Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 30: Decepción.

Mi rostro pasó de la dicha al horror en cuestión de segundos, y la vergüenza se apoderó de mí mientras llevaba mi vestido a su lugar.

Mis ojos se encontraron con la mirada azul de Theon, cuya expresión de shock y decepción cortó mi alma como una hoja afilada, y luego se dirigieron hacia la triste mirada de Landon, quien estaba junto a mi hermano desde un principio, él permanecía inerte, como si estuviese analizándolo todo.

—¡Te casarás con ella, Dagger! —Fue lo único que pronunció mi hermano luego de aquel golpe que le dio en la cara.

—¡¿Qué?! —Miré a Ansel, como si eso solucionara mi inminente desgracia. En cambio Ansel permanecía en silencio, mientras se limpiaba con el dorso de su mano la sangre que brotaba de la comisura de su labio golpeado.

¿En qué momento todo ocurrió tan rápido?

—¿Fue por él por quién me rechazaste? —Inquirió Landon, y lo apuntó de forma grotesca con su dedo —¿Fue por él por quién me pediste que fuéramos solo amigos? —Su expresión de desagrado y decepción eran evidente en sus ojos verdes.

—¿Y dices ser mi amigo? —Landon se acercó a Ansel con una rabia evidente —¡Sabías que la estaba cortejando! —Y otra vez voló otro puñetazo desprevenido hacia el rostro de Ansel, haciéndolo dar unos pasos atrás por la fuerza con que le dio el golpe.

El duque se incorporó rápido y esquivó como un profesional el siguiente golpe que Landon le lanzó, para luego sujetar el puño atacante y llevarlo hacia la espalda del príncipe, inmovilizándolo al instante desde atrás. Ambos eran altos, pero nada se comparaba con esos centímetros más de altura y ese cuerpo fornido que tenía Ansel en comparación con Landon.

—¡Eres un maldito traidor! —Le gritó el príncipe, y la impotencia al estar inmovilizado lo enfurecía aún más —¡Sabías que estaba interesado en ella! —Su respiración era agitada, y mis ojos estaban más abiertos de lo normal al ver aquella escena.

—Para estar interesado en ella, —Ansel le habló cerca de su oído, pero aún así escuchábamos a la perfección sus palabras —Tus dotes de cortejo son bastantes pobres.

—¡Eres un maldito desgraciado! —Insultó Landon, desde la impotencia.

—Te voy a soltar, Landon. No quiero que hagas nada de lo que después puedas arrepentirte —Murmuró Ansel cerca de su rostro, ignorando por completo aquel insulto. Su tono de voz parecía una advertencia, un aliento frío que quería causar temor, en cambio, el príncipe apretó sus labios y no hizo ningún gesto de desobediencia en cuanto su brazo fue liberado con lentitud.

—¡¡Maldito desgraciado!! —Y otra vez se lanzó sobre Ansel para golpearlo, solo que esta vez, Ansel esquivó el golpe y le lanzó un puñetazo directo a la nariz de Landon, ocasionando que la sangre brotara al instante como un riachuelo.

—¡Basta! —Grité, pero fue Theon quien corrió para apartar a Landon lejos de Ansel.

—¡Yo me casaré con Jane, Theon! —Dijo Landon mientras se sujetaba la nariz para detener el brote de sangre que salía de ella. —¡Yo protegeré su honor! ¡Nadie se atrevería nunca a juzgar a una princesa!

—¡No! —Landon lo miró sin entender, y yo dejé de respirar —No pienso arriesgar el honor de mi hermana. Alguien más pudo haberlos visto, no pienso darles de qué hablar a esta sociedad permitiendo que Jane se besara con este traidor, y luego autorizando su matrimonio contigo —Volteó a ver a Landon con una seriedad que jamás había visto en él —Si Jane rechazó tu propuesta de matrimonio, fue porque ella así lo quiso, y no pienso cuestionar su decisión… Vete a casa, Landon, yo me encargo de esto.

Landon me miró por última vez, sus ojos guardaban una tristeza evidente, pero de sus labios no salió nada más que un suspiro de resignación segundos antes de darnos la espalda y dejarnos a los tres a solas. Él estaba dispuesto a todo por protegerme, sin importar que acabara de verme besándome con uno de sus mejores amigos, en cambio, el incómodo silencio que mantenía Ansel me estaba enloqueciendo.

Fue él quien me besó, yo le correspondí, pero fue él quien inició este desastre. Y aunque permanecía en silencio, aguantando la ira de mi hermano y de Landon, algo dentro de mí estaba en total tranquilidad. La intensidad con la que sus labios acariciaron mi piel y sus palabras, me dejaron en claro que él también siente lo mismo que yo.

Pero luego, esa tranquilidad desapareció cuando vi como Theon tensaba su mandíbula y apretaba los puños a su lado hasta dejarlos blancos, mientras veía a Ansel con una furia acumulada, en cambio el duque, parecía la sombra de lo que era hacía unas horas atrás.

—Te casarás con mi hermana de inmediato, esperemos que nadie más te viera tomarte estas libertades con Jane. Te casarás con ella para protegerla de las humillaciones.

El rubor intenso que teñía mis mejillas se transformó en un frío helado que me recorrió la espalda, paralizándola en su lugar. La vergüenza me envolvía como un manto oscuro, haciéndome sentir pequeña e indigna en medio de aquel escrutinio implacable, al ver que había destrozado la confianza de mi hermano de una manera tan atroz.

—¡Te casarás con ella! —Repitió más fuerte, pero sin llamar la atención, al ver que Ansel no respondía a su petición. El cuerpo me temblaba y sentía que mi corazón saldría disparado en cualquier momento al estar en medio de aquella incertidumbre.

Otra vez miré a Ansel en busca de respuestas, y otra vez no obtuve nada más que su silencio y su mirada apagada. Era mi honor el que estaba en juego, y él no parecía reaccionar ante la situación, como si no le importase ni siquiera un poco.

—No quiero casarme…

Sus palabras fueron un balde de agua fría sobre mi cuerpo. Unas lágrimas de decepción y tristeza salieron sin previo aviso de mis ojos, al ver su placante respuesta ante la situación. Lo miré directamente, tratando de averiguar el porqué, y esta vez, era él quien desviaba la mirada al suelo.

¿No quiere casarse?

¿Por qué me besó entonces, para burlarse de mí?

No le importo para nada, no le importa las consecuencias con las que yo tengo que lidiar… no significo nada para él.

—¡¿Manchaste su inocencia, y ahora rechazas su mano?! —Tuvo intención de golpearlo nuevamente, pero yo lo sujeté fuerte por el brazo impidiendo que se moviera de mi lado.

—Casarme no está entre mis planes a futuro —Dijo sin mirarnos, con una frialdad que heló mis huesos, y sentí cómo algo dentro de mí se estaba marchitando.

—¿Y aún así te aprovechaste de mi hermana? ¡Eres un maldito! ¡Debí imaginar tus intenciones con ella cuando me pediste permiso para llevarla al observatorio!

Esta vez no fui capaz de detenerlo…

Theon corrió hacia Ansel y volvió a golpearlo en la cara, pero esta vez fue con más fuerza. Una y otra vez. Ansel no movió un solo músculo y permitió que mi hermano desplegara toda su rabia en aquellos puñetazos que logró darle antes de que yo me lanzara sobre él y lo separara del rostro golpeado de aquel… hombre.

—¡Déjalo, Theon! ¡No merece que manches tus manos con su sangre! —Esta vez fue mi rabia la que habló, pero ni siquiera fui capaz de voltear a ver a aquel traidor que acababa de destrozar mi corazón.

—Sí, sí lo merece —Dijo furioso, y luego volteó a ver al duque —Si no quieres casarte con Jane, entonces exijo ser satisfecho… te exijo un duelo a muerte.

—¿Qué…? —Lo miré aterrada —No por favor hermano, no lo hagas.

—¡Él te deshonró, Jane. Me traicionó a mí y a nuestro apellido…! —Volteó a ver al duque con la rabia reflejada en sus ojos azules —Tú y yo ya no somos amigos, Ansel. No dejaré que mi hermana pague mi mal juicio de haberte considerado como un hermano.

—Lo siento… —Su voz era la sombra de lo que solía ser —Nos veremos al amanecer, en el punto en que nuestras propiedades se conectan.

—Es lo único que te dejaré escoger, Ansel —Refutó Theon.

—¿Quieres escoger a mi segundo? —Preguntó el duque.

—No quiero segundos en este duelo.

—Me parece bien, es justo que se haga tu voluntad.

—También sortearemos nuestros nombres, y quién salga perdedor, llevará una venda en los ojos.

—¡Qué! —Miré a mi hermano con el terror reflejado en mis ojos, luego vi a Ansel y estaba calmado, pero con la mirada en el suelo —¡Esto es una sentencia de muerte!

—No, no lo es, al menos no para el que tenga los ojos descubiertos —Respondió Theon sin voltear a verme.

—Sabes que no es tan así —Dijo Ansel.

—Entonces, también sabes que cualquiera de las dos opciones representan un punto ganador para mí —Respondió Theon.

Me siento usada, destrozada, decepcionada. No entiendo cómo es que él fue capaz de hacerme esto. ¿Qué fue lo que le hice como para querer deshonrarme, como para preferir la muerte antes que a mí?

—No lo entiendo… —Lo miré con decepción, con la tristeza transformada en rabia —¿Por qué lo hiciste? —Mi mirada se nubló por las lágrimas que tenía acumuladas —¿Por qué me besaste, Ansel? ¿Prefieres morir antes que casarte conmigo…? ¿Tan desagradable te parezco? —Mis labios temblaron ligeramente, pero no me desmoroné en ningún instante.

—Lo siento… —Agachó su mirada y sentí cómo la sangre me burbujeaba.

Caminé hacia él, furiosa, hasta quedar frente a su cuerpo. Lo miré directamente a los ojos. Mi mirada no flaqueó ni por un instante, aún cuando estaba apreciando aquel rostro golpeado.

—¿Eso es todo lo que recibo de ti… un lo siento que no resolverá en nada nuestra situación, un lo siento que me dejará en ridículo ante todos? —Ya no había rastro de mis lágrimas de tristeza, ahora me sentía traicionada, usada y desechada.

—Mis eternas disculpas son lo único que puedo proporcionarle, milady —Ni siquiera fue capaz de dirigirme la mirada. Pero sus palabras alimentaron tanto mi rabia como mi orgullo, y acabé acertándole una cachetada, tan fuerte que resonó en el ambiente y su rostro fue movido al sentido contrario por la inercia.

Se quedó viéndome, en silencio, mientras llevaba una de sus manos a su mejilla. Intentó decir algo, pero sus palabras fueron ahogadas por las de mi hermano:

—Vamos, hermana, antes de que alguien nos vea —Theon me sostuvo del brazo y nos alejamos de aquel traidor al instante.

Y mientras nos alejábamos de él, sentía cómo mi mundo se desmoronaba. La sorpresa inicial ante su negativa se transformó rápidamente en un profundo dolor y una sensación de traición que me cortaban el aliento.

Todos los momentos que habíamos compartido juntos, todas las veces en que él se había apoderado de mis sueños y la imágen de mis labios tocando los suyos por primera vez en la vida, se desvanecían como espejismos en el desierto.

Estaba furiosa conmigo misma porque me había dejado envolver por él. Sus palabras habían sido claras; él no tenía intenciones de casarse, y aún así permití que me besara como si fuese una libertina. El hombre que se había robado mi corazón, mis sueños y mi primer beso, no era capaz de protegerme.

Caminamos entre los invitados, todos bailaban, bebían y sonreían ante tan magnífica celebración de bodas, misma celebración que yo no iba a ser capaz de tener nunca… y ahora tenía el corazón destrozado y cada trozo cargaba con la preocupación de que mi hermano estaba dispuesto a morir o matar por mi honor.

🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀

Hola, hola.

Por favor, no odien a nadie, solo a mí jajajaja.

Quiero leer sus opiniones.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro