta y no puede evitar sonreír al ver el nombre "FRAN" hecho con stickers.

— Ven, entra. — El omega lo deja pasar y Esteban tiene que esforzarse para no dejar salir un gruñido de satisfacción y lanzarse a la cama a dar vueltas, la habitación está repleta del olor del omega, duraznos y flores hasta donde su nariz pueda inhalar. — Perdona el desorden, no suele estar así siempre, es solo que anoche no sabía que ponerme...

Esteban niega con la cabeza restándole importancia mientras ve prendas de ropa en la cama que el omega toma y deja en la silla del escritorio, el menor se recuesta en la cama y palmea el lugar a su lado.

— Recuéstate conmigo Estebi. — El alfa no duda en obedecer lo que Fran le indica y se recuesta a su lado, al ver el techo puede notar como hay pegatinas iridiscentes de estrellas en el, no puede evitar sonreír y a esta altura puede suponer que todo lo que haga o diga el omega a el y a su lobo le va a perecer adorablemente hermoso. Fran una vez que el alfa se acuesta no duda en poner su cabeza en el pecho ajeno, después de la noche anterior había descubierto que adoraba dormir ahí, Esteban no duda en acariciar lentamente los cabellos de el omega.

— Frani...yo quería disculparme contigo.

— ¿Porqué? — El omega mueve su cabeza para ver a los ojos al alfa.

— Por lo que paso anoche, no debía reaccionar así — Esteban ve como el omega se sonroja y niega con la cabeza.

— Ya hablamos de eso y no tienes por qué disculparte, es decir, si fue algo precipitado y me hubiera gustado que por lo menos me preguntaras formalmente si quería ser tu novio, pero fue algo que ambos deseábamos Estebi y si tu no ibas por mi a ese baño, yo te iba a brincar encima en ese sofá...

— No puedo evitar pensar en lo que paso con Felipe y Emanuel, si yo te hubiera marcado, es decir no sería lo peor que me pasaría, no quiero que pienses eso, pero ambos como alfa y omega sabemos la seriedad y compromiso que conlleva una marca, ambos sabemos lo que implica formar un lazo. — Esteban suspira cerrando sus ojos y siente como Francisco se siente encima de él.

— Esteban, mírame. — El mencionado niega con la cabeza. — Vamos Estebi, mírame a los ojos, alfa, por favor, mírame...

Ante el llamado tan claro de su omega el alfa no duda en abrir los ojos, Francisco se inclina y lo besa en los labios antes de repartir pequeños besos por toda su cara.

— Eso es jugar sucio, omega. — Esteban pellizca las caderas del menor.

— Quiero que quede algo claro Estebi, todo lo que pase entre nosotros que tú y tu lobo sientan la necesidad de hacer, será consensuado. — Francisco toma las manos del alfa y las entrelaza con las de el.

— ¿Incluso si eso significa que mi alfa quiera frotarse sin cesar en tu cama solo por que le fascina tu olor?

— Si, Esteban. — El omega suelta una risita y deja salir más su aroma causando un gruñido de satisfacción en el alfa.

— ¿Incluso si queremos comerte a besos en este preciso momento? — El mayor ve como el otro asiente y no duda en invertir las posiciones quedando el omega con la espalda contra la cama y el entre sus piernas.

Comienza a besar las manos del omega -que permanecen entrelazadas con las de el-, sube por sus brazos hasta la unión de su cuello y hombro donde está su glándula, en la cual no duda en dejar una mordida superficial, sonriendo al escuchar el suave quejido que suelta el otro, sigue subiendo los besos por el cuello del omega hasta llegar a su cara en la cual besa sin cesar sus mejillas, frente, nariz; incluso sus párpados son besados. Escucha las suaves risas del omega y él también sonríe entre los besos, finalmente se detiene, lo observa detenidamente y Francisco al sentir eso abre los ojos, regresándole la mirada.

— ¿Qué pasa, Esteban?

— Solo veo lo hermoso que eres, Francisco...te quiero besar.

— Hazlo, alfa. — Esteban no espera ni un segundo y ya tiene sus labios contra los del omega, es un beso intenso cargado de amor y anhelo, Francisco suelta las manos del alfa y pone una de estas sobre el hombro de Esteban y con la otra sostiene su cara. El alfa aprovecha y una de sus manos la coloca en su cintura, con la otra puesta en uno de sus muslos para sostener el agarre firme de las piernas del omega en sus cintura.

Esteban se separa un poco y lo ve a los ojos antes de murmurar. — Dijiste que nos permitirás hacer lo que queramos, ¿cierto?... — Francisco asintió, sonrojado y con la respiración agitada.— Quiero hacerte mío de nuevo, omega.

Francisco suelta un gemido que parece más un lloriqueo necesitado antes de hablar.

— Si, si alfa, por favor...

Esteban no necesita escuchar nada más, vuelve a sellar sus labios en un beso y ambos comienzan a despojarse de sus ropas.

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Estaba atardeciendo, las luces naranjas del sol ocultándose se alcanzaban a colar por el espacio de la ventana que no cubría la cortina, ambos estaban recostados en la cama, justo como lo habían estado la noche anterior -sólo que en un espacio más cómodo que no le haría doler el cuello-, Esteban sentía que podía morir ahí mismo, con el cuerpo de Fran bien pegado al suyo, desnudos, sus olores mezclados en el ambiente y pegados en sus pieles. Francisco tenía una sonrisa en el rostro mientras hacía figuras invisibles con su dedo en el pecho de el alfa, se sentía como si estuviera flotando en las nubes, su lobo ronroneaba en medio de su extasis, había recibido tanta atención, estímulos y amor que se sentía como en un sueño.

— Fran-

— Si te atreves a pedir perdón Estebi, te juro que te arrojo de la cama. — El alfa suelta una risa al escuchar al omega hablar.

— Tranquilo, no me iba a disculpar...solo quería pedirte que me tuvieras paciencia.

— ¿Paciencia? — Francisco acomoda su barbilla en el pecho ajeno para verle la cara al mayor. — ¿Porqué paciencia?

— Hicimos todo al revés, Frani. — Esteban ve al menor rodar los ojos y abrir la boca para quejarse, pero el habla antes. — Pero te aseguro algo, habrá un noviazgo oficial y mi cortejo no termina aún.

Francisco sonríe encantado por las palabras de el alfa y se levanta un poco para darle un beso en los labios, antes de que el alfa continúe.

— Y por supuesto, en un futuro habrá una marca sobre tu hermoso cuello, amor, tendrás todo el combo, te prometo que lo haré como corresponde. — El omega se sonroja y sonríe.

— Eres el mejor alfa que pude desear, incluso con tus irremediables celos Estebi. Aunque tienes que admitir, que tenemos una forma muy única de hacer las cosas, ya quisiera Matías que Enzo le hubiera puesto un dedo encima antes de ser novios oficialmente.

Ambos sueltan una risa y se recuestan un momento más, pasada una hora más -aunque muy forzadamente- Esteban decide qué es hora de irse, los padres del menor no deberían tardar en llegar y al día siguiente tenían que seguir con sus rutinas de estudiantes, se despiden en la puerta de la casa del menor con un largo abrazo y unos interminables besos, con la promesa de verse al día siguiente.

══ ✧ FIN✧ ══

Holaaaaaa, bueno este ya es el quinto y último capítulo de esta historia, tal vez agregue un epílogo o unos extras en algún momento.

Quiero agradecerles mucho por leer esta historia, votar y comentar -aunque no responda, siempre está mi corazoncito ahí presente-, también les aviso que publique otra historia de Esteban x Francisco con muchas vibes de Anne with an E, ojalá le den una oportunidad y la lean.

Cualquier error, duda, sugerencia me la pueden comentar, muchas gracias, l@s tqm 🧚🩵🧚🩵.