Abril Anderson

Coloqué mis manos en mis piernas, ya no las sentía frías. Me gustaría saber que se debe hacer cuándo sientes que la persona que creíste que jamás te engañaría, lo hace. 'Solo era un beso, no debía ser dramática' Solo quería saber por qué había permitido aquello, que si le había gustado, Esto era tan confuso y sencillo a la vez. Alcé mi vista para ver como también se sentaba a mi lado y trataba de entenderme.

—¿Es algo parecido de lo que te sucedía aquella noche?

Solté un suspiro y alejé mi vista de él.

—Miré que te besaste con Joy.

Ser directa era importante y no me iba a andar con rodeos. Al no escuchar respuesta, volví a verlo.

—Vas a considerar que es un cliché, pero ella me besó, yo no.

—Y tú lo aceptaste.

Miré que negó con su cabeza rápidamente y agitaba sus manos. Tapé mi rostro, me sentía extraña, con náuseas y mareada. Cada vez entendía menos, cada vez era incapaz de llegar al punto de comprensión hacia las demás personas, empecé a desconocerme, empecé a desconocer como actuar, como pensar, que creer. Mi cabeza no podía dejar de imaginar que sencillo sería ser una niña pequeña y no cometer ningún error para acabar en esta situación. Era Abril Anderson ¿era Abril Anderson?

—¿Estás bien?

Tomó mi brazo preocupado, pero lo aparté con indiferencia. Me levanté del sofá de golpe y me alejé de él.

Desde que descubrí que perdí la memoria todo deja de tener sentido, puede decirme que creará recuerdos para mí, pero lo único que está creando son sentimientos confusos que no recuerdo jamás haberlos sentido.

Al estar cerca de la chimenea, me detuve ahí. Se levantó para acercarse, pero lo detuve, no quería tenerlo cerca, no podía verlo tan siquiera.

—Te amo y eres a la única que amaré siempre.

—No te acerques, por favor. No, no me sigas diciendo que me amas, no quiero escucharte, no entiendo nada Taehyung. Sé que las historias de amor que están en los libros, no tienen nada que ver con la vida real, pero sentía que podía existir cuándo dos personas se amaban de verdad, eso no lo siento de tu parte.

—No entiendo a que te refieres.

Dio un corto paso hacia mí.

—¡Quédate ahí!

Chillé un poco fuerte. Mi respiración se alteró y por fin lo miré. Su rostro estaba confuso, sus cejas enarcadas, no sabía que sucedía ni yo tampoco. Mis manos se formaron en un puño y los apreté mientras cerraba mis ojos.

—No puedo olvidar todas esas veces en que te acobardaste cuándo te decían que no podíamos estar juntos sin ninguna razón, trato de comunicarte tanto lo que siento, te mostré mi corazón y cada vez que lo hago, al día siguiente recibo algo malo de ti. El beso con Joy; encontrarme con Yein, que se puso a hablar mal de ti; por último, que tu novia era tu ex prometida y también era la chica de la cual Yoongi estaba enamorado.

No tenía ningún gesto en su rostro, no podía definir a simple vista como se lo estaba tomando.

—No quería decírtelo, pensé que sería una tontería recordar cosas del pasado que han dolido, pero a la vez se sentiría feo que no me haya enterado —Dije.

—¿Quieres que en verdad lo haga?

Me sentía decepcionada por el simple hecho que tuve que descubrirlo yo por mi cuenta. Me agaché, mis piernas se pegaron a mi pecho y escondí mi rostro en aquel pequeño hueco. Solo quisiera dormir, despertarme y descubrir que todo fue un sueño.

—Deja que me quede aquí.

Levanté un poco mi cabeza para descubrirlo con mi misma posición. Sus manos estaban apoyadas en sus rodillas, su quijada en sus manos y sus ojos mirándome atentos.

—Lo de Joy, aunque no lo creas fue un error. Decidí aceptar su propuesta de salir a tomar una vuelta, despistadamente al fijarme que Yeontan se alejó, me tomó de los hombros por qué pensé que se iba a tropezar, pero en verdad fue para besarme. Suena ilógico, pero así fue. La alejé de mí rápidamente y no he vuelto a saber de ella. Hemos tenido muchas discusiones sobre que ella aún sigue enamorada de mí, supuse que lo había superado...

Y justo en el momento en que se besaron, yo lo miré. Parece conspiratorio, pero era como si lo hubiese planeado a propósito.

—No sé que te dijo Yein, pero todo lo que sale de su boca, es veneno.

—¿Cómo es que la conoces?

—No tiene importancia.

Me levanté. Esta conversación no tenía futuro si él no me decía la verdad. En verdad, quería irme de ahí, no podía aguantar la tensión, la pesadez y las náuseas.

—Espera, —Tomó mi mano, acariciándola. Me giré un poco para verlo—, Ella era, fue amiga de mi exnovia —Era sencillo, fue sencillo decirlo. Soltó mi mano y me acerqué a sentarme en el sofá, dispuesta a escucharlo.

—Con lo de Yoongi, es algo que —Su aura cambió repentinamente—. Yo era demasiado joven, éramos demasiados jóvenes, pero de igual quería tenerla para siempre en mi vida, quería llegar a casarme con ella. Conoció primero a Yoongi, los tres nos enamoramos, pero ella de mí.

A diferencia de Yoongi, a pesar de que él no se quedó con ella, Taehyung parecía sufrir más. No entendía cuál fue el problema clave de que todo se arruinara y creo que había escuchado suficiente.

—Me iré a casa.

Ni siquiera me miró, estaba hundido en sus pensamientos. Tal vez no debí, tal vez sí. Cuándo me levanté, sentí que se dio cuenta.

—Te diría que te quedaras, pero respetaré tu espacio. Solo, déjame llevarte.

*

Los días pasaron sin avisarme, no los sentí, teniendo en cuenta los días de trabajo tan cansados que llegaban a mí. No me parecía extraño que en ciertas ocasiones, Lee Byung Hun mostraba interés hacia mí, pero tenía que ver con mi madre, me hartaba de vez en cuándo, porque me llenaba de ilusión creyendo que alguna vez hablaría del empeño que le doy a mi trabajo.

La sensación que siento cuándo por mi cabeza pasa todo lo que he vivido, desconecto un momento y no dejo de cuestionarme sobre lo que haré después, sobre que si debería cambiar, o simplemente quedarme con los brazos cruzados esperando la ocasión perfecta en que todo saliera a la luz, en donde por fin recordara todo, en donde descubriera quién soy en verdad. Patética y desilusionada, eso era lo que veía de Abril Anderson.

Había estado recibiendo llamadas por parte de James, al parecer mi madre quería saber de mí y decidí mandarle mensajes por otra red social sin que descubriera que estaba en Corea. Ahora que lo pienso, sonaba tan absurdo, ¿por qué ocultar que estoy en un país que quiero, con la persona que amo y trabajando? Ugh.

Con respecto a Taehyung, los primeros dos días después de nuestra pequeña discusión, había mucha tensión y a veces llegaba a ser incómodo. Tratamos de no tocar el tema; en primer lugar para no abrir heridas sanadas, en segundo me estaba hartando de lo mismo y en tercero, creo que debería esperar a que él tomara la iniciativa y empezara a hablarme de su pasado.

Me comentó sobre la idea de ir a visitar a sus padres, al parecer el próximo mes vendrían de vacaciones a Seúl y se encontraba contento, así que me tocaba conocerlos. No sé como sentirme tampoco, no puedo imaginarme la cara de sus padres cuándo me vean, puede ser que esperen a alguien mejor.

Miré mis pies por debajo de la mesa, vaya, usar este tipo de zapatos con tacón mataban mis días. A ver si ya un día me dicen que me dejan venir con zapatillas. No veía la hora de que el reloj marcara la hora para salir del trabajo, necesitaba llamar a Namjoon.

Por lo visto, Taehyung y los chicos se irían de viaje por cuestiones del trabajo a Estados unidos y volverían hasta final de mes, es decir, no podría pasar con Taehyung el día de su cumpleaños. Traté de hablar con Namjoon y Jimin, sobre que tenía ganas de hacerle una pequeña fiesta en casa, donde se había mudado recientemente. Lo bueno es que me ayudaron y me dejaron una copia de llaves para preparar todo ese día en que volvieran, ellos me ayudarían porque Taehyung pasaría a recoger a sus padres.

*

—Nos vemos mañana.

Escuché a Dahyun gritar antes de salir de casa. Últimamente, están teniendo mucho trabajo y regresaban muy tarde, tanto que no me daba cuenta por qué estaba dormida.

Mis planes se atrasaron, porque al final Taehyung y los chicos pasarían final de año en Estados Unidos y aplazaba la pequeña fiesta que tenía para él, es decir, también me tocaba pasar sola, ya que las chicas estarían ocupadas.
Trataría de mantenerme alejada de mis pensamientos que arruinaran cualquier momento, me quedaría en casa, así que seguro que comería, vería la televisión y me iría a dormir, sin antes tener que saludar a mi madre como respeto. ¿Qué debería hacer? ¿Qué estará haciendo Taehyung?

Kim Taehyung

La música era fuerte, tanto que hacía que perdiera la noción del tiempo y solo me dedicara a levantar las pesas. Mi cuerpo se sentía pesado, mis brazos ya empezaban a temblar, era como si me quedara sin fuerzas. Tiré las pesas al suelo, aquello provocó un gran ruido en el gimnasio.

Me acerqué a la banca de detrás de mí, tomé una toalla junto a una botella con agua. Estaba exhausto. Ayer fue nuestro último concierto, al fin nos daban un par de meses para descansar, para pasar tiempo con nuestra familia. Dentro de unos días apenas regresaría a corea, no podía dejar de pensar en que estará haciendo Abril, como estará o tan siquiera ha olvidado algo.

No puedo creer lo idiota que puedo llegar a ser, no puedes decirle a alguien que espera que se le pase su enojo, no puedo esperar a que no recuerde cosas, me vería como un maldito estúpido, con doble moral. Es difícil no entender que es lo que sientes, despertar un día y descubrir que no sabes quién eres. La entendía muy bien y por ello me dolía verla de esa manera, agonizando levemente en silencio, como si pudiera soportarlo todo.
Al ponerme en su lugar, me doy cuenta de que me ama tanto, por qué aún sigue a mi lado a pesar de tantas cosas.

—Deberías bajar el volumen —Giré mi cabeza para encontrarme a Jimin. Le bajó a la música y fue a sentarse a mi lado— Normalmente no escuchas esa música, ¿ocurre algo?

—No creo que escuche a Etta Jones mientras me ejercito.

Hizo una pequeña sonrisa dando un golpe en mi espalda. Su rostro se tornó serio de un momento a otro, seguro quería decirme algo.

—Yoongi... —Lo miré— mañana vuelve a corea. Ha estado un poco distraído, sabes, me preocupa.

—¿Qué puedo hacer yo?

Me levanté, ignorando la conversación. Tiré la botella ya vacía al basurero que estaba cerca. Apagué la música y estaba dispuesto a irme.

—Dos chicos y una chica ¿cuándo fue que todo se arruinó? —Me detuve en seco. Las palabras me atacaron por la espalda como miles de cuchillos afilados. ¿Cuándo empezó? ¿Cuándo la conocí por primera vez? ¿Cuándo él se enamoró de ella?— Taehyung, deberías hablar con él, nunca se va a rendir, lo sabes.

Aunque no quería verlo y hablar de eso, lo iba a hacer.

Llegó la última noche que Yoongi se quedaría, así que decidí ir a visitarlo a su habitación de hotel. Toqué la puerta y pasé. Su maleta estaba a un lado de la cama, él en el escritorio de enfrente con su ordenador junto a una libreta, seguro estaba componiendo alguna canción.

Me senté en la cama, esperando a que se dignara en dar la vuelta para verme, pero no parecía importarle, se quedó ahí, yo también lo haría. Empecé a jugar con su móvil, acostado. Me pregunto como es que pretendo iniciar la conversación, '¿sigues enamorado de ella?', '¿me gustaría que no te acercaras a Abril?', '¿Sé solo su amigo?'. No podía sacarme de la cabeza que sí Abril se enterara se molestaría mucho conmigo y me pediría un tipo de explicación que no podría darle.

—Habla.

Escuché suavemente. Me senté en la cama incorporando mi cuerpo, mirando como giro junto con la silla para verme. Su semblante era el mismo que siempre tiene, entonces podía empezar hablando normal.

—Así que te vas mañana. ¿Que harás en las vacaciones?

Frunció sus labios, como si estuviera pensando. Miré que hizo una diminuta sonrisa antes de hablar.

—Cualquier cosa, dormir, comer, ver series, trabajar en música, salir con algún amigo.

—Visitar a Abril...

Susurré esperando que no escuchara, pero obviamente lo haría. Soltó una risilla.

—Venías por eso. Escucha Taehyung, ella me ve como su amigo, no debes por qué asustarte, si lo haces es porque sabes que...

—Cállate. Te estás equivocando. Lo único que hago y he hecho es protegerla y alejarla de cosas que le hagan daño.

—Tú le haces daño y no te das cuenta, ese es tu problema —No podía hablar con él. Enfadado me levanté de la cama. Me iba a ir de ahí, si me quedaba seguiría enfermando mi cabeza— ¿Por qué te vas? Estar discutiendo por esto me cansa. No puedo alejarme de ella por más lo quieras, sabes que todo vuelve a su lugar.

Le di la espalda y salí de la habitación. Me arrepiento tanto de haber venido aquí.

A la mañana siguiente

Las cortinas de la habitación empezaron a moverse dejando ver la luz del nuevo día, era un horror. Anoche me dormí hasta tarde, siendo sincero, estuve ebrio. Mi cabeza retumbaba y tenía náuseas, casi nunca me daban. Jungkook estaba enfrente de mí, parecía listo, me pregunto a donde iba tan temprano.

Volví a esconderme en las cobijas, pero este de inmediato me las quitó dejándome indefenso.

—¡Jungkook!

—Taehyung, dijimos que iríamos al parque de diversiones. Es supertarde, eres el que siempre está listo. ¡Vamos!, ¡Levántate!

A la fuerza me levantó y me dejó en el baño.

La fila era superlarga, los chicos me dejaron a mí a que esperara, según ellos quedarme esperando debajo del sol sería buena idea para reflexionar por beber tanto. Miré a Jimin correr hacia mí, me quería acompañar, ya que los otros chicos volverían a subirse a otro juego. Aparte, alguien debía ayudarme a llevar todos los algodones de azúcar. Al parecer llevaríamos varios para los que nos acompañaban. En conclusión, estuvimos a punto de llevarnos todo, hasta que escuché él gritó de una niña.

—¡No! ¡No se los lleve todos!

Para mala suerte de aquella niña, ya no quedaban, tenía ocho y Jimin otros ocho.

—Creo que deberíamos dejar uno para ella también —Comenzamos a pagar hasta que note que la niña había llegado a mi lado, tenía sus brazos cruzados y no dejaba de verme.

–Lo siento —Me hice a un lado porque pensé que estaba estorbándole, pero la niña jaló de mi pantalón.

—¡Taetae!

Con dificultad, levanté mis gafas de sol y la miré. Era Ally, la sobrina de Abril. ¿Qué hacía aquí?

—¿Cómo estás? ¿Qué haces por aquí?

Me coloqué en cuclillas para quedar a su altura. Le hice una señal de que tomara uno de los algodones de azúcar que tenía en mi mano. Vaya que creció rápido.

—¡Muchas gracias!, puff, creí que me quedaría sin ninguno y he estado corriendo mucho con mi papi.

Detrás de ella venía Harry, trotando hasta acercarse. Tomó la mano de su hija desconfiado, hasta que notó que era yo. Reincorporé mi postura e hice una pequeña reverencia de saludo.

—Hola, Taehyung. Por lo visto estás de vacaciones.

Asentí. Jimin estaba detrás de mí, me tocó el hombro para susurrarme de que volvería, pero primero se llevaría los dulces, también se llevó parte de los míos. Me sentía algo incómodo, pero me alegraba un poco mirar a Ally sacar con cuidado el algodón del plástico y ensuciarse sus pequeñas manos mientras se lo metía a la boca.

—Abril no te recuerda —Lo miré, ¿no me recordaba? Ah— Está en Alemania, trabajando y haciendo su vida, es lo mejor.

Claro, en Alemania. Entendía, aún no lo descubrían, ella en verdad estaba en corea, esperando por mí.

—Veo que eres al único que le sigo agradando aunque sea un poco.

—Papi, ¿tú odias a Taetae?

—Amor, ve a jugar un rato —Ally nos sonrió e hizo lo que dijo— Me gustaría disculparme debidamente contigo, no pude estar allí cuándo pudiste necesitar algo de apoyo, pero todo indicaba que eras alguien malo. Ahora ella no recuerda nada, ni lo de ahora, ni lo de antes.

—Está bien. Espero que cuándo ella recuerde todo, encuentre misericordia para perdonarlos.

Jimin llegó salvándome de aquello. La mirada de Harry no era igual a como me miraba Alex, lleno de odio por alguna razón.

—Creo que lo mejor sería que nos fuésemos.

Dijo y esperé a que Ally se acercara para despedirme de ella.

No me imaginé que me encontraría aquí con él, aunque hizo darme cuenta de que no estaría tan mal si ella recordara, tan solo algo pequeño, sería una bomba que podría afectarla de una manera grave, pero todo sería mejor que seguir mintiendo. 

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Holis, espero que lxs que leen estén bien.

Aparezco hasta ahora, porque siendo sincera me concentré en mis estudios y por otra parte me distraje escribiendo en las otras obras que tengo pensadas.

Anhelo tanto acabar con este y empezar con las demás.

Gracias por leer, no olviden comer saludablemente, tomar agüita y dormir.

♡