18.- Dear James.

- ¿Alguien ha visto a ______? –Pregunté en cuanto entré a la sala de estar. Steve, Tony, Sam y Romanoff se encontraban allí, hablando sobre una posible misión. Todos negaron de inmediato como respuesta.

-Tú no deberías estar aquí, Buck. Debes tomar reposo, ¿no te acuerdas? – Dijo Rogers, tomando de mi brazo. Haciéndome caminar en dirección a mi habitación. –De seguro salió a caminar. Quizás está con los Maximoff, escuché que saldrían. – Anunció mi amigo, tratando de calmarme.

-Y-yo no lo creo, Steve.

-T-tu no creerás que ella... –Abrió sus ojos con sorpresa y, por su expresión deduje que sabía a lo que me refería; ______, abandonó la torre.

No quería ver aquella posibilidad. _______, simplemente no se pudo haber ido como si nada. Pero, ¿dónde más podría estar si no en la torre? Busqué por todos lados. El recinto era enorme, pero no fue impedimento para buscar el paradero de mi novia. Los meses como recluta de los vengadores me habían servido para conocer cada rincón de la famosa torre Stark. Ya era uno de ellos, por lo tanto, la torre era mi hogar. _______ fue la que me acogió en cuanto me les uní. Al principio, no todos confiaban en mí y, era lógico. Había asesinado un centenar de personas a lo largo de mi vida y lo peor es que, debía vivir con aquel pasado y con el brazo de metal unido a mi cuerpo. Aquel brazo testigo de todas las masacres de las que fui participe.

Sin embargo, _______ fue la única que no tuvo miedo de mí. La única que no me rehuyó, la única que buscaba hacerme compañía. La única que logró entrar a mi corazón y que ahora, me abandonaba sin dar explicación alguna.

-No creo que haya sido por poner tu vida en riesgo – Comentó Rogers, dubitativo. No respondí, pero mi silencio fue lo suficiente para responder a su pregunta. Éste negó y lamentó que en aquella misión las cosas se hayan salido de control.

-Me ha dejado una carta, Steve. –Informé, cabizbajo. Dolía recordar cada palabra escrita manifestando su sentimiento de culpa. – Y-yo, yo simplemente creí que era broma. Ella me había dicho que el tema lo había olvidado, que estaba feliz con que yo supiera que sus intenciones no eran lastimarme. Pero.... – Y mis palabras fueron retenidas por ese nudo en la garganta que, presionaba y dolía inmensamente. Intenté hablar, confesarle a Rogers todo lo que estaba escrito en esa carta. Pero no pude. Simplemente no pude decir palabra alguna.

-La encontraremos, Buck. Ella...ella seguramente está asustada. –Intentó calmarme. Pero bien sabía que ella, ya estaba demasiado lejos y quizás, fuera de todo alcance. Rogers y los demás, ya no podían hacer nada para regresarla a mi lado.

Romanoff, Tony y los demás se enteraron de los sucedido una vez Steve decidió hacer una reunión. Mi mano humana cerrada en puño ejercía fuerza sobre sí misma, casi perforándola con mis propios dedos. Pero el dolor no era el mismo como lo era el que estaba alojado en mi pecho. No, el dolor que me infringía en mi mano estaba muy lejos de ser igual al del corazón.

Claramente los recuerdos de su infancia la atormentaban y, la misión lo único que hizo fue incrementar sus miedos y nublar su mente. Sólo bastó con que viera un cuadro con la foto de su padre para que ella se remontara en el pasado y expusiera en peligro nuestras vidas. Jamás me dijo lo que le habían hecho cuando pequeña, lo único que sé, y, por lo que me comentó Steve, es que los poderes que tiene, no son más que producto de experimentos que su propio padre cultivó en ella con el fin de destruir al enemigo.

-Cuanto lo siento Bucky –Sollozó ______ una vez reaccionó y me vio mal herido en el suelo. Mi brazo humano resultó roto tras usar su poder contra mí. Una gran fuerza sobrenatural golpeó mi cuerpo, arrojándome lejos en cuanto quise acercarme y calmarla. No lo logré, claramente. Al contrario, el golpe me dejó aturdido y, si no hubiese sido por que Tony y Steve escucharan a través de los auriculares, ______, hubiese perdido el juicio totalmente.

Traté de tranquilizarla durante días. Hasta que finalmente, aceptó que no había sido su culpa dañarme. Nunca fue su intención, y lo creía. Ella, era demasiado buena para dañar a alguien. Su rostro figuraba como la de un ángel. Una sonrisa y ojos maravillosos dejaban al descubierto su alma pura. No podía ser que tal belleza tuviera un pasado tan horrible y dañino para ella.

- ¿Y qué dice la carta? –Preguntó Romanoff, expectante.

-Que no la intentemos buscar –Mencioné, con tristeza. Se observaron entre sí, con nostalgia. Nadie dijo nada hasta un buen rato.

-La encontraremos, Barnes. –Dijo Tony. – De seguro está asustada, es normal. Y cuando la encontremos, le ayudaremos a luchar contra sus demonios. –Aseguró el multimillonario, otorgándome la esperanza necesaria. Todos asintieron ante las palabras de Tony.

Me dirigí a mi habitación una vez la reunión terminó. La búsqueda comenzaría desde ese mismo instante. Quise ayudar, pero Rogers, me pidió que lo mejor, era que descansara. Mi brazo y contusiones aun no sanaban.

Miré a mi lado. La carta aún seguía donde estaba. Sobre la mesita de luz, abierta completamente, exponiendo la perfecta caligrafía de _______. La tomé y la leí. Por quinta vez, mi corazón palpitó con fuerzas y mis ojos, simplemente se aguaron.

Querido James:

Sé que escribir esta carta no remediará absolutamente nada, pero, créeme que, cuando te digo que desearía volver el tiempo atrás, lo haría. Sin pensarlo.

Ese día, cuando vi la foto de mi padre me sentí nuevamente como una niña pequeña. La misma niñita sometida a los experimentos que tenían como fin, eliminar al enemigo; ustedes. Deduzco que Steve te comentó mi pasado. Nunca hiciste preguntas al respecto, por lo que supuse que tú ya sabías sobre ello.

Despertar de mi ceguera mental y verte en el suelo, mal herido me hizo pensar en que tú jamás ibas a ser el enemigo en nuestra relación, y menos dentro del equipo. Sino yo. Es cierto, ambos tenemos un pasado oscuro, ambos tenemos codificaciones instaladas en nuestra mente, lo cual me llama bastante la atención. Tuve que pasar por mucho en mi vida para darme cuenta que no era la única viviendo esta situación. La vida tiene sus misterios, James. De todas las personas en el mundo, te conocí a ti. Precisamente a ti y no sabes lo feliz que me hiciste estos tiempos.

Lamento tener que despedirme de esta forma. Desearía que fuese de otra manera. Cara a cara, pero ambos sabemos que nuestra despedida nunca se concretaría. Te amo demasiado, y ésta, era la única forma de despedirme.

Te pido por favor, no gasten su tiempo en buscarme. Es lo único que te pido, sargento. No me encontrarás y tampoco espero que lo hagas. Debes seguir tu vida al lado de alguien que te ame, que te proteja y, por, sobre todo, que te acepte tal como eres. "¿qué me acepte tal como soy?" te preguntarás. Créeme que es posible. Tú me aceptaste con mis demonios. Alguna lo hará con los tuyo y yo, estaré feliz al saber aquello.

Te amo James, y te agradezco tu paciencia. También entenderé si me odias. Estás en tu derecho, pero no olvides que todo lo que hago, es por una buena causa; Tu protección y la de los demás. Han lidiado con muchos monstruos en sus vidas. No merecen lidiar con uno más.

Te quiere, _______.

Cerré mi mano en puño con la carta en mano.Gemí, tratando de reprimir mis lágrimas. Más no lo logré. Tal era la presión en mi pecho por sentir su ausencia, que lloré con desconsuelo esa tarde.