Pov: Narrador

Kay y Darío estaban en silencio, sin mirarse, y llevaban así desde que Jano salió. Kay estaba molesto con el de pelaje morado porque había cortado con Jano después de que arriesgó su vida para salvarles. Ciro estaba mirando a los ojos a Darío, completamente enamorado de él y muy feliz de que le hubiera elegido a él.

Entonces se escucharon unas risas afuera, y Jano apareció en la puerta. Kay, Darío, y Ciro le miraron muy atentamente. Ya no parecía deprimido, parecía más feliz que nunca.

-Hola. Ya he vuelto.- miró a Kay, luego a Ciro, y por último a Darío. Luego pareció alegrarse aún más. -Chicos. Quiero presentaros a alguien.- dijo mientras salía y entraba agarrado del brazo de Gram.

-¡J-jano! ¡Apártate de él!- gritó Kay, el cual parecía un poquito asustado y no dejaba de mirar a Gram a los ojos. -¡Ese Shakay está poseído por una criatura de las sombras!-

-¿A que te refieres Kay? ¿De qué estás hablando?- preguntó Jano sin entender nada.

Kay agarró un pequeño cuchillo que había en la casa de Seya y atacó a Gram, pero Jano se puso delante de él y recibió una puñalada en la pierna por accidente.

Jano tuvo que apoyar una rodilla en el suelo por culpa del dolor. Kay se apartó preocupado por la herida que acababa de hacerle, y Darío se aproximó corriendo.

-¡Jano!- dijo Darío ayudándole a sentarse y mirando la herida, que aunque era profunda, casi no sangraba. -No lo entiendo. ¿Cómo ha podido herirte? Eres casi invulnerable.-

-Cállate- le dijo Jano de forma fría, como si no le importase. -Kay. Tenemos que hablar.-

Jano estuvo veinte minutos explicándole a Kay lo de internet, lo de Gram, y lo de sus poderes. Cuando acabaron de hablar, Kay parecía haber entendido la mayor parte de lo que le había contado Jano. Iba a preguntar algo cuando Ela entró por la puerta muy alterada.

-¡Kay! Tus padres necesitan que vayas a la entrada del pueblo junto a Jano. Ha llegado un humano muy alterado y enfadado que dice que es su padre.-

Continuará...

ฅ⁠^⁠•⁠ﻌ⁠•⁠^⁠ฅ