4 palabras antes de que caigan lágrimas de obsidiana:
Vulnerable 
Cansada 
Triste 
Frustrada 

Tres o doce veces al día, perdió la cuenta. 
Se sentía sola, desnuda, cansada. 
No había llanto por las noches después de la primera, 
solo la mirada disociada, fija en el techo.

4 palabras antes de que caigan lágrimas de obsidiana:
Mugroso 
Obscuro 
Viejo 
Húmedo 

¿Pensaba en el techo? 

"Te saldrán canas por estar amargada", escuchó alguna vez. 
¿Acaso era verdad? 
No, esos hombres mentían. 
Todos mentían. 

¿O era verdad? 
Pues mientras más viejo se hace uno, 
más odio agarra por la vida. 

Tres o quién sabe cuántas veces, 
el sonido de las botas no la dejaba tranquila. 
Una mujer llorando, hombres riendo... 
Carne de cerdo en el lodo. 

Las botas hacen más ruido que nunca. 
Los uniformes dejaron de ser verdes: ahora son carmesí. 

No podía disociar la mirada. 
Nadie pudo.

4 palabras antes de que caigan lágrimas de obsidiana:
Infame 
Asqueroso 
Vulgar 
Bestial 

Y sus ojos parecían ríos, y los ríos parecían abismos: 
abismos negros e infinitos, 
tan, pero tan tristes y vacíos. 

Y le salieron canas blancas, 
el blanco de una pureza que no sentía merecer; 
blanco que ensuciaría con sus lágrimas de obsidiana. 

Un sonido, un muerto, todo revuelto, 
y nada es claro ni concreto. 

Corriendo, corriendo, corriendo, 
y la realidad otra vez diciendo: 
"Todos te están viendo".

Cansada 
Triste 
Frustrada 

Ya solo son 3 palabras; mañana serán dos, 
y pasado mañana una. 

Rodando aún consciente, 
conservando en el recuerdo los ojos azules de una bestia. 

Y se ha acabado. 
Dejas la selva nocturna en sus manos destructoras. 

Se ha acabado, 
y tu amado llora otra vez, 
para que otra vez abras los ojos 
sin saber quién eres, 
sin sentirte triste, ni cansada, ni frustrada... 

Solo eres vulnerable.

—Frieden