El espadachín del Rey de los Piratas.
Incluso si la revelación de que algo le sucedería al hombre que tanto respeta le dejó mal cuerpo, Jinbe está inevitablemente ansioso por conocer a su futura tripulación. Mira alrededor de la habitación con interés. Su mirada inconscientemente se detiene en la chica humana cerca de Arlong. Está sentada con una chica de cabello azul y lanza miradas temerosas a los hombres-pez más cercanos.
"¿Cómo serán los demás?", pregunta Thatch. "Por lo que hemos entendido no son gyojin... ¿Habrá algún gigante?"
"Yo creo que serán raros", dice Shanks con una sonrisa. "Su capitán debe ser extravagante."
"Shanks, imbécil", murmura Luffy con un puchero. "Espero que muestren pronto al músico."
"¿Para qué demonios tendrían un músico?", pregunta Ace.
"¡Todas las tripulaciones piratas deben tener un músico!", espetan Luffy y Shanks a la vez.
"Qué ridículo..."
El emperador le da una mirada sucia al azabache y Luffy lo imita. Ace suspira por lo tonto que resulta ser el ídolo de su hermano y luego sonríe con cariño. Ha echado mucho de menos al pequeño hombre de goma y no puede evitar sacar su lado afectuoso.
Luffy solo suelta una risita encantada cuando su hermano lo atrae en un abrazo de oso. Ace nunca fue el más cariñoso por lo que tener todas las atenciones y mimos de su hermano mayor lo hace muy feliz.
Al fin empieza la acción. Una voz llena la habitación incluso antes de que la pantalla se encienda.
"No soy una bestia cazando a un conejo."
Grande es la sorpresa al ver un primer plano de Dracule Mihawk una vez más. Este se inclina hacia adelante con interés.
"Lamentablemente no cargo nada más pequeño que esto", se burla agitando su cuchillo.
El rostro de otro hombre aparece. "No lo lamentes cuando te mate", gruñe con una espada entre los dientes.
"El Cazador de Piratas, Roronoa Zoro", ronronea la voz de Bessy. "El primer oficial, un espadachín nato."
Aquellos que están cerca del mencionado se mueven para mirarlo mejor. Él mismo muestra sorpresa pero se recupera rápidamente, mirando con atención la pantalla con incredulidad al verse enfrentando al mejor espadachín del mundo.
"¡Aniki!", gritan dos hombres con sorpresa.
"Lo llaman demonio en el East Blue", comenta un marine sin dejar de mirar al chico.
"Alguien del East Blue, el mar más débil, eh", se burla Big Mom.
"¿Está sosteniendo una espada con la boca?", pregunta Izo a nadie en particular.
"Espera, ¿me estás diciendo que era un cazador de piratas y se convirtió en un miembro de la banda del Rey Pirata?", Mohji, uno de los piratas de Buggy, parpadea. "¿Nadie va a decir nada sobre eso?"
Jinbe solo observa a su futuro vice-capitán con el ceño fruncido.
Zoro avanza para encontrarse con su rival.
"Rana en el pozo descubre la grandeza en el mundo", se burla de nuevo el adulto.
El de cabello verde muestra su estilo de tres espadas cuando salta sobre el Shichibukai.
"Oni... Giri", sus espadas chocan contra la punta del cuchillo de Mihawk.
Algunos silban con sorpresa. Los espadachines en la sala muestran un claro interés por el estilo inusual del Santoryu mientras que admiran la fuerza y habilidad del mayor.
Con los ojos muy abiertos, Zoro vuelve a atacar al hombre. El cuchillo de Mihawk desvía sin esfuerzo todos y cada uno de sus ataques y el más joven sale volando. Sin rendirse, vuelve a ponerse en pie para atacar.
"Qué esgrima tan feroz", comenta Mihawk sin pestañear.
"Es débil", opina Daz Bones concentrándose más en el Shichibukai que en el de cabello verde.
"Sin embargo, su estilo es bastante inusual", dice Vista en voz alta. "Y su determinación... Qué aura tan peligrosa."
Zoro ignora las críticas y tiembla de emoción mientras ve la ridícula pelea. Pasa inconscientemente la yema de sus dedos por la vaina de sus espadas. La adrenalina recorre su cuerpo.
"¿Qué es lo que cargas? ¿Qué te hace desear el poder, débil?"
La sorpresa lo hace caer de nuevo. Apenas toca el suelo, se levanta y usa una nueva posición.
"Tora... Gari"
Se lanza al ataque y el cuchillo del espadachín experto se clava en su pecho, tiñendo su camiseta blanca de un rojo brillante.
Algunas personas jadean. La mayoría observa en silencio.
La sangre gotea en las tablas de madera astillada de lo que parece ser los restos de un barco.
"¿Dejarás que perfore tu corazón?", inquiere Mihawk con calma. "¿Por qué no te retiras?"
Muchos habían pensado que el ataque había acabado con la vida del joven. Claramente, la suposición está equivocada lo que hace que la pregunta de Mihawk sea lo siguiente que venga a sus mentes.
"No lo sé...", responde el joven con hilos de sangre cayendo por su mandíbula. "Pero si me retiro ahora siento que las cosas del pasado como juramentos y promesas se perderán y no podré volver a donde estoy ahora."
"Sí", dice el azabache con seriedad. "Eso es la derrota."
"Entonces, más razón para no retirarme."
"¿Aunque mueras?"
Zoro sonríe. "Prefiero morir."
Shanks contiene las ganas de levantarse a aplaudir ante la valentía del muchacho. Vista asiente con aprobación.
Es Mihawk quien no puede evitar expresar sus pensamientos en voz alta.
"Qué fuerte corazón", dice mirando fijamente a Zoro. "Así que eliges la muerte sobre la derrota."
Zoro no mira al espadachín de vuelta. Está demasiado concentrado en la imagen.
El cuchillo se retira de la piel del hombre de cabello verde.
"Mocoso, dime tu nombre", pide Mihawk.
"Zoro", mueve sus espadas preparándose para un ataque. "Roronoa Zoro."
"Lo recordaré", promete el otro. "Hace tiempo que no veo a alguien como tú", se cuelga el cuchillo en el pecho y su mano vuela a su espalda para agarrar la infame Kokuto Yoru. "Como cortesía, te atacaré con la espada negra más fuerte del mundo."
Ambos se quedan quietos unos segundos. Mihawk espera pacientemente que Zoro se retire, sin embargo, el brillo en sus ojos no muestra temor.
Se abalanza contra el joven empuñando su espada. "Muere."
"Santoryuu Ougi", los ojos de Mihawk se ensanchan viendo el ataque. "¡San Zen Sekai!"
Con el choque, dos de las tres espadas se fracturan. La sangre corre como ríos de sudor por el cuerpo del espadachín más joven. Zoro envaina su última espada y se da la vuelta, abrazando la muerte.
"¿Qué?", Mihawk se sorprende.
Zoro sonríe. "Las cicatrices en la espalda son una vergüenza para un espadachín."
Los espadachines silban con admiración, ya sin poder contener la emoción que la pelea está causando.
El Mihawk de la pantalla también sonríe. "¡Admirable!", dice antes de cortar el torso del más joven.
Mihawk se pone de pie y da un corto aplauso. Esta vez, Zoro se gira a mirarlo.
"No apresures tu muerte, joven camarada", le pide.
Zoro cae al mar y un borrón oscuro pasa junto a Mihawk.
"Debe ser una persona que aún no puede ser revelada", reflexiona un marine con decepción.
"El capitán, posiblemente."
"¿Eres el nakama del joven espadachín?", pregunta el Shichibukai. "Gracias por estar pendiente de él. No te preocupes, ese hombre vivirá."
Efectivamente, dos personas sacan a Zoro del agua, este respira y tose sangre, vivo. Otro borrón oscuro lo ayuda a subir a la barca.
"Aún no es tu momento de morir. ¡Mi nombre es Dracule Mihawk! Hazte más fuerte, no importa cuánto te tome, yo te esperaré en mi forma más poderosa. ¡Supera mi espada!", eleva más la voz. "¡Supérame, Roronoa Zoro!"
"Impresionante", murmura Kikunojo seguido de un acuerdo de Kin'emon.
"Chico", Mihawk se vuelve hacia el borrón. "¿Cuál es tu objetivo?"
Con la voz levemente distorsionada, el hombre, chico, responde: "Rey de los Piratas."
Es un poco sorprendente oír tal declaración en esa misma sala, cuando todos ellos saben que están allí porque realmente sucederá.
"¿Puedes escucharme?", el espadachín llama a su capitán.
"¡Sí!"
Roronoa tiembla. Su espada apuntando al cielo.
"Perdóname por preocuparte. Si no me convierto en el mejor espadachín del mundo tendrías un dilema, ¿no?", se detiene y tose sangre pero a pesar de la insistencia de sus acompañantes para que se detenga, él continúa. "Yo nunca... ¡Nunca voy... a perder otra vez!", grita entre sangre y lágrimas. "Hasta que lo derrote y sea el mejor espadachín... ¡No seré derrotado nunca más!"
Un escalofrío de emoción recorre la silenciosa sala.
"¡¿Algún problema con eso... Rey Pirata?!"
El borrón se ríe. "¡Ninguno!"
La imagen se oscurece. El silencio comienza a agitarse y agitarse hasta que suenan aplausos. No son muchos, con los piratas demasiado orgullosos y con los marines rencorosos, no muchos se atreven a reconocer en voz alta la admiración. Sin embargo, la acción resulta realmente conmovedora.
"Así que este es otro de los miembros de la tripulación más grande..."
"Ha sido asombroso", asiente Jinbe con respeto.
Luffy está literalmente vibrando. Marco arquea una ceja hacia Ace que se encoge de hombros y le pregunta.
"¿Lu...?"
El chico lo mira con un brillo extraño en los ojos y suspira. "Jamás he visto algo tan impresionante. Estoy realmente emocionado por conocerlo."
Barbablanca esconde su sonrisa. Desde hace un rato, el chico simplemente habla como si ya estuviera claro que él se cruzará con el joven espadachín. Nota la incertidumbre y diversión de sus hijos ante la declaración del muchacho.
La nueva generación promete.
"Sengoku", la voz de Kaido retumba en la sala. "¿Qué piensas hacer con el resto de la tripulación cuando descubras a su capitán?"
Con pesar, el hombre suspira. "Mientras no se conviertan en un problema en el futuro, los dejaré vivir. Solo me importa el capitán."
Shanks bufa. Kaido sonríe en dirección a Zoro que lo ignora deliberadamente a favor de bostezar y rascarse la barriga con pereza.
Antes de que puedan continuar comentando el emocionante intercambio, la pantalla brilla de nuevo.
El espadachín está atado en un poste, su ropa y su cuerpo están sucios y luce cansado. Está mirando a su izquierda con gran incredulidad.
"¿Quién demonios eres tú?", pregunta con asombro.
Incluso distorsionada, la voz suena alegre y divertida. "¡El hombre que se convertirá en el Rey de los Piratas!"
"¡Es el momento en el que conoce a su capitán!", exclama alguien.
Zoro se inclina hacia adelante con evidente interés. Realmente está ansioso por saber qué hizo aquel hombre para convencerlo de convertirse en un rufián.
"Qué interesante", comenta Shanks con una sonrisa. "Podremos ver qué hizo el futuro Rey de los Piratas para reclutar a su primer oficial", dice con su voz llena de diversión, exteriorizando, de hecho, los pensamientos de la mayoría de los presentes.
"¡¿Convertirte en el Rey de los Piratas?!", Zoro bufa. "Tú... ¿Sabes lo que estás diciendo?"
"El Rey de los Piratas es el Rey de los Piratas", responde el otro con obviedad. "¿Qué más podría significar?"
Se muestra un plano completo de la situación. Zoro y el borrón oscuro, el dueño de la voz, están en un descampado. Junto a la cruz hay un niño regordete con el cabello rosado. A su izquierda, un grupo de oficiales de la marina y su capitán, Mano de Hacha Morgan.
Coby suelta un chillido agudo y se encoje en su sitio. ¿Qué demonios hace ahí?
"¿Ese no es Coby?", murmura Peppoko, uno de los piratas de Alvida.
"Coby", la capitana ruge.
Mientras tanto, Haruta frunce el ceño muy profundo.
"¿Qué es?", pregunta Marco notando la confusión del comandante.
"Se supone que ese borrón es el capitán, ¿no?", la pregunta está dirigida a Bessy. La sirena asiente con una sonrisa. "¿No creéis que es...? Umm... ¿Muy pequeño?"
La habitación al completo se inclina hacia adelante para ver mejor el borrón. Todas las teorías de gigantes o seres exóticos quedan destrozadas cuando todo lo que ven es una figura bajita. Incluso si el borrón que hay encima de la persona no les permite estudiarlo a fondo, casi se puede ver lo delgado que es.
Qué decepción, piensan muchos. Algunos incluso comienzan a creer que la sirena y el Almirante de Flota les están gastando una broma.
El borrón se pone justo frente a Zoro. Le tiende tres espadas.
"Aquí tienes tu espada. ¿Cuál de todas es? Como no lo sabía, traje las tres."
"Las tres son mías. Uso el Santoryuu."
El borrón tararea. "Las aceptarás, ¿verdad? Pero antes de luchar junto a mí tendrás que tomar una decisión. Morir aquí mismo a mano de los marines o venir conmigo. ¿Qué prefieres?"
Todos parpadean.
"..."
"¿Está chantajeándolo?"
"¡Será capullo!", se ríe Shanks.
Zoro se choca la palma de la mano en la frente, casi sin creérselo.
Zoro sonríe. "Debes ser el hijo del Diablo... Está bien, en vez de caer aquí me convertiré en pirata."
"¡Genial!", la voz vitorea. "¡Serás mi nakama! ¡Qué bien! ¡Yahoo!"
"¡Me uniré a ti así que desátame!", lo regaña el otro.
Los marines pierden la calma y comienzan a correr con sus armas blandidas hacia los dos piratas y el niño. Se ve cómo Roronoa pierde la calma y le exige a su nuevo capitán que le de sus espadas.
Sucede demasiado rápido. En un abrir y cerrar de ojos, Zoro detiene con sus tres espadas al menos a diez hombres.
"Haced un movimiento y estáis muertos", amenaza él.
Los marines lloriquean de miedo ante las palabras del espadachín.
Sengoku se frota el rostro avergonzado por la actitud de los soldados mientras que muchos piratas se burlan.
La postura de Zoro no cambia. Sus espadas desenvainadas chocando contra las de los marines mientras mira de frente a lo que parece ser su capitán.
"He prometido convertirme en un pirata. Desde que me opuse a la Marina me he convertido en un hombre buscado. Sin embargo, te advertiré una cosa. ¡Yo siempre seguiré mis propias ambiciones!", declara.
"¿Ambiciones?", pregunta el otro.
"¡Me convertiré en el mejor espadachín del mundo! Si alguna vez me veo forzado a abandonar mis ambiciones...", su mirada se vuelve amenazante. "¡Tu vida terminará bajo mi espada!"
"Lo primero que hace es amenazar al capitán...", es el pensamiento que corre por las cabezas de todos. Los piratas miran con desaprobación al espadachín. No a muchos se le ocurriría hacer tal cosa.
"¿El mejor espadachín del mundo? ¡Suena genial!", responde el capitán sin inmutarse si quiera. "Como nakama del Rey de los Piratas no esperaría nada menos."
La pantalla se apaga.
"¿Honestamente? El capitán parece un poco idiota", se ríe Doflamingo.
"¿Qué pensáis?", pregunta Shanks en dirección a Barbablanca y sus camaradas.
"No está bien", admite Jinbe. "Un hombre que es forzado a unirse a una tripulación... No hay manera de que se cree confianza y lealtad entre ellos."
"No es del todo cierto", interrumpe Ace. "Quiero decir, Oyaji me secuestró..."
Barbablanca y sus comandantes ríen ante las palabras del joven. "Cierto", dice el hombre más fuerte del mundo. "Solo queda ver cómo es el capitán y si puede llegar a ganarse la lealtad de ese chico."
El pelirrojo asiente mirando de reojo al espadachín de cabello verde. El tipo es bastante tranquilo, no se molesta en absoluto ante los cuchicheos de la gente a su alrededor. Parece mucho más ocupado en quitarse de encima al niño que charla con alegría y señala sus espadas con interés.
"Oh", suspira Shanks al reconocer quién es el chico. ¿Cómo no se ha dado cuenta de que el niño se le ha escapado de las manos? "Ace, será mejor que no dejes suelto a Luffy por mucho tiempo, no necesita más enemigos de los que ya ha hecho."
El rostro pecoso del chico se gira con los ojos muy abiertos al asiento vacío junto a él. "¡Luffy!", gruñe.
Mientras tanto, con Zoro y Luffy...
"¿Y te gusta también la carne de caimán?"
"Supongo", se encoge de hombros.
"¡Genial! Es mi favorita. Aunque una vez mi abuelo me trajo carne de rey marino, ¡era genial!"
Zoro bosteza con cansancio. ¿Quién demonios es ese tipo?
"Aunque una vez me comió un cocodrilo", continúa balbuceando el chico junto a él.
"No fue solo una vez", interviene una voz.
Ambos miran hacia arriba para ver a Puño de Fuego Ace. Este se inclina levemente frente al espadachín.
"Siento las molestias que pueda haber causado mi tonto hermano menor."
Y arrastra al chico del sombrero de paja de vuelta como si fuera un gatito.
Zoro bosteza de nuevo y se propone echarse un buen sueño hasta que la pantalla se vuelve a encender. Chasquea los dientes y observa.
Zoro respira agitadamente. Su rostro ensangrentado se transforma en uno pacífico.
"Entiendo, dejaré que te lleves una cabeza."
El lugar en el que se encuentran ahora está completamente destrozado. Hay escombros por todas partes e incluso se pueden reconocer algunos cuerpos.
Roronoa Zoro se encuentra frente a otro Shichibukai, esta vez Bartholomew Kuma. El chico se inclina.
"Pero a cambio... ¡Por favor, toma mi cabeza!"
La escena sin contexto los deja a todos sin aliento. Una cosa es ver al chico dispuesto a morir por su sueño y otra muy diferente es ofrecer su cabeza por la de alguien más. Sobre todo después de lo que dijo la vez anterior.
"¿Qué demo...?"
"¡Te lo ruego! No soy tan famoso todavía", sus ojos determinados miran al enemigo. "¡Pero esta es la cabeza del hombre que se convertirá en el mejor espadachín del mundo! ¡Eso debe ser suficiente!"
Nadie respira.
"Tienes una gran ambición", dice al fin la voz de Kuma. "Aún así... ¿Deseas tomar el lugar de este hombre e ir a la muerte?"
"No veo otro camino para salvar a mis nakamas. Si no puedes proteger a tu capitán, tu ambición es inútil."
"Qué lealtad", halaga Haruta.
"Y pensar que hace solo unos minutos estábamos criticando al chico..."
Kaido mira a Zoro con más interés.
"Realmente tengo muchas preguntas con respecto a lo que está sucediendo", comenta Momonga tocándose el bigote.
"¡Él es el hombre que se convertirá en el Rey de los Piratas!", declara con convicción.
Un borrón se tambalea. "Espera, espera, maldito bastardo."
Todos se sobresaltan ante la inesperada aparición de otro nakama.
Zoro se muestra demasiado sorprendido. El otro hombre dice: "¿Qué pasará si mueres? ¿Qué pasa con tu sueño, idiota?"
La figura se revela. Es un hombre de la misma edad que Zoro, con un flequillo rubio tapándole un ojo. Tiene una ceja rizada y viste un traje completamente destrozado.
Su nombre no se revela, pero su apariencia si se gana una reacción. A Reiju se le escapa un jadeo al reconocer a su hermano. Big Mom la mira y expresa sus pensamientos en voz alta.
"Un Vinsmoke", reconoce con el ceño fruncido.
El mismo hombre, Sanji, mira con los ojos muy abiertos su figura maltratada y luego mira a su figura paterna, como si él pudiera darle alguna explicación.
Zeff también mira con asombro pero se recupera rápidamente y mira al chico con una expresión extraña, entre orgullo y ansiedad.
"Así que al fin saldrás de mi vista, berenjena."
Sanji sacude la cabeza con confusión antes de volver a mirar la pantalla.
"Hey grandullón", Sanji habla ignorando la queja de Zoro tras él. "Llévate mi vida en vez de la de este marimo", parece que casi no puede mantenerse en pie pero su postura no flaquea. "La marina no me considera una gran amenaza todavía... Pero al final quien causará más problemas en esta tripulación... ¡Seré yo, Pierna Negra Sanji!"
"Tú..."
Las respiraciones de ambos, Sanji y Zoro, son erráticas y forzadas. Si alguno de los dos cayera ahora, no podría volver a levantarse.
"¡Ahora... hazlo!", ordena el rubio. "¡Dejaré que tomes mi vida!", su cuerpo comienza a temblar por el cansancio. "Estamos más que preparados para dar nuestras vidas si es necesario. ¡Haz que esta sea una gloriosa muerte!"
Si bien Zoro ha demostrado un valor inmenso con lo que han visto de él, Sanji no se queda atrás. Sus palabras hacen que los que están a su alrededor miren al rubio con los ojos muy abiertos.
"Eh", llama la atención de Zoro. "Dile a todos... que tengan un buen viaje. Lo siento, pero vais a tener que buscar a otro cocinero."
Alguien suelta un grito cuando, de la nada, todos ven la empuñadura de la espada de Zoro golpear el costado del joven rubio.
Sanji se gira con la poca fuerza que le queda y se apoya en el hombro de Zoro.
"¡Desgraciado...!"
Sus fuerzas finalmente se agotan, Sanji cae.
"Ha golpeado a su nakama... Para sacrificarse él mismo..."
Como si nada, Zoro suspira, se quita las tres espadas y las deja en el suelo.
"Esta es mi última voluntad", dice con la respiración errática.
Kuma, que hasta el momento había estado observando pacíficamente, suelta un suspiro de resignación.
"Si le pusiera una mano encima a tu capitán después de esto, caería en la deshonra."
Algunos dejan escapar un suspiro de alivio inconscientemente.
"Estoy en deuda contigo."
Kuma se mueve y agarra uno de los borrones del suelo. "Puedes creerme, mantendré mi promesa", dice. "Pero a cambio... te mostraré cómo es el infierno."
Del borrón oscuro sale una extraña burbuja con sombras rojizas. Zoro abre los ojos.
"Lo que acabo de repeler de su cuerpo... es su dolor y su fatiga. Esto es todo el dolor acumulado de su combate contra Oz y Moria."
Gecko Moria, que había estado observando los escombros con reconocimiento, se retuerce mirando a Zoro.
"Bastardos, ¡¿qué hacíais en mi territorio?!"
Doflamingo ríe. "¿No es obvio? Te han destronado. Qué patético."
Moria gruñe.
"Si tu deseo es ocupar su lugar", continúa Kuma. "Entonces... Naturalmente deberás tomar todo esto. Sin embargo, si alguien tan cercano a la muerte como tú toma todo esto, es imposible que sobreviva. Morirás."
"Por supuesto que lo hará", interrumpe Marco indignado. "El capitán ha luchado contra un Shichibukai, si está inconsciente puedo imaginar la cantidad de dolor que debe tener su cuerpo. Por supuesto que morirá."
"Él mismo dijo que no permitiría que su capitán supusiera un obstáculo entre él y su sueño...", murmura Jozu.
"Pero lo tomará", afirma Luffy sin dudas.
"Lo tomará", repite Barbablanca con una sonrisa.
"Compruébalo tú mismo."
Una pequeña bola del dolor del capitán flota hacia el pecho de Zoro. El efecto es inmediato, su cuerpo se retuerce de dolor y grita como un desquiciado.
Recupera la respiración tumbado en el suelo.
"¿Qué te ha parecido?", pregunta Kuma.
"Por favor", Vivi, la princesa de Arabasta, tiembla con miedo. "Por favor, busca otra solución."
"Permíteme... Cambiar de lugar...", pide el joven.
"Cada vez estoy más impresionado", confiesa Kizaru sin apartar la mirada de la pantalla. "No solo por Jinbe, por este Roronoa o por el otro. ¿Qué tipo de capitán debe ser este hombre para obtener una lealtad como tal?"
La respuesta viene de Aokiji: "Uno peligroso, no hay duda."
La pantalla se oscurece. Cuando vuelve a aclararse, Sanji vuelve a aparecer. Busca desesperadamente a Zoro.
"¡Es imposible que haya quedado de una pieza! ¿Dónde se habrá metido?"
Se detiene cuando, por el rabillo del ojo, ve una figura conocida. Parpadea hacia Zoro, que está de pie en medio de un claro.
"Ahí está", se acerca. "No me des esos sustos. ¿Dónde se ha metido ese Shichibukai...?"
Jadea ante la imagen. Zoro está bañado en sangre, tiene heridas en todo su cuerpo y la tierra en sus pies se ha vuelto roja. Sanji grita maldiciones y pide respuestas.
Zoro solo dice: "¡No ha pasado... nada...!"
"¿Eres imbécil?", pregunta una chica pelirrosa inmediatamente después de que se oscurece la pantalla.
Jewelry Bonney sabe que no es ella la que llegará a la cima. Se ha aclarado en más de una ocasión que el capitán es un hombre. Sin embargo, su curiosidad por la tripulación había sido enorme desde el momento en que el Almirante de Flota dijo por qué los habían traído aquí.
Ahora sin embargo se pregunta qué tipo de imbécil puede reclutar a un par de suicidas. ¿No es un desperdicio?
"Debes ser imbécil", repite ella. "Tienes un sueño, ¿por qué lo desperdicias de esa manera?"
Roronoa Zoro le da una mirada extraña. Él habla.
"No me mires a mí, mujer. Aún no tengo capitán así que no podría saber lo que siente mi yo del futuro", responde con simpleza. "Sin embargo, si hay alguien que merece la pena lo suficiente como para hacer que me arrodille por él, quiero conocerlo", sonríe.
"Parece que lo has aceptado fácilmente", dice Jinbe de brazos cruzados, mirando a Zoro con interés.
"No es cuestión de aceptarlo o no. Ya sea que se desvele la identidad del capitán o no, nuestros destinos acabarán cruzados. Será entonces cuando decida si seguir con esto. Quienquiera que sea mi capitán tendrá que volver a ganarse mi respeto. Cuando lo haga, no me avergonzaré a mí mismo de llamarme pirata."
"Serás un buen vice-capitán", dice Benn Beckman junto a su propio capitán.
Zoro asiente en dirección al hombre y entrecierra los ojos. Tras el pelirrojo y el hombre que acaba de hablar, el niño del sombrero de paja lo está mirando fijamente. Cuando capta la mirada de Zoro, parece más que complacido.
El niño le guiña un ojo, le da un pulgar arriba y le muestra un puño. Es obvio que Zoro no entiende sus actos porque el niño suelta una risa burbujeante al ver su cara.
Luego, él susurra. Zoro puede leer sus labios.
"Te encontraré", promete el chico del sombrero de paja silenciosamente.
Luego se gira hacia adelante y grita a nadie en particular: "¡Eso ha sido genial! ¿Ahora podemos ver al cocinero? ¡El tipo de la ceja rara que ha salido antes! ¡Quiero verlo, qué genial!"
"¿Era el cocinero?", pregunta Thatch cerca suya con interés.
"Si Luffy lo dice, lo era. Si se ha mencionado en algún momento, confía en Luffy para ser lo único que lo recuerde", ríe Ace.
──────────
Hemos visto una escena de lucha (vs Mihawk) y luego una pequeña comparación entre la actitud de Zoro al unirse a la tripulación y la lealtad que ha desarrollado hacia el capitán. ¡Y sin duda el coraje digno de un vice-capitán!
Sé que en los países de Latinoamérica aún queda un rato pero aquí ya es 2021 así que...
¡Feliz año! ❣️ Muchas gracias a todos los que seguís esta historia, os deseo muchas cositas buenas este año nuevo 🥰
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